ENTRANDO AL TRAPO: GRECIA, VENEZUELA, EL EURO
Rafael Pla López

Quienes han gobernado hasta ahora en España parecen haber entrado en modo pánico, a juzgar por sus histéricas acusaciones. Y entiendo que los candidatos eviten entrar al trapo para no hacerles el juego. Pero como yo no soy candidato a nada puedo entrar a todos los trapos.

 Comenzaré per Venezuela. Dejando de lado las grotescas acusaciones de haber financiado a un Partido mucho antes de que existiera ni siquiera como proyecto, las cuales ya han sido desestimadas por los tribunales, llama la atención el afán de personajes como Gallardón o Felipe González por defender a Leopoldo López, ocultando que ha sido encarcelado no por sus ideas, sino por haber promovido la violencia para derrocar al gobierno de Venezuela, mediante lo que allí se llaman "guarimbas", similares a lo que en Euskadi llaman "kale borroka", con la diferencia de que allí no quemaban cajeros bancarios sino centros de salud, habiendo provocado la muerte de más de 40 personas. Hubieran hecho mejor utilizando su no probada capacidad jurídica para defender a un preso político que tenían más cerca, como era el caso de Arnaldo Otegi, que a diferencia de Leopoldo López ha trabajado por el fin de la violencia en Euskadi, empujando a ETA al abandono de las armas.

Respecto al Euro, hay que reconocer que Jordi Sevilla actuó con mayor finura que determinados mastuerzos, limitándose a preguntar a Alberto Garzón si el programa económico de Unidos Podemos era compatible con el euro, haciendo referencia a la posición del PCE en favor de la salida del mismo. Sobre esto habría que aclarar que si bien el Congreso del PCE se pronunció mayoritariamente por la salida del Euro, dicha posición resultó minoritaria en la votación realizada en Izquierda Unida, dejando claro que los comunistas somos minoritarios no sólo en el conjunto de las fuerzas coaligadas, sino también dentro de Izquierda Unida. Ello no nos asusta, dado que estamos acostumbrados a estar en minoría, pero deja en evidencia el discurso anticomunista desde el PP y el PSOE, revelando que quizá a lo que tengan miedo, más que a los comunistas mismos, sea a perder sus privilegios.

Pero sobre el Euro lo que habría que preguntarse no es si nuestro programa es compatible con él, sino si el Euro y la Unión Europea son compatibles con políticas a favor de las mayorías sociales. Ya actualmente, y poco antes del referéndum en el Reino Unido, según la revista TIME del 13 de junio "Una encuesta online publicada el mes pasado encontró que el 45% de más de 6000 preguntados en Alemania, Francia, Italia, Bélgica, España, Suecia, Hungría y Polonia quieren que sus gobiernos realicen un referéndum sobre la pertenencia a la Unión Europea". Y si continúan las políticas austericidas de la Comisión Europea y el Banco Central Europeo es previsible que aumente la oposición ciudadana al Euro y a la misma Unión Europea, poniendo en peligro su subsistencia.

Finalmente, hay que decir que resultan especialmente obscenas las advertencias contra el peligro de seguir el camino de Grecia, olvidando que lo que allí ocurrió fue que, en un país ya arruinado por las políticas de derechas, Merkel y los demás mandamases de la Unión Europea quisieron castigar el atrevimiento del pueblo griego de oponerse a sus políticas austericidas, y pusieron todos los medios para ahogar al pueblo griego y humillar a sus gobernantes hasta obligarles a doblar la cerviz.

Ante ello, querría lanzar un mensaje a los patriotas de hojalata del PP y Ciudadanos, que se llenan la boca hablando de España pero desprecian al pueblo español, para que le trasladen a su amiga Merkel los versos de Miguel Hernández:
"   Los bueyes doblan la frente, impotentemente mansa, delante de los castigos:
los leones la levantan y al mismo tiempo castigan con su clamorosa zarpa.
    No soy de un pueblo de bueyes, que soy de un pueblo que embargan
yacimientos de leones, desfiladeros de águilas y cordilleras de toros con el orgullo en el asta.
    Nunca medraron los bueyes en los páramos de España.
    ¿Quién habló de echar un yugo sobre el cuello de esta raza?
    ¿Quién ha puesto al huracán jamás ni yugos ni trabas, ni quién al rayo detuvo prisionero en una jaula?".

De modo que pueden decirle a su amiga Merkel que, si pretende hacer con España lo que hizo con Grecia, con nosotros no va a poder.