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El presidente argentino Bartolomé Mitre había
tenido que regresar a Buenos Aires porque el vicepresidente Marcos Paz, que
presidía el gobierno mientras Mitre estaba en el frente
paraguayo, había contraído el cólera. El 2 de enero de 1868 murió Paz
y Mitre tuvo que renunciar a ocuparse personalmente del transcurso
de la guerra. Así el general brasileño Luís
Alves de Lima pudo actuar con más libertad.
Ese mismo día, una expedición militar
británica dirigida por Sir Robert Napier desembarcó en Zula, en el mar Rojo,
dispuesta a liberar a los rehenes británicos retenidos por
el rey Teodoro II de Etiopía. Napier puso especial
empeño en comunicar a la población que ésa
era la única razón de la presencia británica
en suelo etíope. Desde allí inició el avance
hacia Magdala tratando de llegar siempre a acuerdos con los jefes
locales para evitar incidentes.
El 3 de enero los
señores japoneses de Satsuma
y Choshu, opuestos al
clan Tokugawa tomaron el palacio imperial en Kyoto e hicieron que
el 4 de enero el emperador
Meiji declarara la restauración de su poder absoluto.
El 5 de enero el dictador
peruano Mariano Ignacio Prado llegó a El Callao, tras su
fracasado intento de sofocar la rebelión de Pedro
Díez Canseco. Allí un cabildo abierto le
mostró su descontento y Prado se vio obligado a abandonar
el poder, que cedió al general Luis Lapuerta.
El 6 de enero James Spriggs Payne
sucedió a Daniel Bashiel Warner como presidente de Liberia.
Había nacido en Virginia, hijo de esclavos mestizos.
El 7 de enero el Senado de los
Estados Unidos declaró nulo el cese del secretario de
guerra Edwin M. Stanton. El presidente Johnson, dispuesto a forzar
que el decreto sobre
ocupación de cargos fuera declarado
inconstitucional, no hizo caso de esta declaración.
El 8 de enero llegó a
Lima el general Francisco
Díez Canseco, quien asumió provisionalmente
el poder hasta entregárselo a su hermano Pedro, que
llegaría unas semanas más tarde y convocó
elecciones presidenciales de acuerdo con la constitución de
1860 que Mariano Ignacio Prado había abolido.
Ese mismo día la estadounidense Susan Brownell Anthony fundó The Revolution, la primera
revista semanal en defensa de los derechos de la mujer. Su lema
era: La verdadera
república: los hombres, sus derechos y nada mas; las
mujeres, sus derechos y nada menos. Anthony
pertenecía a una familia de cuáqueros activistas: su
hermano Daniel era un
editor que había destacado en su lucha por el abolicionismo
en Kansas, mientras que su hermana Mary, que era maestra, también luchaba por
los derechos de la mujer. A los seis años el maestro de su
escuela se había negado a enseñarle a dividir porque
una niña no necesitaba saber eso. Su padre organizó
entonces una escuela en su propia en la que él mismo
educó a sus hijos y a los de algunos vecinos. A los
diecisiete años (ahora tenía 48), Susan ya
colaboraba recogiendo firmas para pedir la abolición de la
esclavitud en la época en la que el Congreso había
ordenado el archivo sistemático de las peticiones
abolicionistas.
Hacía ya casi medio siglo que se había fundado la Sociedad Americana por la Templanza,
que promovía principalmente la prohibición de las
bebidas alcohólicas. Dieciséis años
atrás, Susan había solicitado su admisión en
dicha sociedad, pero había sido rechazada por su
condición de mujer. Esto la llevó a fundar, junto
con Elizabeth Cady Stanton,
la primera Sociedad por la
Templanza femenina. El mayor éxito de estas
sociedades se había producido en el Estado de Vermont,
donde las bebidas alcohólicas estaban prohibidas desde
hacía quince años. La prohibición
había sido introducida en Maine un par de años
antes, pero sólo duró cinco años. Los
movimientos de derechos de la mujer apoyaban a los movimientos por
la templanza porque veían en el alcoholismo una de las
principales causas de violencia doméstica contra las
mujeres. Durante la última década también se
habían implicado profundamente en la lucha contra la
esclavitud.
El tema principal de The
Revolution era el derecho de voto para las mujeres y los
negros, pero también se reivindicaba la igualdad de
salarios para los mismos trabajos, una ley de divorcio más
liberal y se cuestionaban las posiciones de las distintas iglesias
sobre los asuntos relativos a la mujer.
El 17 de enero el shogun
Tokugawa Yoshinobu declaró no sentirse obligado a aceptar
la proclamación de la restauración del poder
imperial. Tras haberse declarado una serie de incencios en Edo, especialmente uno que
afectó a la residencia principal de los Tokugawa, el shogun
ordenó un ataque a la residencia del señor de
Satsuma en Edo.
El presidente en funciones ecuatoriano, Pedro José de
Arteta, había convocado elecciones, de las que
resultó vencedor Javier
Espinosa, cuyo mandato terminaría a primeros del
año siguiente, cuando debía haber terminado el de
Jerónimo Carrión, que se había visto obligado
a renunciar a su cargo prematuramente el año anterior.
El 24 de enero Tokugawa
Yoshinobu ordenó un ataque contra Kyoto con el
propósito de "liberar" al emperador Meiji de la
coacción de los enemigos del shogunato.
El 27 de enero el
ejército del shogun se encontró entre Kyoto y Osaka
con las fuerzas aliadas de los señores de Satsuma, Choshu y
Tosa. Contaba con unos
15.000 hombres, frente a unos 5.000. Se iniciaba así la guerra Boshin (guerra del
año del dragón). La superioridad numérica fue
compensada por la potencia de la artillería enemiga (que
disponía incluso de modernas ametralladoras Gatling) y la
ineptitud de los oficiales del ejército del shogunato. Tras
un combate inconcluyente en dos frentes las tropas de los Tokugawa
se retiraron a Yodo al
caer la noche. El 28 de enero
varios oficiales del ejército opuesto al shogunato
recibieron documentos falsos por los que el emperador
consentía en que usaran banderas imperiales, banderas que
habían sido falsificadas hacía un tiempo en Choshu
para usarlas cuando fuera oportuno, y el momento había
llegado. Además se puso nominalmente al frente del
ejército a un niño de doce años que
pertenecía a la familia imperial, y se hizo correr el rumor
de que el emperador le había dado una espada como
símbolo de su nombramiento como general en jefe. El efecto
fue que una buena parte del ejército del shogun
desertó para no traicionar al emperador. Mientras tanto,
una flota formada por tres barcos leales al shogunato
derrotó en la bahía
de Awa, a tres buques de Satsuma.
Mientras tanto, en los Estados Unidos, el general Grant, al que
Johnson había nombrado como sustituto de Stanton, molesto
por el uso de su imagen que estaba haciendo el presidente, le
envió una nota de renuncia al cargo que en realidad nunca
había ocupado.
El 29 de enero las banderas
imperiales japonesas hicieron su aparición tras las
líneas de Satsuma-Chosu, pero habían permanecido
tantos siglos sin usar que ninguno de los dos bandos las
identificó, y hubo que enviar mensajeros para explicar lo
que eran. Una vez informados, los soldados de Satsuma-Chosu
recibieron los ánimos que perdieron los del shogun y, si
hasta el momento la batalla había sido esencialmente un
intercambio de fuego de artillería, ahora los soldados de
Satsuma-Chosu lanzaron una impetuosa carga que obligó a sus
enemigos a retirarse en desorden. El ejército del shogun
trató de buscar refugio en el castillo de Yodo, residencia de un
señor que hasta entonces había permanecido leal al
shogunato, pero al parecer había cambiado de bando, porque
las puertas del castillo permanecieron cerradas y el
ejército de Tokugawa tuvo que continuar su huida.
El 30 de enero Todo Takayuki, señor de
Tsu, retiró su
apoyo a los Tokugawa e hizo que sus tropas se pasaran al bando
imperial. Esta noticia desmoralizó al bando de los Tokugawa
y causó a su vez nuevas traiciones. Cuando el
ejército del shogun llegó a Osaka en su retirada, se
encontró con que Tokugawa Yoshinobu había huido, y
lo mismo habían hecho otras autoridades. El 31 de enero el ejército
shogunal se rindió y no opuso resistencia alguna a que el
ejército imperial continuara su avance hacia Edo.
Mientras tanto el presidente dominicano José María
Cabral era derrocado por partidarios de Buenaventura Baéz,
quienes organizaron una junta de gobierno militar presidida por Manuel Cáceres, uno de
los que habían firmado en su día el acta de
anexión a España.
El gobierno Chino había logrado finalmente sofocar la
rebelión de los Nian, lo que le permitió
concentrarse a partir de entonces en los dos últimos grupos
rebeldes activos: el de los musulmanes del sultán Du
Wenxiu, que resistía desde hacía más de diez
años, y el de los musulmanes Dungan, que había
estallado hacía seis.
El 2 de febrero el
ejército imperial tomó e incendió el castillo
de Osaka. Varios embajadores extranjeros se reunieron en Hyogo y declararon que
seguían reconociendo al shogunato como gobierno
legítimo de Japón. Poco después las potencias
extranjeras recibieron una nota firmada por el emperador en la que
se informaba de la abolición del shogunato a la vez que se
garantizaba que el emperador suscribía todos los tratados
internacionales firmados por el gobierno anterior. Esto, junto con
el rumbo de la guerra, hizo que las potencias europeas no tardaran
en reconocer la caída del shogunato.
El 6 de febrero se
presentó el San Petersburgo el ballet Le Corsaire de Adam, esta vez
con una coreografía de Marius
Petipa, un francés que había tenido un gran
éxito internacional como bailarín de ballet, y que
ahora, a sus cincuenta años, destacaba aún
más como coreógrafo. Llevaba diez años
ocupando el cargo de maestro de baile del ballet imperial ruso.
Benito Juárez recibió informes de que un grupo de
conservadores se reunía secretamente en el templo de San
Andrés, donde habían reposado un tiempo los restos
de Maximiliano. Entonces decidió derruirlo, al igual que
otros veinte más de la capital mexicana. Muchos de ellos
tenían un gran valor artístico y
arquitectónico, además de ser muy apreciados por la
población, mayoritariamente católica. Sus ministros
le advirtieron de que la medida sería impopular, pero
desoyó todos los consejos. Replicó que no
necesitaban templos, sino escuelas: "Telégrafos, escuelas, caminos, futuro y no
pasado es lo que México necesita". Los templos
fueron derribados con la consiguiente pérdida de
popularidad del presidente. Ese año empezaron a producirse
los típicos alzamientos.
El 11 de febrero murió
el físico y astrónomo francés Léon
Foucault.
El 15 de febrero Nikolai
Rubinstein estrenó en Moscú la primera sinfonía de
Chaikovski completa, y resultó un gran
éxito. Sin embargo, no volvería a interpretarse en
los quince años siguientes. En París Camille
Saint-Saëns compuso en diecisiete días su segundo concierto para piano
a petición de Anton Rubinstein, que quería alguna
obra nueva para su gira por Europa.
Mientras tanto una epidemia de cólera desatada en
Montevideo ayudó a los "blancos" a arrebatar el gobierno al
dictador uruguayo Venancio Flores. El 19
de febrero unos 25 hombres bajo el mando del
ex-presidente Bernando Prudencio Berro tomaron la residencia
presidencial gritando consignas contra Brasil y la guerra contra
Paraguay. Flores no se encontraba allí. Poco
después, ante la llegada de fuerzas gubernamentales Berro
huyó hacia la costa, y Flores, junto con algunos hombres
armados con pistolas, salió en su persecución. Sin
embargo, durante el trayecto su carruaje chocó con una
carreta y en ese momento aparecieron unos desconocidos que
asesinaron a Flores. El suceso nunca ha llegado a esclarecerse,
pero obviamente los colorados responsabilizaron a los blancos y a
Berro en particular. Berro fue capturado ese mismo día, fue
encarcelado y finalmente fue muerto de un tiro a través de
las rejas de su celda. Su cuerpo fue degollado y paseado por las
calles de Montevideo.
Tras la dimisión de Grant, el presidente Johnson
había ofrecido la secretaría de guerra al general
Sherman, pero éste también había rechazado la
oferta declarando que detestaba la política. El 21 de febrero Johnson nombró
a Lorenzo Thomas, el cual también empezó por
negarse, pero finalmente fue persuadido a que aceptara el cargo.
El propio Thomas llevó a Stanton la orden presidencial de
cederle el puesto, pero Stanton lo mandó detener por violar
el decreto sobre
ocupación de cargos, pero luego se enteró
de que el arresto podría dar pie a los tribunales a revisar
la ley, por lo que retiró la acusación.
Ese mismo día Sher Alí Khan derrocó a su
hermano Mohammad Azam Khan y se convirtió en el nuevo emir
de Afganistán.
Esa misma noche, la flota brasileña remontaba el
río Paraguay hasta rebasar el fuerte Humaitá, que
perdía así su principal línea de suministros.
Además, ahora la flota brasileña amenazaba
Asunción, por lo que el 22 de
febrero el dictador Francisco Solano López
ordenó que el gobierno se trasladara a la ciudad de Luque, situada cerca de
Asunción, pero no a orillas del río. López
dispuso también el levantamiento de una nueva línea
defensiva que empezaría en Angostura, junto al río y se
internaría en el territorio paraguayo protegiendo la
capital.
La tensión entre el Congreso y el presidente Johnson iba
en aumento, hasta que el 24 de febrero
la Cámara de Representantes aprobó por 126 votos
contra 47 el enjuiciamiento del presidente. Unos días
después fueron presentados los cargos concretos que
fundamentaban el enjuciamiento, que esencialmente eran la
violación del decreto
sobre ocupación de cargos, así como el
haber pronunciado tres discursos con la intención de
desprestigiar al Congreso ante los ciudadanos estadounidenses. Si
Johnson era declarado culpable, no había vicepresidente que
pudiera sucederlo (pues él era el vicepresidente que
había sucedido a Lincoln), y el cargo pasaría a Ben Wade, el presidente del
Senado, republicano radical.
El 27 de febrero Lord Derby
renunció a su cargo de primer ministro británico por
motivos de salud, y la reina Victoria lo sustituyó por Benjamin Disraeli, famoso por
su oratoria y que gozaba también de un gran éxito
como escritor. Se había ganado el afecto de la reina
gracias a un artículo de periódico que
publicó tras la muerte de su esposo, el príncipe
Alberto.
El 29 de febrero murió
en Niza el rey Luis I de Baviera, abuelo del rey actual, Luis II.
El shogun Tokugawa Yoshinobu había logrado reconstruir en
Edo un pequeño ejército, que el 1 de marzo salió bajo dispuesto a detener
el avance del ejército imperial.
Ese día el colorado Lorenzo Batlle fue nombrado
presidente de Uruguay.
Unas obras de explanación para el trazado de una
línea ferroviaria descubrieron unos restos humanos en las
llamadas cuevas de Cro-Magnon,
al sudeste de Francia. El gobierno envió a investigar al
geólogo y peleontólogo Louis Lartet, quien recuperó cuidadosamente
los restos, que resultaron ser cinco esqueletos humanos de gran
antigüedad: tres hombres, una mujer y un niño.
Incapaz de resistir a los bóers, el rey Moshoeshoe I
pidió ayuda a los británicos, y el 12 de marzo la tierra de los
Sotho fue declarada protectorado británico con el nombre de
Basutolandia. Un poco
más al norte de Basutolandia, al este de Pretoria,
vivía una tribu bajo tutela de los bóer cuyo
territorio recibió el nombre de Suazilandia por el jefe Mswati II, que murió ese año y fue
sucedido por su hijo Ludvonga II
bajo la regencia de su madre, la reina Tsandzile Ndwandwe.
El 13 de marzo se
inició en la sede del Congreso el enjuciamiento contra el
presidente Andrew Johnson, bajo la presidencia Salmon P. Chase, el
presidente del Tribunal Supremo. Se formó un comité
de enjuiciamiento y otro de defensa. Éste pidió
cuarenta días para reunir evidencias en favor del
presidente, pero sólo se le concedieron diez, aunque
después se concedió una prórroga de otros
seis.
El 27 de marzo una muchedumbre
se concentró ante el palacio de la reina Rasoherina de
Madagascar con intención de asaltarlo. Se sospecha que la
protesta fue organizada por el antiguo ministro
Rainivolninahitriniony. La reina y el primer ministro estaban
ausentes: ella permanecía en Ambohimanga, donde se recuperaba de una grave
disentería, y el primer ministro había ido a
visitarla. Los rebeldes lograron apresar a una serie de
personalidades, pero algunos guardias lograron escapar y fueron a
avisar a la reina y al primer ministro Rainilaiarivony. Por la
tarde la reina habló en público y pidió a los
partidarios de su gobierno que caminaran con ella hasta la
capital. Una gran cantidad de súbditos desfiló con
ella hasta Antananarivo y entró triunfalmente en el palacio
real.
El 29 de marzo unos 3000 soldados imperiales japoneses barrieron a unos 300 leales al shogun que defendían la fortaleza de Kofu.
El 30 de marzo se
reanudó el proceso de enjuiciamiento contra el presidente
Johnson con un discurso de tres horas de Benjamin Butler en el que
recapituló casos pasados de enjuiciamiento,
remontándose hasta el caso del rey Juan I de Inglaterra (el
que gobernó el país mientras Ricardo Corazón
de León estaba cautivo en Oriente).
El 1 de abril el presidente
colombiano Santos Acosta fue sucedido por José Santos Gutiérrez
Prieto, liberal radical, como su antecesor.
Ese día murió la reina Rasoherina de Madagascar.
Fue sucedida por su prima Ranavalona
II, otra de las esposas del fallecido rey Radama II.
El 9 de abril la
expedición de Sir Robert Napier llegó a la capital
etíope. El rey Teodoro II tenía a su
disposición un ejército reducido, pues muchos de sus
hombres habían desertado.
El 10 de abril se
estrenó en la catedral de San Pedro de Bremen una
versión incompleta (poco después
añadiría un movimiento a la obra) de Un requiem alemán, de
Johannes Brahms. A sus 35 años fue su primer éxito
importante, que lo animó a completar una serie de obras
más ambiciosas que había dejado inacabadas. Ese
año publicó una colección de canciones Op. 49
entre las que figura la que probablemente es su melodía
más popular, la de su canción
de cuna.
Las tropas paraguayas se retiraron definitivamente del Mato
Grosso, ante la necesidad de contener el avance brasileño
en territorio paraguayo.
Mientras tanto los británicos se enfrentaban a los
etíopes del rey Teodoro II y los pusieron en fuga. El 11 de abril Napier envió un
mensaje a Teodoro II prometiéndole un trato honorable si
liberaba a los rehenes y se sometía a la reina Victoria I.
El rey se negó a aceptar lo que consideraba una
humillación, pero a la vez trató de resolver el
conflicto diplomáticamente y envió una gran cantidad
de ganado a Napier como regalo de pascua, y acto seguido
liberó a los prisioneros. Sin embargo, informado de que
Napier había rechazado el regalo, Teodoro II, tras un
intento frustrado de suicidio, trató de huir, pero la
fortaleza estaba totalmente rodeada, así que tuvo que
volver a su interior.
Los prisioneros llegaron a las posiciones de los
británicos, quienes se sorprendieron de encontrarlos en
perfecto estado de salud. Uno de ellos dijo: "Hemos sido bien alimentados y
alojados. Sólo temíamos un cambio de humor del
emperador". El 13 de abril
los británicos lanzaron un nuevo ataque contra la fortaleza
de Teodoro II. Éste, comprendiendo que la resistencia era
inútil, se llevó a la boca una pistola que le
había sido regalada en nombre de la reina Victoria I y se
suicidó. El 18 de abril
los británicos se retiraron de Etiopía, dejando el
país sumido en luchas internas por la sucesión de
Teodoro II.
El 22 de abril Isabel de
Wittelsbach dio a luz en Buda a una niña, María Valeria, a quien
las malas lenguas hicieron hija del conde Andrássy, pero a
quienes el tiempo desmintió, al hacerse patente el parecido
entre la niña y el emperador Francisco José I.
Aprovechando que su suegra Sofía no se sentía ya con
ánimos de ocuparse de la educación de la
recién nacida, Sissí pudo conservar su custodia, y
se refería a María Valeria como "mi hija
húngara".
El 23 de abril murió de
pulmonía Ramón María Narváez, el
primer ministro español. Si el fallecimiento de O'Donnell
el año anterior había fragmentado a la Unión
Liberal, ahora el fallecimiento de Narváez tuvo un efecto
similar sobre el Partido Moderado, y el grupo de partidarios del
derrocamiento de la reina Isabel II creció aún
más. Narváez fue sucedido por Luis González
Bravo. Éste adoptó una actitud autoritaria que
agitó aún más a sus oponentes.
Ese día Charles Dickens embarcó en los Estados
Unidos de regreso a Gran Bretaña. Su estancia había
sido agotadora, pues había participado en setenta y seis
lecturas públicas de sus obras. La impresión que se
llevó del país fue muy satisfactoria, al contrario
de la que se había formado en su visita previa, antes de la
guerra civil.
Ibsen dejó Italia para instalarse en Dresde, en Alemania. Dostoyevski, en cambio, dejó Ginebra para trasladarse a Italia con su esposa, poco después de que su primera hija muriera a los tres meses de edad. Empezó a publicar su novela El idiota en El Mensajero Ruso, y el dinero que recibió por ello alivió bastante su situación económica.
El 24 de abril Pierre Michaux
patentó una versión mejorada de su velocípedo
con el nombre de pédivelle.
Mientras Pierre Lallement regresaba a Francia tras su frustrado
intento de comercializar en los Estados Unidos un invento similar,
su biciclo, se
encontraba con que los velocípedos de Michaux triunfaban
ahora en los Estados Unidos como consecuencia de su éxito
en Francia. Los estadounidenses los llamaban boneshakers (sacudehuesos)
porque sus ruedas de madera forradas de hierro no hacían
muy confortable el artefacto.
La revolución contra el presidente venezolano Juan
Crisóstomo Falcón se estaba extendiendo, y a ello
había contribuido en gran medida el apoyo del general
José Tadeo Monagas. El 25 de
abril Falcón dejó el gobierno en manos de Manuel Ezquiel Bruzual para
ocuparse personalmente de la dirección del ejército.
La junta militar dominicana arregló unas elecciones para
entregar la presidencia del país a Buenaventura
Báez, que tomó posesión del cargo el 2 de mayo.
El ejército del shogun había tomado algunos
castillos abandonados por pequeños señores
partidarios del emperador, pero en ellos no había
encontrado muchas provisiones ni armamento. El 10 de mayo, tomando como excusa una
revuelta de campesinos, tomó el castillo de Utsunomiya, de mayor
envergadura. Las reservas de arroz que había en el castillo
fueron repartidas entre los campesinos sublevados.
Con la capital venezolana rodeada por varios ejércitos
rebeldes, el presidente Bruzual se entrevistó con Miguel
Antonio Rojas y el 11 de mayo
firmó un tratado de Paz por el que éste
reconocía al gobierno actual y a cambio era nombrado
comandante en jefe del ejército venezolano. Sin embargo,
José Tadeo Monagas no reconoció el tratado y
continuó al frente de los rebeldes.
El 14 de mayo el
ejército imperial contraatacó y retomó el
castillo de Utsunomiya.
El 16 de mayo se
estrenó en el Nuevo Teatro de Praga la ópera Dalibor, de Bedrich Smetana.
Aunque fue bien acogida, las críticas posteriores la
consideraron pobre y Smetana se convenció de que
había fracasado con ella. Algunos críticos la
tacharon de excesivamente wagneriana y, por consiguiente,
inválida como modelo de lo que debía ser la
ópera nacional checa. Entre éstos se encontraba Frantisek Pivoda, el director
de la Escuela de Canto
de Praga, que no perdonaba a Smetana que hubiera contratado para
el teatro artistas extranjeros en lugar de alumnos de su escuela.
La polémica entre wagnerianismo frente a la
tradición italiana, mezclada con la polémica a favor
y en contra de Smetana, dividió a la sociedad musical de
Praga.
Era año de elecciones en los Estados Unidos, y el 20 de mayo se reunió en Chicago la convención republicana para elegir a su candidato. Encontraron al hombre perfecto: Ulysses S. Grant. Era uno de los personajes más populares de la época, simpatizaba con las ideas de los republicanos radicales sobre la reconstrucción del Sur y, lo que era más importante, por su carácter prometía ser el títere perfecto en manos de los congresistas, justo al contrario que Johnson. Fue elegido por aclamación. Más disputada estuvo la elección del candidato a vicepresidente, que finalmente recayó en Schuyller Colfax.
El 26 de mayo terminó
el enjuiciamiento del presidente Johnson. El general Butler
había denunciado que el presidente había estado
transmitiendo órdenes a varios oficiales del
ejército sin hacerlo a través de Grant, como el
Congreso había acordado. Entre los testigos que declararon
estuvo Lorenzo Thomas, en principio llamado por la defensa, pero
cuyo testimonio terminó beneficiando a la acusación,
así como el general William T. Sherman, llamado por la
acusación. De un total de 54 senadores, se necesitaban las
dos terceras partes (es decir, 36) para que la sentencia fuera
condenatoria. Los republicanos contaban con 42 senadores, de los
cuales siete habían manifestados sus reservas sobre la
posición de su partido favorable a la condena del
presidente. De hecho, seis de ellos ya habían manifestado
abiertamente que votarían por la absolución, y
sólo el senador por Kansas Edmund Gibson Ross mantuvo en secreto su
intención de voto. De este modo, se sabía que
había 35 votos favorables a la condena, 18 favorables a la
absolución y el voto incierto de Ross resultaba decisivo.
Finalmente su voto fue absolutorio y, para la indignación
de los republicanos el presidente Johnson pudo conservar su cargo.
Posteriormente el senador Butler afirmó tener indicios
razonables de que algunos senadores republicanos habían
aceptado sobornos a cambio de votar por la absolución.
La reserva india de Borque Redondo, adonde habían sido
llevados los Navajos cuatro años atrás había
resultado un fracaso. Las cosechas habían sido arruinadas
por varias plagas, el río Pecos se había desbordado
estropeando los sistemas de irrigación, los Comanches
realizaban continuas incursiones, que a su vez eran respondidas
por los Navajos, y así la mayoría de los indios
habían abandonado ya la reserva por su cuenta. El 1 de junio los principales jefes
Navajos firmaron un nuevo tratado con el gobierno estadounidense
por el que se les permitía volver a las tierras que
habían ocupado tradidionalmente, donde se
establecería una nueva reserva. El gobierno
proporcionaría a los indios semillas y todos los bienes que
no pudieran fabricarse por sí mismos, así como
escuelas gratuitas obligatorias para todos los niños.
El 10 de junio el
príncipe de Servia Miguel III Obrenovic fue asesinado a
tiros en Belgrado mientras paseaba con su sobrina, que
también resultó muerta. Nunca se llegó a
esclarecer quiénes fueron los responsables del magnicidio.
Fue sucedido por su primo Milán
IV, de catorce años, hijo de Milos Obrenovic, que
había sido adoptado por Miguel III como heredero.
Las luchas por el poder en Etiopía se resolvieron en favor
del gobernador de Lasta,
que contaba con un ejército de 60.000 hombres y el 11 de junio se hizo proclamar
emperador con el nombre de Jorge
II.
El 12 de junio el venezolano
José Tadeo Monagas llegó a Guatire con un ejército
de 4.000 hombres. Tras un fallido intento de negociación
con el gobierno, se dispuso a atacar Caracas.
El 21 de junio Wagner
estrenó en Munich Los
maestros cantores de Nuremberg, la única
ópera cómica entre sus obras de madurez, aunque lo
menos gracioso para el público es su duración de
cuatro horas y media. La obra tuvo un gran éxito, en parte
por el nacionalismo alemán que destilaba. En su estreno fue
dirigida por Hans von Bülow y cuatro meses después su
esposa Cosima lo abandonó llevándose consigo a dos
de sus cuatro hijas, Isolda y Eva (las que tenían un
curioso parecido físico con Wagner) y se fue a vivir con el
compositor, cuya esposa Mina había fallecido el año
anterior. Pese a ello, Bülow nunca pareció mostrar
ningún rencor hacia Wagner y siguió dirigiendo sus
obras.
Johann Strauss estrenó uno de sus valses más
conocidos: los Cuentos de los
bosques de Viena, que destaca por una inusitadamente
larga introducción que incluye un solo de cítara y
en la que la orquestación plasma de forma excepcionalmente
descriptiva la atmósfera de los bosques vieneses, seguida
de una de sus melodías de vals más pegadizas. Unos
días después de su estreno se interpretó por
segunda vez en un concierto de beneficencia, donde tuvo que
repetirlo varias veces, y unos días más tarde, el 22 de junio, lo interpretó al
aire libre ante unas 5.000 personas. Su hermano Joseph
presentó ese año uno de sus valses más
famosos: la Música de
las esferas.
El 25 de junio los rebeldes
venezolanos tomaban Caracas, y el 26
de junio José Tadeo Monagas entraba en la capital,
quien se dispuso a organizar un gobierno provisional. El 28 de junio designó como
presidente en funcines a Guillermo
Tell Villegas.
Ese mismo día el Papa Pío IX publicó la bula
Aeterni Patris por la que
convocaba a los obispos católicos a un concilio que se
celebraría en Roma a finales del año siguiente. Los
asuntos a tratar eran la
"defensa de la fe contra los errores de la época"
y la "puesta al día de
los cánones del concilio de Trento".
El 4 de julio se
celebró en Nueva York la convención demócrata
para elegir el candidato del partido a la presidencia de los
Estados Unidos. El requisito demócrata de exigir una
mayoría de dos tercios hizo que fueran necesarias 22
votaciones hasta que fue elegido Horatio
Seymour, el alcalde de Nueva York.
Mientras tanto el ejército imperial había rodeado
Edo y ese mismo día derrotaba a las últimas tropas
del shogun que defendían la ciudad en la batalla de Ueno. Entonces el
shogun Tokugawa Yoshinobu se recluyó en un templo y
dejó que la ciudad fuera tomada sin resistencia.
El 9 de julio Carolina del Sur
aprobó la decimocuarta Enmienda de la Constitución
Estadounidense. En los meses anteriores habían hecho lo
propio Iowa, Arkansas, Florida, Carolina del Norte y Luisiana, con
lo que los Estados que la habían aprobado sumaban ya un
total de 28 de 37, suficientes para que la Enmienda pasara a
formar parte de la Constitución. Sin embargo, la
situación no estaba del todo clara porque Oregon, Nueva
Jersey y Ohio se habían retractado. No obstante,
Alabama la aprobó unos días después y el 21 de julio hizo lo mismo Georgia,
con lo que las cuentas volvieron a cuadrar.
Las sociedades en defensa de los derechos de la mujer
insistían en que la decimocuarta enmienda debía ser
modificada para que garantizara para las mujeres los mismos
derechos que garantizaba para los negros. Sin embargo esta
medida no contaba con muchos partidarios, y los defensores de los
derechos de los negros no dudaron en apoyar la enmienda con su
redacción actual sin importarles que no incluyera las
reinvindicaciones de las mujeres. Esto defraudó a muchas
feministas que habían luchado por el abolicionismo y que
ahora se veían traicionadas.
El 24 de julio, incapaz de
resistir por más tiempo el asedio brasileño, la
guarnición paraguaya del fuerte Humaitá trató
de evacuarlo, pero, de los 3.000 hombres que la integraban,
sólo unos 1.000 pudieron salvarse. Unos 1.300 acabaron
siendo apresados durante la semana siguiente y el resto
murió en los bombardeos de la artillería.
El 25 de julio el
ex-presidente venezolano Juan Crisóstomo Falcón fue
expulsado del país.
Ese mismo día se organizó el Territorio de Wyoming, al sur de Montana, en
los Estados Unidos, cuya población había aumentado
considerablemente gracias al ferrocarril.
El 28 de julio se celebró la
boda entre el príncipe Federico de Dinamarca,
heredero del rey Cristián IX, y la princesa Luisa
de Suecia, hija del rey Carlos XV.
El Congreso de los Estados Unidos aprobó el pago de la
cantidad comprometida a Rusia a cambio del territorio de Alaska y
el 1 de agosto la suma fue
finalmente abonada, cerrando la operación de compra.
Las elecciones presidenciales en Perú dieron la victoria a
José Balta,
soportado por una "amplia mayoría" de más de tres
mil votos. El 2 de agosto
asumió la presidencia. Le tocó en suerte enfrentarse
a un gran terremoto que el 13 de
agosto sacudió Perú, acompañado de
un maremoto. El número de víctimas fue del orden de
las 40.000 (más de trece veces el número de sus
votantes). El terremoto también afectó al vecino
Ecuador, donde en la ciudad de Ibarra murieron casi todos sus
habitantes (unos 20.000). El general y ex-presidente Gabriel
García Moreno fue puesto al mando de la subsecuente
operación de reconstrucción.
El 18 de agosto hubo un
eclipse total de sol, que fue estudiado por numerosos
astrónomos. Entre ellos estaban el francés Pierre Janssen y el
británico Joseph Norman
Lockyer, que emplearon técnicas
espectrográficas sobre la luz proveniente de la corona
solar. De forma independiente, ambos encontraron una línea
amarilla brillante en el espectro de la luz solar, que no
correspondía a ningún elemento químico
conocido. Ambos postularon, pues, la existencia en el Sol de un
elemento desconocido en la Tierra, y Lockyer lo bautizó
como helio, por la
palabra griega que significa Sol.
El eclipse pudo ser observado como eclipse total en el lejano
oriente. Janssen y Lockyer se habían trasladado a la India
para observarlo. El rey Rama IV de Siam calculó por
sí mismo la mejor posición para observarlo en su
reino, que resultó ser la ciudad de Wakor, e invitó a
autoridades occidentales y siamesas a contemplarlo en su
compañía. Desgraciadamente, durante el viaje tanto
él como su hijo resultaron infectados de malaria.
Charles Darwin publicó un voluminoso tratado titulado Variación de las plantas y
los animales en estado doméstico, que tuvo una
gran aceptación. Para esas fechas, las polémicas
sobre la teoría de la evolución ya habían
abandonado el ámbito científico y sólo eran
alimentadas por religiosos, que no sabían de qué
hablaban, y oportunistas, que lo sabían perfectamente.
Entre los investigadores en biología más destacados
en ese momento estaba el alemán Ernst Haeckel, quien estableció la
distinción entre animales unicelulares y pluricelulares, y
acuñó téminos como "protozoo", "metazoo"
o "ecología". Se
le debe la teoría de que todos los seres vivos, animales y
plantas, provienen de una misma forma ancestral de origen
inorgánico. También conjeturó que los
factores hereditarios se almacenan en el núcleo de las
células. En cuanto al origen del hombre, postuló que
debía haber un "eslabón perdido" entre el hombre y
los simios que conocemos, a la que llamó Pithecanthropus.
Tras un periodo de inactividad que Solano López
había sabido aprovechar para fortalecer su nueva
línea defensiva, el 19 de
agosto el ejército brasileño salió
fialmente de Humaitá en un avance hacia el norte.
El 29 de agosto los
brasileños ocuparon la ciudad de San Fernando, que los
paraguayos habían destruido antes de abandonarla.
Ante las continuas presiones persas, el gobierno otomano terminó por encarcelar a Baháulláh en la fortaleza de Akká (la antigua San Juan de Acre). Desde allí, Baháulláh se dedicó a escribir cartas a las autoridades mundiales (el Papa, los emperadores de Francia, Austria y Rusia, el rey de Prusia, la reina de Gran Bretaña, el sultán otomano, el sha de Persia, el presidente de los Estados Unidos, etc.)
El 3 de septiembre la ciudad
japonesa de Edo fue rebautizada como Tokio (Capital oriental) y el emperador Meiji
realizó una larga estancia, instalándose en el
castillo que hasta entonces había ocupado el shogun. No
obstante, la guerra Boshin continuaba, pues en el norte del
país quedaban todavía algunas regiones leales al
shogunato. Allí varios señores habían formado
una Coalición del Norte
opuesta a la corte imperial. El principal foco de resistencia era
Aizu. Con el
restablecimiento del emperador como autoridad suprema de
Japón se inicia la llamada era Meiji, y entre las primeras medidas del
nuevo gobierno estuvo la de conceder a los campesinos la propiedad
de las tierras que trabajaban, lo que fue el primer golpe al
sistema feudal tradicional en Japón.
El 6 de septiembre se
inauguró en Bruselas el III congreso de la
Asociación Internacional de Trabajadores, en la que
participaron delegados de Bélgica, Francia, Gran
Bretaña, Alemania, Italia, Suiza y España. Ese
año Bakunin se afilió a la delegación Suiza.
Juan Prim no desistía de su propósito de derrocar a
la reina Isabel II. Había logrado que Napoleón III
le garantizara la neutralidad francesa en caso de que se desatara
una guerra civil en España y el 12
de septiembre salió de Londres en un barco de
vapor haciéndose pasar por criado de Mr y Mrs Bark, amigos
suyos. El 16 de septiembre
llegó a Gibraltar y desde allí pasó a una
fragata de una escuadra española anclada en Cádiz
bajo el mando del general Juan
Bautista Topete. El 17 de
septiembre la escuadra se sublevó, el 18 de septiembre toda la ciudad de
Cádiz estaba de parte de los sublevados y el 19 de septiembre varios generales
controlaban toda la provincia. Ese mismo día Topete, Prim y
otros cuatro generales publicaron una proclama que decía lo
siguiente:
Españoles: la ciudad de Cádiz puesta en armas con toda su provincia [...] niega su obediencia al gobierno que reside en Madrid, segura de que es leal intérprete de los ciudadanos [...] y resuelta a no deponer las armas hasta que la Nación recobre su soberanía, manifieste su voluntad y se cumpla. [...] Hollada la ley fundamental [...], corrompido el sufragio por la amenaza y el soborno, [...] muerto el Municipio; pasto la Administración y la Hacienda de la inmoralidad; tiranizada la enseñanza; muda la prensa [...]. Queremos que una legalidad común por todos creada tenga implícito y constante el respeto de todos. [...] Queremos que un Gobierno provisional que represente todas las fuerzas vivas del país asegure el orden, en tanto que el sufragio universal echa los cimientos de nuestra regeneración social y política. Contamos para realizar nuestro inquebrantable propósito con el concurso de todos los liberales, unánimes y compactos ante el común peligro; con el apoyo de las clases acomodadas, que no querrán que el fruto de sus sudores siga enriqueciendo la interminable serie de agiotistas y favoritos; con los amantes del orden, si quieren ver lo establecido sobre las firmísimas bases de la moralidad y del derecho; con los ardientes partidarios de las libertades individuales, cuyas aspiraciones pondremos bajo el amparo de la ley; con el apoyo de los ministros del altar, interesados antes que nadie en cegar en su origen las fuentes del vicio y del ejemplo; con el pueblo todo y con la aprobación, en fin, de la Europa entera, pues no es posible que en el consejo de las naciones se haya decretado ni decrete que España ha de vivir envilecida. [...] Españoles: acudid todos a las armas, único medio de economizar la efusión de sangre [...], no con el impulso del encono, siempre funesto, no con la furia de la ira, sino con la solemne y poderosa serenidad con que la justicia empuña su espada. ¡Viva España con honra!
El descontento que había llevado a la rebelión
contra la monarquía de Isabel II tenía su paralelo
en las colonias de Cuba y Puerto Rico. Allí los colonos
tenían que soportar altos impuestos fijados arbitrariamente
desde España, no había libertad de prensa ni de
reunión, era ilegal formar partidos políticos y, por
otro lado, en las islas habían causado impacto las ideas
abolicionistas estadounidenses, de modo incluso grandes
propietarios de esclavos comprendían que la esclavitud era
una rémora al progreso económico, y que el trabajo
de los esclavos no podía competir en productividad con el
de los trabajadores asalariados de las colonias británicas.
Por ello, desde el año anterior se habían formado en
ambas islas sociedades clandestinas que fraguaban una revuelta,
animadas por el éxito de la reciente expulsión de
los españoles de la República Dominicana. El 23 de septiembre medio millar de
rebeldes puertorriqueños se reunieron en la hacienda del
general Manuel Rojas, a
las afueras de Lares,
entraron en la ciudad, saquearon los comercios de propietarios
españoles y tomaron el control del ayuntamiento. Luego se
declaró la libertad de los esclavos que tomaran las armas
contra los españoles.
Mientras tanto, en España, el pronunciamiento de
Cádiz estaba teniendo una gran acogida en diversos puntos
de la península, especialmente en Barcelona. El general
Prim avanzaba por la costa mediterránea y todas las
ciudades por las que pasaba se unían a los rebeldes. Ese
mismo día entraba en Málaga.
A primeras horas de la madrugada del 24
de septiembre se proclamaba la República de Puerto Rico. Los rebeldes
nombraron un gobierno provisional presidido por Francisco Ramírez Medina.
Manuel Rojas dirigió su pequeño ejército
hacia San Sebastián,
pero fue rechazado por milicianos españoles y tuvo que
regresar a Lares. Allí los rebeldes fueron rodeados por los
españoles y rápidamente la revuelta fue sofocada.
Unos veinte rebeldes fueron encarcelados.
El 25 de septiembre Bakunin
fundó en Ginebra la Alianza Internacional de la
Democracia Socialista, que defendía una doctrina con
los objetivos siguientes:
Sin embargo, la Asociación Internacional de Trabajadores
rechazó el ingreso en su seno de la Alianza porque
era una asociación internacional, mientras que sólo
asociaciones nacionales podían integrarse en la AIT. Por
ello, la Alianza se deshizo al cabo de unos meses para integrarse
separadamente en la AIT.
Ese mismo día Prim entraba en Almería y el 26 de septiembre en Cartagena.
Mientras tanto el general Serrano, que se había unido a la
revuelta, avanzaba desde Cádiz hacia Madrid. El 28 de septiembre se encontró
en Alcolea
(Córdoba) con un ejército monárquico dirigido
por Manuel Pavía y Lacy,
el marqués de Novaliches.
Ambas partes contaban con unos 10.000 hombres cada una.
Pavía intentó un ataque frontal que fue detenido por
Serrano. Pavía tuvo que retirarse hacia el norte. La reina
Isabel II estaba veraneando en San Sebastián (en la costa
norte) y al recibir la noticia de la derrota de Alcolea
cruzó la frontera francesa.
El 1 de octubre murió
de malaria el rey Rama IV de Siam. Fue sucedido por su hijo Rama V, de quince años,
quien, aunque también había contraído la
enfermedad, logró superarla. El joven quedó bajo la
regencia de Si Suriyawongse,
el oficial más poderoso del momento. La institutriz
británica Anna Leonowens, que Rama IV había
contratado unos años antes estaba entonces en su
país por razones de salud. El rey la había
calificado de "mujer
difícil, y más difícil que la
mayoría". El rey la mencionó en su
testamento, si bien ella nunca llegó a recibir la herencia.
El nuevo rey, al que Leonowens había educado, le
escribió afectuosamente, pero no la invitó a
recuperar su puesto.
El rey Rama IV había concedido a su hermano Pinklao, fallecido dos
años atrás, el título de segundo rey de Siam,
y Si Suriyawongse estableció que este título se
transmitiera a su hijo Vichaichan.
Su propósito, al parecer, era prevenir que una muerte
prematura de Rama IV desestabilizara el país. Con el
nombramiento de Vichaichan como segundo rey, la sucesión
podría producirse sin incidentes.
El 2 de octubre Prim entraba
en Valencia y el 3 de octubre
fue recibido triunfalmente en Barcelona. Mientras tanto en Madrid
se había organizado una junta revolucionaria que
encomendaba al general Serrano la formación de un gobierno
provisional. Serrano nombró a Prim ministro de la guerra y
en el ministerio de gobernación puso a Práxedes Mateo Sagasta,
hasta entonces exiliado en Francia por su participación en
el motín de San Gil.
Los carlistas vieron en la situación española la
mejor ocasión para ocupar finalmente el trono. En ese
momento estaban divididos entre los que reconocían como rey
a Carlos María de Borbón (Carlos VII) y los que
seguían considerando rey "legítimo" su padre Juan
III, pero éste, para evitar que la desunión pudiera
obstaculizar sus metas, abdicó en Londres ese mismo
día.
También se interesó por la situación
española Mijaíl Bakunin, que envió al
italiano Giuseppe Fanelli
la misión de marchar a España y tratar de consolidar
una sección de la AIT en el país.
Durante los disturbios acaecidos en Madrid un escritor de treinta
y dos años llamado Gustavo Adolfo Claudio
Domínguez Bastida perdió un manuscrito con una
colección de poemas que estaba preparando para su
publicación y tuvo que reconstruir en parte de memoria.
Trabajaba como censor de novelas, y llevaba ya diez años
publicando en periódicos relatos en prosa que firmaba como
Gustavo Adolfo Bécquer (Bécquer era un
apellido de sus antepasados que también usaba su padre, que
era pintor, al firmar sus cuadros). Sus poemas fueron publicados
poco después con el título de Rimas. Tanto
sus relatos en prosa, conocidos como Leyendas, como sus Rimas
supusieron una renovación de la poesía
española que tuvo una gran influencia en autores
posteriores. En la época competían el romanticismo
con el realismo, entre cuyos representantes más destacados
en España estaban José Zorrilla y Ramón
de Campoamor, respectivamente. La obra de Becquer es
romántica, pero de un carácter novedosamente
íntimo, contrapuesto a la retórica imperante. Veamos
algunos ejemplos:
Amar y querer |
Rima XLII |
|
A la infiel más infiel de
las hermosas un hombre la quería y yo la amaba; y ella a un tiempo a los dos nos encantaba con la miel de sus frases engañosas. |
Con el hirviente resoplido moja el ronco toro la tostada arena, la vista en el jinete ata y serena, ancho espacio buscando el asta roja. |
Cuando me lo contaron
sentí el frío de una hoja de acero en las entrañas, me apoyé contra el muro, y un instante la conciencia perdí de dónde estaba. |
Mientras él, con sus flores venenosas, queriéndola, su aliento emponzoñaba, yo de ella, entre los pies que idolatraba, acabadas de abrir echaba rosas. |
Su arranque audaz a recibir se arroja, pálida de valor la faz morena, e hincha en la frente la robusta vena el picador, a quien el tiempo enoja. |
Cayó sobre mi espíritu la
noche, en ira y en piedad se anegó el alma, ¡Y entonces comprendí por qué se llora, y entonces comprendí por qué se mata! |
De su favor ya en vano el aire arrecia; mintió a los dos, y sufrirá el castigo que uno le da por vil, y otro por necia. |
Duda la fiera, el español la llama; sacude el toro la enastada frente, la tierra escarba, sopla y desparrama; |
Pasó la nube de dolor... con pena logré balbucear breves palabras... ¿Quién me dio la noticia?... Un fiel amigo |
No hallará paz con él, ni bien
conmigo; él, que sólo la quiso, la desprecia; yo, que tanto la amaba, la maldigo. |
le obliga el hombre, parte de repente, y herido en la cerviz, húyele y brama, y en grito universal rompe la gente. |
¡Me hacía un gran favor!... Le
di las gracias. |
Ramón de Campoamor
|
José Zorrilla
|
Gustavo Adolfo
Bécquer |
Un organista y compositor austriaco de 44 años llamado Anton
Bruckner aceptó una plaza de profesor de
teoría musical en el conservatorio de Viena. Sólo
entonces se decidió a estrenar bajo su dirección una
sinfonía que había compuesto hacía unos
años, la que ahora se conoce como su Primera
Sinfonía, aunque se conserva una previa que no
publicó. Hasta entonces había compuesto varias misas
y algunas piezas menores para orquesta, así como
música para órgano y piano solo.
Offenbach estrenó ese año cuatro de sus
óperas cómicas, Le
château à Toto, una revisión de Le pont des soupirs, L'île de
Tulipatan y, el 6 de octubre,
La Périchole, en
la que se empieza a notar un cambio en su estilo, que pasa a ser
menos exuberante y más romántico y humano.
Ese mismo día Charles Dickens inició en Gran
Bretaña una gira de lecturas de sus obras similar a la que
había realizado en los Estados Unidos. Su agenda
tenía un centenar de lecturas contratadas.
Los revolucionarios cubanos habían señalado una
fecha para el alzamiento a finales de año, pero las
autoridades españolas tenían noticias de la
conspiración. El 7 de octubre
se recibió un telegrama en Bayamo con la orden de detener a uno de los
dirigentes, Carlos Manuel de
Céspedes, pero el telegrafista lo avisó a
través de un sobrino de éste. Esto llevó a
Céspedes a convocar a los conspiradores más cercanos
el 8 de octubre y el 10 de octubre se produjo el
alzamiento al grito de ¡viva
Cuba libre! Céspedes era propietario de esclavos,
y su primer paso fue liberarlos.
El 11 de octubre el emir Samim bin
Thuwaini de Omán fue derrocado por su hermanastro Azzan
bin Qais, y se vio obligado a huir del país en
un barco británico.
El 12 de octubre Domingo Faustino Sarmiento,
tras haber ganado las elecciones, principalmente con el apoyo del
ejército, sucedió a Bartolomé Mitre como
presidente de la República Argentina.
El 17 de octubre Baden,
Baviera, Francia, Hesse, los Países Bajos y Prusia firmaron
la convención de Mannheim que garantizaba la libre
circulación por el Rhin para todos los países
signatarios.
El 20 de octubre, tras tres
días de combates, los insurgentes cubanos tomaron la ciudad
de Bayamo, que
Céspedes convirtió en la capital de un gobierno
presidido por él mismo. Uno de los insurgentes, abogado y
músico aficionado, llamado Perucho Figueredo compuso un
himno al que tituló la
Bayamesa, distribuyó octavillas con la letra y ese
mismo día fue cantado por primera vez. Su primera estrofa
dice:
¡Al combate corred bayameses, que la patria os contempla orgullosa; no temáis una muerte gloriosa, que morir por la patria es vivir! |
Ese mismo día Céspedes declaró la libertad
de todos los esclavos insurrectos.
Ese año Portugal declaró la abolición de la
esclavitud en sus colonias.
El 1 de noviembre un golpe de
estado derrocó al presidente costarricense José
María Castro Madrid y llevó de nuevo al poder a
Jesús Giménez Zamora.
La campaña electoral estadounidense fue como cabía esperar que fuese: los republicanos apelaron al patriotismo y a las pasiones en contra de los confederados. Trataron de presentar al candidato demócrata como un derrotista que habría permitido que la guerra civil terminara con la fragmentación de los Estados Unidos. En algunos Estados sureños la campaña electoral estuvo manchada de episodios sangrientos. El Ku Klux Klan se había convertido en una organización paramilitar al servicio del partido demócrata (salvo por el hecho de que nunca llegó a aceptar una jerarquía, sino que cada célula actuaba con total independencia). En Luisiana más de un millar de negros fueron asesinados como parte de la campaña de coacción para evitar que votaran, aunque también algunos republicanos blancos fueron asesinados. En el condado de Columbia, en Georgia, más de un millar de personas habían votado unos meses atrás al gobernador republicano, pero en las elecciones presidenciales se contó sólo un voto por Grant, como resultado de las coacciones (y tal vez también del fraude electoral). El Klan también mató a varios cientos de negros en Florida.
El 3 de noviembre se
celebraron las elecciones y Grant venció con una amplia
mayoría: 214 frente a 80 votos electorales. Ganó en
26 de los 34 Estados. Sin embargo, en lo tocante al voto popular,
la victoria de Grant había sido mucho más ajustada:
había obtenido tres millones de votos frente a los 2.7
millones de Seymour. Si los negros no hubieran votado, la victoria
habría sido para Seymour, lo que indicaba que la
población estadounidense estaba empezando a cansarse de
defender a los negros y quería pasar página sobre
los espinosos debates que habían conducido a la guerra
civil.
El 4 de noviembre
prendió un nuevo foco revolucionario en Cuba, en la ciudad
de Camagüey.
El 6 de noviembre, tras un
largo mes de asedio, se rindió el castillo de Aizu en
Japón. Muchos de sus defensores prefirieron suicidarse
antes que aceptar la rendición.
El 13 de noviembre
murió en París el compositor Gioacchino Rossini.
Las elecciones en Gran Bretaña dieron la mayoría a
los liberales, con lo que Benjamin Disraeli perdió su cargo
de primer ministro, que pasó a ocupar William Ewart Gladstone.
La guerra de Nube Roja había estallado por los intentos
por parte del gobierno estadounidense de asegurar el camino por el
que los colonos viajaban hacia Montana, pero el ferrocarril
había proporcionado una ruta alternativa, por lo que la
lucha contra los indios era costosa e innecesaria. Por ello el
gobierno propuso a Nube Roja unas condiciones que pudo considerar
satisfactorias y el tratado de Fort Laramie puso fin a la guerra.
Dicho tratado establecía una gran reserva Sioux en la parte
suroccidental del territorio de Dakota. Por esas fechas la guerra
de Halcón Negro contra los mormones también estaba
oficialmente terminada. No obstante, aunque Halcón Negro se
había rendido y había instado a otros jefes a hacer
lo mismo, todavía quedaban tribus Utas en pie de guerra que
seguían protagonizando robos y ataques aislados.
El 18 de noviembre murió el
general venezolano José Tadeo Monagas, en un momento en que
estaba desempeñando un papel decisivo en la política
del país.
El 25 de noviembre el
parlamento español aprobó una nueva ley electoral
que contemplaba por primera vez en España el sufragio
universal masculino.
El 3 de diciembre se
inició el juicio contra el ex-presidente Jefferson Davis
por traición.
Los brasileños habían alcanzado la nueva
línea defensiva paraguaya y, juzgándola
infranqueable, el general Luís Alves de Silva optó
por rodearla. Para ello se había construido en poco
más de un mes una carretera de 25 kilómetros que
permitiera el traslado rápido de tropas paralelamente a las
defensas paraguayas. El 4 de diciembre
la flota brasileña remontó Angostura y
desembarcó unos 18.000 soldados en San Antonio, cerca de
Asunción, en la retaguardia paraguaya, pero en lugar de
encaminarse hacia la capital se dirigió hacia el sur, para
encontrarse con la otra parte del ejército, unos 25.000
hombres que fueron trasladados por el camino construido hasta el
otro extremo de la línea defensiva paraguaya. La maniobra
cogió a Solano López totalmente por sorpresa.
Envó a los hombres que pudo (unos 4.000) hacia San Antonio,
donde el 6 de diciembre se
enfrentaron a unos 12.000 soldados brasileños en la batalla de Ytorró.
Tras una desesperada resistencia, los paraguayos terminaron
huyendo, pero Alves de Silva no los persiguió, sino que se
dispuso a concentrar sus tropas.
El 7 de diciembre, en un
espectáculo que tuvo lugar en el Teatro de la Zarzuela de
Madrid en el que se representó El alcalde de Zalamea (de Calderón de la
Barca) se estrenó el himno ¡Abajo los Borbones!, con letra de Antonio
García Gutiérrez (más conocido por su drama El trovador, en que se basa
la ópera de Verdi) y música de Emilio Arrieta, hasta
hacía poco profesor de canto de la reina Isabel II. Ese
año fue nombrado profesor de composición de la Escuela Nacional de Música
de Madrid.
La revuelta cretense se encontraba cada vez con más
dificultades. El gobierno revolucionario estuvo bajo asedio en Gonia hasta que el 11 de diciembre los turcos lograron
entrar en la ciudad y mataron a casi todos sus miembros.
Mientras tanto unos 19.000 soldados brasileños se
enfrentaron en la batalla de
Avay a menos de 6.000 paraguayos, más de la mitad
de los cuales acabaron muertos en el campo de batalla, y otra
buena parte fue hecha prisionera.
Solano López improvisó una nueva línea de
trincheras en las llamadas Lomas
Valentinas, donde pudo reunir unos 10.000 soldados, la
mitad de los cuales eran niños.
El 21 de diciembre Alves de
Lima intentó un ataque directo a las posiciones paraguayas
en Itá-Baté,
pero fue rechazado a costa de grandes pérdidas humanas.
El 24 de diciembre Francisco
Solano López recibió un ultimátum en el que
se le exigía la rendición incondicional en un plazo
de doce horas:
"La sangre derramada en el puente de Tororo y en el arroyo Avay debía haber determinado a V.E. a economizar la vida de sus soldados en el 21 del corriente, no compeliéndolos a una resistencia inútil. Sobre la cabeza de V.E.debe caer toda esa sangre,, así como la que tuviere que correr aún, si V.E. juzgase que su capricho debe ser superior a la salvación de lo que resta del pueblo de la República del Paraguay."
Ciertamente, la carnicería de la batalla de Avay
había sido totalmente predesible, pues había tenido
lugar en campo abierto, donde la inferioridad numérica de
los paraguayos no podía ser compensada de ninguna forma.
Sin embargo, López no vio motivos de peso para aceptar el
ultimátum, dado que todavía le quedaban paraguayos
vivos.
El 25 de diciembre el
presidente Johnson, todavía en funciones, anunció el
perdón incondicional para muchos confederados, entre ellos
el propio ex-presidente Jefferson Davis, que se encontraba
entonces en libertad bajo una fianza de 100.000 dólares.
Ese año había conseguido trabajo en una
compañía de seguros de Tennessee.
Ese mismo día los brasileños desplegaron una
batería de cañones alrededor de las Lomas Valentinas
e iniciaron un intenso bombardeo. Tras un día de descanso,
el 27 de diciembre se
reanudó el bombardeo, que fue seguido de un avance que no
tuvo dificultad en penetrar las líneas defensivas
paraguayas. El dictador Solano López había afirmado
una y otra vez a sus hombres que vencería o
perecería con ellos ese día, pero en cuanto tuvo
noticia de que los brasileños estaban abriéndose
paso a través de sus defensas, mientras mantuvo la orden de
resistir a toda costa, salió huyendo del lugar. Al parecer,
los portugueses lo vieron escapar, pero no hicieron nada por
evitarlo, no se sabe bien por qué.
El 30 de diciembre Angostura,
incomunicada desde que la flota brasileña rebasó su
posición en el río Paraguay, se rindió tras
negociar unas condiciones razonables. López había
huido de las Lomas Valentinas con menos de un centenar de
soldados, que eran todo lo que quedaba ahora del ejército
paraguayo.
En Creta, los jefes revolucionarios de seis provincias orientales
decidieron continuar la lucha, pero ya no contaban con el apoyo
popular necesario.
Édouard Manet terminó ese año la
versión definitiva de La
ejecución de Maximiliano, junto con otros cuadros
como el Retrato de Émile
Zola, que fue aceptado para el Salón de
París de ese año. Por su parte, Renoir
presentó su Lise
à l'ombrelle, que fue elogiada por Zola, pero que
en general recibió malas críticas y fue
caricaturizada en la prensa.
Hacía cuarenta y seis años que había nacido en Alemania Heinrich Schliemann, hijo de un pastor protestante que a los catorce años había tenido que abandonar sus estudios debido a que su padre fue acusado de apropiarse indebidamente de dinero de su iglesia y se quedó sin posibilidades de costear la educación de su hijo. Schilemann trabajó unos años en una tienda de ultramarinos y luego embarcó rumbo a Venezuela en busca de fortuna, pero su barco naufragó y acabó en una playa de los Países Bajos. Allí encontró trabajo en una oficina de comercio que compaginaba con el estudio de idiomas. A los 22 años dominaba siete idiomas y estaba aprendiendo ruso. Poco después fue enviado como representante a San Petersburgo, pero allí se independizó e inició sus propios negocios.A los 30 años se casó con una aristócrata rusa, Ekaterina Lyschin. Para entonces tenía ya una respetable fortuna y viajaba con frecuencia. Afirmaba que sólo necesitaba seis semanas para aprender un idioma, y su diario estaba escrito en la lengua del país en el que se encontraba en cada momento. Luego llegó la guerra de Crimea, que le permitió acrecentar considerablemente su fortuna proporcionando suministros al ejército. Schliemann contaba que su padre lo había familiarizado desde pequeño con las historias de la Ilíada y la Odisea, y una de las lenguas que más le habían interesado era el griego clásico. El año anterior Schliemann había visitado Grecia y el estrecho del los Dardanelos (en el Imperio Otomano), donde había conocido a Frank Calvert, el cónsul británico, quien le había revelado su convicción de que en un terreno de su propiedad, la mitad de la colina de Hissarlic (la otra mitad era propiedad del Imperio) estaba sepultada la antigua ciudad de Troya, que a la sazón se consideraba legendaria. Schliemann estuvo de acuerdo y escribió un ensayo titulado Ithaka, der Peloponnesus und Troja en el que defendía esta tesis.
La reconstrucción de los
Estados Unidos |
Índice | La
aniquilación del Paraguay |