Clara Inés Quijano de Muñoz*, Lucía Victoria Sarmiento
de Peñaranda**,
Martha Isabel Camargo R.***, Teresa González Pereira****
RESUMEN:
La auto evaluación del
Programa de Enfermería de la UIS es una fase del proceso de Acreditación que para la Educación
Superior, orienta el CNA, Consejo Nacional de Acreditación, con base en el
análisis de siete factores: Proyecto Institucional, Estudiantes y Profesores,
Procesos Académicos, Bienestar Institucional, Organización, Administración y
gestión, Egresados e impacto sobre el medio y Recursos físicos y
Financieros. El Programa efectuó el
Proceso en dos años 1999 y 2000, utilizando como fuentes de información, los
documentos institucionales y de la Escuela de Enfermería; los Directivos de la
universidad, la Facultad de Salud y los de la Escuela; los Profesores,
Estudiantes y Administrativos del Programa, los Egresados y los Empleadores. La apreciación global del Programa fue de
80.6%, correspondiendo a un Alto Grado de Cumplimiento.
SUMMARY:
The
evaluation of the Nursing Program of the Industrial University of Santander is
the first stage of the Acrediting Process, that the Acrediting National Councel
is leadering. This evaluation is done with the analysis of seven agents:
Institutional Proyect, Students and Teachers, Academic Process, Institutional
Welfare, Organization, administration and management, Graduates and their impact
on the society, Physical and financial resorts.
The Nursing Program realized the process a long two years (1999-2000);
analysed the institutional documents, maked interview with the university
managers and with the Director of the Nursing Program and
its teachers. Also, ranked inquests to the students, administration
staff, graduates and employers. The
issue of the evaluation was 80.6%; this result corresponds to High Degree of
Fulfillment.
Evaluar es medir un fenómeno, el desempeño de un proceso, comparar el
resultado obtenido con criterios pre-establecidos y hacer un juicio de valor
tomando en cuenta la magnitud y dirección de la diferencia (Pabón 1985). Para
Michael Scriven, la evaluación es la estimación del valor o mérito de algo,
implica la formulación de un juicio a través del cual se expresa la valoración
o el mérito.
La actitud de evaluar es intrínseca al hombre en su naturaleza pensante.
Diariamente se aprende al comparar experiencias, situaciones y el éxito como
meta se consigue abordando los errores o desviaciones de los fines propuestos e
impulsando las fortalezas que se poseen. En el acto de evaluar se expresan los
valores e intereses de las personas u organismos que la promueven o
desarrollan, de ahí la necesidad de poner en común o expresar todo aquello que orienta
el proceso de evaluación. Para que el proceso sea optimista y conduzca al
desarrollo, debe basarse en la posibilidad de un progreso continuo, en la
premisa de que nada es perfecto y que todo pueda mejorar. El cambio, la acción,
el perfeccionamiento, el dar cuenta de, son objetivos de la evaluación. Quien
quiera hacer transformaciones de la realidad, de los procesos, hará de la
evaluación un eje conductor de su accionar.
La educación se basa en valores e intereses los cuales se manifiestan en
la evaluación. Las acciones educativas, sin interesar el nivel o el contexto en
el cual ocurran, adquieren sentido cuando buscan el crecimiento y el
mejoramiento de las personas que participan en ellas (Torres 1990). La
educación tiene sentido cuando crea los ambientes y genera las oportunidades
para que las personas se formen en la autonomía y la autodeterminación; siendo
la evaluación una reflexión sistemática
y continua del quehacer educativo, es necesaria para conocer los procesos
tendientes a la generación de la autonomía y la determinación.
Desde la Epistemología, puede pensarse la evaluación en dos sentidos: La
subjetivista, entiende el papel del sujeto como constructor de su propia
realidad, es participativa, pretende la comprensión y la interpretación de los
procesos, promulga el control interno fomentando la autoestructuración y la
autoevaluación. La objetivista, ve el papel del sujeto como receptor de
acciones del objeto, es productiva, pretende la eficacia, eficiencia, lo
observable y promueve un control externo, hetero estructural, la
heteroevaluación. La primera concepción es coherente con los postulados
derivados de la Misión de la Universidad.
Lo evaluativo como acto de valoración reflexiva sobre la acción
educativa, permite desde la perspectiva ética, contribuir en la formación de
personas capaces de elaborar discursos autónomos y constructores de relaciones
sociales en los cuales los hombres se consideran sujetos. La evaluación como
elemento pedagógico supone que los sujetos que intervienen en ella, pueden
tener discusiones orientadas a la comprensión de la acción que se está
desarrollando en el ambiente educativo y asumir la crítica de los procesos
educativos (Torres 1993).
La evaluación como factor esencial para promover el desarrollo del alumno,
del maestro, de la organización educativa, de los programas, de la comunidad y
por tanto de la calidad de todo el proceso educativo, permite además de ejercer
la autorregulación, dar respuesta al compromiso
adquirido frente a la sociedad, asumiéndola como un proceso dinamizador
que trasciende el juicio de valor
emitido en un momento puntual, orientando el futuro que se desee y quiera
alcanzar.
Como proceso dinamizador, la evaluación permite la continua revisión de
los alcances frente a los objetivos propuestos; es con ella que se puede
establecer qué grado de desarrollo se ha alcanzado, qué aspectos de la calidad,
en términos de lo que se conciba como tal, se han logrado para continuar
impulsando las acciones conducentes al mejoramiento continuo.
La calidad de un producto, un
programa, un servicio o una empresa, es una aspiración permanente en quienes
tienen la mira del éxito y/o compromiso real con quienes reciben sus
beneficios. La calidad se aprecia en la satisfacción de quienes reciben el
producto y/o servicio, en el cumplimiento de las premisas y características que
enmarcan el programa o el servicio mismo, en la satisfacción y compromiso de
quienes efectúan el proceso y en general en la dinámica misma de la población.
La calidad por tanto, es una aspiración en permanente dinamismo, no es
un punto final al cual se quiera llegar; es algo en constante construcción: en
la medida en que se van cumpliendo propuestas y metas, surgen otras que deberán
superarse.
La Educación superior tiene unas determinantes legales, políticas y
sociales que le señalan el rumbo de sus acciones y la universidad expresa ese
compromiso en su Misión que se constituye en la carta de navegación de los
programas académicos que la conforman.
El CNA*,
refiriéndose a la Calidad expresa sus conceptos y define los criterios sobre
los cuales opera, estableciendo los lineamientos marco para efectuar el proceso de autoevaluación en los
programas de Educación Superior:
«Qué es la Calidad? Es aquello que determina la naturaleza de algo,
aquello que hace de algo lo que ese algo es; es la identidad de algo como
síntesis de las propiedades que lo constituyen. Es la medida en que ese algo se
aproxima al prototipo ideal definido históricamente como realización óptima de
lo que le es propio.»
La calidad en la educación superior hace referencia a la síntesis de
características que permiten reconocer un programa académico específico o una
institución de determinado tipo y hacer un juicio sobre la distancia relativa
entre el modo como en esa institución o programa académico se presta dicho
servicio y el óptimo que corresponde a su naturaleza.
La evaluación de la calidad en el Sistema Nacional de Acreditación es
efectuada a través de: La autoevaluación, La evaluación externa o evaluación de
Pares y la evaluación final efectuada por el CNA, quien a partir de las dos
evaluaciones iniciales emite un concepto técnico para el Ministro de Educación,
quien finalmente establece un Acto de Acreditación o Reconocimiento Público de
la Calidad.
Los criterios sobre los que opera el CNA o elementos valorativos que se
complementan y potencian entre sí son:
• Universalidad: Saber válido intersubjetivamente, su validez no
está condicionada al contexto geográfico de su producción. Multiplicidad y
extensión de los ámbitos en que se despliega el quehacer de la Institución.
• Integridad: la probidad como preocupación
constante de la institución o programa en el cumplimiento de sus tareas;
preocupación por el respeto de los valores y referentes universales que
configuran el Ethos académico y los inspiradores del servicio educativo del
nivel superior.
• Equidad: Dar a cada quien lo que merece; justicia con que opera
en procesos de toma de decisiones, evaluaciones, reconocimiento de méritos, la
no discriminación, reconocimiento de diferencias y aceptación de diferentes
culturas.
• Idoneidad: Capacidad de cumplir a cabalidad
las tareas específicas desprendidas de la Misión, y del Proyecto Educativo Institucional PEI.
• Responsabilidad: Capacidad para
reconocer y afrontar las consecuencias de sus acciones. Criterio íntimamente
relacionado con la autonomía aceptada como tarea y como reto y no simplemente
disfrutada como un derecho.
• Coherencia: Grado de correspondencia entre las
partes de la institución y entre éstas y la institución como un todo.
Correspondencia entre lo que dicen que son y lo que efectivamente realizan.
• Transparencia: Capacidad para
explicitar claramente las condiciones internas de operación y los resultados
de ella.
• Pertinencia: Capacidad para
responder a las necesidades del medio.
• Eficacia: Grado de correspondencia entre los
propósitos formulados y los logros obtenidos por la institución y el programa.
• Eficiencia: Utilización de los medios
disponibles para el logro de los objetivos.
La Autoevaluación se efectúa mediante el análisis de siete factores
determinados por el CNA: Proyecto Institucional; Estudiantes y Profesores;
Procesos académicos; Bienestar Institucional; Organización, Administración. y
gestión; egresados e impacto sobre el medio y Recursos físicos y
financieros, claramente definidos por
características e indicadores.
La Escuela de Enfermería como
respuesta a la política de la UIS de
asumir el compromiso de la Acreditación y como parte de su responsabilidad
social con la comunidad, decidió efectuar el proceso de Autoevaluación,
determinando los resultados que contribuirán al proceso de desarrollo del
programa.
El Proceso de Autoevaluación estuvo constituido por diez fases
desarrolladas en un período de dos años
que se describen a continuación:
1. Proceso de preparación
sobre lineamientos del CNA:
• Participación
en convocatoria de Vicerrectoría Académica y Oficina de Planeación donde se
presentó el Proceso de Acreditación.
• Asignación de
docente Coordinadora del proceso en la Escuela de Enfermería.
• Asistencia al
taller sobre Acreditación convocado por el CNA.
• Participación
en reuniones con miembros del CNA para la verificación de requisitos, paso
previo al inicio de la Autoevaluación de los Programas.
• Conformación
del Comité de Autoevaluación de la Escuela.
2. Sensibilización sobre
proceso de Acreditación efectuado con el personal docente y los estudiantes del
Programa de Enfermería; fue una labor permanente aprovechando los diferentes
espacios académicos del programa.
3. Construcción, discusión y
análisis de factores con participación de estudiantes y profesores; este proceso
duró un año, en razón de extensión en el
tiempo de los grupos para desarrollar el trabajo.
4. Realización de los
talleres de ponderación con profesores y estudiantes representantes por niveles
de estudio. En forma individual cada participante estableció la importancia
relativa de cada uno de los siete factores en la determinación de la calidad
del programa y la importancia relativa de cada característica en la
calificación de cada factor. A partir de esta calificación individual, se
determinó la ponderación colectiva base para la comparación final con los
juicios obtenidos en la recolección de la informaciòn y el establecimiento del porcentaje de
cumplimiento.
5. Diseño de los
instrumentos, realizado por el Comité de Autoevaluación a partir del análisis
efectuado tanto por profesores como de estudiantes, al inicio de 1999.
6. Prueba de los
instrumentos efectuada durante el primer
semestre de 1999, de la siguiente manera:
• De directivos
efectuada con la Jefe de la División de Bienestar, un Director de Escuela
diferente a Salud y un jefe de Departamento enfermera.
• De
profesores: Docentes de otras escuelas
• Estudiantes:
Grupo de estudiantes de Enfermería de la primera cohorte del Plan B:
Bachilleres Auxiliares de Enfermería.
• Empleadores:
un ex directivo de una importante Empresa Prestadora de Salud.
7. Aplicación de
Instrumentos: se desarrolló durante el segundo semestre de 1999.
• Consejo
Académico a todos sus miembros.
• Consejo de
Facultad: Miembros Unitarios, un representante de los jefes de Departamento.
• Consejo de
Escuela: a todos los miembros
• Profesores:
Todos los de Planta activos en el programa y los de Cátedra vinculados en el
semestre.
• Estudiantes:
con una población de 226 estudiantes matriculados en el semestre, se estimó una
muestra con el 2% de error para un total de 179 estudiantes distribuidos
proporcionalmente por nivel de estudio, aplicando en forma aleatoria a las
Unidades de análisis presentes en una actividad académica teórica.
• Empleadores:
se seleccionaron por conveniencia de aquellas instituciones que agrupan el mayor número de egresadas;
escogiendo igualmente algunas más pequeñas conformadas en los últimos tiempos.
• Egresados:
ubicados en empresas de la región identificadas por miembros de la Escuela.
8. Procesamiento y análisis
de la Información, efectuado por el
Comité de Autoevaluación, mediante la revisión de documentos, y la utilización
de programa EPIINFO, se ejecutó en el año 2000.
9. Calificación de
características y factores de acuerdo
con la siguiente escala:
GRADO DE CUMPLIMIENTO |
CALIFICACION |
CUMPLIMIENTO
|
Grado A Grado B Grado C Grado E |
10 8 – 9 6 – 7 4 – 5 1 – 3 |
Se cumple plenamente Se cumple en alto grado Se cumple satisfactoriamente Se cumple aceptablemente No se cumple |
El cumplimiento se estableció comparando los resultados obtenidos en la
revisión de documentos y los resultados de las encuestas, con los datos de la
ponderación obtenidos antes de la recolección de la información. La
existencia del requerimiento en la
característica e indicador se calificó con 100, que promediado con los
resultados de las encuestas dio la calificación que en definitiva se comparó con
el dato de cada ponderación para una determinación de la calidad del programa.
10. Presentación del Informe
final ante la Vicerrectoría Académica para revisión y el Aval para su
presentación ante el CNA, en el segundo semestre del 2000.
Una vez efectuado el proceso de
acuerdo con los parámetros del CNA, se obtuvo un grado de cumplimiento general
del 80.6% (Alto grado), resultado del análisis de los siete factores, dos de
los cuales obtuvieron una valoración inferior al 80%: estudiantes y profesores
y el factor Organización, Administración y gestión.
RESULTADO
GLOBAL: AUTOEVALUACIÓN PROGRAMA DE ENFERMERIA UIS
FACTORES |
IMPORTANCIA RELATIVA** |
JUICIO*** |
CUMPLIMIENTO**** |
1.
Proyecto institucional |
16.4 |
83.9 |
13.8 |
2.
Estudiantes y profesores |
17.2 |
78.7 |
13.5 |
3.
Procesos académicos |
16.5 |
80.0 |
13.2 |
4.
Bienestar intitucional |
14.5 |
81.9 |
11.9 |
5.
organización, admón., y gestión |
11.1 |
75.9 |
8.3 |
6.
Egresados e impacto sobre el medio |
10.4 |
82.0 |
8.5 |
7.
Recursos físicos y financieros |
13.9 |
81.9 |
11.4 |
%
de cumplimiento |
|
|
80.6 B |
El factor 1: Proyecto Institucional, obtuvo la
máxima apreciación, en razón de que la Universidad y el Programa de Enfermería
cumple a cabalidad con las exigencias de las características relacionadas con
la existencia del Proyecto Educativo Institucional y la Misión. Se cuenta con
una Misión, propósitos, objetivos y metas claramente definidos; se asume la
formación del factor humano como eje capaz de influir en el bienestar y calidad
de vida de los individuos y colectivos humanos; se han conformado grupos de
trabajo orientados a la reflexión, al mejoramiento y calidad del programa
académico; y la Universidad plantea criterios para el manejo y control adecuado
de los recursos físicos y financieros.
Este factor se vio afectado en su valoración principalmente por el
desconocimiento que la comunidad de enfermería posee en relación con la Misión
y de los mecanismos explícitos de Administración y gestión y por la escasa
evaluación de la interacción de la Escuela con el medio externo.
El factor 2.
Estudiantes y Profesores, obtuvo
una valoración del 78.9%, destacando en él, la calidad e idoneidad del
programa, representado por el cumplimiento fiel de la equidad, la transparencia
y la eficiencia en el proceso de admisión de estudiantes, lo cual se refleja en
el alto puntaje de las pruebas de Estado
de quienes ingresan y en la cualificación del factor humano docente. El proceso
y vivencia de la democracia en los diferentes espacios de la vida académica de
la UIS, son elementos positivos que favorecen la participación de docentes y
estudiantes en cada uno de los organismos de dirección.
En este factor, se cuestiona el ingreso por segunda opción al programa
de Enfermería, al igual que la ausencia de una entrevista que permita
identificar actitudes requeridas para el rol de cuidadora de la salud, propio
de la Enfermera. De igual forma se identifica como debilidad el alto número de
docentes de cátedra requeridos para el cumplimiento del modelo pedagógico que
se sigue en las prácticas y derivado del número de comisiones de servicio por
tiempo prolongado de docentes de planta. Otro aspecto considerado débil es lo
relacionado con la investigación docente , su
reconocimiento como tal y su
proyección a nivel nacional e internacional.
El factor 3. Procesos Académicos con valoración
del 80% , se destaca la pertinencia social del programa, constituyéndose en un
ejemplo de renovación permanente dentro del contexto de la universidad y
pionero a nivel nacional en la propuesta del quinto año de formación
profesional, el cual ha favorecido el ejercicio integral de la enfermería en su
proceso formador de nuevas profesionales.
En la
actualidad existe satisfacción por parte de los egresados con su propio
desempeño y así mismo existe reconocimiento por parte de la comunidad por las
acciones que efectúan las enfermeras UIS para el logro de las metas
institucionales donde ejercen la profesión.
La investigación y la fundamentación teórica, son aspectos que se han
fortalecido como parte fundamental en el currículo de Enfermería, el cual ha
evolucionado desde el proceso salud enfermedad hasta los saberes propios de las
ciencias del Cuidado; sin embargo, se
identifica como debilidad la ausencia de coordinación con centros de
investigación y la poca utilización de los resultados para enriquecer los
procesos.
En la evaluación de la calidad de este factor, los aspectos relacionados
con la integralidad en la evaluación y la disponibilidad de recursos bibliográficos la afectan
negativamente, por cuanto se admite que las tres áreas de formación como son la
actitudinal, la conceptual y la
procedimental, no son evaluadas con igual importancia y se reconoce la poca
posibilidad de mantener actualizados los recursos bibliográficos.
El Bienestar Institucional de la UIS, evaluado en el factor 4, obtuvo
una apreciación del 81.9% siendo
considerado de gran calidad, dado que existen políticas, factor humano, organizaciones
diferentes y múltiples mecanismos orientados a favorecer la calidad de vida
tanto de estudiantes como de docentes vinculados, elementos que son reconocidos
en el ámbito local, regional y nacional.
La debilidad en este factor está expresada por el desconocimiento de las
políticas y la baja participación de los estudiantes en los programas de
bienestar relacionada con la baja disponibilidad de tiempo para actividades
extra curriculares y por la ubicación geográfica de la Facultad de Salud. Por
otra parte, los sistemas para el bienestar docente cubren sólo a los profesores
de planta de la institución, dejando por fuera a los profesores de cátedra en
aumento.
La evaluación de la Organización, Administración y Gestión del programa,
factor 5, con una valoración del 75.2%,
se caracteriza en forma positiva por la orientación que tiene hacia las funciones sustantivas de la UIS:
docencia, investigación y extensión y por los mecanismos que permiten
incentivar y motivar al personal vinculado.
Como debilidades se encontraron: la supresión del cargo de coordinadora
académica en tiempos de descentralización, la necesidad de un mayor apoyo
administrativo por parte de personal de secretaria, la configuración del Consejo de facultad con marcado
predominio de la Escuela de Medicina, desconocimiento de las decisiones
emanadas de los organismos de dirección por parte de los estudiantes y en
especial lo común a la universidad pública: baja disponibilidad de recursos
frente a los compromisos que como entidad de Educación Superior tiene con sus
programas y con la comunidad.
El factor 6. Egresados e impacto sobre el medio,
obtuvo la segunda mejor calificación, 82%,
a expensas del reconocimiento que los empleadores le confieren a la
calidad profesional de las Enfermeras UIS; sin embargo, al interior de la
Escuela se reconoce de manera clara la ausencia de mecanismos efectivos que
permitan el seguimiento y/o participación activa de los egresados en el
programa.
Los egresados han ejercido un papel protagónico en la transformación de
la calidad de vida de la comunidad en el oriente colombiano; la UIS ha formado
la mayor parte de las enfermeras que laboran en las instituciones de la región
a nivel directivo y asistencial. La proyección social e investigativa se revela
en la creación del instituto PROINAPSA, en la creación de los programas de
postgrado en Prevención y atención de
emergencias y desastres y Atención de enfermería al paciente en cuidado crítico
y en la implementación del programa dirigido a bachilleres que forman parte del
grupo trabajador del sector salud, las Auxiliares de Enfermería.
El factor 7. Recursos físicos y financieros
obtuvo una valoración del 81.9%, reconociendo la calidad de las instalaciones,
la existencia de políticas definidas de organización presupuestal y financiera,
el manejo honesto y transparente de los recursos con que cuenta la universidad, fortaleza más
evidente en la medida en que cada vez
son más escasos por deficiencia en la asignación, disponibilidad y
generación de recursos propios frente a
los requeridos para su funcionamiento óptimo; es en este factor donde se plasma
la intención de las políticas gubernamentales frente a la financiación de la universidad pública.
1. Derivadas
del factor 1. Proyecto Institucional:
• Promover y
divulgar el conocimiento y reconocimiento de la Misión institucional y de la
Escuela.
• Analizar la
posibilidad de una estructura administrativa para la Escuela donde las funciones
de Docencia, Investigación y Extensión tengan sus coordinadoras, con una
dirección integradora y un Consejo Asesor, que garantice el desarrollo del
programa.
2. Derivadas
del factor 2. Estudiantes y Profesores:
• Limitar el
tiempo de comisiones administrativas de los docentes.
• Proveer los
cargos vacantes existentes, promoviendo a nivel nacional el concurso docente
para garantizar el factor humano de
calidad requerido.
• Ante la
dificultad de proveer cargos por concurso, estudiar la posibilidad de
seleccionar enfermeras jóvenes para capacitar en las áreas de postgrado que se
necesiten para el desarrollo futuro del programa.
• Fortalecer
programas de relaciones e intercambio de docentes con instituciones del nivel
nacional e internacional.
• Potencializar
en docentes y estudiantes la construcción de actitudes que favorezcan los
requerimientos para ejercer la profesión de enfermería.
• Fortalecer el
recurso bibliográfico informático y la infraestructura de las aulas de clase.
• Garantizar el
factor humano requerido para desarrollar el programa sin detrimento de la
calidad y sin obstaculizar el cumplimiento de las responsabilidades que se asignan al ascender en el escalafón.
• Cumplir con
la disposición de la Universidad de publicar los horarios semestrales por oficina docente.
• Constituir
líneas de investigación a partir de la experiencia construida hasta el momento.
3. Derivadas
del factor 3. Procesos Académicos:
• Potencializar
las experiencias que favorezcan la formación integral.
• Repensar el
plan de estudios en términos de fortalecer más las oportunidades de interacción
que la universidad y la sociedad brinda a los estudiantes para favorecer las
diferentes dimensiones del ser.
• Promover
estrategias que favorezcan la flexibilidad académica, manteniendo o buscando
siempre la excelencia.
• Ejecutar
procesos de reflexión frente a la evaluación en la formación, tanto en docentes
como en estudiantes, para asumirla en el proceso pedagógico en su real
dimensión.
• Propiciar
mecanismos que garanticen la ejecución de estrategias que aborden los
resultados de las evaluaciones producidas al interior del programa de
enfermería, ejemplo tiempos prudenciales para la programación académica
semestral.
• Fortalecer
aún más la investigación como un instrumento no sólo para la construcción de
conocimiento, si no para intermediar la relación profesor estudiante en el
proceso formados y la requerida entre profesionales de diversas disciplinas.
• Diseñar e
implementar programas de inducción y mejoramiento docente a los profesores de
cátedra.
• Fortalecer en
el plan de inversiones, recursos efectivos para aumentar la cobertura de los
servicios de información con conexiones internacionales.
• Establecer un
incremento fijo anual real en el presupuesto de inversión, para mejorar el
apoyo bibliográfico para los programas.
4. Derivadas
del factor 4: Bienestar institucional.
• Fortalecer
desde la división de bienestar y desde la escuela de enfermería la vivencia de
estilos de vida saludables en quienes como profesionales deberán orientar a la
comunidad en general en tal sentido.
• Mantener los
espacios y las estrategias de promoción y prevención que ha constituido la
división de Bienestar en la Facultad de salud, estableciendo un sistema de
organización de la oferta, de acuerdo con la demanda potencial.
• Rescatar la
figura de Coordinadora Académica de Pregrado, como alternativa a la
estructura organizativa de la escuela
planteada en el factor 1.
5. Derivadas
del factor 5. Organización, Administración y Gestión:
• Ejecutar
programas de mejoramiento de la comunicación y de las relaciones
interpersonales al personal de secretarias y/o efectuar rotación de cargos que
fomenten la motivación.
• Reconsiderar
la conformación del Consejo de Facultad en términos que agilice su
funcionamiento y operatividad; podría formar parte de él sólo un representante
de los jefes de departamento de la Escuela de medicina elegido por un período
de tiempo determinado además de los miembros unitarios.
• Rescatar la
participación de los egresados en los organismos directivos del programa.
6. Derivadas
del factor 6. Egresados e impacto sobre el Medio:
• Fortalecer
estrategias para mantener relación con los egresados, para consultarlos,
asesorarlos, brindar educación continua e implementar sus ideas.
• Promover una
investigación sobre el impacto de las enfermeras de la UIS en el medio social
laboral.
• Incluir un
representante de Egresados en el consejo de Escuela.
7. Derivadas
del factor 7
• Gestionar
mayores recursos con el fin de mejorar la financiación de proyectos que cumplan
con las tres funciones fundamentales de la UIS y las exigencias derivadas de la
Misión y del Proyecto Educativo Institucional.
• Evitar el
deterioro de las fortalezas históricas de la UIS y del programa, manteniendo y
desarrollando la infraestructura en relación con la estructura física, y el
plan de cargos docente.
• Mantener en
forma permanente el Comité de Autoevaluación con el fin de garantizar el
seguimiento y monitorización tanto de las recomendaciones como de la ejecución
del programa de enfermería.
• Asumir la
Universidad, a través de la Vicerrectoría Académica, la evaluación periódica de
los programas acreditados.
CONSEJO NACIONAL DE ACREDITACIÓN - CNA. Lineamientos para la
acreditación. Bogotá: CNA, (1996)
DIAZ BARRIGA, Angel. Problemas y retos del campo de la evaluación
educativa. En: Perfiles educativos. No 37, México, (1988)
INFORMES CON FINES DE ACREDITACIÓN,
Bienestar Universitario, Biblioteca, Oficina de Admisiones, Oficina de
Recursos Humanos, Publicaciones,
Secretaría General, Sección Financiera. Otras UIS 1999.
PABÓN LASSO, Hipólito. Evaluación de servicios de salud, manual modelo
Prides, Cali: Universidad del Valle, 1985.
PANZA GONZÁLEZ, Margarita y otros. Fundamentación didáctica. México:
1986, Tomo 1.
QUIJANO DE MUÑOZ, Clara Inés. La
evaluación como proceso comunicativo. Bucaramanga: UIS, 1996.
TORRES ZAMBRANO, Guillermo.
Autoevaluación y autonomía. Bogotá: 1990.
—————— Otra evaluación, Otra educación: Bogotá el autor, 1993.
TORRES ZAMBRANO, Guillermo y otros. Una reflexión sobre la evaluación educativa desde la ética.
Cuadernos de evaluación. Bogotá: Universidad Santo Tomás, 1993.
*
Lic. Enfermería MSP y MP. Profesora Asociada UIS. Coordinadora Comité
Autoevaluación Enfermería UIS
**
Lic.Enfermería Especialista en Salud Sexual y Procesos Afectivos y en Pedagogía
Informática. Profesora Asociada UIS. Miembro Comité Autoevaluación
***
Enfermera. Especialista Salud Ocupacional y en Educación. Profesora Asistente
UIS. Miembro del Comité
****
Lic. Enfermería. MSP. Profesora Asociada UIS. Miembro del Comité
*
CNA. Lineamientos para la Acreditación
**
Resultados del taller de ponderación
***
Resultado del análisis de la Información
****
Resultado de la relación entre la importancia relativa y el juicio