HOJA DEL LUNES Nº 381

(23 de Octubre de 2006)


LOS PRESUPUESTOS GENERALES DEL ESTADO PARA EL AÑO 2007 Y LA FINANCIACIÓN DE LA EDUCACIÓN SUPERIOR

Después de los insignificantes aumentos del 2003 y 2004 aprobados por el PP, se pasa a un presupuesto de transición, el del 2005, con un crecimiento similar al del PIB, que evidentemente no contribuía a superar nuestro diferencial histórico con la UE en lo que a gasto público educativo se refiere. En 2006 supuso un aumento cercano al 19%, lo que implicó un crecimiento neto sobre el PIB, si bien el grueso de los más de 300 millones de euros de aumento presupuestario se destinaron a financiar los conciertos del segundo ciclo de educación infantil.

Los PGE para 2007 continúan esa tendencia con un incremento del 26,1 %. En términos absolutos 500 millones € de aumento en educación, lo que supone un total de 2.423,2 millones €. De mantenerse ese crecimiento en diez años los PGE habrían incrementado en 0,36% del PIB el gasto público educativo. Teniendo en cuenta que ese diferencial es en la actualidad de 0,74% aproximadamente, (4,47% del PIB de gasto público en España frente a 5,21% en la UE ), tendríamos que desde los PGE se estaría haciendo, si continúa este ritmo de crecimiento, casi un 50% del esfuerzo necesario en esos diez años.

Casi la mitad de la cantidad total (1.226,63 millones €) se destinará a becas y ayudas a estudiantes (mayoritariamente universitarios), que aumentan en 242,54 millones. Además de los 115 millones de aumento para becas de carácter general, se introduce una nueva clase de ayudas (50.000) para el aprendizaje del inglés en el extranjero, por jóvenes entre 18 y 30 años, que se dota con 85 millones €. Se destinan también 50 millones a financiar préstamos para estudiantes que deseen cursar postgrado.

Por último resaltar el aumento de 119 millones en Enseñanzas universitarias, que se destinan a la UNED, al programa Erasmus (pasa de 5,6 a 52 millones €) o a financiar las adaptaciones al Espacio Europeo de Educación Superior.

Es un presupuesto que otorga una relativa prioridad a la educación, tanto por el incremento de su cuantía (un 26%) como en comparación con otros Ministerios, aunque hay que tener en cuenta que el gasto educativo del MEC supone un pequeño porcentaje del total del gasto público educativo, al tener transferidas las CCAA las competencias en educación; de ahí que la incidencia en el incremento global sea modesta.

Es positivo el esfuerzo en becas universitarias y en ayudas a programas como el Erasmus, el estudio del inglés en el extranjero o los préstamos para los postgrados; así como el inicio del apoyo a la UNED, pero esto contrasta con la ausencia de financiación para el proyecto de reforma de la LOU y todas las derivaciones que ello implica. En cambio las tasas y precios públicos, todavía siguen siendo en España de los más altos de la Unión Europea y el presupuesto de becas y ayudas públicas es de lo más reducidos de la Unión Europea.

Cuando se conozca el documento que el MEC está preparando sobre financiación de la Enseñanza Superior, podremos realizar un análisis pormenorizado y una valoración, pero deseamos que el modelo asuma el papel equilibrador del Estado para compensar las desigualdades entre universidades de diferentes entornos territoriales y de diferentes niveles de implantación. Así mismo, no puede entenderse la financiación de forma exclusiva en función de resultados, dadas la peculiaridades del sistema universitario. Es necesaria mayor transparencia y eficiencia en la gestión, pero la Educación no es una mercancía, ni puede tratarse como tal por más se empeñen algunos.


SECRETARIA DE UNIVERSIDAD