Instituto Confucio
VOLUMEN 14 | Nº5 SEPTIEMBRE 2012
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LENGUA CHINA
elaborar el idioma es diferente a la
nuestra, y a la vez guarda relación con
aspectos culturales”.
En su día a día, Álvaro se muestra
encantado con su estancia en Shanghái
de la que asegura “no dista mucho de
cómo se vive en Occidente, aunque ves
claros aspectos diferenciados en cuanto
a trabajo, relaciones personales, etc.” y
cree que el chino, al saber mucho in-
glés, parte con ventaja respecto a nues-
tro idioma. “La comida y el fútbol es lo
más famoso por aquí como imagen de
España”, bromea.
Virginia Delgado tiene 32 años y
es licenciada en Filología Española.
Apenas lleva dos meses estudiándolo.
“
Me gusta aprender idiomas y quería
empezar uno completamente diferente
a lo que había aprendido antes”. Está
convencida de que es este uno de los
idiomas del futuro “y también del pre-
sente”, matiza, “el desarrollo que está
viviendo China en todos los aspectos
durante estos últimos años nos hace
prestarle más atención”. Por ahora, es
para ella una afición más, le encanta se-
guir aprendiendo y le encantaría “tener
la oportunidad de trabajar con chinos
en España o directamente vivir allí, me
sentiría recompensada por el esfuerzo”.
Ella piensa que para los chinos, la
gramática española es lo más compli-
cado y para los españoles los tonos,
“
identificarlos, recordar dónde van
en cada palabra y, sobre todo, usarlos
correctamente al hablar”. Por ahora ha
aprendido temas como “los saludos, las
supersticiones relacionadas con los nú-
meros y la historia que va a ligada a al-
gunos ideogramas”, pero espera pronto
empezar a leer algún libro para afianzar
sus conocimientos “y viajar a China me
encantaría, vaya que sí, he descubierto
gracias al idioma una cultura que me
encanta. Es gente muy amable, traba-
jadora y que simpatiza fácilmente, al
menos con los españoles”. Confiesa
que nos perciben como gente “amable
y divertida, tienen buena imagen de
nosotros” y lanza un mensaje para to-
dos aquellos que quieran emprender el
reto de aprender un nuevo idioma, “el
chino es un lenguaje muy bonito, no
es tan complicado como parece y hay
muchas escuelas y universidades con
un personal y una metodología idónea
para aprender chino de la mejor manera
posible”. En definitiva, la aventura em-
pieza cuando el alumno así lo desea.