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Retos a los que se enfrenta la psicología en el tratamiento con hombres condenados por violencia de género

Terapia con maltratadores

Con el objetivo de analizar algunos de los aspectos importantes a considerar en la intervención grupal que se realiza en los programas psico-educativos dirigidos a aquellos hombres que han sido condenados por un delito de violencia de género; Marisol Lila (profesora del Master en Psicología General Sanitaria que ofrece la Universitat de València y coordinadora de la asignatura de “Actualizaciones y avances en las aproximaciones biopsicosociales a la salud y enfermedad” de segundo curso); Santiago Boira (Universidad de Zaragoza, España) y Pablo Carbajosa (Instituciones Penitenciarias, SGPMA de Almería, España) realizan un estudio titulado: “Principales Retos en el Tratamiento Grupal de los Hombres Condenados por un Delito de Violencia de Género” publicado en 2014. 

1 de diciembre de 2016

De esta forma, en primer lugar repasan los temas relacionados con la violencia de género que implican importantes consecuencias para el planteamiento e implementación de los programas de tratamiento dirigidos a estos hombres. En segundo lugar, identifican las circunstancias y dificultades relacionadas con el contexto del tratamiento, el penado y el terapeuta. Finalmente, identifican algunos retos que debe enfrentar el terapeuta.

Alcanzar la erradicación de la violencia dentro de la pareja sigue siendo un problema grave y un reto que implica al conjunto de la sociedad. “En este sentido, la OMS –en el informe realizado en 2013- señala que se trata de un problema de proporciones pandémicas”, destacan los autores. Las estrategias de actuación se han centrado en visibilizar el problema, en mejorar los medios para la atención de las víctimas y en el endurecimiento de las actuaciones con hombres violentos.

Alcanzar la erradicación de la violencia dentro de la pareja sigue siendo un problema grave y un reto que implica al conjunto de la sociedad

Los modelos que han tratado de explicar la violencia en la pareja son:

  1. Aquellos que acentúan la causa de la violencia en variables intrapersonales.
  2. Los que se centran en variables interpersonales.
  3. Los que colocan la causa de la violencia fundamentalmente en variables de carácter sociocultural.
  4.  Los que analizan la violencia como una interrelación de los tres anteriores (modelo ecológico).

Respecto a su definición, “este tipo de violencia puede entenderse como un intento sistemático por parte del agresor de conseguir y mantener el control de la relación utilizando un comportamiento violento”, explican los autores. Habitualmente, el fin último de estas actitudes no suele ser el daño en sí, sino el control; tanto en el caso del daño psicológico como en el caso de la agresión física o sexual. “De este modo, la percepción que el agresor tiene de su comportamiento se caracteriza por la ausencia de conciencia de problema, lo que incide en una comprensión distorsionada de la situación y en una deficiente capacidad empática para ponerse en el lugar de la mujer”, aseguran los autores.

Este tipo de violencia puede entenderse como un intento sistemático por parte del agresor de conseguir y mantener el control de la relación

Diferentes estudios e investigaciones destacan la cada vez más temprana edad en la que aparecen actitudes sexistas sobre el modo de entender el amor o el papel del hombre y la mujer dentro de una relación. En cuanto a los tratamientos y revisiones que han evaluado los programas han mostrado resultados discretos. Por tanto, el debate acerca de si estos tienen éxito o no continúa y se ha convertido en un tema controvertido; dado que existen aspectos que podrían mejorar su eficacia. “La mejora de la seguridad de la víctima, la prevención de los posibles daños futuros, el aumento de la conciencia sobre el daño cometido y el cambio del sistema de creencias se convierten en elementos críticos de intervención”, subrayan.

Diferentes estudios destacan la cada vez más temprana edad en la que aparecen actitudes sexistas sobre el modo de entender el amor o el papel del hombre y la mujer dentro de una relación

En España, este tipo de programas con penados se aplican bajo ciertas condiciones:

  • Mediante la participación voluntaria del hombre.
  • Como consecuencia de una medida judicial que sustituye o suspende una pena privativa de libertad.
  • Una vez que el hombre se encuentra en prisión.

Sin embargo, la intervención debido a programas por mandato judicial plantea problemas debido a la dificultad para que los hombres asuman su comportamiento. Por ello, es necesaria una visión ecológica que contemple las relaciones de influencia entre contexto, terapeuta, programa y penados. Dada esta situación, a la hora de proponer programas efectivos es necesario tener en cuenta el contexto en que estos hombres llegan al tratamiento. La mayoría de ellos lo hacen por obligatoriedad.

Es necesaria una visión ecológica que contemple las relaciones de influencia entre contexto, terapeuta, programa y penados

Asimismo, también es necesario tener en cuenta el contexto institucional donde se implementan los programas. Ya que todo ello va a tener “consecuencias en los objetivos de la intervención, las actitudes de los participantes y la necesidad de desarrollar habilidades específicas por parte del terapeuta”, explican en el estudio. A todo ello se suma la problemática de los propios agresores que también suponen un reto para el psicólogo a la hora de desarrollar la dinámica de trabajo con el grupo. Los principales elementos a tratar serán:

  • Motivación
  • Conciencia del problema
  • Ajuste psicosocial
  • Actitudes hacia la terapia y el terapeuta.

Como conclusión destacan que “el futuro de este tipo de programas pasa por encontrar un equilibrio en atender a los factores de riesgo -demanda institucional y social- sin perder de vista el bienestar del penado -demanda terapéutica-. El atender estos dos factores de manera conjunta y efectiva es quizás el mayor desafío de este tipo de programas y, para ello, hay que cumplir los objetivos y contenidos del programa, primando en todo momento la seguridad de la víctima”.