Identificados los factores clave para la supervivencia de los tiburones capturados accidentalmente en el Mediterráneo
Un estudio liderado por la Universitat de València revela que los tiburones de menor tamaño y de aguas profundas son especialmente vulnerables ante la captura accidental. El trabajo, publicado en la revista Conservation Biology, aporta soluciones prácticas para reducir este impacto y promover la sostenibilidad de los mares.
19 de septiembre de 2025
Un equipo del Institut Cavanilles de Biodiversitat i Biologia Evolutiva (ICBiBE) de la Universitat de València ha identificado los principales factores que explican la mortalidad de tiburones capturados de forma accidental en la pesca de arrastre del Mediterráneo occidental. Realizado en colaboración con la asociación Catsharks para el estudio y la conservación de los elasmobranquios y sus ecosistemas, el estudio ha analizado 2.445 ejemplares de dos especies de pequeños tiburones muy comunes en el Mediterráneo: la pintarroja (Scyliorhinus canicula) y el olayo (Galeus melastomus).
Los resultados muestran que la mortalidad aumenta drásticamente cuando la temperatura atmosférica supera los 20 ºC en el caso de la pintarroja –tiburón de aguas someras– y de los 16 ºC en el caso del olayo, una especie de aguas profundas. El riesgo también se incrementa cuando los ejemplares permanecen más de 15 minutos en cubierta, tiempo suficiente para que el agotamiento y la falta de oxígeno comprometan su recuperación. A ello se suma el tamaño corporal, ya que, según el artículo, los ejemplares más pequeños muestran una mayor vulnerabilidad al estrés fisiológico generado durante la captura.
“Apostar por prácticas que hagan compatible la actividad pesquera con la conservación es invertir en mares más resilientes y en un futuro sostenible tanto para la biodiversidad como para quienes dependen del mar.”, explica David Ruiz-García, investigador del ICBiBE y autor principal de este estudio.
“Conocer estos umbrales nos permite proponer medidas específicas para mejorar la supervivencia de los tiburones capturados accidentalmente”, señala David March (ICBiBE), coautor del estudio.
El equipo propone una combinación de medidas preventivas, como la protección de áreas clave para juveniles mediante cierres espacio-temporales adaptados a los periodos de mayor riesgo, la modificación de los artes de pesca para aumentar su selectividad, o determinadas mejoras en el manejo a bordo, como por ejemplo la liberación rápida de los ejemplares o la reducción de su exposición a altas temperaturas.
“Trabajar en conjunto con el sector pesquero es esencial para que estas medidas se integren de forma efectiva y generen beneficios tanto para la conservación de los tiburones como para la actividad pesquera”, añade Claudio Barría, del Departamento de Biología funcional de la Universidad de Oviedo, cofirmante del trabajo.
La investigación, recientemente publicada en la revista Conservation Biology, se desarrolla en el marco del proyecto ECEME con el apoyo de la Fundación Biodiversidad del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITECO).
Referencia:
Ruiz-García D., Barría C., Raga J.A., March D. (2025). Key drivers of at-vessel mortality in demersal sharks. Conservation Biology. https://doi.org/10.1111/cobi.70100