ANTERIOR |
ESTROFA VII | SIGUIENTE |
Un monte
era de miembros eminente éste, que —de Neptuno hijo fiero— de un ojo ilustra el orbe de su frente, émulo casi del mayor lucero; cíclope a quien el pino más valiente, bastón, le obedecía tan ligero, y al grave peso junco tan delgado, que un día era bastón y otro cayado. |