PROGRAMA DE EDUCACIÓN:
 
El PCE defiende un modelo de Educación pública, libre, gratuita, universal, laica, científica y de calidad al servicio de la inmensa mayoría social, promotora de emancipación social y de la formación integral de la ciudadanía. Así considera necesario:
1. Priorizar la inversión pública en educación como requisito para un desarrollo sostenible frente a la crisis capitalista.
2. Asegurar el papel central de la escuela pública en el sistema educativo, reduciendo los conciertos a un papel subsidiario, temporal y en extinción. 
3. Mejorar y garantizar la oferta pública educativa, incluida la etapa de 0 a 3 años, desde la red de centros de titularidad pública.
4. Garantizar la laicidad del sistema educativo, excluyendo la religión del curriculum. El adoctrinamiento religioso debe salir de la Escuela y para ello se debe derogar el Concordato con el Estado Vaticano y las leyes que confieren a la iglesia católica un papel que no le corresponde en un estado democrático.
5. Respaldar con una financiación suficiente la dimensión social y la renovación pedagógica en la educación superior, implantando la gratuidad y generalizando las becas-salario.
6. Establecer Campus Ínter universitarios integradores que engloben a todo el sistema universitario público garantizando su calidad.
7. Salvaguardar la investigación como servicio público, rechazando la apropiación privativa de recursos públicos.
8. Impulsar la gestión democrática de todas las instituciones educativas.
9. Continuar apoyando las movilizaciones contra la mercantilización del sistema educativo.

La formación de los trabajadores: 
Ante los límites ecológicos al crecimiento, un desarrollo sostenible  sólo puede basarse en la Investigación científica, el Desarrollo  tecnológico y la innovación en el trabajo, y por tanto en la creatividad  del trabajo colectivo. Y  a medio plazo un desarrollo basado en la  innovación en el trabajo requiere que la clase trabajadora asuma la  responsabilidad de su gestión, superando la explotación capitalista del  trabajo intelectual. Y la reducción de la jornada de trabajo debe  facilitar la formación laboral imprescindible para dicho desarrollo. Por  otra parte, la generalización de la formación superior deberá permitir  superar la discriminación basada en la formación, a partir de una  profunda transformación de los sistemas educativos públicos para la  formación para el trabajo creativo y cooperativo necesario para el mismo. 

Por otra parte, y frente a la reforma laboral del PP, hay que subrayar que los trabajadores y trabajadoras en paro que han estado cotizando a la  Seguridad Social tienen derecho al cobro del subsidio de paro derivado  de dichas cotizaciones, el cual no puede condicionarse ni a la  realización de servicios comunitarios ni de actividades de formación.  Dicho subsidio tiene como objetivo atender a sus necesidades a corto  plazo, en tanto una reactivación económica o un mejor reparto del tiempo  de trabajo le permita reanudar una actividad laboral que puede ser  similar a la anteriormente desempeñada y para la cual ya tiene formación  y experiencia. 

Solamente en el caso de agotarse el subsidio de paro o de no haber  cotizado para el mismo procedería la asignación de un salario social,  por un monto igual al salario mínimo, vinculado al servicio público y  eventualmente a la formación (tal como se plantea en el punto 1.1.1 del  Guión Programático, http://www.uv.es/pla/pce/trabalt.htm ), para  capacitarle para la realización de nuevas tareas con nuevas tecnologías  o en distintos sectores económicos.

UNIVERSIDAD:

 1/ Como esta en ese nivel la  educación:
 La Universidad ha tenido una gran expansión durante el último tercio del siglo XX, ante una fuerte demanda de estudios superiores, vinculada al desarrollo de las fuerzas productivas en el marco de la revolución científico-técnica. Ello se inscribe en un proceso objetivo de transformación de una Universidad para la formación de la burguesía a una Universidad para la formación de la clase trabajadora, limitada inicialmente a la fracción de dicha clase que requiere de una formación superior para desempeñar su trabajo. No obstante, la estructura y la metodología de la Universidad ha seguido respondiendo esencialmente a la función de reproducción de la clase burguesa dominante y de su ideología.
 (ver "La Universidad en el marco de la crisis global del capitalismo" en http://www.nodo50.org/fimpv/gruninv/diaguniv.htm )
 
2/ Como afecta las dinámicas privatizadoras  hoy y mañana:
 En el marco de la crisis global del capitalismo, la hegemonía del capital financiero y su proyecto neoliberal ha hecho fracasar el proyecto de reforma universitaria impulsado por la fracción de la burguesía vinculada al desarrollo tecnológico. Ello supone una suicida supeditación de los estudios universitarios a las exigencias del mercado a corto plazo, y una restricción de la financiación que hace imposible la renovación pedagógica necesaria para un aprendizaje centrado en el estudiantado y la llamada "dimensión social" que debería garantizar que pudieran completar sus estudios sin obstáculos derivados de su origen socioeconómico, implantando aumentos elitistas de las tasas académicas, especialmente en los Masters, y centrándose en los llamados "Campus de excelencia" con criterios elitistas y mercantilistas. Se impulsa asimismo la mercantilización de la investigación, promoviendo la apropiación privativa y excluyente de los resultados de la investigación realizada con fondos públicos.
(ver "Alternativa a la Estrategia Universidad 2015, el acceso a los estudios superiores, la gratuidad y las becas" en https://n-1.cc/pg/pages/view/1231353 )

3/ Como debería ser y que medidas deberíamos  tomar para revertir la situación:
 La naturaleza de los estudios universitarios, con un período prolongado de formación, es contradictoria con la supeditación al mercado, y requiere por el contrario una perspectiva de planificación a medio y largo plazo. Y dado que el factor central para un desarrollo sostenible está en la calidad del trabajo humano y su capacidad innovadora, hay que impulsar la tendencia a la generalización de la educación universitaria, gratuita y con un sistema generalizado de becas-salario, así como una renovación pedagógica que fomente los métodos activos que estimulen la creatividad, y el desarrollo de una democracia participativa en la gestión universitaria. La investigación deberá desarrollarse también como un servicio público, garantizando el carácter públicos de los resultados de las investigaciones realizadas con fondos públicos. Todo ello requiere de una adecuada financiación pública y el rechazo de todo forma directa o indirecta de privatización.
 (ver "Universitat: alternatives" en https://n-1.cc/pg/pages/view/1114096 )