CUBA: A CADA CUÁL SEGÚN SU
TRABAJO Y SUS NECESIDADES
Rafael Pla López
gestor de la RedRoja y secretario de Formación y Debate del
Partido Comunista del País Valenciano
El artículo de Bárbara Areal (
http://argentina.elmilitante.org/content/view/3550/42/
) pasa por alto
algunas cuestiones, y en particular que el principio "a cada
cuál según
su trabajo" fue defendido primero por Marx y después por Lenin
para la
fase "socialista" de transición al comunismo.
Es cierto que tal principio conlleva elementos (de toma y daca) propios
de la llamada "economía de mercado", pero precisamente Marx y
Lenin
explican que dichos rasgos de la economía de mercado son
inevitables
(por ejemplo, con una retribución monetaria por el trabajo
realizado)
durante el período de transición, hasta que el desarrollo
de las
fuerzas productivas permite su superación con el plena acceso al
comunismo.
Ciertamente, es discutible la periodización excesivamente
rígida en
fases ("socialista" y "comunista") que fue utilizada por la burocracia
en los países colectivistas (llamémoslos así) para
"congelar" una
situación que Marx y Lenin enfatizaban como transitoria,
desvaneciéndose así la transición efectiva hacia
el comunismo.
Y precisamente uno de los enfoques que puede ser más
válido del llamado
"Socialismo del siglo XXI" (como sabemos, hay otros que difuminan su
contenido efectivamente socialista) es el que lo enfatiza como un
proceso de transición al comunismo, en vez de como una "fase"
virtualmente estable. En ese sentido, el principio comunista "a cada
cuál según sus necesidades" debe aplicarse
también, aunque sea
parcialmente, durante el proceso "socialista" de transición, y
el
problema es cómo articularlo con el principio de "a cada
cuál según su
trabajo".
Posiblemente una buena forma de plantear dicha articulación es
conjugar
la desmercantilización de determinados servicios públicos
"básicos"
(educación, sanidad... que corresponden en buena medida con lo
que en
Cuba se llaman las "conquistas sociales" de la revolución), que
siendo
universales y gratuitos se regirían por el principio de "a cada
cuál
según sus necesidades" con la existencia de una
retribución monetaria
por el trabajo (un "salario"), que en cuanto tal debería regirse
por el
principio de "a cada cuál según su trabajo" y
permitiría acceder a
bienes y servicios no "básicos". Las propuestas acordadas por el
Parlamento Cubano y expuestas por Raúl Castro parece que van, en
alguna
medida, por ahí.
Naturalmente, a través del proceso socialista de
transición al
comunismo deberán irse ampliando, al paso del desarrollo de las
fuerzas
productivas (que por otra parte deberá ser ecológicamente
sostenible),
los servicios "básicos" regidos por el principio de "a cada
cuál según
sus necesidades", hasta que éste llegue a regir el conjunto de
la vida
social y económica.