Cómo probar que 641 divide a 232+1

Este argumento lo he sacado del interesantísimo libro de H.M. Edwards "Fermat's Last Theorem". El lenguaje que uso no es, evidentemente, el que usaba Euler, pero el razonamiento es propio de su época.

Buscamos un primo p que divida a 232+1. Consideramos el cuerpo Z/pZ, es decir, el anillo cociente que se obtiene del anillo Z de los números enteros mediante la relación de equivalencia dada por mRn si y sólo si p  |  m-n (usamos | para indicar "divide a"). Es conocido que tiene p elementos y que se convierte en un cuerpo con las operaciones definidas de forma natural: [m]+[n] = [m+n] y [m][n] = [mn].  Tenemos que [232+1] = [0], o lo que es lo mismo, [2]32 = [-1]. Elevando al cuadrado [2]64 = [1].

Cuando a un cuerpo le quitamos el 0 obtenemos un grupo (con el producto). En nuestro caso obtenemos un grupo finito de p-1 elementos. Sea d el orden de [2] en este grupo multiplicativo, es decir, el menor natural no nulo que hace [2]d = [1]. Dividimos 64 = dc+r, con r< d, y vemos que [1] = [2]64 = [2]dc[2]r = [2]r pero, por la minimalidad de d, ha de ser r = 0, o sea, d | 64 (esto es un hecho elemental de la teoría de grupos). Ahora bien, puesto que [2]32 = [-1] (distinto de [1]) no puede ser que d | 32 (si fuera 32 = dc, entonces [2]32 = [1]c = [1]). Concluimos, pues, que d = 64.

Por otro lado, también es conocido que el orden de un elemento en un grupo finito divide al orden (el número de elementos) del grupo. En este caso 64 | p-1. En otras palabras, el primo buscado ha de ser de la forma p = 64k+1. Los primeros términos de esta sucesión son

65129,  193,  257321385,  449,  513,  577,  641, ...

Los números que están en rojo no son primos (es inmediato que son divisibles entre 3 o 5). El 257 se descarta fácilmente, pues en Z/257Z se cumple [0] = [257] = [2]8+[1], luego (siempre en este cuerpo) [232]  = [28]4 = [-1]4 =[1], luego [232+1] = [2], que no es la clase del 0, luego 257 no divide a 232+1.

Esto hace que 641 sea el cuarto candidato a divisor de 232+1. Descartar a los anteriores por cálculo directo ya no es una tarea excesiva, pero lo cierto es que disponemos de más armas para evitar el cuerpo a cuerpo. En efecto, podemos observar que el primo que buscamos, p = 64k+1, cumple en particular p = 8n+1, y Euler sabía que la clase [2] es un cuadrado en Z/pZ si y sólo si p es de la forma p = 8n+1 o p = 8n-1. En nuestro caso tenemos, pues que [2] = [x]2, para cierto entero x (las clases tomadas en Z/pZ). Así pues, [2](p-1)/2 = [x]p-1 = 1, usando una vez más que el orden de una clase [x] ha de dividir al orden del grupo p-1. Esto hace que en realidad el orden de [2] no sólo ha de dividir a p-1, como habíamos usado antes, sino de hecho a (p-1)/2, o sea, 64  | (p-1)/2 y, en consecuencia, p = 128 n + 1.

Usando esta expresión la lista se reduce a la mitad:

129,   257385,   513,  641, ...

con lo que 641 es el primer candidato. Para comprobar que efectivamente divide a 232+1 tampoco se echa de menos la calculadora. Hay que calcular [2]32 en el cuerpo Z/641Z y comprobar que da [-1], pues entonces [232+1] = [0]. Para ello vamos calculando las potencias de 2 teniendo en cuenta que en cualquier momento podemos restar 641 sin que ello afecte a la clase. Los cálculos que siguen se pueden hacer a mano sin esfuerzo:

2
4
8
16
32
64
128
256
-129
-258
125
250
-141
-282
77
154
308
-25
-50
-100
-200
-400
-159
-318
5
10
20
40
80
160
320
-1








Esto prueba que 641 divide a 232+1.

Los primos de la forma 2k+1 se llaman "primos de Fermat" y sólo se conocen cinco, para k = 1, 2, 4, 8, 16. No se sabe si hay más, pero si los hay tienen que ser enormes. Su interés reside en que un polígono regular de n lados es constructible con regla y compás si y sólo si n es producto de una potencia de 2 y de primos de Fermat distintos entre sí. Gauss obtuvo la construcción explícita para p = 17. No recuerdo en qué libro leí que un tal profesor Hermes dedicó buena parte de su vida a obtener la construcción con regla y compás del polígono regular de 65.537 lados. Contaba el libro que una inundación estuvo a punto de destruir su trabajo, pero afortunadamente salió indemne.