VALORACIÓN DE LOS DOCUMENTOS PRESENTADOS EN LA FASE 2 DE LA XI ASAMBLEA FEDERAL DE IU:
Rafael Pla López
1. "Una IU para un nuevo país"

Compartiendo buena parte del análisis y de los objetivos planteados, hay que destacar que, aunque critique la configuración de IU como un Partido, sus propuestas en la práctica se orientan a la organización de un Partido (eso sí, no electoralista) con base ideológica y militante (que sería más bien la función del PCE, por ejemplo), aplazando la creación de un movimiento político y social como ámbito de confluencia real. Si bien sitúa correctamente dicho ámbito a partir de las confluencias municipales, etc., sus propuestas para desarrollarlo "federalmente" vuelven a remitir al funcionamiento de IU.

Habría que criticar también la idealización de las primarias como supuesto instrumento de democracia participativa, al tiempo que las propuestas organizativas omiten algo tan básico como la supresión de los miembros natos con voto en las Asambleas Federales. Así como la incoherencia de las propuestas respecto a la UE: tras caracterizarla como irreformable, afirma que "reducir  nuestro  planteamiento  a una salida unilateral del euro y de la UE sin más, podría llevarnos a caer en una posición izquierdista y poco comprensible para la mayoría social" (página 27), eludiendo una definición clara del objetivo al respecto. Por otro lado, en relación al euro confunde los conceptos de moneda única y moneda común (ver "La chapuza. Moneda europea y soberanía democrática", de Frédéric Lordon, El Viejo Topo, Barcelona, 2016) y no plantea la cuestión central de la disposición a emitir medios propios de cambio frente a un chantaje financiero.

Y en la página 28 vuelve a plantear la Renta Básica sin hablar, por el contrario, de Trabajo Garantizado.

2. "IU, sí; con más fuerza"

Comparto también buena parte del análisis y de los objetivos planteados, que coinciden además con los del documento anterior. También coincido con la afirmación de que "La presunta dicotomía entre reforma y ruptura como estrategias antagónicas obvia las condiciones  concretas de las correlaciones de fuerzas existentes y de la dimensión temporal los procesos sociales" (página 5), aunque sería más adecuado señalar la compatibilidad entre la estrategia de ruptura y la táctica de reformas.

Plantea también para IU tareas de lucha ideológica que son propias de un Partido, aunque intente matizarlo con la afirmación de que "el trabajo ideológico es fundamental y precisa la colaboración de los partidos que se integran en IU" (página 8). Y encubre en la crítica del "ciudadanismo" la aparente incomprensión de la pluralidad de clase de las fuerzas sociales con intereses contradictorios con los de la oligarquía, que no se reducen a los sectores "proletarizados". Ello puede corresponderse con la pretensión de definir a IU por "su carácter de clase" (página 13) y atribuirle un "espacio propio" (página 13) que coincide objetivamente con el del PCE. Aunque en otro apartado sí habla de "los  efectos de la crisis sobre la pequeña burguesía y sectores equivalentes" (página 10), aunque no parece sacar conclusiones al respecto.

También coincido en que "El primer paso para cualquier proceso de convergencia es el mantenimiento de la pluralidad y la unidad  de  los que ya estamos en IU" (página 13). Aunque no entiendo cómo podía haber ayudado a la convergencia la "crítica política a quienes procedentes de Izquierda Unida, y algunos con importantes responsabilidades, han engrosado" las filas de Podemos (página 12). Ni cómo encaja la política de confluencia con la afirmación excluyente de que "no existe otra fuerza que sustente su estrategia en la construcción de un Bloque Político y Social" (página 14), quizá confundiendo el concepto con la consigna. Y parece poco realista condicionar la confluencia a "un papel hegemónico" (página 15) de IU.

Y resulta singular que en las propuestas organizativas, en las que insiste en el papel de la "militancia" y los derechos de la "afiliación" tampoco incluyan la supresión de los miembros natos con voto en las Asambleas Federales.

Respecto a Europa, afirman que "la posición de IU, no debe ser favorable a una ruptura unilateral con el euro, aunque destacamos que la unión monetaria exacerba las dificultades para salir del marco neoliberal en el que se configura la política de nuestro Estado" (página 25), pero sí plantean "la adopción de cambios políticos (de la restricción de movimientos de capitales hasta, en casos extremos, una doble moneda oficial)" (página 26).

3. "Ponencia punto 8 para la XI Asamblea de IU"

Se limita al tema de Europa, con un análisis esencialmente coincidente con el de los dos documentos anteriores, pero concluyendo con la propuesta de "romper con el yugo de la unión monetaria" (página 2), aunque sin concretar cómo hacerlo. Es importante precisar que el yugo no radica en la existencia una moneda común, sino en la pretensión de que ésta sea una moneda única que excluya la capacidad de emitir medios propios de pago, la cual debe ser reivindicada frente al chantaje financiero.

4. "Revolución democrática para una izquierda ganadora"

Hay coincidencia en el análisis de la situación económica y los objetivos alternativos con los de los dos primeros documentos.

Coincido también en el rechazo a la integración en Podemos, la necesidad de contar con ellos y las dificultades que entraña. De acuerdo también en defender "la bandera del pluralismo y de la diversidad en el encuentro de las izquierdas alternativas" (página 13). Pero no parece adecuado confiar la recuperación de IU al "desvanecimiento" del "encantamiento" de Podemos (páginas 2 y 12).

No entiendo por qué la elección de co-portavoces por sufragio universal evitaría el "presidencialismo" (página 3). Y puestos a escoger un sistema de elección proporcional con lista abierta (pero sin demonizar las listas cerradas que pueden ser una expresión de la pluralidad interna), el sistema electoral de EUPV (ver http://www.uv.es/pla/sistelec/Estatuts1516c.htm ) tiene más garantías que el Dowdall.

Singularmente, tampoco las propuestas organizativas incluyen la supresión de los miembros natos con voto en las Asambleas Federales.

Comparto la necesidad de respetar la soberanía de cada organización federada (a.k.a. "Federación"). pero no la equiparación de casos radicalmente diferentes: en el caso de Extremadura, su consentimiento del gobierno del PP vulneraba la política federal de IU, y no es comparable con la barbaridad de desfederación de IUCM. Por otra parte, habría que precisar que no hay diputados de IU dentro del grupo de Podemos, sino dentro de un grupo compartido con Podemos que incluye candidaturas de confluencia en las que participamos conjuntamente.

El documento propone un "Proceso constituyente para una nueva Europa" (página 27), pero elude definirse sobre el euro y ni siquiera defiende la capacidad de emitir medios propios de pago frente al chantaje financiero.

Singularmente, el documento enfatiza "el menoscabo de determinadas libertades y derechos civiles en Cuba" (página 28) y olvida denunciar la oleada de asesinatos policiales que han dado lugar al movimiento "Black Lives Matter" en EE.UU.

5. "Por la refundación de IU en el marco de la Unidad Popular"

Contiene un análisis sesgado de la trayectoria de IU que, curiosamente, hace referencia indirecta a las Elecciones Europeas reprochando que IU no aceptara la propuesta unipersonal de Pablo Iglesias sin reconocer el éxito electoral de IU en dichas elecciones triplicando sus resultados. Y rechaza buscar "culpables" fuera de IU para centrarse en buscarlos dentro, con propuestas excluyentes.

Y reivindicando la concepción originaria de IU (página 6) propone una organización confederal que nunca estuvo en dicha concepción, proponiendo asimismo un modelo confederal para el Estado (página 26). Y tras proponer "respeto estratégico a la pluralidad política e ideológica" (página 6) pretende excluir de su dirección a los responsables de sus partidos componentes.

Contiene una descripción distorsionada de la historia que describe a jacobinos, anarquistas y comunistas como "amenazas fantasmales" (página 7), despreciando su lucha y el Manifiesto de Marx y Engels que superaba tal entidad "fantasmal". Y curiosamente, describe ampliamente la situación en EE.UU. pero elude referirse a la cleptocracia que se expresa a través de las Primarias que defiende. Y propone, a diferencia de los documentos anteriores, "recuperar cuanto antes un capitalismo regulado" (página 19), aunque también "el inicio de la transformación socialista de la sociedad" (página 20). No tengo claro que ambos textos los haya redactado la misma persona (en ocasiones está redactado en primera persona, aunque sus autores no se identifican).

Afirma que "Un gobierno presidido por el PSOE no puede ser calificado como “de izquierdas” o “progresista”" (página 20), sin establecer una distinción, necesaria, entre ambos conceptos.

Comparto que "hay campos y ámbitos de la reformas que pueden facilitar el proceso constituyente" (página 22).

El documento asume la propuesta de "romper con el yugo de la unión monetaria" (página 24) del tercer documento, pero propugna además "la construcción de un nuevo modelo de Unión Europa" (página 25). En cualquier caso, habría que reiterar la necesidad de disponerse a emitir medios propios de pago frente a un chantaje financiero.

6. "Federación IU Alemania XI Asamblea"

Cuando habla de "un espacio de trabajo plural y sobre todo no subordinado a ningún aparato burocrático de ninguna organización integrante de nuestro partido" (página 1), cabe suponer que por "nuestro partido" se refiere a IU, que no parece concebirse así como movimiento político y social, aunque sí traslada la prevención hacia sus organizaciones integrantes, como el PCE.

A diferencia del documento anterior, afirma que "es el turno del socialismo anticapitalista (y no de reformas "sociales" para lavar la cara del capitalismo)" (página 2).

Cuando afirma que "La Unidad Popular no puede tener carácter interclasista" (página 4) ignora el concepto mismo de Pueblo en su formulación original por Mao Tse Tung, abarcando un conjunto de clases y fracciones de clase alrededor de la clase trabajadora.

La afirmación de que "La crisis representa la derrota histórica del proyecto neoliberal" (página 6) no se corresponde con la realidad: aunque supusiera una refutación de sus postulados, ha sido utilizado por los neoliberales para profundizar en su proyecto antipopular. Curiosamente, el mismo texto explica a continuación que lo que ha sido derrotado es el proyecto socialdemócrata.

Cuando el texto afirma que "El Estado actual ya no es una herramienta para la representación de los intereses de todos los españoles y españolas" (página 7) hay que recalcar que nunca lo ha sido.

De acuerdo en que hay que intentar la confluencia también con Podemos (página 7). Pero no está de más recordar que ha sido Podemos quien la ha rechazado hasta ahora en el ámbito global. Y habría que recordar que la causa de las "confluencias asimétricas" (página 11) ha sido precisamente la negativa de Podemos a una confluencia global.

La afirmación de que "La consigna debe surgir de las bases y la dirección debe hacerla suya" (página 9) es mecanicista. Las propuestas pueden tener múltiples orígenes (de las bases, de los partidos componentes, etc.).

La afirmación de "La negativa de los responsables de IUCM a acatar las decisiones del federal durante el último año" (página 11) es simplificadora si no se especifica de quien eran las competencias en cada caso.

Sobre el tema de la UE y el Euro no se define, más allá de propugnar una "Europa Socialista" (página 12).

Meliana, 27 de marzo de 2016