Bonet y Miguel se sirvieron de sus experiencias vitales para explicar que, a través del arte y de la literatura -contadas por figuras femeninas-, fueron capaces de encontrar la calma suficiente para entender que no estaban solas. ‘’Tuve dos abortos espontáneos y sentí que mi cuerpo, del que siempre había escuchado que debía cumplir una misión, no podía cumplirla. Leyendo fue como encontré a muchísimas mujeres a las que también les había pasado lo mismo. Ahí fui consciente de que debía escribir y pintar sobre ello para que esto les sirviera a otras’’, así fue cómo Bonet se lanzó con su último libro, Roedores.

En cuanto a su activismo, ambas lo tienen claro: el arte y la literatura deben comprometerse con el contexto y así se refleja en sus obras. ‘’Lo que no se nombra no existe, ese es el motivo por el que alzo la voz. No quiero que las mujeres, sobre todo las que vienen detrás de mí, tengan que enfrentarse a situaciones a las que yo me he enfrentado’’, indicó Miguel. Esta actitud responde, más que a una valentía individual, a un hartazgo al que han tenido que hacer frente desde que comenzó su carrera. ‘’Crecemos escuchando el término igualdad, pero a lo largo de nuestra vida, por mucho que nos esforcemos, existe algo muy difícil de señalar que te calla todo el tiempo, que te intenta ridiculizar. Es el patriarcado golpeándonos en la cara’’, explicó la pintora. Y este, además, se perpetúa a través de comportamientos sociales, de halagos o de un léxico que, actualmente, sigue excluyendo a la mitad de la población. 

¿Qué es ‘Mujeres de hoy? 
Este nuevo ciclo de Fundación Cañada Blanch contará con una charla al mes donde las invitadas serán mujeres con una carrera propia y destacada en distintas disciplinas. Su principal objetivo, además de promover la igualdad, es visibilizar el trabajo de todas sus participantes y ofrecer una mirada femenina de nuestro panorama actual dada la tendencia que existe a contar el mundo desde un prisma masculino.