INTERVENCIÓN
EN EL COMITÉ FEDERAL DEL PCE DEL 2 DE FEBRERO DE 2008
Rafael Pla López
Una propuesta de adición y dos matizaciones a un Informe
con el que estoy globalmente de acuerdo.
En el marco de la actual situación política preelectoral
y desde el apoyo inequívoco a
las candidaturas de IU, hay que denunciar que las torturas que se han hecho patentes y
la amenaza de nuevas ilegalizaciones
en Euskadi son tanto una agresión a las libertades
democráticas como una forma de realimentar el terrorismo, que
más allá de oportunismos electoralistas sólo puede
combatirse adecuadamente desde la profundización de la
democracia.(1)
Al principio del Informe, habría que matizar que han seguido
habiendo movilizaciones en solidaridad
con el pueblo palestino,
las últimas la pasada semana, aunque su magnitud esté muy
lejos de las que hubieron contra la guerra de Irak bajo el PP, y en
ellas también han participado artistas e intelectuales, aunque
se note la ausencia de algunos que fueron una referencia contra dicha
guerra y a quienes ahora parece preocupar más la defensa del
canon. Pero de ello el Partido ha de asumir su propia responsabilidad
por haber dejado de ser un referente y de articular a las fuerzas de la
cultura como hicimos contra el franquismo. Superar este déficit
es esencial para la lucha ideológica.
En ese sentido, y en relación al Manifiesto-Programa
al que se refiere el final del Informe, hay que articular las
reivindicaciones inmediatas y nuestros objetivos comunistas (2), destacando
cómo luchar por el comunismo aquí y ahora, de lo que
pondré 2 ejemplos:
La lucha contra el canon digital
debe enmarcarse en la lucha por la abolición de la llamada
"Propiedad intelectual" y por la libre circulación de la
información, cuya supeditación al mercado es
utópica en la era de Internet.
Y la defensa de servicios
públicos universales y gratuitos
en Educación o Sanidad es una concreción del principio
comunista de que cada cuál reciba según sus necesidades.
Es en ese sentido que desde el País Valenciano hablamos de un
Manifiesto-Programa de transición
al comunismo.
Aportación
para el documento para la Conferencia del PCE sobre la Mujer:
12-8: Ganar definitivamente la batalla contra la regulación de
la prostitución,
impulsando medidas para su erradicación.
Hay que exigir y trabajar por una política social, cultural y
educativa dirigida al conjunto de la sociedad que fomente una
sexualidad libre y busque terminar con el recurso a la
prostitución, así como de formación y
reinserción laboral de las mujeres que ejercen la
prostitución y contra la política de
criminalización de la pobreza que el sistema lleva a cabo.
Por ello, la vía penal no debe utilizarse contra las mujeres
llevadas a ejercer la prostitución, sino contra el proxenetismo.
Hay que penalizar también a quienes pretenden conseguir sexo a
cambio de dinero, siguiendo el modelo sueco.
NOTA: esta aportación fue esencialmente incorporada, con la
siguiente redacción:
"Ganar
definitivamente la batalla contra la regulación de la
prostitución, impulsando medidas para su erradicación.
Hay
que exigir y trabajar por una política social, cultural y
educativa dirigida al conjunto de la sociedad que fomente una
sexualidad libre, así como la formación y
reinserción
laboral de las mujeres prostituidas y contra la política de
criminalización de la pobreza que el sistema lleva a cabo.
La
vía penal no es la más adecuada, necesitamos leyes
dirigidas contra el proxenetismo y que penalicen al prostituidor,
siguiendo el modelo sueco."
Algunas matizaciones necesarias a las
correcciones introducidas posteriormente en el Informe:
- La formulación de "profundizar nuestra acción
política en defensa del
federalismo republicano, por el fin del terrorismo y la violencia,
que conduzca a una solución definitiva del llamado conflicto
vasco, que permita la defensa de cualquier propuesta
democrática,
sin ilegalizaciones ni leyes de excepción contra ninguna
opinión ni organización" es confusa, en tanto que
puede interpretarse como que "el fin
del terrorismo y la violencia" fuera una precondición
para permitir la defensa de cualquier propuesta democrática
terminando con las ilegalizaciones, cuando por el contrario esto
último sí es una precondición para poder combatir
adecuadamente el terrorismo. Y en todo caso, la exigencia a ETA del fin
de la violencia y al Estado del respeto a las libertades
democráticas deben ser incondicionales.
- La formulación de "analizar la realidad,
organizar las ideas y contribuir a los cambios, articulando las
reivindicaciones inmediatas con los objetivos que los comunistas
perseguimos" no deja claro qué es lo que
hay que articular, dado que las mismas reivindaciones inmediatas
también son "objetivos que los
comunistas perseguimos", y de lo que se trata es de articularlas
con los objetivos propiamente comunistas, referidos a una humanidad sin
clases y sin Estados, organizada sobre la base de la abolición
de la propiedad privada y del principio "de cada cuál
según su capacidad, a cada cuál según sus
necesidades".