ESA GENERACIÓN CANTADA POR LOS WHO

 

The highways jammed with broken heroes
Bruce Springsteen

 

Era el mejor rockero español de los sesenta. Y el más de derechas. Ganó todos los premios. Grabó el que si no me equivoco (a lo mejor sí) fue el primer disco en directo de la historia. Hizo alguna película. Se estrelló muchas veces con sus coches deportivos. Finalmente se estrelló profesionalmente porque no vio cómo los tiempos cambiaban y él seguía a su bola, con sus ideas de antes, con su música de siempre, con sus vestimentas que eran como las de Elvis Presley en sus momentos últimos y confusos. Yo conocí entonces a Bruno Lomas, cuando ya era un tipo entrañablemente anacrónico. Le hice varias entrevistas y fuera de los estudios me contaba historias de marcianos y sueños que hablaban de nuevas canciones y éxitos como los de tantos años atrás. Iba por los pueblos con su cassette llena de música para cantar en playback por las verbenas de la madrugada. Un día de mil novecientos noventa se estrelló contra un camión cuando iba desde su casa de La Pobla de Farnals a cantar en Llíria. Las autopistas están atascadas de héroes rotos, cantaba Bruce Springsteen en “Born to run”. Después de su desaparición -quizá mucho antes- vino el olvido. Su memoria no era un buen ejemplo para nuestras autoridades conservadoras. Y eso que él lo era. Ideológicamente lo era, claro que sí. Pero su vida era una vida a contracorriente. Ya lo dije: iba a su bola. Por eso esas autoridades lo nombran con la boca pequeña. No era, para esa gente de la doble moral, un buen ejemplo. Aunque fuera el mejor en lo suyo, que era cantar baladas y rock&roll como nadie. Desde hace algunos años, en Xàtiva, su pueblo, organizan en las fiestas una velada que lo tiene de protagonista. Todos los veranos pasan por el escenario cantantes y grupos que vienen de aquella época. Se inventó ese homenaje -o eso creo, si no es así, lo siento- Enrique Ginés, otro monstruo que lleva cincuenta y tres años en la radio y cuarenta y siete al frente de un programa musical que se llama Discomoder, ahora en la 97.7 radio.
Hace unos días me llamó otro amigo. Es cantante, seguramente el mejor rockero que tenemos ahora mismo. Se llama Emilio Solo. Es del barrio de San Marcelino. Su referencia es Bruno Lomas. Lo respeta porque respeta su memoria, el trabajo que llevó a cabo en aquellos años, todo lo que significó Bruno Lomas para la música de los sesenta. Me llamó Emilio: que actuaba en Xàtiva ese sábado, en el homenaje a Bruno Lomas. Y que también intervenían en el espectáculo Los Brincos. ¡Hostia, Los Brincos! ¡Hostia, qué Brincos! En fin. En el campo de fútbol de la Murta había expectación. Una media de edad avanzada. Yo mismo. Esa generación cantada por los Who que fue dejando en el camino lo que había sido y se hizo vieja demasiado pronto. Ahora a saber dónde anda además de en el campo de fútbol aquella noche de verano. Mi amigo estaba exultante. Tenía ganas de seguir en el respeto al héroe truncado en la autopista un día de mierda. Y siguió en ese respeto. Me hizo gracia lo que me dijo antes de empezar: he alquilado un auto de aquel tiempo. Se subió en ese auto y acompañado por las hermanas Blasco hizo entrada triunfal en el recinto hasta el pie del escenario. Iba de blanco, como tantas otras veces su ídolo. Era otro tiempo el de aquella noche. La música de Emilio Solo se escapaba hacia la madrugada. Desconecta tu mente, relájate, déjate llevar… escucha el color de tus sueños, cantaba John Lennon en “Tomorrow never knows”. Para despedirse, Emilio Solo quería ofrecer una versión de “Stand by me”. La de John Lennon, me dijo. Y esa fue su magnífica despedida. En la lona de plástico verde que cubría el césped de la Murta había un silencio inexpugnable. En las pantallas que escoltaban el escenario no habían dejado de aparecer Bruno Lomas, sus canciones, sus fotografías, sus películas. Una vida vivida a contratodo.
 Cuando Los Brincos salieron, la noche ya estaba echada. Un tipo que resultó ser el alcalde de la localidad llamado Alfonso Rus había subido al escenario a tocar la batería. No sé por qué. Dicen que es el presidente de la Diputación y manager de Madonna, Police y Elton John en sus actuaciones valencianas. El año que viene más homenaje a la memoria de Bruno Lomas. No creo que haga falta el batería de marras para eso. Ninguna falta. Ninguna.