Aprender
de la història es la primera condición para evitar que la historia se
repita. Desgraciadamente, es más frecuente reincidir en los errores a
lo largo de las décadas.
En los años 80,
Santiago Carrillo,
a la sazón secretario general del PCE, impulsó un conjunto de purgas a
diestra y a siniestra que condujo a un grave debilitamiento
organizativo del PCE. En estas condiciones, y frente a un PSOE que
aparecía como una esperanza de cambio, el PCE se hundió electoralmente
en las elecciones generales de octubre 1982, pasando de 23 a 4 escaños.
Tras la formación de
Izquierda
Unida, en la que se integraba el PCE, ésta fue aumentando la
representación en sucesivas elecciones generales, llegando a 21 escaños
en 1996. Pero en 1997 estalló la crisis en IU, con la expulsión de
Nueva Izquierda y la ruptura con las organizaciones en Galicia y
Catalunya (ver "
No és això, companys, no és això" en
http://www.uv.es/pla/noesaixo.html
). Y en las siguientes elecciones generales de 2000 su representación
se redujo a 8 escaños. En elecciones sucesivas seguiría disminuyendo,
hasta llegar en 2008 a 2 escaños contando el coaligado de ICV en
Cataluña.
En las elecciones generales de 2011 IU se presentó
dentro de la coalición Izquierda Plural, que obtuvo un total de 11
escaños. Pero cuando se avecinan las elecciones generales de 2015 se
produce la ruptura con IUCM (Izquierda Unida de la Comunidad de
Madrid). De hecho, aunque ésta se consagra en el Consejo Político
Federal de IU del 14 de junio, ya había estallado cuando la Presidencia
Federal desautorizó la candidatura de IUCM en Madrid, y notorios
dirigentes federales de IU pidieron públicamente el voto para "Ahora
Madrid", generando una imagen de división que condujo a la falta de
representación de IU no sólo en la ciudad de Madrid, sino también en la
Comunidad de Madrid y en casi todas las comunidades autónomas. Tras las
elecciones autonómicas y municipales, el Comité Federal del PCE del 7
de junio se pronunció en favor de la llamada "desfederación" de IUCM,
en contra de la posición que yo defendí (mi intervención, "
Hacia un nuevo movimiento político y social", se puede leer en
http://www.uv.es/pla/pce/15607int.htm
). No encontrándome en condiciones de defender en el Consejo Político
Federal de IU la posición aprobada por dicho Comité Federal, que
considero que lleva a IU a su hundimiento, y no queriendo confrontarme
con ella en dicho Consejo Político Federal, me vi obligado a presentar
mi dimisión de éste.
Singularmente, en los tres casos la
división se produce en el marco de un debate sobre la unión con otras
fuerzas. En la de 1982, el detonante fue la integración en Euzkadiko
Ezquerra de la organización del PCE en Euskadi. En la de 1997, la
coalición con el PSOE de la organización de IU en Galicia. Y en la de
2015, la negativa de IUCM a integrarse en Ahora Madrid en las
elecciones municipales. Aunque si en los dos primeros casos los
expulsados fueron quienes renunciaban a presentarse con sus propias
siglas en Euskadi y Galicia respectivamente, ahora los "desfederados"
han sido quienes decidieron presentarse con sus propias siglas en
Madrid.
Pero, a juzgar por los resultados de las elecciones
autonómicas del 24M, que llevan camino de prefigurar los de las
próximas elecciones generales, la lección común que debería extraerse
es que la división (del PCE primero, de IU después) lleva al
hundimiento electoral. Actualmente, para más inri, se hace en nombre la
política de
Unidad Popular.
Pero ésta no puede construirse desde la división. La Unidad Popular es
un proceso de largo recorrido que deberá partir de la articulación de
los acuerdos que se han realizado en ámbitos locales, pero que es
difícil que culmine antes de las elecciones generales. Y si IU quiere
jugar un papel relevante en dicho proceso debería priorizar el
mantenimeinto de su propia unidad: ante un Podemos que insiste en que
irá a las elecciones generales con sus
propias siglas y se niega tanto a una coalición con IU como a diluirse
en una plataforma común, no parece que sea inteligente ofrecerles en
bandeja de plata la cabeza de IUCM.