Embajada de la República de Polonia en España
C/ Guisando 23 bis,
28035 MADRID
Estimada Embajadora de la República de Polonia en Madrid:
Yo, ................................... por la presente, expreso
mi más enérgica
protesta ante las medidas que la cancillería de la
República de Polonia
pretende tomar contra los voluntarios polacos de las Brigadas
Internacionales. En lo económico, querer suprimir las pensiones
a ancianos
de noventa años, edad media de los escasísimos
supervivientes, es una
decisión indigna y mezquina que recuerda las represalias de los
regímenes
totalitarios.
Por lo que se refiere a la memoria histórica, quiero recordar
que los
interbrigadistas polacos acudieron a España a defender la
libertad y la
democracia, amenazadas en España por el golpe militar y en toda
Europa
por el fascismo internacional que apoyaba a los sublevados. Querer
borrar
de la memoria histórica de Polonia la presencia de los
voluntarios
internacionales de la Brigada Dombrowsky es querer eliminar parte del
pasado democrático de Polonia y del patrimonio histórico
común
hispano-polaco.
Pero es también un empeño inútil, porque la
memoria histórica es
resistente. En España, la memoria de los brigadistas polacos,
como la
de todos los internacionales, resistió cuarenta años
para retornar con más
fuerza con la reconquistada democracia. La sociedad española
actual ha
expresado en numerosas ocasiones su gratitud y reconocimiento a las
Brigadas Internacionales, empezando por la concesión de la
nacionalidad
española por el Congreso de los Diputados en 1995
Todo gobierno democrático debería contribuir a esta
labor, manteniendo
la memoria histórica de quienes dejaron su tierra y familia para
defender
la libertad.
En este sentido, apelo al gobierno de Polonia para que reconsidere las
medidas pretendidas contra los voluntarios polacos de las Brigadas
Internacionales.