REPRESENTACIÓN PROPORCIONAL
conceptos básicos

Sistema proporcional: aquel que garantiza que si una parte dels electores vota en bloque de la misma manera, obtienen un número de representantes que difiere en menos de la unidad de la parte
proporcional exacta que les correspondería.

Sistema de listas cerradas: aquél en que se presentan distintas candidaturas ordenadas y cada votante debe escoger una de ellas, votando únicamente por sus candidatos. Las listas se llaman bloqueadas cuando el votante no puede suprimir ni reordenar los candidatos de la lista escogida. Hablaremos de listas excluyentes cuando las distintas candidaturas no pueden tener nombres en común.

Sistema de lista abierta: aquél en que cada votante puede votar por cualquier candidato con independencia de cómo se haya presentado.

La representación proporcional con listas cerradas excluyentes puede obtenerse por distintos sistemas, como el de resto mayor y los de cociente mayor (entre ellos el de Hondt que utiliza denominadores enteros consecutivos y el de Saint Lagué que utiliza denominadores impares consecutivos).

Hay que aclarar que no hay ningún sistema proporcional "puro", dado que, si la proporcionalidad exacta no da números enteros, únicamente pueden proporcionar una aproximación de la distribución de puestos a la proporcionalidad exacta.

El sistema de resto mayor da la mejor aproximación cuando hay únicamente 2 candidaturas (midiendo la aproximación mediante la distancia entre los números de puestos atribuidos y la proporcionalidad exacta, sea cual sea la manera de calcular esta distancia). Si el número de candidaturas es superior a 2, la cosa no es tan inequívoca: el sistema de resto mayor es muy sensible a la fusión o división de candidaturas.

Para conseguir la proporcionalidad con lista abierta o con listas cerradas no excluyentes hay que utilizar sistemas especiales. Debe aclararse que el sistema de votar un número menor al de puestos a cubrir y atribuir los puestos a quienes reciban más votos no puede considerarse proporcional (dado que no cumple el requisito antes enunciado), sino mayoritario corregido.

Podría hablarse de una proporcionalidad débil cuando, en caso de que todos los votantes voten en bloques disjuntos y ordenados, el sistema da una distribución proporcional. Para ello basta con utilizar distintas formas de voto ordenado y ponderado, asignando pesos decrecientes en función de la posición en la que se recibe el voto.

Hablaremos de una proporcionalidad fuerte o en sentido estricto cuando el resultado proporcional de un bloque de votantes no está condicionado a lo que voten los demás. Ello exige un mecanismo de garantía para evitar que una determinada dispersión o cruce de votos de una mayoría de votantes prive a una minoría de su representación proporcional.

Estudiaremos aquí: