La Blanca es un asentamiento maya que se encuentra en el Departamento de Petén, Guatemala. Goza de una ubicación privilegiada, al pie de una serranía que alcanza 490 m de altura, desde donde se domina el extenso valle formado por la cuenca de los ríos Mopán y Salsipuedes.
Antiguamente, en esta región convivieron numerosas entidades políticas que, aunque compartieron similares rasgos culturales, exhiben marcadas diferencias a nivel de integración política y de relación con otros sitios del entorno.
A pesar de su pequeño tamaño, algunos de estos sitios presentan una arquitectura de una calidad y dimensiones espectaculares. La Blanca es uno de ellos.
En la actualidad, la ciudad en ruinas está sumergida en una "isla de vegetación", rodeada por fincas ganaderas y extensas áreas de cultivo, que en las últimas décadas han contribuido a la creciente deforestación de este territorio de sabanas húmedas y bosque tropical.
A menos de 3 Km. de distancia se encuentra la aldea de La Blanca. La población está asentada a ambos lados de una amplia laguna y se accede por un camino de terracería en buen estado de 17 Km, que enlaza con la carretera de Flores a Melchor de Mencos a la altura de la población de la Pólvora.
Desde el año 2004, el Proyecto La Blanca está realizando la investigación arqueológica, restauración y puesta en valor de este asentamiento, con el fin de avanzar en el conocimiento del pasado maya de esta región de Petén y de recuperar e incorporar a la sociedad actual una parte de su riquísimo patrimonio cultural.
Como parte de los reconocimientos arqueológicos en la cuenca del río Salsipuedes, desde el año 2009 se comenzaron las investigaciones en otro asentamiento cercano conocido como El Chilonché, el cual ha sido víctima de un intenso expolio arqueológico en los últimos años.