EDITORIAL La formación
pedagógica de los profesores universitarios es desde hace varios años
motivo de preocupación para algunos países interesados por las reformas
universitarias, las cuales implican tanto la innovación pedagógica de sus
programas como la formación de los docentes.
En nuestro país propuestas como el Programa Nacional de Formación de
los Profesores Universitarios del ICFES, el apoyo a la Investigación en
Educación Superior desde el Programa de Estudios Científicos en Educación de
COLCIENCIAS, el decreto 272 del Ministerio de Educación, los lineamientos
generales de acreditación de la calidad definidos por el Consejo Nacional de
Acreditación y los proyectos desarrollados por las universidades en este
campo, muestran un creciente interés por la renovación de la educación
superior. En
este contexto, los procesos de formación docente deben reconocer en primer
lugar, que los profesores aprenden activamente y construyen sus propias
interpretaciones sobre la base de lo que ya conocen y de las experiencias que
han construido. Es decir, aprenden
nuevas prácticas y elaboran interpretaciones en la medida que pueden darles
sentido a través de sus concepciones y sus creencias. En segundo lugar, los profesores deben ser
considerados como profesionales autónomos y reflexivos que toman conciencia
crítica del conocimiento tácito o espontáneo que ha orientado su práctica y
lo confrontan con situaciones conflictivas o de incertidumbre a las cuales
deben dar respuesta construyendo una nueva comprensión, tanto de los fines de
la práctica como de las acciones que pueden realizar orientadas por criterios normativos de su profesión. La reflexión permite la conexión entre el
conocimiento y la acción haciendo al profesor responsable de su propia
práctica. Con
base en las consideraciones anteriores, en este número de Docencia
Universitaria, se difunden las experiencias, reflexiones y discusiones de
reconocidos profesores españoles que comparten nuestros problemas y
preocupaciones sobre la docencia y la formación universitaria así como, las
reflexiones y experiencias de profesores de la Universidad Industrial de
Santander sobre estos tópicos. El
mensaje más importante de esta edición, es el de la necesidad de apoyar la
formación de los profesionales docentes, a través del análisis de las relaciones que se dan en la formación
universitaria con estudiantes, colegas y administrativos y el compromiso con
el aprendizaje de los estudiantes que lleva a los profesores a innovar en la
búsqueda de mejores y más agradables formas de enseñar los contenidos para
favorecer una formación profesional integral. Para posibilitar lo anterior y mostrar la riqueza
de perspectivas sobre la docencia universitaria, se hace la Semblanza de un
Maestro de Maestros, el Dr. Gonzalo Anaya, considerado además un Maestro de
la República y quien comparte con nosotros sus reflexiones en voz alta sobre
la docencia universitaria, la cual resume en una palabra: la
profesionalidad. Una Entrevista a un
pedagogo, José Gimeno Sacristán, nos permite conocer su vida como docente
universitario; los cambios más significativos, los procesos de formación y
evaluación, la calidad de las relaciones y el compromiso con la universidad,
son algunos de los temas que aborda. Se presentan como Reflexiones
tres trabajos acerca de concepciones sobre Docencia Universitaria, el
Proyecto Docente y la Calidad de la Docencia y la Innovación Docente en
relación con la valoración que la universidad hace de ella frente a la
investigación. Un Foro de Papel
reproduce la discusión entre profesores de dos universidades públicas
españolas, la Universidad de Valencia y la Politécnica de Valencia, sobre la
formación del espíritu democrático y las relaciones en el aula. Acerca de la calidad de la educación se
publican dos experiencias: una de la U. de Granada y otra de la UIS que
muestran los procesos de evaluación y autoevaluación realizados en diferentes
programas. Para continuar, dos
Revisiones, una resalta la importancia de las Concepciones en la Calidad
Docente y otra los Procesos de Formación Didáctica del Profesorado
Universitario, así como las acciones formativas desarrolladas en el ICE
(Instituto de Ciencias de la Educación) de la Universidad Politécnica de
Valencia. Como aporte nuevo a la comunidad
docente universitaria, ofrecemos en este número la primera entrega de un
curso universitario, orientado por el Dr. Juan Ignacio Pozo, profesor de la
U. Autónoma de Madrid, que parte de una pregunta de gran actualidad y
relevancia en nuestro quehacer educativo: ¿por qué no aprenden los alumnos
universitarios lo que se les quiere enseñar? La importancia de las
Tecnologías de la Información y la Comunicación en la formación universitaria
hace interesante y llamativa la publicación que se reseña en este
número: El Mundo de las Teleconferencias.
Y para finalizar, nuestra sección de Monografías, con el propósito de
compartir las propuestas que sobre pedagogía y didáctica universitaria están
realizando los profesores que participan en el programa de Especialización en
Docencia Universitaria del CEDEDUIS. Esperamos, a través de estas
aproximaciones a la docencia universitaria, permitir el contraste y
fortalecer el debate acerca de la importancia y complejidad del proceso de
formación pedagógica de los profesores, en el cual seguimos comprometidos
como Centro para el Desarrollo de la Docencia, desde la enseñanza, la
investigación y la proyección a la comunidad. María Mercedes Callejas R. |