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Instituto Confucio
VOLUMEN 15 | Nº6 NOVIEMBRE 2012
COMUNIDAD GLOBAL
al capricho de un momento, pues exige
que exista el amor entre ambos, lo que
significa que durante su vida solo pue-
den gozar de la condición de
āxiào
una
sola vez. Únicamente cuando ambos
no se llevan bien, se puede romper la
relación y se puede buscar otra pareja.
Si el “marido” mantiene una relación
en privado con otra mujer, conocida
como
āxiào
temporal, se considera un
comportamiento inmoral, aunque no
es lo más común. Si la mujer descubre
que su pareja tiene un
āxiào
temporal,
le regala, a modo de advertencia o de
ruptura, una bolsa de lino rellena de
carbón, chile picante y plumas de gallo.
Solamente cuando el arrepentido le
pide perdón a su pareja, pueden recon-
ciliarse.
A los mosuo se les permite tener una
relación de “visita matrimonial” cuando
ya han cumplido los trece años, pues se
les considera ya adultos, aunque la gran
mayoría no lo hace hasta haber cumpli-
do los dieciséis. Eso sí, está prohibido
un
āxiào
entre familiares cercanos. Para
que un
āxiào
llegue a formarse lo pri-
mordial son los sentimientos de la pare-
ja y, en especial, los de ella. El dinero y
la posición social no influyen a la hora
de conquistar el corazón de una joven.
Ellas, movidas por el amor, suelen elegir
a los chicos guapos, altos e inteligentes,
y su familia no influye en la decisión
final. Al no haber un matrimonio legal
oficial y al no unirse ambas familias,
nunca hay disputas sobre las propieda-
des ni de herencias.
Los chicos que deseen concertar un
“
matrimonio de a pie” deben superar
tres barreras: primero, tienen que subir
un muro; segundo, hacer callar al pe-
rro; y tercero, trepar al edificio donde
vive su chica sola. Después ya puede
abrir la puerta y pasar la noche con
ella. Es costumbre que la primera vez
que visita a la joven los parientes no se
enteren, así que los mozos tienen que
preparar comida para los perros y evitar
así que ladren. Las trancas con las que
se cierran las puertas de los edificios
son largas y gruesas, así que los preten-
dientes tienen que usar un sable para
abrirlas. Después de encontrar a su
enamorada, el chico cuelga su sombre-
ro encima de la puerta para que nadie
les moleste. Así pues los “tres tesoros”
del “matrimonio a pie” serían: el tocino
(
comida preparada) para los perros, el
sable para abrir la puerta y el sombrero
que indica “no molestar”. Podría ser
que en una misma familia hubiera más
de una chica esperando a que su amado
supere las tres pruebas.
En la actualidad, la mayoría de los
jóvenes mosuo todavía eligen y practi-
can estos tipos de “matrimonio”, mien-
tras que solo unos pocos eligen la forma
moderna.
En 1992, el lago Lugu, para los
mosuo “la Tierra de las Flores de Melo-
cotonero”
1
o “El reino de las mujeres”,
levantó suavemente su misterioso velo
y se abrió públicamente a los visitan-
tes chinos y extranjeros. Este mundo
matriarcal, atrae a personas de todo el
planeta gracias a su hermoso paisaje y a
su única cultura, digna de estudio.
n
1.
Se refiere a un lugar de paz imaginario, un paraíso apartado e idílico, un oasis de paz.