RESUMEN
La continuidad es importante para seguir la pista de las líneas evolutivas a lo largo del tiempo geológico. Los Mysticeti y Odontoceti modernos remontan su ascedencia hasta los Archaeoceti del Eoceno y, más atrás, a los Condilarthra mesoniquios. Dentro de este continuo compartido, el origen de los Archaeoceti y el origen de los Cetacea viene marcado por la primera indicación de una transición evolutiva gradual desde las características de vida terrestre a las características de vida acuática de los cetáceos posteriores. Los Archaeocetes son conocidos gracias a muchas localidades en las que afloran materiales marinos marginales y someros del Eoceno. Se extienden durante un intervalo de 13,5 Ma, desde el Ypresiense superior (Eoceno inferior tardío; ca. 49,5 Ma) hasta el Priaboniense (Eoceno superior; ca. 36 Ma) y están ampliamente distribuidos en América del Norte (18 localidades), Europa (5 localidades), Asia (8 localidades), África (8 localidades), Australia (Nueva Zelanda, 2 localidades) y la Antártida (una localidad). Estas 42 localidades pueden considerarse como registros estadísticamente independientes.
Con esta información y un modelo de distribución de muestreos de fósiles potenciales, podemos comparar las distintas edades asignadas al origen de los arqueocetos calculando la verosimilitud relativa de cada una de ellas. El modelo de distribución de muestras refleja los cambios de las áreas de afloramiento de las rocas sedimentarias a lo largo del tiempo geológico y los cambios del número de arqueocetos durante su periodo de diversificación. La edad de máxima verosimilitud para el origen de los arqueocetos viene dada por la edad del fósil más antiguo, que define el comienzo del rango temporal y no requiere hipótesis sobre su extensión. Las relaciones de verosimilitud 0,5 y 0,05 tienen probabilidades asociadas menores o iguales que 0,5 y 0,05, respectivamente, representando a los límites de confianza iguales o mayores que el 50% y el 95%. Un valor crítico de la verosimilitud, l=0,05, define la máxima extensión del rango que, razonablemente, podemos esperar encontrar. A partir de esta estimación, el origen de los Archeoceti habría tenido lugar hace 51,6 Ma, o poco después, es decir, dentro del Eoceno inferior.
Cincuenta y seis registros independientes de Mesonychidae y Hapalodectidae de los tres continentes septentrionales se extienden desde el Torrejoniense (Paleoceno medio; ca. 63 Ma) al Rupeliense (Oligoceno inferior; ca. 33 Ma). Estimamos que el origen de los condilartros mesoniquios tendría lugar hace 66,7 Ma o poco después (prácticamente en el límite Cretácico-Paleoceno). Los Artiodactyla, el grupo hermano viviente de las ballenas, tiene un registro fósil que se extiende hasta el comienzo del Eoceno, con antecesores arctociónidos que se extienden hasta finales del Cretácico. El registro fósil, como ahora lo conocemos, indica una divergencia evolutiva de los Mesonychia+Cetacea desde los Arctocyonia+Arctiodactyla en el Paleoceno inferior o, razonablemente, en el Cretácico terminal.
1 Philip D. Gingerich, Department of Geological Sciences and Museum of Paleontology, The University of Michigan, Ann Arbor, Michigan 48109-1079, U.S.A.
2 Mark D. Uhen, Cranbrook Institute of Science, Bloomfield Hills, Michigan 48303-0801, U.S.A.
Palabras clave: Distribución estratigráfica, Cetacea, Mesonychia, Artiodactyla, Eoceno.
Translation: Prof. Marcos A. Lamolda, Facultad de Ciencias-UPV, Campus de Lejona, E-Lejona 48940