Emmanuel Levinas La moral de Levinas
1. Dios, la muerte y el tiempo puede ser el punto de partida. Estas páginas reproducen su último año de docencia en la Sorbona (1975-1976) “Dios es una palabra desmesurada” advierte para seguir con “la muerte es el sin respuesta” idea que remite hacia “el yo es la identidad de uno mismo”. Este triángulo de ideas puede abrirse hacia “toda nada es nada de alguna cosa”. “El lazo con el otro no se anuda más que como responsabilidad”. Ese vínculo que el uno hace con el otro y donde un “tercero” puede suponer, tal vez, una amenaza.
2. “Esta voz, que viene de la otra orilla...”
3. Este es el espacio lírico de Levinas, esas voces que surgen desde “allí” y que de alguna manera nos atañen.
4. Nos atañe la divinidad.
5. La divinidad y la muerte son “desmesuradas”.
6. “El rostro significa el infinito”. La muerte destruye la infinitud.
7. “Hay que evitar que el rostro no sea visto”.
8. “La esencia del Dasein radica en su existencia” (Heidegger) y desde este aserto Levinas se encamina hacia “el instante acarrea la conquista de la existencia”. Todo este mundo es “desmesurado”.
9. Toda “desmesura” es “religiosa”.
10. Hablar de lo exterior es mantener alguna línea que lo conecta con uno mismo. Allí afuera está el “tercero” que se aleja de ese idilio, que yo he establecido con el ser de tu rostro”.
11. Lo ajeno a tu rostro es la muerte.
12. Lo ajeno es el “allí”, lo que no tiene rostro.
13. La falsedad tiene rostro. Puede cautivarte. “Hay imágenes falsas que nos tiene cautivos” (Wittgenstein).
14. “Sólo Dios puede salvarnos todavía”.
15. Sólo tú puedes salvarme.
16. Pues la salvación es que tu rostro me ayuda en el Dasein hacia la nada.
17. La nada no tiene rostro pero yo se lo invento.
18. Tratar de escuchar siempre la “voz de la otra orilla”.
19. Las personas que vienen “de la otra orilla”.
20. Las orillas de la vida cotidiana. “La piel del rostro es la más desprotegida”. Muchas veces perdemos la noción de nuestro punto de partida. Y hay un rostro que nos enseña como “salir”. Pues “la relación moral consiste en vincular la conciencia de sí y la conciencia de Dios”. Pero, ¿cómo puede conocer la conciencia de Dios? ¿Qué dilema me produce esta paradoja?
21. Dice Levinas “sabemos de Dios al entrar en la ética”.
22. Habla del “existir infinito del tiempo como ser”.
23. “El triunfo mesiánico es el triunfo puro”.
24. “El hablar vive totalmente de la vida del otro”.
25. “El existir es un ser sin nada, son fusiones de donde no es posible huir”.
26. “La ética es siempre profética”. Proximidad significa acercarse. Buscar una explicación a ese vacío que nos hemos propuesto como meta. Y en ese tránsito el Dasein vaga con una hiriente presunción de cantidad.
© 2001, Cándido Pérez Gállego
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Última actualización : 15/01/2001
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