CARTA A LA CONFERENCIA EPISCOPAL
26 de diciembre de 2000

        Sus reverencias:
        He recibido un mensaje, enviado o reenviado desde las
direcciones que incluyo en CC, instando a reenviárselo a sus reverencias
con el objetivo declarado de "a ver si de una vez por todas la Iglesia
se moja y no volvemos a oír a Setién", como respuesta a sus
declaraciones argumentando razones éticas en favor del diálogo con ETA.
        El que suscribe ha condenado reiteradamente las acciones
terroristas de ETA desde sus páginas web, y de forma permanente desde
http://www.uv.es/~pla/terrorisme . Pero rechaza frontalmente que se
pretenda coartar la libertad de expresión pastoral de monseñor Setién,
cuya condena moral del terrorismo ha sido siempre inequívoca, aunque en
ocasiones su discurso no complazca a determinados círculos de opinión.
        Considero, además, que el discurso de monseñor Setién es
profundamente evangélico, condenando el pecado del terrorismo pero
propugnando éticamente el diálogo con y la salvación de los pecadores.
Todo y que monseñor Setién reconoce que razones políticas pueden
legítimamente desaconsejar el diálogo con ETA, reconocimiento con el
cuál evita adoptar una posición partidista que no correspondería a la
Iglesia.
        Por el contrario, los remitentes del referido mensaje vienen a
reclamar que la Iglesia se pliegue a las condiciones de un supuesto
"pacto antiterrorista" que no sólo excluye a las fuerzas políticas que
representan a la mayoría del pueblo vasco, sino que pretende, con la
cobertura del discurso antiterrorista, aislar al nacionalismo
democrático vasco.
        Considero además que, aunque los pastores de la Iglesia puedan
haber cometido graves errores humanos en la historia de nuestro país,
son injustas las acusaciones genéricas contra ellos en relación a su
actitud respecto del conflicto vasco, y que la Iglesia actúa de acuerdo
con su misión evangélica favoreciendo la solución pacífica y dialogada
de tal conflicto, que tiene en las criminales acciones terroristas de
ETA su punto más álgido, pero no se reduce a éstas, y manteniendo
abiertos, desde su posición ética por la paz, puentes de diálogo que
puedan ser transitados cuando se den las condiciones políticas propicias
para ello.
        Envío copia ciega de este mensaje a otros recipiendarios del
referido mensaje, con el propósito de moverles a la reflexión para no
dejarse arrastrar por maniobras electoralistas que no pretenden
resolver, sino exacerbar el conflicto, e instarles a que eviten
presionar a sus reverencias en contra de la acción autónoma de la
Iglesia e intentando plegarla a tales maniobras.
        Suyo atentísimo,
--
Rafael Pla-Lopez
mailto:Rafael.Pla@uv.es
http://www.uv.es/~pla