Dos proyectos de la Universitat y del CSIC investigan las aguas residuales como rutas de transmisión del virus de la COVID-19

  • Unidad de Cultura Científica y de la Innovación
  • 29 enero de 2021
 
Pilar Domingo-Calap, investigadora del Instituto de Biología Integrativa de Sistemas.
Pilar Domingo-Calap, investigadora del Instituto de Biología Integrativa de Sistemas.

El Instituto de Biología Integrativa de Sistemas (I2SysBio), centro mixto de la Universitat de València y del CSIC, desarrolla dos proyectos liderados por la bióloga Pilar Domingo-Calap para analizar la presencia del SARS-CoV-2 en ambientes como las aguas residuales y su posible transmisión por este medio. Estas búsquedas de virología ambiental podrán proporcionar una herramienta de vigilancia del virus y, por tanto, un mejor manejo de la pandemia.

Aunque el SARS-CoV-2 y otros coronavirus se transmiten principalmente de manera directa entre individuos, la permanencia del virus en el ambiente tiene el poder de originar nuevos brotes que pueden perjudicar la eficacia de los esfuerzos y las medidas aplicadas. Es por ello que el grupo de Virología Ambiental y Biomédica del I2SysBio está realizando dos investigaciones para comprender mejor este tipo de expansión del virus.

El primero de estos proyectos es Environmental COVID, financiado por el Instituto de Salud Carlos III, y en el que se pretende determinar la presencia del virus en muestras ambientales y su potencial transmisión indirecta. Estudios anteriores han mostrado que virus similares han sido detectados en aguas residuales y que las partículas virales de éstos podían permanecer infectivas tiempo suficiente para constituir un riesgo. La investigadora Pilar Domingo destaca también la función de vigilancia epidemiológica y control que permite el análisis de aguas residuales.

“Gracias a Environmental COVID, hemos estado haciendo vigilancia epidemiológica del SARS-CoV-2 en aguas residuales de Valencia desde el inicio de la pandemia. Esta metodología nos permite saber de manera rápida, sencilla y económica qué está ocurriendo en la población, ya que las aguas residuales contienen virus tanto de pacientes COVID-19, como de presintomáticos e individuos asintomáticos”, declaró Domingo-Calap.

Los datos recabados muestran una correlación con la prevalencia del virus en la población, por lo que se pueden utilizar para monitorear el comportamiento del virus y detectar posibles brotes. Además, la secuenciación de estos datos, explica la investigadora, “nos permitirá conocer las variantes que circulan en Valencia desde el inicio de la pandemia”.

El grupo también lidera FecOrSARS, proyecto con el que se quiere determinar la posible ruta de transmisión fecal y si ésta se puede dar mediante las aguas residuales. Tener información sobre todas las rutas posibles de transmisión es importante, explica Pilar Domingo-Calap, para influir en la toma de decisiones y medidas a aplicar.

Esta investigación puede tener especial interés en áreas poco desarrolladas, sin las condiciones de saneamiento y alcantarillado adecuadas que puedan significar una vía de transmisión, pero requiere un estudio detallado que valide estas rutas de infección. “Aunque el SARS-CoV-2 es mayoritariamente un virus respiratorio, se ha visto que se replica también en la mucosa intestinal. Se estudiará la presencia de partículas infectivas en 100 pacientes tomando muestras de heces longitudinales, lo que permitirá determinar si la ruta fecal-oral es determinante en la transmisión del coronavirus.”

 

Enlaces a las páginas de los proyectos:

FecOrSARS:  https://links.uv.es/BTltu8X

EnviromentalCOVID:  https://links.uv.es/ijk5Gy6