LA RUTA DEL CABALLERO En tierras vallisoletanas
Esta ruta castellana transcurre entre los bellos paisajes ecológicos que engloban los valles del Cega y del Eresma, al sur de la ribera del Duero en pleno corazón de las tierras vallisoletanas.
Presenta un terreno fundamentalmente arenoso y en ella se encuentran grandes extensiones de pinares que hallan en este suelo un ingrediente más para su supervivencia y conservación. Entre las variedades más importantes se halla el pino albar o piñonero y el pino resinero más ramificado y que vamos encontrado a medida que avanzamos en altura.
Gracias a esta gran extensión de pinares se ha desarrollado toda una industria relacionada con la explotación de la resina, el piñón y la madera que junto con la explotación del regadío y la ganadería porcina se convierten en los principales recursos económicos de toda la región. Recursos que han evitado, en gran medida, el éxodo masivo de la población hacia otros enclaves industrializados del interior peninsular.
Si partimos de Valladolid en dirección sur llegaremos a la población de Lagunas de Duero que se encuentra a tan sólo 8 kilómetros de la capital provincial.
En esta bella población serrana podemos admirar la belleza de su patrimonio monumental en los edificios religiosos más emblemáticos de la población como son la iglesia de la Asunción y la ermita de la Virgen del Vilar. La primera es una obra de finales del siglo XV y principios del siglo XVI. Tiene planta de salón y presenta unas bellas bóvedas estrelladas. El retablo mayor es una obra que nos recuerda el estilo de Gregorio Fernández.
La segunda se encuentra situada en un alto a las afueras de la población, tiene cabecera con cubiertas de crucería realizadas en el siglo XVI y XVII. Su retablo mayor es barroco y cuenta con dos magníficas tallas de madera en estilo gótico, un Cristo del siglo XIV y un San Bernardino del siglo XV. En las cercanías de la población se encuentran las ruinas del Monasterio Palacio del Abrojo.
Si seguimos nuestro itinerario llegaremos a Boecillo donde podemos admirar sus bodegas y la Iglesia parroquial de San Cristóbal. Cuenta la población con el llamado Casino de Castilla y León, instalado en el antiguo palacio de los condes de Gamazo.
Si atravesamos la villa sin abandonar la orilla del río Cega llegaremos a la población de Mojados en la que sobresale su iglesia mudéjar de Santa María, obra del siglo XIV, que cuenta con un magnífico retablo con pinturas de Alonso de Herrera y esculturas del siglo XVI, además de un Cristo de Juan de Juni.
Por su parte, la iglesia mudéjar de San Juan es del siglo XIII. Su portada en el lado de la epístola se abre con arquivoltas de herradura apuntada. El retablo mayor está dedicado a los Santos Juanes con escenas relativas a sus vidas, obra de Pedro de la Cuadra a principios del siglo XVII. En las inmediaciones se encuentran las ruinas de la ermita de Nuestra Señora de Luguillas, barroca del siglo XVII.
En la población de Alcazarén se encuentran las ruinas de la Iglesia románico-mudéjar de San Pedro. La iglesia de Santiago es también del mismo estilo que la anterior y fue reedificada en el siglo XVIII en estilo barroco. Dispone de tres grandes naves y contiene varios retablos de singular belleza e interés artístico. Su retablo mayor es renacentista y sobresale la talla de Santa Teresa de Jesús del siglo XVIII. Sobresale la capilla cubierta con yeserías policromadas de la época de la reforma.
En la villa de Olmedo se desarrolló la histórica batalla entre Juan II y Alvaro de Luna contra los infantes D. Juan y D. Enrique en 1445. Su nombre va indisolublemente unido a la inolvidable comedia de Lope de Vega “El Caballero de Olmedo”. Ha sido considerada como uno de los centros mudéjares de toda Castilla. Conserva gran parte de su recinto amurallado, siete de sus puertas, dos portillos y numerosas casas blasonadas. Su plaza mayor es porticada y en ella se encuentra el Palacio de la Chancillería que se ha convertido en la actualidad en Oficina de Turismo y Sala de Exposiciones.
Entre sus edificios religiosos más emblemáticos se encuentran las iglesias de Santa María del Castillo; San Andrés; San Miguel; San Juan y la iglesia del antiguo convento de la Merced o de San Pedro.
A cuatro kilómetros de la localidad nos encontramos con los restos del Monasterio de la Mejorada que fue una ermita en el siglo XIV, luego residencia de franciscanos y más tarde de jerónimos. La iglesia del siglo XV conserva una capilla funeraria con cúpula decorada mediante lacerías de yeso.
Al sur de la población se halla la villa romana de Almenara de Adaja en la que se encontraron interesantes ejemplos de mosaicos de temática vegetal y geométrica.
Esta población cuenta con la iglesia románico-mudéjar parroquial reformada en el sigo XVII. Otra de las poblaciones que se encuentran en la ruta del caballero es Pedrajas de San Esteban en la que sobresale su iglesia parroquial de San Esteban y la ermita de Sacedón.
En la población de Iscar podemos admirar su imponente castillo que se alza imponente dominando la villa. Este castillo conserva restos de sus torreones cilíndricos, la torre del homenaje y varios de sus escudos. Entre sus edificios religiosos más emblemáticos se encuentran la iglesia de San Miguel Arcángel que conserva el primitivo ábside románico y la iglesia románico.mudéjar de Santa María.
Muy cerca de aquí se encuentra la población de Cogeces de Iscar en la que podemos admirar el trazado medieval urbano y la iglesia parroquial de San Martín. En San Miguel de Arroyo existe una bella iglesia dedicada a San Miguel del Arroyo y realizada en el siglo XVI que guarda una pila bautismal gótica.
En la villa del Portillo se alza imponente el castillo que domina la población. Fue construido en el siglo XV a instancias de la familia Alonso Pimentel, condes de Benavente. Es de planta cuadrada con barbacana y torres circulares en sus esquinas. En él estuvo encarcelado el célebre D. Alvaro de Luna antes de ser ejecutado en Valladolid. La población cuenta con interesantes iglesias como la renacentista de Santa María del siglo XVI de tres naves con retablo mayor salomónico y la mudéjar del siglo XIII de San Juan, convertida hoy en círculo recreativo.
Para acabar nuestro recorrido llegaremos a Aldea de San Miguel que guarda una extraordinaria cruz de piedra del siglo XVI y en la que podemos admirar la iglesia románico-mudéjar de San Miguel.
Entre los festejos más destacados sobresalen los carnavales de Iscar con la celebración del llamado Domingo de Piñata que comienza el sábado con bailes y danzas típicas. En Agosto sobresalen los festejos de Iscar y Pedrajas con sus encierros y capeas.
Destacan en septiembre las numerosas romerías y fiestas en torno a la Virgen como la de Laguna de Duero, Boecillo, Portillo, etc.
Las fiestas patronales de Olmedo son a finales de septiembre y se celebran en honor de San Miguel y San Jerónimo. En Octubre Olmedo celebra sus fiestas en honor de la patrona la Virgen de la Soterraña.
En cuanto a la gastronomía conviene degustar las tortillas de Boecillo, el cordero asado o las chuletillas de lechazo regadas con un buen vino del Duero y por lo que respecta a los postres no podemos dejar de degustar las exquisitas “zapatillas” o mantecados del Portillo y el turrón de miel de Montemayor.
* El presente trabajo forma parte de una serie de reportajes realizados para prensa con destino a SUPLEMENTOS DE VIAJEROS que editaron un gran número de medios prensa regionales de este país; entre otros ALERTA DE CANTABRIA, LANZA DE CIUDAD REAL, FAROS DE CARTAGENA, CEUTA Y MELILLA, PUBLICACIONES DEL SUR, DIARIO DE JEREZ, DIARIO DE CÁDIZ, FARO DE VIGO, GUADALAJARA 2000, etc |