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Arte gráfico en la colección Martínez Guerricabeitia

Esta exposición nos ofrece la posibilidad de contemplar una selección de casi un centenar de piezas de obra gráfica de artistas españoles y extranjeros como Tàpies, Arroyo, Lichtenstein, Genovés o el Equipo Crónica, datadas mayoritariamente entre 1970 y 1980.

 

 
 

La exposición Arte gráfico en la colección Martínez Guerricabeitia nos ofrece la posibilidad de contemplar una selección de la obra gráfica integrada en una de las más importantes colecciones universitarias de arte contemporáneo, que también incluye un importante fondo pictórico. Esta selección recoge casi un centenar de estampas de artistas plásticos nacionales e internacionales de la relevancia de Equipo Crónica, Tàpies, Arroyo o Litchenstein, fechadas, mayoritariamente, entre 1970 y 1980. Al ser originariamente una colección privada, no ofrece una visión completa de la producción gráfica del momento pero, debido al gran número de obras, sí que constituye una aproximación adecuada al ambiente artístico español de esta época. Los dos parámetros que definen la colección donada a la Universitat de València por Jesús Martínez Guerricabeitia son el contenido crítico y el lenguaje figurativo. Sin embargo, la obra gráfica es más heterogénea que el conjunto pictórico y representa con más de 300 piezas, una parte muy relevante de toda la colección. Para esta exposición se han escogido un conjunto de estampas que muestra la pluralidad estilística que compone la colección Martínez Guerricabeitia. No obstante las obras navegan en su mayoría desde el realismo social al realismo crítico y la figuración narrativa.


El informalismo fue una tendencia fundamental en el panorama artístico español en los años 50, ya que supuso la vía de enlace con el contexto internacional. Muchos artistas informalistas, tras iniciarse en la pintura o en la escultura, experimentaron con la gráfica a finales de los años 50. Fue en ese momento cuando, gracias al apoyo del régimen, que pretendía ofrecer una imagen aperturista al exterior, gozaron de una gran proyección internacional. Este hecho resulta paradójico si tenemos en cuenta que la obra de estos artistas representó durante los años de la postguerra un arte de oposición frente al arte oficial.
 
 

A principios de la década de los 60, se produce un fuerte impulso en el desarrollo del arte gráfico. Y en este cambio, es muy importante la aportación de Estampa Popular. Este grupo englobaba diversas agrupaciones de artistas dispersas por todo el estado. La base ideológica era crear un arte accesible para todo el mundo. Para ello, adoptaron la figuración expresionista que enlazaba con la tradición artística española y trataron temáticas cotidianas. Con el mismo fin de difusión, utilizaron el medio gráfico, que ofrecía la ventaja de la reproducibilidad frente al carácter único de la obra pictórica o escultórica.

Hacia mediados de la década de los 60, se inició una tendencia que se ha llamado Crónica de la Realidad. La base ideológica era similar a la de Estampa Popular, a la que muchos de ellos pertenecieron. A diferencia de estos, adoptaron un lenguaje que desterraba la subjetividad propia del informalismo y del expresionismo. Por ello, recogían los códigos visuales de los medios de comunicación de masas. Mediante la yuxtaposición de imágenes extraídas del universo visual contemporáneo y de la historia del arte buscaban producir el extrañamiento en el espectador y despertar un proceso de cuestionamiento crítico.

El último grupo de la exposición es representativo de la obra de artistas internacionales que posee la colección. Muchos de ellos, como Monory o Adami, pertenecieron a la tendencia llamada Nouvelle Realisme, que se desarrolló a lo largo de los años 60 en Europa. Estos artistas pretendían analizar cuál era el ideario que se transmitía mediante los objetos e imágenes de la vida cotidiana, y para este cometido utilizaban el lenguaje de los medios de comunicación de masas, pero dotándolo de contenido crítico.
 

 
 
La exposición, que reúne 68 obras, se articula en cuatro secciones según la tendencia creativa: La generación de artistas abstractos, El realismo expresivo de Estampa Popular, Crónica de la realidad y La obra gráfica internacional de los años setenta.