Platón ¿De verdad dialogan en el Parménides de Platón?
1. No es un diálogo. Es un pensamiento sólido que se verifica en una bipolaridad. Es una disyuntiva entre dos presupuestos que tienen que "enfrentarse" para alcanzar una mayor ostentación de la verdad. A las preguntas suceden las respuestas y así se establece una sinfonía de relaciones entre un todo que se articula en un lenguaje que es a la vez dos mecanismos expositivos.
2. Las respuestas muchas veces sirven para afianzar: "Es cierto"/"No, desde luego"/"Así me parece"/"No me parece"/"Sí"/"Ciertamente"/"Necesariamente"/"Sin duda"/"Dices bien"/"Justamente" y muchas más que ponen de relieve que la propuesta anterior tiene una solución directa y clara. No hay una paráfrasis explicativa ni mucho menos un afán de matizar sino un sistema donde el sí enhebra muchas veces el no.
3. "Imposible"/"Recordémoslo"/"Eso me temo" y demás variantes de ese mundo de la "aquiescencia" donde unas ideas no son sometidas a crítica sino a una afirmación inmediata, breve y contundente que en general da ocasión a que se vaya continuando el programa expositivo.
4. No hay por tanto una dialogación, sino una afirmación de lo expuesto en la pregunta de un modo directo y contundente.
5. Sería interesante ver cuántas veces se responde sí.
6. Y cuántas no.
7. Pero sobre todo aún más analizar las veces que se rebate con argumentos lo expuesto anteriormente.
8. Deberíamos crear un modo para ver de qué forma podemos entrar en los diálogos platónicos y ver si esa forma elegida es una realidad o un artificio que se propone como un juego de formas de acatar los postulados que se nos van ofreciendo.
9. No hay por lo tanto una respuesta "creativa".
10. Ni mucho menos una contradicción lenta y extendida a las razones que se han ido exponiendo sino antes un mundo donde el sistema analógico del sí/no sea una de las formas explícitas de entrar en la realidad expositiva.
11. La verdad sujeta a la temática del diálogo.
12. Hablar yo conmigo mismo.
13. Los otros son mi propio lenguaje.
14. No hay por lo tanto una disposición de rebatir sino que mis palabras engendran mis propias palabras e ideas.
15. Es como si yo mismo me quisiera convencer de que se puede dualizar lo que digo y exponerlo en dos esquemas concluyentes que admiten una casuística de la realidad.
16. La manera de dialogar es "seguir las ideas" de lo que hemos recibido.
17. Hay una contínua mitificación de la pregunta.
18. Un mundo donde al pronunciarse "es verdad" se está insistiendo en un orden disyuntivo que sirve para que Platón ensalce sus propias ideas y adquiere así un ritmo de deificación de su propio pensamiento.
19. "Sin lugar a dudas" insiste en este mismo mecanismo adulador.
20. "Así es en efecto" participa de un orden donde se busca una imagen de que el lenguaje de Platón no se interrumpa y se hilvane en sí mismo como si fuera un artificio que necesita de la escucha y presencia de los otros para producirse. La vida como una necesidad narcisista que de la "mitad de mi pensamiento" sea un mundo donde yo me repito a mí mismo, dando la sensación de que hay una libertad de exposición. Nadie disiente, no hay crítica sino el más descarado narcisismo.
© 2001, Cándido Pérez Gállego
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Creada: 22/02/2000 Última Actualización: 19/01/2001