continuación: viene de la pág 2

La Historia Augusta descubre una actitud filopagana muy prudente que busca sólo conseguir tolerancia para los seguidores de la religio patrum (CHASTAGNOL, 1964, 64). En ello concuerda con las ideas preconizadas en 382 por Quinto Aurelio Símaco con motivo de la disputa alusiva a la retirada de la Estatua de la Victoria de la sala de sesiones del Senado Romano (WALLACE-HADRILL, 1966, 17-18). ¿Quién fue su autor? Sospecho que fue Cayo Rufio Antonio Agripnio Volusiano. Un tío paterno suyo de nombre Publilio Cayo Cecina Albino era amigo de Símaco. Nuestro personaje nace hacia 385. Su madre le hace cristiano. Luego abandona la fe de la que se declara enemigo público con sus opiniones pero vuelve al regazo de la Iglesia en sus años postreros. Es muy interesante que Cayo Rufio Antonio Agripnio Volusiano inaugure su cursus honorum con un proconsulado en África. Ello se ajustaría con los vínculos norteafricanos que el inolvidable Sir Ronald Syme apreciaba en el autor de la Historia Augusta (SYME, 1968, 200 – 202).

BIBLIOGRAFÍA:

•  CHASTAGNOL 1964 CHASTAGNOL, A.: Le problème de l'Histoire Auguste : état de la question en Historia-Augusta-Colloquium Bonn 1963 , Rudolf Habelt Verlag, Bonn, págs. 43 – 71.

•  PICÓN Y CASCÓN 1989 PICÓN, V. Y CASCÓN, A (editores): Historia Augusta. Ediciones Akal. Madrid.

•  RICHARDSON 1998 RICHARDSON, J.S.: Hispania y los romanos. Traducción castellana de T. DE LOZOYA. Crítica/Grijalbo/Mondadori. Barcelona .

•  SYME 1968 SYME, R.: Ammianus and the Historia Augusta. Clarendon Press. Oxford

•  WALLACE-HADRILL 1966 WALLACE-HADRILL, J.M.: El oeste bárbaro 400 – 1000 , traducción española de la 2ª edición inglesa por C. MAGRINI, 2ª edición española, Eudeba, Buenos Aires.