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En 1805 el escritor
británico William Godwin publicó su novela Fleetwood.
Humboldt estaba en París organizando el material
científico que había obtenido en su
expedición. Ese año publicó su Essai sur la géographie des
plantes. También empezó en
colaboración con Gay-Lussac un estudio sobre la
composición del aire.
Laplace obtuvo algunos resultados sobre capilaridad que
esencialmente habían sido descritos por Young el año
anterior, pero Laplace les dio una formalización
matemática más precisa. En particular
estableció la que hoy se conoce como ecuación de Young-Laplace.
Ese año fue condecorado con la Legión de Honor.
Goya pintó su Maja
vestida, un cuadro idéntico en su
composición a su Maja
desnuda, de finales del siglo precedente, salvo por que
la modelo aparece vestida. Una vez más el propósito
de este cuadro no está claro. Su primer propietario
conocido —aunque no necesariamente el que lo encargó— es
Manuel Godoy.
El 1 de enero de 1806 fue
abolido el calendario republicano francés y el calendario
gregoriano volvió a entrar en vigor. Ese mismo día
tenía lugar la coronación de Maximiliano I
José como rey de Baviera y la de Federico I como rey de
Würtemberg.
Ingres pintó ese año su Napoleón entronizado, y poco
después marchó a Roma, donde descubrió a
Rafael y el quattrocento italiano, que marcaría su estilo.
El 19 de enero una flota británica dirigida por sir David Baird invadió el cabo de Buena Esperanza y tomó a los neerlandeses Ciudad del Cabo. El 23 de enero murió el primer ministro británico William Pitt. Una prueba de su honradez política es que dejó una deuda de cuarenta mil libras, que el Parlamento aceptó pagar, a la vez que decretaba un funeral público en su honor. En la expedición británica contra Ciudad del Cabo había participado sir Home Popham, quien, ignorando la muerte de Pitt, le escribió una carta sugiriéndole reconsiderar el proyecto de promover una rebelión en sudamérica.
El 6 de febrero una flota
británica derrotó a otra francesa cerca de la isla
de La Española.
El 9 de febrero un
ejército francés dirigido por André Masséna
invadió el reino de Nápoles. El rey Fernando I tuvo
que huir nuevamente a Sicilia, bajo la protección de la
flota británica.
El 11 de febrero tomó
posesión del cargo de primer ministro británico el
barón William Grenville.
Formó el llamado "Ministerio
de todos los talentos", en el que a causa de la guerra,
quiso incorporar a representantes de todas las tendencias
políticas. En particular, el político más
influyente del partido whig,
Charles James Fox, recibió el ministerio de asuntos
exteriores. Pitt había intentado anteriormente incorporar a
Fox a su gobierno, pero el rey Jorge III se había opuesto a
ello sin dejar lugar a discusión.
El 15 de febrero los franceses
tomaron la capital napolitana.
El 25 de febrero Cherubini
estrenó en Viena su ópera Faniska, que obtuvo un gran éxito y fue
alabada por Haydn y Beethoven.
El 26 de febrero los franceses
pusieron sitio a Gaeta, que era, junto con Calabria, el
último reducto de las tropas del rey Fernando I en la parte
continental de su reino.
El 3 de marzo el
ejército francés tomaba Calabria. Gaeta
resistía el asedio.
El 10 de marzo, con la batalla
de Campo Tenese, los
franceses completaban el dominio del reino de Nápoles,
salvo que Gaeta seguía resistiendo el asedio.
Después de que fracasaran sus intentos de implicar al gobierno británico en su proyecto de independizar las colonias españolas en América, Francisco de Miranda había marchado a los Estados Unidos, donde había hecho una propuesta similar al presidente Jefferson y a su secretario de Estado, James Madison. Como éstos también le denegaran su apoyo, terminó organizando una expedición de forma privada. Alquiló un barco, reclutó una tripulación y marchó hasta Haití, donde compró otros dos barcos. El 12 de marzo izó en uno de ellos una bandera tricolor, amarilla, azul y roja, diseñada por él mismo, que pretendía ser la bandera de su proyecto de Imperio Colombiano.
El 13 de marzo una flota
francesa encontró a una británica cerca de las islas
de Cabo Verde y se libró una batalla de seis horas en la
que los británicos resultaron vencedores.
El 28 de marzo llegó a
Ciudad del Cabo un barco británico que informó de
que en Buenos Aires se encontraba un barco cargado con un tesoro
procedente de Potosí y que pronto zarparía rumbo a
España. Popham trató de persuaidir a Baird de que le
proporcionara una flota para tomar Buenos Aires, hacerse con el
tesoro y usarlo para financiar una revuelta contra España.
Le aseguró que la revuelta contaría con el apoyo
popular.
El 29 de marzo se
estrenó en Viena la nueva versión de Fidelio, reducida a dos actos
y con una nueva obertura, considerada una joya de la música
sinfónica. Esta vez tuvo éxito, pero sólo se
representó dos veces a causa de una disputa entre Beethoven
y la dirección del teatro.
El 30 de marzo Napoleón
nombró rey de Nápoles a su hermano Joseph, ahora José I de
Nápoles. Recientemente había estallado una revuelta
de campesinos en Calabria, hartos de soportar los excesos de los
soldados franceses. Napoleón concedió también
el título de princesa de Guastalla a su hermana Paulina. Guastalla
había formado parte hasta entonces del ducado de Parma, que
Napoleón asignó a Cambacérès, mientras
que a Lebrun le otorgó el ducado de Piacenza. El
matemático Laplace recibió el título de conde
del Imperio. Ese año Napoleón prohibió La Marsellesa.
El 9 de abril murió
exiliado en Alemania el príncipe Guillermo V de
Orange-Nassau. Fue sucedido por su hijo Guillermo Federico.
El 14 de abril una flota
británica salió de Sudáfrica bajo el mando
del coronel William Carr
Beresford con la misión de conquistar Buenos
Aires. En Santa Helena recibió refuerzos y envió una
carta a Londres informando de esta misión que, en
principio, no había sido autorizada, pero que se
hacía en virtud de la autoridad que tenían los
gobernadores coloniales (Baird en este caso) para ordenar acciones
militares de urgencia.
Villeneuve había sido capturado por los británicos
en la batalla de Trafalgar, pero fue puesto en libertad y
decidió regresar a París. En el transcurso de su
viaje hizo una parada en Rennes, donde escribió una carta
al ministro de Marina con su versión de los hechos, en la
que pedía la oportunidad de justificarse ante
Napoleón. Sin embargo, el 22 de
abril fue encontrado muerto en la habitación del
hotel de Rennes en el que se hospedaba. La policía
dictaminó que se había suicidado
apuñalándose seis veces en el pecho.
Turner presentó su óleo La batalla de Trafalgar, en el que plasma una
atmósfera llena de humo y niebla.
El 28 de abril una flota
española interceptó a la pequeña armada de
Francisco de Miranda cerca de la costa de Venezuela y
capturó dos de sus barcos. Dieciséis hombres fueron
capturados, de los cuales diez fueron condenados a muerte.
El 5 de junio Napoleón
disolvió la república Bátava y nombró
a su hermano Luis rey de Holanda. El nuevo monarca se
preocupó por integrarse en la cultura de su nuevo reino y
estudió el holandés. Se cuenta que se
presentó ante el pueblo como el Conejo de Holanda, porque pronunció Kongin (rey) como Konjin (conejo). No obstante,
este error le granjeó la simpatía popular, pues
evidenciaba su interés por asimilar la cultura neerlandesa.
El 10 de junio Charles James
Fox propuso a la cámara de los Comunes una ley que aboliera
totalmente el tráfico de esclavos, que fue aprobada por 114
votos contra 15, y ratificada en la cámara de los Lores el
25 de junio. Ese mismo
día los británicos desembarcaban cerca de Buenos
Aires y el 27 de junio la
capital se rindió ante ellos. El virrey, Rafael de Sobremonte,
había abandonado previamente la ciudad llevándose
consigo la plata de Potosí que estaba bajo su custodia.
Beresford advirtió a los comerciantes que si no se
recuperaba el tesoro del Estado ellos mismos lo pagarían
con sus propios bienes. Los comerciantes se lanzaron entonces a la
persecución del virrey, al que le arrebataron el tesoro y
se lo entregaron a los británicos.
El 12 de julio se firmó
en París el tratado de la Confederación del Rin, por el que
dieciséis estados del Sacro Imperio formaron una
confederación bajo la protección de Francia.
El 14 de julio el virrey
Sobremonte firmó una declaración por la que ordenaba
no obedecer ninguna orden proveniente de Buenos Aires mientras
permaneciera ocupada por los británicos.
Ese mismo día, un militar de Kentucky llamado Joseph Hamilton Daveiss
escribió una carta al presidente Jefferson denunciando que
Aaron Burr trataba de provocar una rebelión en los
territorios españoles limítrofes con los Estados
Unidos con el fin de crear un nuevo Estado independiente que
comprendiera estos territorios y parte de Luisiana. Al parecer
Jefferson no dio crédito a estas acusaciones. Más
tarde, James Wilkinson, el gobernador de Luisiana, envió al
presidente Jefferson correspondencia de Burr que confirmaba las
acusaciones que se habían vertido contra él. Parece
ser que Wilkinson había alterado las cartas para exculparse
a sí mismo, y que delató a Burr precisamente como
medio para evitar que le salpicara un escándalo en el que
él mismo estaba implicado.
El 18 de julio la
artillería francesa logró finalmente abrir brechas
en los muros de Gaeta y la ciudad se rindió finalmente a
Masséna, que fue enviado entonces al sur para combatir la
revuelta de Calabria.
El 22 de julio el embajador
austríaco en París recibió un
ultimátum según el cual, si el emperador Francisco
II no abdicaba antes del 10 de agosto, el ejército
francés invadiría Austria. El 1 de agosto los estados de la Confederación
del Rin se desvincularon del Sacro Imperio.
El 2 de agosto el rey
José I de Nápoles abolió el feudalismo y
todos los privilegios de la nobleza que restringían la
libertad personal, de comercio y de industria para las clases
inferiores.
El 3 de agosto Francisco de
Miranda desembarcó en Venezuela enarbolando su bandera
tricolor. Al amanecer del 4 de agosto
entró en Coro,
pero no encontró el respaldo que esperaba entre sus
habitantes.
El 6 de agosto Francisco II
promulgó, no sólo su abdicación como
emperador, sino la disolución del Sacro Imperio Romano
Germánico, reservándose el título de
emperador de Austria. Así desaparecía un imperio con
casi ocho siglos y medio de historia. Ese mismo día
Napoleón concedió al príncipe elector
Federico Augusto III de Sajonia el título de rey Federico Augusto I de Sajonia.
El 12 de agosto Karagjorgje,
al frente de unos 9.500 servios, derrotó a un
ejército turco de 40.000 hombres en la batalla de Misar, que se prolongó
durante tres días.
En vista de la falta de apoyo, el 13
de agosto Miranda abandonó Venezuela y estuvo un
tiempo por el Caribe esperando unos refuerzos que nunca llegaron.
El entusiasmo inicial con el que los bonaerenes habían
recibido a los británicos también se había
extinguido. Habían aparecido sectores que recelaban de que
la supuesta ayuda británica para independizar la colonia
era más bien un intento de convertirla en colonia
británica. Se produjeron levantamientos realistas que
terminaron imponiéndose. El 20
de agosto capituló Beresford, que fue hecho
prisionero.
El 23 de agosto murió
el físico francés Charles Augustin de Coulomb.
El 14 de septiembre el sultán
Said bin Sultan de Omán depuso a su hermano Salim y
pasó a gobernar en solitario.
El 18 de septiembre
murió el ministro británico Charles James Fox. Al
igual que Pitt, también dejó al morir una
considerable deuda personal, aunque algo menor, en este caso de
unas diez mil libras.
Aunque la expedición británica contra Buenos Aires
había terminado en un completo fracaso, lo cierto es que el
tesoro que Beresford había arrebatado a los
españoles navegaba de camino a Londres. Popham había
sido condenado por un consejo de guerra por haber abandonado su
misión en el cabo de Buena Esperanza sin
autorización para ello, si bien la sentencia nunca tuvo
efecto alguno, pues también fue condecorado por sus
esfuerzos para "abrir nuevos
mercados". Más aún, el 22 de septiembre el gobierno británico
autorizó un proyecto similar de conquista de Buenos Aires y
Montevideo.
El 23 de septiembre la
expedición de Lewis y Clarck estaba de regreso en Saint
Louis.
El 1 de octubre Gran
Bretaña, Prusia, Rusia y Suecia firmaron la Cuarta Coalición
contra Francia. El rey Federico Guillermo III de Prusia
forzó a Federico Augusto I de Sajonia a apoyar a la
coalición. El ejército francés derrotó
a Prusia y Sajonia en las batallas de Saalbourg y Schleiz
el 9 de octubre, y en Saalfeld el 10 de octubre. El 14 de octubre los franceses
obtuvieron dos nuevas victorias, esta vez decisivas: En Jena,
Napoleón, al frente de unos 56.000 hombres derrotó a
unos 75.000 prusianos y sajones. El rey Federico Augusto I
firmó una paz por separado con Francia.
Simultáneamente, el rey Federico Guillermo III de Prusia,
al frente de más de 60.000 hombres, era derrotado en Auerstaedt por unos 25.000
franceses. Napoleón formó un consejo de guerra
contra el mariscal Jean-Baptiste
Jules Bernadotte porque se pasó el tiempo
conduciendo a sus hombres de uno a otro campo de batalla sin
participar en ninguno.
El 17 de octubre el emperador
Jacques I de Haití fue asesinado por sus colaboradores,
entre ellos Henri Christophe y Alexandre
Pétion, que instauraron un sistema republicano en
el que Christophe fue elegido presidente, mientras que
Pétion controlaba el senado.
El 22 de octubre
Napoleón recibió a uno de los generales polacos que
combatían en sus filas, el general Jan Henryk Dabrowski. Lo
había citado para reclutar y organizar un ejército
en Polonia que se opusiera a la dominación prusiana.
El 27 de octubre
Napoleón entraba en Berlín. La familia real prusiana
tuvo que huir hacia el este.
El 29 de octubre los
británicos tomaron la ciudad de Maldonado, cerca de Montevideo.
El 3 de noviembre Dabrowski
entraba en Poznan
dispuesto a cumplir la misión que Napoleón le
había encomendado, y no tardó en encontrar patriotas
dispuestos a luchar por la independencia de Polonia con la ayuda
de Francia.
El 6 y el 7 de noviembre unos 30.000 franceses se
enfrentaron a unos 20.000 prusianos por las calles de Lübeck.
Los franceses vencieron nuevamente y saquearon la ciudad.
El 10 de noviembre un
ejército polaco se enfrentó al ejército
prusiano en Ostrzeszow y
Kepno. Los levantamientos
se extendieron por toda la región circundante.
En la India murió el Gran Mogol Sha Alam II, que fue
sucedido por su hijo Akbar Sha.
Como su padre, continuó siendo un títere de la
Compañia Británica de las Indias Orientales.
El 21 de noviembre
Napoleón decretó el bloqueo continental a Gran Bretaña, por
el que prohibía el comercio en Europa con productos
británicos.
El 27 de noviembre
Napoleón entraba en Poznan.
El 30 de noviembre Prusia
firmó un armisticio con Francia.
En diciembre los servios
infligieron otra espectacular derrota a los turcos en la batalla
de Deligrad, tras la cual
pusieron sitio a Belgrado.
El 15 de diciembre Fichte
pronunció en Berlín el primero de una serie de
discursos que más tarde serían publicados con el
título de Discursos a la
nación alemana. En ellos afirma la superioridad
cultural y filosófica del idioma alemán sobre los
idiomas latinos y concluía que la nación alemana
tenía una enorme ventaja sobre las demás naciones
europeas. Instaba a la rebelión contra la ocupación
francesa y a la construcción de una Alemania unida sobre
los restos del Sacro Imperio Romano Germánico.
El 23 de diciembre se
estrenó en Viena el
concierto para violín de Beethoven. No tuvo mucho
éxito.
El 24 de diciembre
murió en Viena el duque Fernando I de Módena,
tío del emperador Francisco II. Fue sucedido por su hijo Francisco IV (meramente como
duque titular, pues el ducado formaba parte entonces del reino de
Italia).
Desde Prusia, el ejército francés se dirigió
a (lo que había sido) Polonia para enfrentarse a los rusos.
El 26 de diciembre hubo dos
batallas simultáneas: En Golymin
Murat sostuvo un enfrentamiento contra los rusos que acabaron
retirándose, aunque no puede decirse que fueran derrotados.
En Pultusk sucedió
algo similar.
Desde la derrota rusa en Austelitz, los turcos se habían
mostrado más agresivos frente a los rusos. Éstos
entraron en Moldavia y Valaquia con unos 40.000 soldados, y el 30 de diciembre el sultán
Selim III declaró la guerra a Rusia.
Tras la muerte del mandarín Pok, que gobernaba Camboya en
nombre del rey Rama I de Siam, éste aceptó que fuera
coronado Ang Chan II, el
heredero de la corona camboyana, que acababa de cumplir los
dieciocho años.
El 1 de enero de 1807
Napoleón conoció en un baile a la condesa polaca María Walewska, y
pronto se convirtió en su amante. La condesa usó
todos sus "razonamientos" para convencer a Napoleón de que
restableciera el reino polaco. Por esa época, el
ejército polaco organizado por el general Dabrowski contaba
ya con 23.000 soldados organizados según el patrón
napoleónico. Sin embargo, el entusiasmo de Dabrowski se
enfrió cuando Napoleón le indicó que
sólo debía luchar contra Prusia, pero no contra
Austria y Rusia, las otras potencias que se habían
repartido el territorio polaco.
El 5 de enero el almirante sir
Charles Stirling
transportó hasta el Río de la Plata un
ejército británico bajo el mando del general Samuel Auchmuty.
El 10 de enero Aaron Burr
leyó en un periódico que se había dictado una
orden de busca y captura contra él, acusado de
traición. Todavía no está claro por
qué el presidente Jefferson tardó varios meses en
dar crédito a las denuncias que le habían llegado,
pero finalmente había decidido a enviar agentes federales
tras su pista. Burr se entregó en dos ocasiones a las
autoridades y dos jueces lo exculparon, pero Jefferson mantuvo la
orden de arresto y Burr decidió huir a Florida.
El 16 de enero los
británicos desembarcaron a diez kilómetros de
Montevideo y se dispusieron a asediarla. El 20 de enero los españoles trataron de
romper el bloqueo y atacaron las posiciones británicas,
pero fueron repelidos con muchas bajas.
En Haití, las disensiones entre el presidente Henri
Christophe y Alexandre Pétion llegaron al extremo el 27 de enero, cuando éste
logró que el senado dejara de reconocer a aquél como
presidente y lo nombrara a él mismo en su lugar.
Estalló entonces una guerra civil y Christophe se
retiró al norte.
El 2 de febrero la
artillería británica logró abrir una brecha
en las murallas de Montevideo, por la que penetraron el 3 de febrero y tomaron la ciudad sin
gran dificultad. La noticia llegó a Buenos Aires el 5 de febrero, y el pueblo
responsabilizó de la invasión a la mala
gestión del virrey Rafael de Sobremonte.
El 7 de febrero el
ejército francés trabó contacto nuevamente
con el ruso cerca de la localidad polaca de Eylau. El combate se
extendió hasta la noche y se prolongó al día
siguiente, el 8 de febrero. Los
rusos llevaban ventaja y el centro del frente francés
estaba casi aniquilado. El propio Napoleón estuvo a punto
de ser capturado en su puesto de mando, situado en la torre de una
iglesia. Pero el emperador ordenó una carga de
caballería que dirigió Murat, una de las más
espectaculares de la historia. Primero atacó a la
infantería rusa, luego se dividió en dos para atacar
una parte a la caballería y otra a la infantería, y
finalmente se reagrupó para atacar a los artilleros. Se
perdieron 1.500 jinetes, pero la batalla dio un giro en favor de
Francia. Después los rusos recibieron refuerzos prusianos y
Napoleón se vio de nuevo en dificultades. No obstante,
aunque tarde, también recibió refuerzos y el combate
se prolongó durante un total de catorce horas
ininterrumpidas, hasta que los rusos se retiraron. Se calcula que
los rusos perdieron unos 15.000 hombres y los franceses más
de 20.000. Técnicamente, fue una victoria francesa, puesto
que Napoleón conservó el campo de batalla, pero el
enfrentamiento quedó en una carnicería de la que
ninguno de los dos bandos sacó ningún provecho.
El 10 de febrero una asamblea
popular en Buenos Aires presionó a la Real Audiencia y
logró que el virrey Sobremonte fuera destituido. En su
lugar fue designado Santiago de
Liniers, que hasta entonces ocupaba la capitanía
general. Mientras tanto, el coronel Beresford logró escapar
de su cautiverio en Buenos Aires y embarcó hacia Londres.
En Londres, el "ministerio de todos los talentos" propuso
modificar la ley para permitir que los católicos pudieran
acceder a todos los rangos militares, pero ahí tocaron el
punto débil del rey Jorge III, que no sólo se
negó en redondo, sino que exigió que jamás se
volviera a plantear semejante idea. Los ministros aceptaron
retirar el proyecto, pero no se comprometieron para el futuro.
Un inventor alemán llamado Friedrich Albrecht Winzer, que vivía en
Gran Bretaña y había cambiado su nombre a Frederick Albert Winsor,
después de haber estudiado en Francia la lámpara de
gas de Lebon, había fundado una fábrica de gas (que
obtenía de la hulla) y ese año iluminó uno de
los lados de la calle Pall Mall
de Londres.
El 16 de febrero franceses y
rusos se enfrentaron en Ostrolenka
y esta vez obtuvieron una clara victoria. Los rusos se dieron a la
fuga perseguidos por los franceses. El 18
de febrero Napoleón ordenó al general François Joseph Lefebvre
capturar la ciudad de Dantzig,
en poder de los prusianos, de gran importancia estratégica
por su emplazamiento en la desembocadura del Vístula.
Los turcos habían bloqueado el estrecho de los Dardanelos,
y Rusia pidió ayuda a Gran Bretaña para que
contuviera a los turcos mientras los rusos luchaban contra
Francia. Gran Bretaña envió una flota a los
Dardanelos, pero el 19 de febrero
fue derrotada por una flota turca superior en número.
Ese mismo día Burr fue arrestado y conducido a Virginia
para ser juzgado por traición.
En marzo Beethoven
estrenó en un concierto privado su cuarta sinfonía, su cuarto concierto para piano y
la obertura de Coriolano.
La cuarta sinfonía
es bastante conservadora en comparación con su
revolucionaria tercera
sinfonía. Mucho más original es su cuarto
concierto para piano, considerado como el primer
concierto romántico. La obertura no estaba destinada a la
tragedia de Shakespeare, sino a una obra homónima estrenada
ese mismo año por Heinrich
Joseph von Collin.
Fries publicó su Nueva
crítica o crítica antropológica de la
razón, en la que intenta proporcionar nuevos
fundamentos a la teoría del conocimiento kantiana.
Hegel, a falta de un empleo mejor, aceptó convertirse en
editor del Bamberger Zeitung,
un periódico publicado en Bamberg.
Ese año publicó su Fenomenología del espíritu, obra
que marca el principio de su carrera filosófica y el final
de la filosofía como disciplina digna de respeto. Si en la
obra de Fichte o Schelling todavía podía apreciarse
una apariencia de racionalidad, por superficial y engañosa
que ésta pudiera llegar a ser, la obra de Hegel es ya pura
verborrea caótica. He aquí una muestra tomada al
azar (el principio del capítulo IV):
En los modos de la certeza que preceden, la verdad es para la conciencia algo distinto a ella misma. Pero el concepto de esta verdad desaparece en la experiencia de él; resulta que en verdad el objeto no es lo que era inmediatamente en sí mismo, el mero ser en la certeza sensible, una cosa concreta en la percepción, o fuerza en el caso del entendimiento, sino que este ser en sí resulta ser un modo en que es para otro; el concepto abstracto del objeto cede el paso al objeto concreto real, o la primera representación inmediata desaparece con la experiencia. La mera certeza desaparece ante la verdad. Pero ahora ha surgido lo que no se había producido en estas relaciones previas: una certeza que es igual a su verdad, pues la certeza es ella misma su objeto, y la conciencia es ella misma la verdad. Y en ello es también, ciertamente, un ser otro; en efecto, la conciencia hace una distinción, pero distingue algo que para ella es, al mismo tiempo, algo no diferenciado. Si llamamos concepto al movimiento del saber y objeto al saber, pero como unidad quieta o como yo, vemos que, no solamente para nosotros, sino para el saber mismo, el objeto corresponde al concepto. O bien, si, de otro modo, llamamos concepto a lo que el objeto es en sí y objeto a lo que es como objeto o para otro, vemos que es lo mismo el ser en sí y el ser para otro, pues el en sí es la conciencia; pero es también aquello para lo que es otro (el en sí); y es para ella para lo que el en sí del objeto y el ser del mismo para otro son lo mismo; el yo es el contenido de la relación y la relación misma; es él mismo contra otro y sobrepasa al mismo tiempo este otro, que para él es también sólo el mismo.
Esta "filosofía" se ha convertido en el opio para quienes,
incapaces de enfrentarse a los interrogantes reales que plantea
nuestra presencia en el mundo, han preferido el vacuo placer de
creerse dueños de una verdad profunda por haber atribuido
un significado, y hasta incluso una justificación, a estas
concatenaciones de palabras.
El 17 de marzo zarpó de
Sicilia una flota británica con la misión de
apoderarse de Alejandría, para tomarla como base de
operaciones contra el Imperio Otomano. Estaba al mando el general
Alexander Mackenzie-Fraser.
Tras una débil resistencia, la ciudad se rindió el 20 de marzo.
Ese mismo día los franceses iniciaron el asedio a Dantzig.
Las tensiones entre el rey Jorge III de Gran Bretaña y sus
variopintos ministros lo llevaron finalmente a disolver el
gobierno. El 26 de marzo
designó nuevo gabinete formado exclusivamente por tories, bajo la presidencia
nominal del ya anciano William
Cavendish, el duque de Portland, aunque el poder
quedó realmente en manos de Spencer Perceval, que ocupó el ministerio
de hacienda. Unos días antes el rey había firmado la
ley contra la esclavitud aprobada por el parlamento el año
anterior. Se acordó que la marina británica tratara
los barcos que transportaran esclavos como barcos piratas.
El 29 de marzo Olbers
descubrió otro pequeño planeta y dejó que
Gauss le pusiera nombre. Éste decidió llamarlo Vesta. Era el cuarto de estos
objetos descubierto hasta el momento, y todos ellos estaban
situados entre las órbitas de Marte y Júpiter. Por
ello, Olbers conjeturó que se trataba de los fragmentos de
un antiguo planeta, al que llamó Faetón, que, por algún motivo,
había estallado.
Desde Alejandría, los británicos trataron de
apoderarse de Rosetta, pero la operación terminó el
21 de abril en un completo
fracaso. Cientos de cabezas británicas fueron expuestas en
estacas en El Cairo.
El sha de Persia, Fath Alí Sha Kayar, incapaz de contener
la ofensiva rusa, envió embajadores a Prusia, donde se
encontraba entonces Napoleón, y el 4 de mayo se firmó el tratado de Finckenstein, en el que el
emperador francés garantizaba la integridad de Persia y
reconocía su derecho sobre Georgia, a la vez que se
comprometía a proporcionar al sha armas, soldados y
trabajadores. Por su parte, Persia se comprometía a
expulsar a los británicos de sus territorios y a entablar
relaciones diplomáticas con Afganistán para
propiciar una futura alianza entre Francia, Persia y
Afganistán que permitiera expulsar a los británicos
de la India.
El 10 de mayo llegó a
Montevideo el general John
Whitelocke, nombrado comandante de las fuerzas
británicas en el Río de la Plata, con instrucciones
de conquistar Buenos Aires.
Mientras tanto la armada rusa destruyó a la otomana en la
batalla de los Dardanelos.
Ese mismo día los rusos trataron de socorrer la ciudad de
Dantzig con la ayuda de barcos británicos y suecos, pero no
pudieron romper el bloqueo francés. Otro tanto
sucedió el 15 de mayo.
El 24 de mayo Dantzig
capituló ante el general Lefebvre.
El 2 de junio un
ejército de apenas 4.500 soldados rusos neutralizó
un masivo ataque otomano contra Bucarest.
El 10 de junio
Napoleón, al frente de unos 50.000 franceses,
derrotó en Heilsberg
a un ejército de 90.000 rusos en una batalla que se
prolongó hasta el 12 de junio.
Los rusos se retiraron hasta Friedland,
donde se enfrentaron nuevamente a los franceses el 14 de junio, en la que
resultó ser la batalla definitiva de la campaña
polaca de Napoleón. Los franceses sorprendieron a los rusos
amontonados en los meandros del río Alle, donde fueron un blanco
fácil para su artillería, que hizo estragos. Muchos
soldados rusos murieron ahogados en el río durante la
retirada. Los generales rusos aconsejaron al zar que pidiera un
armisticio. El 16 de junio
Napoleón recibió emisarios rusos mientras
Königsberg caía en su poder.
El 18 de junio 7.000 rusos
derrotaron a unos 20.000 otomanos en la batalla de Arpachai, en Armenia. El 19 de junio se inició la batalla del monte Athos, que
se prolongó durante 10 días, en la que la flota rusa
terminó de destrozar la flota otomana.
El 22 de junio un barco
estadounidense llamado Chesapeake,
que se dirigía rumbo a África cargado de
mercancías, fue interceptado cerca de las aguas
territoriales estadounidenses por un barco de guerra
británico, el Leopard.
Éste exigió inspeccionarlo porque sospechaba que a
bordo viajaban desertores de la marina británica. (La
marina británica se nutría de marineros enrolados
contra su voluntad y que además eran tratados con una
disciplina férrea, por lo que eran frecuentes las
deserciones. Se calcula que se producían más de dos
mil al año, y muchos de los desertores acababan
enrolándose en barcos estadounidenses. Por ello, era
frecuente que los británicos detuvieran barcos
estadounidenses en busca de desertores.) El Chesapeake se negó a
aceptar semejante abuso y el Leopard
abrió fuego. Al cabo de media hora, el Chesapeake se rindió,
con tres muertos y dieciocho heridos. Los británicos
inspeccionaron el barco y se llevaron cuatro hombres asegurando
que eran desertores.
La opinión pública estadounidense estaba indignada
y si Jefferson hubiera declarado la guerra a Gran Bretaña
habría contado con el apoyo popular, pero Jefferson era
probablemente el gobernante más sensato de la época
y comprendió que su país no estaba en condiciones de
ir a la guerra. En los últimos años había
llevado una política de ahorro para sanear las cuentas
públicas y la armada estadounidense estaba bajo
mínimos. No era plan enfrentarse a la todopoderosa armada
británica, ni siquera en una época en la que Gran
Bretaña estaba en guerra contra el invencible
Napoleón.
El 25 de junio Napoleón
se entrevistó con el zar Alejandro I en una balsa en medio
del río Niemen. Se
dice que Alejandro I se dirigió a Napoleón diciendo:
Sire, yo odio a los ingleses
tanto como vos, a lo que Napoleón
respondió: En tal caso,
la paz está hecha.
El 28 de junio Whitelocke
desembarcó cerca de Buenos Aires al frente de unos 11.000
hombres y el 4 de julio
inició el asedio de la ciudad. El 5 de julio decidió organizar un ataque
simultáneo por doce puntos. Sin embargo, los bonaerenses
contraatacaron parapetados en sus casas y lograron derrrotar a los
confiados británicos. Whitelocke perdió a la mitad
de sus hombres, entre muertos y heridos. El 7 de julio los británicos se rindieron y,
no sólo se retiraron de Buenos Aires, sino que aceptaron
evacuar Montevideo. Esto último le costó a
Whitelocke su expulsión del ejército una vez de
regreso en Gran Bretaña.
Ese mismo día Napoleón y Alejandro I firmaron en Tilsit el tratado del mismo
nombre. Francia prometía ayudar a Rusia contra los turcos,
mientras que Rusia aceptaba el bloqueo francés contra Gran
Bretaña. Además, se acordó la
formación del Gran Ducado
de Varsovia, que comprendía la parte prusiana de
la antigua Polonia del que los polacos esperaban que más
adelante se convirtiera en un nuevo reino de Polonia.
Napoleón designó como Gran Duque al rey Federico
Augusto I de Sajonia, basándose en que era nieto del rey
Federico Augusto II de Polonia. Por indicación de
Napoleón, el Gran Ducado no fue anexionado a Sajonia, sino
que tuvo su propio gobierno parlamentario. La república
septinsular quedó de nuevo bajo dominio francés.
Tras el tratado de Tilsit, Napoleón rompió sus
acuerdos con Persia contra Rusia, de modo que los persas tuvieron
que empezar a negociar con los británicos. El primer
intento fue un fracaso, pues apelaron a un acuerdo firmado unos
años atrás, pero los británicos objetaron que
ese acuerdo establecía una cooperación contra
Francia, no contra Rusia.
Los jenízaros depusieron al sultán otomano Selim
III y en su lugar eligieron a su sobrino Mustafá IV.
El 3 de agosto se
inició el juicio contra Aaron Burr. El juez que
llevó el caso no era sino John Marshall, federalista
enemigo acérrimo de Jefferson. El juicio fue un duelo entre
ambos, el primero empeñado en exculpar a Burr y el segundo
empeñado en que fuera declarado culpable.
El 12 de agosto los otomanos
firmaron un armisticio con Rusia.
El gobierno británico decidió capturar la flota
danesa para evitar que acabara cayendo en manos de
Napoleón. Sin previa declaración de guerra, el 16 de agosto el general Arthur
Wellesley atacó Copenhague.
El 17 de agosto Robert Fulton
realizó un viaje de 177 kilómetros por el río
Hudson en un barco de vapor. Durante un tiempo, el barco fue
conocido por "el monstruo de
Fulton", pues atemorizó a muchos de sus paisanos
con su fuego, su humo y su ruido.
El 18 de agosto Napoleón
constituyó a expensas de Prusia el reino de Westfalia, que se
integró en la Confederación del Rin y cuyo primer
rey fue Jérôme
Bonaparte, el hermano menor de Napoleón, ahora Jerónimo I. Su
territorio comprendía lo que habían sido los
electorados de Hannover y Hesse, entre otros. Jerónimo I
implantó una monarquía constitucional, abolió
la servidumbre, decretó el libre marcado, implantó
el código napoleónico y el sistema métrico
decimal, aunque no reconoció la libertad de
expresión.
El 19 de agosto
Napoleón suprimió el tribunado y modificó el
Cuerpo legislativo.
El 1 de septiembre Aaron Burr
resultó absuelto de los cargos de traición por falta
de pruebas.
El 7 de septiembre Copenhague
se rindió y la flota danesa fue entregada a los
británicos. Poco después Dinamarca estableció
una alianza con Francia a la vez que empezaba a reconstruir su
flota construyendo un gran número de pequeños
cañoneros con los que hostigar a los barcos
británicos.
El 25 de septiembre, incapaces
de mantener su posición, los británicos abandonaron
Alejandría y se retiraron a Sicilia.
Bajo presión francesa, el rey Federico Guillermo III de
Prusia abolió la servidumbre el 9
de octubre. Los campesinos que cultivaban tierras de la
corona las recibieron en propiedad.
La principal nación que no respetaba el bloqueo
continental a Gran Bretaña decretado por Napoleón
era Portugal. Por ello, el 27 de
octubre España y Francia firmaron el Tratado de Fontainebleau, por
el que España consentía el paso por su territorio
del ejército francés con el fin de conquistar
Portugal. Una vez conquistado, el país sería
dividido en tres partes: el norte, con el nombre de reino de Lusitania septentrional,
sería entregado al rey Carlos I de Etruria, la zona
central, se le ofrecería a Gran Bretaña a cambio de
Gibraltar y la isla de Trinidad, mientras que el sur se le
entregaría al primer ministro español, Manuel Godoy
como principado de Los
Algarves.
Un sector de la nobleza española recelaba de Godoy, que
recientemente había recibido del rey Carlos IV el
título de gran almirante, con tratamiento de alteza serenísima, y
del que se llegó a rumorear que pretendía que
Napoleón le adjudicara la corona española a la
muerte del rey. Sus enemigos se agruparon en torno a Fernando, el
príncipe de Asturias (que tenía ahora
veintitrés años), heredero de Carlos IV. Trataron de
ganarse el favor de Napoleón y llegaron a pedirle una
princesa de su familia como esposa para Fernando y estaban
fraguando una conspiración para derrocar al rey en favor de
su hijo. Sin embargo, el mismo día que se firmaba el Tratado de Fontainebleau,
mientras la corte se encontraba en El Escorial, alguien
denunció anónimamente la conspiración al
monarca, que entró en la habitación de su hijo y se
hizo con documentación que lo inculpaba en la
conspiración. Inmediatamente ordenó el arresto del
príncipe, que fue interrogado en presencia del gobierno y
al principio negó todas las acusaciones, pero poco
después confesó abiertamente y delató a todos
los conjurados. Godoy redactó unas cartas en las que el
príncipe pedía perdón a sus padres, que
fueron publicadas el 5 de noviembre,
junto con el decreto por el que el rey Carlos IV le
concedía su perdón. Esta publicación
constituía una humillación para el príncipe,
pero le favoreció, porque a ojos del pueblo apareció
como una víctima de las maquinaciones de Godoy, y se
convirtió en un ídolo popular, especialmente a
partir del momento en que, sin información alguna sobre su
propósito, los españoles tuvieron ocasión de
contemplar un inquietante ejército francés
atravesando España.
El 19 de noviembre un químico británico llamado Humphry Davy informó a la Royal Society del descubrimiento de un nuevo elemento químico al que llamó potasio por haber sido obtenido por electrolisis a partir de la potasa. Unas semanas después aplicó el mismo procedimiento a la sosa caustica y descubrió así el sodio. Ese mismo año Davy observó que tanto el sodio como el potasio aparecían en la composición del alumbre, pero dedujo que debía haber otro metal adicional al que llamó aluminio, aunque no fue capaz de aislarlo.
A primeros de mes los ejércitos españoles
habían penetrado en Portugal por el norte y por el sur, y
el ejército francés bajo el mando del geneal Androche Junot, que ya
había entrado en España antes incluso de que se
firmara el Tratado de
Fontainebleau, cruzó la frontera portuguesa por Alcántara el 20 de noviembre. El 29 de noviembre la familia real
portuguesa embarcó en Lisboa rumbo a Brasil, y el 30 de noviembre los franceses
entraban en la capital.
Entre tanto, un tribunal de altos funcionarios se encargaba de
juzgar a todos los inculpados en la llamada conspiración de El Escorial.
El reino de Etruria, bajo la regencia de María Luisa de
Borbón, estaba asilando a algunos enemigos de
Napoleón, hasta que el emperador perdió la paciencia
y el 10 de diciembre
disolvió el reino, anexionándolo a Francia.
Gauss aceptó el cargo de director del observatorio de Gotinga. Tres años
atrás, el entonces emperador Francisco II
había decidido crear cátedras de Filosofía y
Religión en las universidades más importantes de sus
estados para contrarrestrar la influencia de la ilustración
francesa. La correspondiente a la universidad de Praga
había salido a concurso al mismo tiempo que una
cátedra de matemáticas que había quedado
vacante recientemente, y la primera posición en ambos
concursos la obtuvo un matemático y teólogo bohemio
llamado Bernard Bolzano.
Finalmente se le concedió la de filosofía y
religión, pues para la de matemáticas había
otro candidato que ya la había ejercido de forma temporal
durante la enfermedad del titular anterior, pero la
elección no gustó nada en Viena, pues el perfil de
Bolzano no era precisamente el que se ajustaba a las pretensiones
del emperador. Su ratificación se retrasó todo lo
posible, pero finalmente Bolzano accedió a su
cátedra y pronto confirmó los peores recelos: en sus
lecciones predicaba la igualdad de todos los hombres, criticaba la
propiedad privada obtenida sin trabajo, denunciaba la
discriminación que sufrían los judíos y los
bohemios de habla checa (frente a los de habla alemana) e instaba
a sus alumnos a sacrificarlo todo en pro de los derechos humanos.
El 21 de diciembre Fourier
presentó ante un comité del Instituto de
París una memoria titulada Sobre la propagación del calor en los cuerpos
sólidos. En el comité estaban Lagrange y
Laplace, que expusieron dudas sobre las técnicas de
Fourier, principalmente en sus desarrollos de funciones como
series trigonométricas (sumas infinitas de senos y
cosenos), los que hoy se conocen como desarrollos en series de Fourier.
El 22 de diciembre un nuevo
ejército francés dirigido por Pierre-Antoine Dupont de
l'Étang, al mando de unos 22.000 soldados de
infantería y unos 3.500 jinetes, entró en
España sin autorización del gobierno español.
Ese mismo día el presidente Thomas Jefferson hizo aprobar
una Ley de prohibición
por la que prohibía a los comerciantes estadounidenses todo
comercio con países extranjeros. Su propósito era
unirse al bloqueo que Napoleón había declarado en
Europa contra Gran Bretaña pero de forma que no pareciera
una acción específica contra Gran Bretaña.
El emperador Francisco II de Austria había enviudado
recientemente de su segunda esposa, María Teresa de
Borbón, y el 6 de enero de 1808
se casó con su prima María
Luisa
Beatriz de Austria-Este, hermana del duque Francisco IV
de Módena.
El 9 de enero un nuevo
ejército francés cruzó la frontera
española. Lo dirigía el mariscal Bon Adrien Jeannot de Moncey,
y contaba con 25.000 soldados de infantería y unos 2.700
jinetes.
El 25 de enero se dictó
la sentencia sobre la conjuración del escorial: todos los
implicados resultaron absueltos. Los reyes y Godoy se enfurecieron
al conocer el fallo, y desterraron a todos los acusados.
El 1 de febrero el general
Junot declaró depuesta la dinastía de Braganza y
proclamó la soberanía de Napoleón sobre el
reino de Portugal.
El 3 de febrero un
ejército francés ocupó Roma.
Soldados franceses se presentaron ante Pamplona y, como no se les
dejó ocupar la ciudadela, la tomaron por la fuerza el 16 de febrero. Unos días
antes otro ejército había entrado bajo amenazas en
Barcelona.
En el tratado de Tilsit, el zar Alejandro I se había
comprometido a presionar a Suecia para unirse al bloqueo
continental contra Gran Bretaña. Sin embargo, el rey
Gustavo IV Adolfo de Suecia no cedió a las presiones. Como
respuesta, el 21 de febrero un
ejército ruso de 24.000 hombres invadía Finlandia.
El 5 de marzo, con
autorización de Godoy, los franceses ocuparon San
Sebastián. El 9 de marzo
llegó a españa el general Murat en calidad de
lugarteniente de Napoleón para todos sus ejércitos
en España. Oficialmente, Francia era aliada de
España, pero nadie entendía la finalidad de tanto
ejército ocupando posiciones estratégicas en el
país. Todos miraban a Godoy y éste sabía lo
mismo que los demás. El rey Carlos IV, desconcertado,
consultó a sus ministros, la mayoría de los cuales
odiaba a Godoy. El pueblo aprovechó para culpar a Godoy, no
sólo de la invasión francesa, sino también de
todas las carencias de la política española de los
últimos años. Al borde de la perdición, Godoy
jugó su última carta: convenció a Carlos IV
de que los franceses venían a derrocarlo en favor de su
hijo Fernando, y le aconsejó que se dirigiera a Aranjuez y desde allí
se preparara para trasladarse hacia el sur, desde donde
podría embarcar hacia América si resultaba oportuno,
como ya había hecho la familia real portuguesa. El rey,
asustado, accedió.
El 13 de marzo murió el
rey Cristián VII de Dinamarca y su hijo, que llevaba
más de dos décadas dirigiendo el país, se
convirtió en el rey Federico
VI de Dinamarca.
El 15 de marzo Dinamarca, a
instancias de Francia, declaró la guerra a Suecia. Aunque
no llevó a cabo ninguna ofensiva, la amenaza de una
invasión danesa mantuvo retenida a una parte del
ejército sueco, que no pudo desplazarse hacia Finlandia
para enfrentarse a los rusos.
Los preparativos para sacar de Aranjuea al rey Carlos IV y su
familia se organizaron en secreto, pero la noticia se
filtró y, con la excusa de aclamar al rey, una multitud
rodeó el palacio de Aranjuez. El rey publicó un
bando en el que asegura que no piensa moverse y llama a la calma,
pero los preparativos continúan y llegan varias unidades
del ejército. El príncipe Fernando asegura a la
guardia real que huye obligado por su padre y por Godoy, pero que
él preferiría quedarse y compartir el destino de los
españoles. La guardia difunde esto entre el pueblo y crece
la indignación. El 17 de marzo
el populacho asaltó la casa de Godoy. Su esposa y su hija
fueron llevadas con todo respeto al palacio real, pero Godoy no
aparece. El 18 de marzo el rey
cesa a Godoy de sus cargos y ruega a su hijo Fernando que haga
volver a Madrid a la multitud. Fernando acalla a la multitud y
anuncia que Godoy será juzgado por la ley. El 19 de marzo por la mañana
Godoy fue encontrado en su casa por un centinela. Había
pasado día y medio envuelto en una alfombra en el
desván, hasta que la sed lo hizo bajar en busca de agua,
con la mala suerte de que fue descubierto. Fue llevado a un
cuartel entre gritos y agresiones de la multitud. Por la tarde
Carlos IV, con el fin de salvar a Godoy, convoca a sus ministros
y, ante ellos, se quita la corona y se la coloca a Fernando, tras
lo cual firma su abdicación. Así, el príncipe
de Asturias se convirtió en el rey Fernando VII de España.
Al enterarse del llamado motín
de
Aranjuez, Murat se apresuró a llegar a Madrid.
Entró en la ciudad el 23 de
marzo, y el 24 de marzo
lo hizo Fernando VII. Napoleón fue informado el 26 de marzo, y decidió seguir
una política un tanto retorcida: hizo que Murat no
reconociera a Fernando VII como rey, así como que alentara
a Carlos IV, que seguía en Aranjuez, a asegurar que su
abdicación había sido forzada.
El 28 de marzo, en la batalla
de Selandia, dos barcos
de guerra británicos destruyeron el Príncipe Cristian Federico,
el último buque de guerra que les quedaba a los daneses,
aparte de los pequeños cañoneros.
Fernando VII, necesitado del apoyo de Napoleón,
envió a su hermano Carlos
el 5 de abril a entrevistarse
con el emperador francés. Sin embargo, el 10 de abril él mismo
dejó Madrid para ir a su encuentro. El 15 de abril Napoleón llegó a Bayona (Bayonne, ciudad francesa cerca
de la frontera española que no hay que confundir con otra
ciudad española del mismo nombre) y dio orden de que se
comunicara a Fernando VII, que estaba entonces en Vitoria, que si
se reunía allí con él, no tendría
inconveniente en reconocerlo como rey de España, pero el 16 de abril Murat proclamaba en
Madrid que el emperador no reconocía a otro rey más
que a Carlos IV, cuya abdicación había sido forzada.
El 18 de abril los suecos
detuvieron el avance ruso en la batalla de Siikajoki, en Finlandia.
El 19 de abril Fernando VII
salió de Vitoria dispuesto a entrevistarse con
Napoleón en Bayona, a pesar de que una muchedumbre
trató de impedir el viaje. El 20
de abril llegó a Bayona, pero nadie salió a
recibirlo. Finalmente comió con Napoleón, y
después fue informado de que el emperador había
decidido sustituir a los borbones por la familia Bonaparte como
reyes de España. Ese mismo día Murat lograba en
Madrid la excarcelación de Godoy, que llegó a Bayona
el 26 de abril.
El 27 de abril los suecos
derrotaron nuevamente a los rusos en la batalla de Revolax.
El 30 de abril llegaron a
Bayona Carlos IV y su familia, y el monarca fue recibido por
Napoleón como el auténtico rey de España. En
Madrid, Murat entregó al gobierno de Fernando VII una carta
de Carlos IV en la que pedía que su hijo Francisco de Paula se reuniera
con él en Francia.
El 1 de mayo Napoleón
comió en Bayona con Carlos IV y con Godoy. Luego hizo
llamar a Fernando VII y, tras presenciar una patética
discusión familiar, logró que éste abdicara
de nuevo en favor de su padre.
El 2 de mayo los suecos
obtuvieron una nueva victoria frente a los rusos en Pulkkila.
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