[...] No podía ser uno un buen científico sin comprender que,
en contraste con la concepción popular sostenida por los periódicos
y por las madres de los científicos, buen número de ellos no sólo
son obtusos y de mentalidad estrecha, sino también simplemente estúpidos
[...]".
Escrito
por J. Watson en su libro "La doble hélice".
Watson y Crick con un modelo de doble hélice de ADN |