Sófocles Simbología en Edipo Rey
9 septiembre 1996
1. En sánscrito bakti significa “devoción por Dios” que se consigue por un “confiado abandono” En el Upanishhadsyel y el Bhagavad-Gita ya aparece citado con frecuencia. La santidad para alcanzar las metas, que Rene Girard estudia, se dirige hacia multitud de pensadores, pero, tal vez uno de los significativos sea F. J. Bradley (1846-1924), profesor en Oxford, sobre quien T. S. Eliot hizo tesis doctoral y que predica la teoría de que las ideas no son acontecimientos mentales sino significados puros. En su libro Apariencia y realidad (1914) crea una auténtica “mística” del comportamiento y afirma que la finalidad de la filosofía es “reafirmar” la unidad omnicomprensiva de la realidad que es “lo absoluto”. Esta definición del Dasein en el sentido de Heidegger llega a la imagen que suscita que lo absoluto es también lo contrario de la apariencia como si quisiera buscar una “santidad recóndita”, próxima al ya citado bakti donde se mueve la conducta en Antigona.
2. Brentano dice que “representaciones, juicios y afectos son las tres clases de los fenómenos físicos y esta idea se puede acercar hacia Huserl cuando advierte que es necesario “llegar al renacimientos de la filosofía desde el existencialismo”.
3. Cuando en 1950 Bertalanffy publica su Perspectivas en la teoría general de sistemas está creando de modo indirecto una simbología. Gilles Delleuze habla de que en el “eterno retorno lo que se repite es el ser” y esta imagen cotidiana de repetición nos lleva a una ruina de las normas científicas de comportamiento. Insiste en el tema: “No hay repetición de un primer término, incluso nuestro amor de la infancia hacia la madre repite otros amores adultos hacia otras mujeres”:
4. Habermas comenta que “la sociedad queda inmediatamente plasmada por los empujes corporativos de los centros de presión”. Y estas palabras simbolizan la creación de un sistema donde el poder y sus sucesivas alternativas “simbolizan” la creación de un orden manipulador en los más recónditos aspectos de la vida cotidiana en Antigona.
5. Los sistemas nos rodean de modo insistente. De entre ellos que actúan como una red de relaciones dinámicas surgen unos elementos diferenciales que pueden tener “además” otro significado. Este mundo dual es el que determina la posibilidad de integrar la conducta en espacios más referenciales en los que moverse. Dice Fayerabend que “la ciencia tiene necesidad de una pluralidad de standards” y esa advertencia nos coloca ante una pragmática de la pluralidad, tal y como Habermas la entendería que coloca los actos en una simbología de la realidad.
6. Gadamer habla de que la experiencia del arte “nos lleva a la verdad”, idea que Santayana desarrilara en sus “reinos” de modo definitivo y añade “quien tiene lenguaje tiene mundo” idea que denota un alejamiento de Heidegger cuando hablaba de que el lenguaje era la casa del ser”.
7. Sófocles hace hablar a su Edipo “Ese alado trueno de Zeus me llevará al infierno” y ese aserto está inscrito en un horizonte sexual donde los actos se inscriben en la dinámica de los deseos tal y como Habermas señalaría. El mundo del hacer está vinculado siempre con la sexualidad y es como una respuesta desprendida de la conjunción de la masculinidad y la feminidad puestas en contacto. De esta forma la visión “familiar” de la vida cotidiana señala unas posibilidades de praxis donde el tema sexual está siempre inscrito sea en su presencia o ausencia. Esta sería una forma de reafirmar que no puede zafarse. La familia es el gran infierno donde los actos cotidianos encuentran reposo. La “devoción por Dios” que el bakti propugnaba se abre a un deseo de descendencia donde los “hijos” sean el gran remanente moral. El Rey Hamlet su hijo sería una buena prueba de esta dinámica de la inserción del todo en la nada.
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Creada: 22/02/2000 Última Actualización: 24/01/2001