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Zona: Espadán Inicio: Fondeguilla Acceso: Desde La Vall, a 2 km
por la carretera de Soneja. Tiempo
estimado:
3 horas Desnivel: ±920m en 4 subidas Dificultad: Alta. Gran parte del recorrido es muy técnico para correr. En marcha... Ruta: Hoy volvemos a
Fondeguilla. Es la tercera vez que venimos aquí esta temporada y aún nos
quedan sendas nuevas que recorrer. Salimos de la plaza por la pista
hormigonada, barranco arriba. Al cabo de un km aproximadamente continuamos
por el cauce seco del barranco para dejarlo por la senda que veremos a la
derecha y que continúa cerca del cauce entre bancales. Cruzamos el barranco, subimos a otros bancales y
seguimos junto a una canal, para seguidamente volver a cruzar el barranco y
pasar junto al famoso “arquet” en el estrecho que forma el barranco.
Seguimos barranco arriba y después de una curva
cerrada a la derecha salimos a la pista que sube a Aigualit. Seguimos la
pista hacia abajo, a la izquierda, cruzamos el barranco y subimos a la pista
principal, por la que salimos de Fondeguilla, que seguiremos hacia la
derecha. Dejamos a la izquierda un desvío que nos
llevaría a Les Penyes de Carlos y al poco veremos un desvío a la derecha con
un cartel que indica a Artana. Lo cogemos, al principio por pista, y luego
por una bonita senda que nos sitúa en unos 10 minutos en el collado de
Artana, en el cordal de la Lloma de Llosti. Aquí nos encontramos con el GR36,
entre la Vilavella y Eslida, que seguiremos hacia la izquierda por la
divisoria de aguas entre el valle de Fondeguilla y la vertiente de Artana y
Eslida. Es la conocida Lloma de Llosti, un largo cordal que nos conducirá
hasta el Coll Roig, por una bonita senda siguiendo las marcas del GR.
Estos días atrás ha hecho bastante frío. Hoy
parecía que íbamos a tener más calor, pero el viento por toda la Lloma es
frío y a poco que paramos nos quedamos helados, lo que provoca un poco de
dispersión entre los corredores hasta llegar al Coll Roig, donde da el sol y
estamos un poco a resguardo del viento. Una vez en el Coll Roig, dejamos el GR36 que
baja hacia Eslida y cogemos la senda que sube de frente al Coll de la Nevera,
primero por unas empinadas pendientes, para luego suavizarse y seguir una
travesía hacia la derecha.
Al llegar al Coll de la Nevera giramos a la
izquierda para remontar la loma que nos separa del Castillo de Castro. Una
estrecha senda sube de frente y continúa luego por el cordal para dejarse
caer, a la derecha, sobre el collado, a pie del castillo. Remontamos el
sendero que tan bien conocemos y entramos en las ruinas del Castell de
Castro.
Desde aquí vamos a innovar y para ello nos colamos
justo al oeste por un surco entre las ruinas, bajamos por una pendiente junto
a los restos de la muralla y una vez al pie de la muela que da soporte al
castillo seguimos hacia el sur, hacia una elevación que queda a nuestros pies
con una marcada trinchera a su izquierda. La
idea es llegar a Cantallops siguiendo el cordal que nos separa. La bajada es
muy empinada y no hay camino. Unos bajan por un espolón rocoso y otros por
una especie de tobogán lleno de maleza y piedras sueltas más a la izquierda. |
Una vez sobre la elevación de la trinchera, la
superamos y bajamos por el otro lado, hasta otro collado, por un terreno
rocoso, complicado para correr. Tenemos frente a nosotros un resalte rocoso que
hay que superar bordeando por la derecha para seguir a continuación por una
loma hasta dar con la pista de Cantallops.
Seguimos la pista a la derecha hasta que ésta
cambia de vertiente, junto al pozo de las minas abandonadas de cinabrio, y
cogemos la senda que aparece a nuestra izquierda que nos lleva directamente al
collado de Cantallops, donde giramos a la izquierda para dejarnos caer por la
empinada senda que nos conduce en pocos minutos y algún que otro tropezón, de
regreso hasta el pueblo de Fondeguilla.
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