OTRA
CONSTITUCIÓN EUROPEA ES POSIBLE
Rafael Pla López
(intervención para el Comité Federal del PCE del
24-4-04)
Hace 3 meses aprobamos una primera resolución
sobre el
anteproyecto
de Constitución Europea, expresando "nuestra
postura contraria con la mayor parte del contenido de dicho
borrador". Podríamos destacar, en línea con lo
allí aprobado, algunos aspectos:
1. Se continúa privando al Parlamento Europeo
de una capacidad legislativa plena y exclusiva: debe colegislar con el
Consejo de Ministros (artículos 19 y 22) y sólo a
propuesta de la Comisión (artículo 25) o de un grupo de
Estados miembros (artículo 33).
2. Los Bancos Centrales continúan al margen
de cualquier control democrático (artículos 29 y III-80).
3. Se requiere a los Estados mejorar sus capacidades
militares, se preven misiones militares fuera de la Unión sin
requerir la autorización de la ONU y se
establece por el contrario la cooperación con la OTAN
(artículo 40).
4. En vez de requerir a los Estados la
aplicación de la
Carta de Derechos, se restringe ésta
a las competencias de la Unión
(artículo II-51).
5. Se excluye de las competencias compartidas en
política social las remuneraciones, el
derecho de asociación y sindicación, el derecho de
huelga y el derecho de cierre patronal (artículo III-104).
Recordemos también que propusimos "proceder
a la
apertura de un período constituyente que, coincidiendo con la
nueva
legislatura, posibilite la constitución de un espacio
político de
democracia avanzada, en el que las competencias constituyentes residan
de modo principal en el Parlamento europeo". Pero actualmente,
después del cambio de gobierno en España, es previsible
por el contrario
un intento de acelerar la aprobación de tal Constitución
y el posible Referéndum, coincidiendo con las Elecciones
Europeas. Ello exige una actuación y posicionamiento sin
dilaciones para hacer frente a dicho intento, que cerraría un
proceso constituyente desarrollado a espaldas de la población.
Por lo que se refiere al procedimiento,
es necesario rechazar el anteproyecto
para hacer posible la apertura de un
auténtico proceso constituyente vehiculado a
través del Parlamento Europeo. Por lo que se refiere al contenido, hay que decir NO a cualquier proyecto de
Constitución de las características antes
señaladas afirmando con rotundidad que otra Constitución Europea es posible
desde el ejercicio de la soberanía democrática.
Estas serán cuestiones centrales en las próximas elecciones al Parlamento
europeo, que por tanto han de condicionar nuestra
política de alianzas en ellas, las eventuales coaliciones y la
elaboración de las candidaturas: sería inaceptable
invertir el orden, de modo que una coalición o una candidatura
condicionaran la política a defender.
Por otra parte, si prospera el proyecto de Izquierda Europea (que
debería configurarse como un movimiento político y social
europeo, más que estrictamente como un "Partido"), es claro que
ésta debería ser la denominación principal de la
candidatura. Otra cosa carecería de sentido. Menos sentido
tendría aún una coalición cuyos componentes fueran
a distintos grupos parlamentarios europeos. O que incluso pretendiera
presentarse como una "Izquierda Verde", apuntando tardíamente al
grupo de los Verdes Europeos, que hace tiempo dejó de ser una
opción antisistema.
La ambigüedad sería, además, electoralmente suicida: en unas
elecciones de ámbito europeo, el principal referente social para
un voto alternativo es el movimiento
contra la globalización neoliberal, que tiene actualmente
en la oposición a un anteproyecto neoliberal y militarista de
Constitución una de sus señas de identidad. Evitar un
posicionamiento claro, subordinándose al "pensamiento
único" protoconstitucional, no daría una
motivación para votar a quienes quieran salirse de la
órbita del bipartidismo, sin por ello atraer votos de quienes se
mantengan dentro de dicha órbita.
En esa línea, y como un primer paso, deberíamos impulsar
la realización de manifestaciones el 9 de mayo siguiendo la convocatoria
desde el Foro Social Europeo, participando en ellas bajo el lema "Otra
Constitución Europea es posible", y proponiendo también
dicho lema para nuestra candidatura en las Elecciones Europeas.
En otro orden de cosas, quería proponer al Comité Federal
la aprobación de dos resoluciones:
1. Apoyando la campaña contra el pago por préstamo de libros
en Bibliotecas inducido por la Comisión Europea.
2. Adhiriéndonos al homenaje previsto para
mañana 25 de abril en Sant Adrià de Besós al
camarada recientemente fallecido Josep
Miquel Céspedes, con quien cuando coordinaba el
área de formación del PCC colaboramos estrechamente desde
las áreas de formación del PCPV, del PCIB y lo que
posteriormente sería el PSUC viu.