La resonancia de 13C presenta dos inconvenientes a la hora de medir la energía
absorbida y luego emitida en el proceso de relajación de la muestra a
analizar. Por una parte la radiación utilizada en el caso de 13C es de
menor energía (1/4) que en el caso del 1H, ya que la razón giromagnética
del 13C es la cuarta parte que la del 1H. Por otra parte la abundancia isotópica
del 13C es de 1,1% respecto del 12C y por ello el número de núcleos
que absorben energía es menor y mas difícil de medir.
En la antigua técnica de barrido de campo o de frecuencia (CW). Una pequeña
parte de la energía de la radiación aplicada a la muestra se utilizaba
para incrementar la energía de algunos núcleos (núcleos
con spin). Esta absorción de energía (muy pequeña, ondas
de radio) era analizada y directamente registrada. La pequeña magnitud
de la energía absorbida hacía difícil su medida. La acumulación
de señales mediante múltiples barridos permitía mejorar
el resultado, pero el proceso era lento.
Con la aplicación de la transformada de Fourier (FT) la irradiación
de la muestra se lleva a cabo mediante pulsos con una radiación que cubre
todo el rango de frecuencias en que absorbe la muestra. Y todos los núcleos
con spin absorben energía simultáneamente y las radiaciones emitidas
en su relajación son acumuladas en un interferograma conocido como "free
induction decay FID ". La aplicación de la transformada de Fourier
(FT ) convierte las ondas resultado de las relajaciones (dominio de tiempo)
en señales de frecuencia (dominio de frecuencia).