ACPV y las universidades quieren hacer público el balance de aquello en que se ha podido avanzar, y remarcar también aquello que se ha iniciado pero que hay que acabar de concretar: la reciprocidad de las emisiones de las radios y televisiones, la competencia lingüística en la función pública, la colaboración cultural entre territorios, y la atención especial a la diversidad del sur.

Las universidades y ACPV han trabajado conjuntamente desde el 2015 con el objetivo de diseñar propuestas de política lingüística y cultural, con aval académico y social, que ayuden a avanzar hacia la plena igualdad lingüística. En este sentido han introducido conceptos como ‘igualdad lingüística’ -que sitúa la política lingüística en términos de ciudadana y derechos civiles y, por lo tanto, apunta a la reivindicación de la no discriminación por razón de lengua y al deber de la administración de garantizar condiciones de igualdad a la ciudadanía que hable cualquiera de las dos lenguas oficiales- y ‘competencia lingüística’ -se trata de garantizar, consecuentemente, que el personal de la administración pública sea competente en las dos lenguas oficiales, con niveles de competencia diferentes según la plaza y nivel. De lo que se trata es de evitar la discriminación y la incompetencia y garantizar la igualdad y la capacidad.

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