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Alemania seguía inaugurando campos de concentración. El 1 de agosto de 1937 empezó a funcionar el de Buchenwald, bajo el mando del coronel Karl-Otto Koch, que no tardaría en hacerse conocer por toda clase de excesos. Incluso su esposa Ilse era conocida como La bruja de Buchenwald (o La bruja del bosque de las hayas), pues se encargaba personalmente de aplicar técnicas de castigo y tortura. En la puerta principal del campo estaba grabada la inscripción "A cada uno lo suyo".
El 3 de agosto la Junta Federal de
      Conciliación y Arbitraje presentó su dictamen sobre el conflicto
      entre las petroleras mexicanas y los sindicatos. Los empresarios
      se negaron a acatarlo y el presidente Lázaro Cárdenas convocó a
      ambas partes a una reunión presidida por él mismo.
    
El 4 de agosto se publicaron los estatutos del partido único franquista, en los que se establecía que el Caudillo sólo sería responsable "ante Dios y ante la Historia".
El 6 de agosto el general Mariano
      Gamir fue nombrado presidente de la Junta Delegada del
        Gobierno en el Norte, que debía coordinar las acciones
      bélicas de vascos, cántabros y asturianos, pero nunca pudo
      lograrse que éstos actuaran coordinadamente.
    
El 7 de agosto aviones soviéticos
      bombardearon el aeródromo de Palma de Mallorca y mataron a un
      soldado. Ese día el gobierno republicano legalizó el culto
      religioso en privado. No obstante, continuó prohibido en público.
    
El 8 de agosto los japoneses ocuparon
      
      Běipíng.
    
El ejército japonés que ocupaba la Mongolia Interior, bajo el
      mando del general  Hideki
          Tōjō, y en colaboración con las fuerzas del
      príncipe Demchugdongrub (que unos meses antes había proclamado la
      independencia de la Mongolia Interior), atacó a un ejército chino
      en Nankou. 
    
El 9 de agosto el gobierno republicano
      organizó el Servicio de Información Militar, con la misión
      de controlar a los anarquistas, a los colaboradores con el enemigo
      y a otros "desestabilizadores", en definitiva, una policía
      política. En parte ocupó el vacío que habían dejado las disueltas
      patrullas de control anarquistas.
    
Ese día se estrenó Almas en el mar, dirigida por Henry
      Hathaway, la única película que protagonizó Gary Cooper ese año y
      que fue un rotundo fracaso de crítica y taquilla.
    
El lugarteniente Isao Ōyama de la marina japonesa
      se dirigía en coche a toda velocidad al aeropuerto de Shanghái
      cuando un guardia chino lo obligó a detenerse. El lugarteniente
      intentó continuar su camino y, cuando el guardia trató de
      impedirlo, sacó una pistola y lo mató. Inmediatamente otros
      guardias lo mataron a él. El 10 de agosto,
      al tiempo que la diplomacia japonesa protestaba enérgicamente por
      el incidente, empezaron a llegar tropas a la ciudad, tanto chinas
      como japonesas. En Shanghái había muchos europeos, y las grandes
      potencias no querían disturbios en la zona que perjudicaran sus
      actividades económicas, así que trataron de mediar entre chinos y
      japoneses para evitar que la guerra que se estaba librando ya en
      el norte se extendiera al centro de China.
    
Franco trasladó su cuartel general de Salamanca a Burgos.
    
El ejército disolvió el Consejo Regional de Defensa de Aragón, la
      última organización anarquista de relevancia en la España
      republicana. Su presidente, Joaquín Ascaso y otras autoridades
      anarquistas (valga la contradicción) fueron arrestadas. Varios
      centenares de anarquistas más fueron detenidos bajo acusaciones
      diversas. Ascaso permaneció unos días en la cárcel y luego marchó
      a Francia, desde donde marchó a Uruguay, para establecerse
      finalmente en Venezuela. En sustitución del consejo, el gobierno
      nombró gobernador general de Aragón a José Ignacio Mantecón.
      Esto suponía el fin de la llamada Revolución Social Española,
      que intentó imponer el anarquismo en diversas zonas de la España
      republicana.
    
La revuelta anarquista en Cataluña había minado profundamente la
      moral de los combatientes republicanos. Para tratar de elevarla de
      nuevo, Dolores Ibárruri, recién llegada de Madrid, dio un discurso
      en Valencia en el que, entre otras cosas, previno a sus
      "camaradas" contra el trotstkismo con un estilo que en poco se
      diferenciaba del que Hitler empleaba unos años atrás al prevenir a
      sus compatriotas contra las conjuras de los judíos (hasta usó la
      imagen de la puñalada por la espalda que tan bien había cuajado
      entre los nazis):
    
Cuando señalamos la necesidad de luchar contra el trotskismo, nos encontramos con un extraño fenómeno, pues se alzan voces en su defensa en las filas de ciertas organizaciones y en ciertos círculos de ciertos partidos. Esas voces pertenecen a la gente saturada de esta ideología contrarrevolucionaria. Los trotskistas se han transformado hace tiempo en agentes del fascismo, en agentes de la Gestapo alemana. Pudimos verlo en la práctica durante el golpe de mayo en Cataluña; lo vimos claramente en las revueltas en otras localidades. Y todo el mundo lo verá cuando empiecen los juicios contra los dirigentes del POUM que fueron capturados en sus actividades de espionaje. Y veremos la mano del fascismo en todas sus acciones, dirigidas a desmoralizar nuestra retaguardia, a minar la autoridad de la república, Por ello es esencial destruir el trotskismo con mano firme, pues el trotskismo ya no es una tendencia política en la clase trabajadora, sino un arma de la contrarrevolución. El trotskismo debe ser erradicado de las filas proletarias de nuestro partido como se erradican las plantas venenosas. Los trotskistas deben ser erradicados y destruidos como bestias salvajes, pues, si no, en cada momento decisivo cuando nuestros hombres preparen una ofensiva, seremos incapaces de iniciarla a causa de los desórdenes provocados por los trotskistas en la retaguardia. Hay que acabar de una vez por todas con esos traidores, para que nuestros hombres en el frente puedan luchar si el temor de ser apuñalados por la espalda.
El 11 de agosto terminó la batalla de
      Albarracín. Los nacionales habían ganado algo de territorio antes
      de que el frente se estabilizara de nuevo.
    
Ese día Yezhov firmó la orden de actuación contra los polacos
      residentes en la Unión Soviética, que resultaron ser conspiradores
      mucho más peligrosos aún que los alemanes. Unos días más tarde
      presentó una nueva orden que extendía los arrestos a los
      familiares de los arrestados por la primera orden.
    
Los japoneses no habían tenido éxito en Nankou, pero ahora
      emprendieron un segundo ataque con el apoyo de tanques y aviones.
    
El iraquí Bakr Sidqi había sido invitado a una reunión por el
      gobierno turco, y en su viaje hizo escala en Mosul. Cuando se
      encontraba en los jardines de una base aérea, un soldado llamado Muhammad
        Ali Talla'fari disparó sobre él y un acompañante, y ambos
      murieron en el acto. Los móviles del asesinato nunca llegaron a
      aclararse.
    
El Salvador se retiró de la Sociedad de Naciones.
    
El 12 de agosto los chinos, bajo el
      mando del general Tang Enbo, lograron rodear a los
      japoneses que atacaban Nankou.
    
El 13 de agosto se produjeron los
      primeros tiroteos entre fuerzas chinas y japonesas en las calles
      del Shanghái. Fueron seguidos por disparos de mortero por parte de
      los chinos, y a su vez por disparos de la flota japonesa situada
      en los ríos Yangtze y Huangpu. 
    
Las reformas sociales que estaba impulsando el presidente
      paraguayo Rafael Franco le habían creado muchos enemigos. Éstos
      aprovecharon que Bolivia y Paraguay seguían negociando un acuerdo
      de paz definitivo para la Guerra del Chaco. Franco estaba
      dispuesto a hacer ciertas concesiones territoriales a Bolivia a
      pesar de que Paraguay había ganado claramente la guerra. Esto no
      gustó a los militares y ese día, las tropas del coronel Ramón
        Paredes entraron en Asunción y lo derrocaron. En su lugar
      Félix Paiva ocupó la presidencia provisionalmente. Franco tuvo que
      exiliarse en Uruguay.
    
El 14 de agosto la aviación china
      bombardeó posiciones japonesas en Shanghái, causando la muerte a
      más de 3.000 civiles, y a continuación intervino la infantería. Se
      iniciaba así la primera batalla de grandes dimensiones entre los
      dos países.
    
Desaparecida la amenaza republicana en Brunete, los nacionales
      reanudaron las operaciones en el norte en dos frentes, uno que
      avanzaba desde Vizcaya por el este y otro que avanzaba desde
      Burgos, por el sur. Tras un intenso bombardeo y varios combates,
      los italianos rompieron el frente en Soncillo (Burgos) y
      avanzaron hasta el puerto de montaña de El Escudo.
    
El 15 de agosto el ejército nacional
      realizó un avance en su camino a Santander. El principal foco de
      resistencia que encontró estuvo en Portillo de Suano. 
    
que, toda vez que el Episcopado español está en su totalidad y sin reservas al lado del general [Franco] y a favor del Movimiento, publique un escrito que, dirigido al episcopado de todo el mundo, con ruego de que procure su reproducción en la prensa católica, pueda llegar a poner la verdad en su punto, haciendo a un mismo tiempo obra patriótica y depuración histórica, que podría redundar en gran bien para la causa católica de todo el mundo.
Puede ser interesante leerla. El
      Vaticano recibió una copia antes de su publicación y ni siquiera
      acusó recibo. También guardó silencio después de su publicación.
      Hubo cinco obispos que no firmaron la carta. Uno era el obispo de
      Menorca, que tenía 92 años, estaba medio ciego y enfermo y aislado
      del exterior en su dicesis, así que su ausencia no es
      significativa. Otro era el cardenal Pedro Segura, que se
      encontraba exiliado en Roma y al que probablemente no se le pidió
      que firmara, porque sin duda habría firmado con gusto. Otros dos
      no firmaron por sus simpatías con el nacionalismo vasco (en el
      País Vasco muchos sacerdotes habían defendido la causa
      republicana), y la negativa más señalada fue la del arzobispo de
      Tarragona, Francesc Vidal i Barraquer, que se había
      salvado de ser asesinado por un comité anarquista gracias a la
      intervención del presidente de la Generalidad, Lluís Companys,
      quien lo ayudó a huir de España, pero luego no había querido
      regresar a la zona nacional. Entre las razones con las que
      justificó su negativa estaban que era un documento de propaganda,
      poco adecuado a la condición y carácter de quienes quieren
      suscribirlo, porque "se le dará una interpretación política por su
      contenido y por algunos datos en él consignados", porque su
      publicación podría empeorar la situación de los eclesiásticos que
      vivían en la zona republicana y también debido a que el documento
      había surgido de una petición de Franco, pues el arzobisco
      consideraba peligroso "aceptar sugerencias de personas extrañas a
      la jerarquía en asuntos de su incumbencia". También afirmó que "en
      aquella guerra fraticida la Iglesia no debái identificarse con
      ninguno de los dos bandos, sino más bien hacer obra de
      pacificación". El obispo de Urgel, amigo de Vidal i Barraquer,
      exiliado en Italia, se resistió a firmar la carta, pero finalmente
      cedió a las presiones de Gomá para que lo hiciera.
    
La carta tuvo pleno éxito internacional. Hubo 580 mensajes
      episcopales de respuesta, individuales o colectivos. La opinión
      católica mundial simpatizó de forma prácticamente unánime con la
      causa nacional a partir de ese momento. En cambio, en la españa
      republicana la opinión pública se indignó porque la Iglesia
      apoyara una rebelión contra un régimen que había establecido como
      deportes la quema de Iglesias o el asesinato de religiosos.
    
El 16 de agosto los nacionales
      vencieron la resistencia en Portillo de Suano y avanzaron hasta Reinosa.
      
    
Los chinos en Shanghái se dieron cuenta de que su artillería no
      era lo suficientemente potente como para dañar los muros de
      cemento de los cuarteles japoneses en la ciudad, así que optaron
      por rodearlos tomando las calles y levantando barricadas. La
      estrategia funcionó hasta que aparecieron en las calles los
      tanques japoneses. En los días siguientes los chinos usaron
      también sus tanques, pero la falta de entrenamiento de sus tropas
      hizo que fallara la coordinación con la infantería, y los
      japoneses lograron neutralizarlos con lanzallamas y un fuego
      intenso de ametralladora.
    
En Nankou los japoneses recibieron refuerzos e iniciaron un ataque sobre Hunaglaoyuan. Mientras tanto, más al norte, los chinos ocuparon Shangtu, Nanhaochan, Shanyi y Huateh a las fuerzas mongolas del príncipe Demchugdongrub.
El 17 de agosto los italianos se
      apoderaron del puerto de montaña de El Escudo y convergieron con
      las fuerzas que avanzaban desde el este. En un ataque en tenaza,
      los nacionales lograron aniquilar 22 batallones republicanos.
    
Matvei Berman fue cesado de su puesto al frente de la GULAG y fue
      nombrado comisario del pueblo de correos y telecomunicaciones. La
      GULAG pasó a manos de Israel Pliner. 
    
El asesinato de Bakr Sidqi llevó a la dimisión del primer
      ministro iraquí Hikmat Sulayman. El rey Ghazi I encargó formar un
      nuevo gobierno a Jamil al-Midfai.
    
El 18 de agosto todo el sistema
      defensivo planeado por el general Gamir en Santander estaba roto.
      Los nacionales rebasaban todas las posiciones. Mientras los
      navarros tomaban Santiurde, los italianos llegaban a San
        Pedro del Romeral y San Miguel de Lluena. 
    
Los japoneses contraatacaron en el norte de China desde Changpei,
      y tomaron Shenweitako en la Gran Muralla. Las dispersas
      tropas chinas apenas podían hacer nada para detener su avance.
    
Mientras tanto el general Masakazu Kawabe entraba en
      
      Běipíng en medio de un gran desfile militar y se presentó como el
      nuevo gobernador militar de la ciudad.
    
Nicolás Franco había viajado a Roma para pedir a Mussolini en
      nombre de su hermano que torpedeara a los mercantes españoles y
      soviéticos que abastecían a la República de material bélico desde
      el Mar Negro. El 19 de agosto el
      mercante Armuru fue torpedeado en aguas turcas, y en las
      dos semanas siguientes hubo al menos veinte ataques más, siempre
      por submarinos desconocidos. Gran Bretaña sabía que eran
      italianos, porque había descifrado la clave que usaba la marina
      italiana, pero Italia no negaba y Gran Bretaña no quería descubrir
      que conocía sus claves secretas, así que oficialmente se hablaba
      de "submarinos fantasmas".
      
El 20 de agosto se reunió el XX
      Congreso Sionista, en el que se debatió el informe de la Comisión
      Peel. Hubo práctica unanimidad en que el Estado Judío debía
      abarcar toda Palestina, y no sólo una parte, pero hubo división de
      opiniones sobre si convenía rechazar de lleno el informe, si
      convenía tomarlo como base para futuras negociaciones o si
      convenía aceptarlo y esperar futuros acontecimientos para
      modificar las fronteras propuestas. Los principales líderes
      sionistas del momento eran David Ben-Gurión, que
      representaba el "sionismo de izquierda", Zeev Jabotinsky,
      representante del "sionismo revisionista", de derecha,
      radicalmente nacionalista y partidario de reconstruir a toda costa
      el antiguo Estado de Israel (Jabotinsky no podía ser de
      izquierdas, pues había nacido y vivido en Rusia) y entre ambos
      extremos estaba Jaim Weizmann, que encabezaba el llamado "sionismo
        sintético", que propugnaba la colaboración con Gran Bretaña
      y el uso de la diplomacia. Finalmente se impuso el criterio de
      Ben-Gurión, quien había abogado por aceptar en principio la
      propuesta británica, pero más bien como medio oportuno para
      conseguir el objetivo final de que toda Palestina fuera judía.
    
Jabotinsky se había hecho con el control de la Irgún, que
      recientemente había sufrido una escisión, cuando más o menos la
      mitad de sus miembros (los militantes de izquierdas) había optado
      por integrarse en la Haganá. Los restantes se radicalizaron, ahora
      bajo el mando de Moshe Rozenberg. Tres meses atrás el
      Irgún ya había matado a dos árabes en una playa. A partir de ese
      momento sus atentados se incrementarían. Por otra parte, los
      miembros del Irgún empezaron a colaborar en la recepción y
      distribución de inmigrantes judíos clandestinos que llegaban
      hacinados en barcos.
    
Arthur Stashevski, uno de los principales artífices de que
      las reservas de oro de España fueran llevadas a Moscú, había sido
      llamado de vuelta a la capital soviética el mes anterior, y el 21 de agosto fue fusilado tras la adecuada
      condena por los típicos cargos de traición, espionaje, etc. En
      total, ese año fueron ejecutados en la Unión Soviética más de
      350.000 "traidores". La mayoría de los ejecutados o enviados a los
      gulags eran ciudadanos comunes: trabajadores, campesinos,
      maestros, sacerdotes, músicos, soldados, mendigos, etc., y también
      muchos extranjeros, incluso estadounidenses que habían emigrado a
      la Unión Soviética en busca de trabajo a causa de la crisis
      económica.
    
Los japoneses rompieron por Henglingcheng y Chenbiancheng
      el frente chino que pretendía contenerlos en la Gran Muralla. El
      general Tang Enbo, a pesar de haber perdido la mitad de sus
      tropas, logró retener Huailai, y otras posiciones.
    
Para evitar que los coreanos que residían en el Lejano Oriente
      ruso pudieran pasar a China a combatir contra los japoneses y
      crear un conflicto con rusia, el gobierno soviético emitió ese día
      una orden por la que todos los coreanos debían ser deportados a
      Kazajistán y Uzbekistán antes de final de año.
    
El 22 de agosto la Junta Delegada del
      Gobierno se reunió para estudiar dos alternativas: o bien ordenaba
      la retirada del ejército hacia Asturias abandonando Santander a
      los nacionales, o bien se replegaba hacia Santander para resistir
      a la espera de que el gobierno republicano realizara una maniobra
      de distracción prometida por Indalecio Prieto para dos días más
      tarde en el frente de Aragón. Finalmente se optó por lo segundo.
    
Por esta época Enrique Jardiel Poncela logró salir de España
      hasta Francia, desde donde viajó a Argentina y allí trabajó para
      el cine y la radio.
    
El 23 de agosto empezaron a producirse
      desembarcos de topas japonesas en oleadas en las costas cercanas a
      Shanghái, que obligaron a los chinos a reorganizar sus posiciones.
      Los desembarcos eran precedidos por fuertes bombardeos navales y
      aéreos. Durante las semanas siguientes se libraron cruentos
      combates en los alrededores de las ciudades costeras.
      Paulatinamente, los japoneses llegaron a reunir 300.000 hombres,
      500 aviones, 300 tanques y 130 barcos. Por su parte, los chinos
      contaron con 700.000 soldados, 180 aviones y 17 tanques, pero su
      superioridad numérica apenas servía para cubrir rápidamente el
      gran número de bajas que sufría su ejército.
    
Desde antes de la caída de Bilbao, algunos miembros del Partido
      Nacionalista Vasco habían entablado negociaciones con los
      nacionales, a espaldas del gobierno republicano y con la mediación
      del Vaticano, para la rendición del País Vasco. Era previsible,
      pues el nacionalismo vasco, de carácter conservador, no tenía nada
      en común con el comunismo radical que dominaba la España
      republicana. El lendakari Aguirre estaba enterado, pues el
      gobierno republicano interceptó un telegrama dirigido a él desde
      el Vaticano en el que se le informaba de las condiciones que
      exigían Franco y Mola. No obstante, Largo Caballero mantuvo el
      asunto en secreto y apenas trascendieron meros rumores.
      Finalmente, el 24 de agosto los vascos
      firmaron con los italianos el Pacto de Santoña, por el que
      el ejército vasco se rendiría y entregaría sus armas a los
      italianos a cambio de que los soldados fueran reconocidos como
      prisioneros de guerra bajo custodia italiana y se permitiera la
      evacuación en barcos británicos de los dirigentes políticos.
      Inmediatamente los italianos entraron en Santoña y se hicieron
      cargo de la administración civil. 
    
Por su parte, las autoridades asturianas decidieron constituir el
      Consejo Soberano de Asturias y León, al que presentaron
      como un gobierno independiente de la República Española, bajo la
      presidencia del socialista Belarmino Tomás. 
    
Mientras tanto el ejército republicano atacaba al nacional por
      ocho puntos distintos en dirección a Zaragoza. Las localidades de
      Quinto y Codo, mal defendidas, no tardaron en caer.
    
El 25 de agosto el lendakari Aguirre salió en avión hacia Francia, mientras que el general Gamir embarcó hacia Gijón con intención de organizar la defensa de Asturias.
El 26 de agosto llegaron a Santoña dos
      mercantes británicos escoltados por un destructor, y empezaron a
      embarcar refugiados con pasaporte vasco. Cuando el general Dávila
      se enteró ordenó la suspensión de la operación, y únicamente uno
      de los mercantes pudo zarpar con 533 heridos. Por su parte, Franco
      se puso furioso cuando se enteró del pacto de Santoña, del que no
      había sido informado. Presionó a los italianos para que le
      entregaran a los prisioneros vascos, que fueron encarcelados en la
      prisión de El Dueso. 
    
Mientras tanto las tropas nacionales entraban en Santander
      aclamadas por la población, aunque no por toda, pues en poco
      tiempo arrestaron a unos 17.000 prisioneros, muchos de los cuales
      fueron fusilados inmediatamente.
    
Varios miles de combatientes nacionales se habían concentrado en
      la localidad de Belchite, cerca de Zaragoza, y dos
      divisiones republicanas se detuvieron para ocuparse de ellos. Ese
      día rodearon completamente la ciudad.
    
El Ejército Rojo había entrado en Xinjiang a petición de Sheng
      Shicai, y derrotó a Kichik Akhund cerca de Aksu. Akhund
      vio cómo el grueso de sus tropas era aniquilado por la aviación
      soviética y tuvo que huir a Kashgar con apenas 200 hombres. Unos
      días más tarde los soviéticos tenían ya dominada la provincia y
      los líderes rebeldes habían huido a la India. Chiang Kai-shek tuvo
      que presentar los rumores de que los soviéticos habían penetrado
      en Xinjiang como mentiras inventadas por los japoneses, para no
      enturbiar las buenas relaciones que había establecido
      recientemente con la Unión Soviética.
    
El ministro de Interior de Mongolia,
      
      Horloogiyn Choybalsan, había enviado varias cartas a Nikolái
      Yezhov informándole de los juicios celebrados el año anterior
      contra los lamas budistas y de algunos más que estaba preparando.
      Todos ellos se habían celebrado "siguiendo los consejos del
      camarada Stalin". En una de las cartas se informaba de que los
      detenidos habían revelado que el ex primer ministro Peljidiin
      Genden (que llevaba casi un año en la Unión Soviética recibiendo
      tratamiento médico en una residencia de reposo) era un espía
      japonés. No tardó en ser arrestado, y un adecuado interrogatorio
      hizo que confesara su implicación en las conjuras por las que
      había sido ejecutado el mariscal Tujachevski. El 27 de agosto tropas soviéticas entraron en
      Mongolia y Choybalsan recibió una copia de la confesión de Genden
      junto con una lista de 115 conspiradores. Stalin había dispuesto
      que 30.000 soldados soviéticos estuvieran en Mongolia para
      prevenir un posible ataque por parte de los japoneses, que se
      estaban apoderando de la Mongolia Interior china. Ese mismo día
      los japoneses tomaban Kalgan, donde poco después el príncipe
      mongol Demchugdongrub, cuyas fuerzas habían colaborado con los
      japoneses, proclamó la independencia respecto a China de la región
      de Chahar.
    
En la Ciudad de México se estrenó El Salón México, de
      Aaron Copland, una de sus obras más conocidas.
    
Las brigadas internacionales, bajo el mando del general Kléber,
      llegaron a 6 km de Zaragoza, pero pronto se vió la imposibilidad
      de tomar la ciudad, por lo que el 28 de agosto
      los republicanos se concentraron en tomar Belchite, donde lograron
      cortar el suministro de agua a los asediados.
    
El 29 de agosto el Consejo Soberano de
      Asturias y León destituyó al general Gamir y entregó el mando del
      ejército al general Adolfo Prada. Asturias era ahora el
      último reducto republicano en el norte. Contaba con dos
      destructures y tres submarinos para evitar el bloqueo por parte de
      la flota nacional, pero ese mismo día uno de los submarinos huyó a
      Francia bajo pretexto de haber sufrido una avería.
    
El 30 de agosto los nacionales
      lanzaron una contraofensiva desde Zaragoza con la intención de
      socorrer a Belchite, pero fue detenida por la división del general
      Kléber.
    
El 31 de agosto el José Luis Díez,
      uno de los destructores encargados de la defensa de Asturias, huyó
      a Gran Bretaña debido a que "la brújula no funcionaba". El 1 de septiembre era otro de los submarinos
      republicanos el que acababa en un puerto francés. De este modo, en
      la defensa de Asturias sólo quedaban el destructor Císcar
      y un submarino, que no huyó porque su capitán era soviético. Tras
      un breve descanso, los nacionales habían retomado la ofensiva en
      el norte y cruzaban la frontera de la provincia de Asturias.
    
Desde Chahar, el ejército japonés se lanzó a la invasión de la
      provincia de Shanxi, importante por sus recursos naturales.
    
Un "submarino fantasma" italiano disparó torpedos por error
      contra un destructor británico, aunque no lo alcanzó, y al día
      siguiente, el 2 de septiembre, un
      petrolero británico fue hundido por otro "submarino fantasma"
      frente a las costas de Castellón. El gobierno británico amenazó
      con tomar medidas frente a los "submarinos fantasma", y recibió el
      apoyo de Francia. Entonces Italia dio órdenes a sus submarinos de
      que regresaran a sus bases, órdenes que interceptaron los
      británicos.
    
Ese día murió en Ginebra el barón Pierre de Coubertin, el
      fundador de los Juegos Olímpicos modernos.
    
La decepción por la propuesta británica sobre el conflicto en
      Palestina reavivó la revuelta árabe. El 3 de
        septiembre el rabino Eliezer Gerstein fue
      asesinado mientras se dirigía a rezar ante el Muro de las
      Lamentaciones. 
    
Los republicanos entraron en Belchite e iniciaron un combate casa
      por casa hque se prolongó hasta el 4 de
        septiembre. La aviación nacional incendió depósitos de
      combustible en Tarragona, que estuvieron ardiendo durante cinco
      días, y supusieron una grave pérdida para el ejército republicano.
    
Ignace Reiss era un agente de la NKVD que había desertado hacía unos meses y se había escondido en Suiza. Había dirigido una carta a Stalin en la que devolvía una condecoración que había recibido anteriormente afirmando que llevar la medalla "junto con los verdugos de los mejores representantes de los trabajadores de Rusia" estaba por debajo de su dignidad. La NKVD había dado con él y esa noche su cadáver fue hallado ametrallado en una cuneta. Su muerte llevó a desertar poco después a otro agente de la NKVD: Walter Krivitsky.
El 5 de septiembre las fuerzas
      nacionales que avanzaban por Asturias se encontraron con una
      fuerte resistencia en el paso de montaña de El Mazuco, a
      cargo de unos 6.000 soldados republicanos dirigidos por el coronel
      de la Guardia Civial Juan Ibarrola Orueta. El ejército
      nacional, dirigido por el general José Solchaga, contaba
      con unos 33.000 hombres, pero lo escarpado del terreno hacía
      difícil aprovecharlos. Incluso la aviación resultaba poco efectiva
      en esas condiciones.
    
Tras el asesinato de un rabino, un comando del Irgún arrojó
      explosivos sobre un autobús, lo que dejó heridos a dos árabes y a
      un policía británico.
    
En la madrugada del 6 de septiembre
      los pocos nacionales que resistían en Belchite intentaron una
      huida a la desesperada. Unos trescientos lograron cruzar las
      líneas republicanas, y de ellos unos ochenta pudieron llegar hasta
      Zaragoza. El pueblo había quedado completamente destrozado y
      habían muerto unas 5.000 personas en dos semanas. El frente
      aragonés se estabilizó de nuevo. Los republicanos habían ganado
      algo de terreno, pero sin ningún valor estratégico.
    
El 6 de septiembre se inauguró en
      Nuremberg el noveno congreso del partido nazi, que fue llamado
      "Congreso del Trabajo", porque celebraba la reducción del
      desempleo en Alemania desde la llegada de Hitler al poder. Se
      había pasado de unos seis millones de parados a menos de un
      millón, aunque había truco, porque se debía en gran medida a la
      retirada de las mujeres y de los judíos del mercado laboral. Las
      mujeres también se retiraron en gran medida de la educación
      secundaria y universitaria. En educación secundaria se había
      pasado en 10 años de 437.000 a 205.000, y el número de mujeres
      matriculadas en universidades o centros de formación posteriores a
      la enseñanza secundaria había pasado de 128.000 a 51.000.
    
Los japoneses entraron en Baoshan, una de las posiciones
      estratégicas más importantes en la costa al norte de Shanghái.
      Tras una lucha cada por casa, sólo quedó un superviviente del
      batallón chino que la defendía.
    
El 7 de septiembre el crucero nacional
      Canarias se enfrentó cerca de Cherchel, en la costa
      argelina, con la flota republicana, que escoltaba a tres mercantes
      rumbo a Cartagena. El resultado fue un empate, pues el Canarias
      resultó dañado, pero los barcos tuvieron que refugiarse en
      Cherchel, donde uno embarrancó y los otros fueron retenidos por
      las autoridades francesas. El comandante de la flota republicana
      fue destituido, mientras que el comandante del Canarias, Manuel
        de Vierna, fue ascendido a contraalmirante.
    
El 8 de septiembre se celebró en Bludán
      (Siria) la llamada Conferencia de Bludán, convocada por el
      Álto Comité Árabe para debatir el informe de la Comisión Peel y su
      propuesta de partición de Palestina. Acudieron cientos de
      delegados de diversos países, que coincidieron en rechazar todo
      plan de creación de un Estado judío en Palestina. Por lo
      contrario, se afirmó que Palestina era parte integrante del mundo
      árabe y se crearon varios comités para buscar medios de oponerse a
      cualquier intento de partición. La principal nota discordante fue
      la del emir Abdullah de Transjordania, que apoyó la propuesta
      británica.
    
El gobierno turco había enviado unos 25.000 soldados a Dersim
      para combatir la rebelión kurda. El 10 de
        septiembre Seyit Riza acudió al gobierno provincial para
      negociar la paz y fue arrestado.
    
Esa noche fueron arrestados en Mongolia 65 intelectuales y
      funcionarios de alto rango, que no tardaron en confesar toda clase
      de horrendos crímenes. Fueron los primeros de una larga serie de
      detenciones masivas.
    
Tras la caída de Baoshan, desde el 11 de
        septiembre la defensa de Shanghái se centró en Luodian,
      donde los chinos habían concentrado 300.000 soldados y los
      japoneses más de 100.000. Cada día, los japoneses iniciaban su
      ataque con bombardeos, luego lanzaban globos de observación para
      detectar dónde quedaban tropas chinas y luego la infantería
      avanzaba protegida por tanques y cortinas de humo. Los chinos
      minaban las carreteras durante las noches, y durante el día
      procuraban defender sus puestos más avanzados con el mínimo número
      de soldados para reducir las bajas.
    
El 12 de septiembre China denunció
      ante la Sociedad de Naciones la invasión japonesa.
    
Gran Bretaña y Francia convocaron la conferencia de Nyon
      para tratar sobre la piratería en el Mediterráneo. Asistieron
      representantes de estos dos países, Bulgaria, Egipto, Grecia,
      Rumanía, Turquía, la Unión Soviética y Yugoslavia. Alemania e
      Italia estaban convocadas, pero rehusaron asistir. España, por el
      contrario, no había sido convocada. La Unión Soviética acusó
      abiertamente a Italia de haber hundido dos de sus barcos. El 14 de septiembre firmaron un acuerdo por el
      que destructores y aviones británicos y franceses patrullarían una
      serie de rutas comerciales, de modo que todo submarino en
      inmersión que atacara a un barco neutral sin advertencia o que se
      encontrara cerca del lugar de un ataque sería hundido, y también
      serían atacados los aviones o barcos no españoles que atacaran a
      barcos neutrales.
    
El 15 de septiembre fueron
      bombardeados la estación y el puerto de Valencia.
    
Tras haber recibido la orden de regresar a España, 68 miembros de
      la tripulación del José Luis Díez desertaron y fueron
      detenidos por las autoridades británicas. Unas semanas más tarde
      el destructor zarpó de Falmouth, pero acabó recalando en
      Francia con nuevas averías.
    
El 17 de septiembre el crucero
      Canarias ahuyentó a cuatro destructores republicanos y capturó dos
      transportes que llevaban material de guerra a Barcelona.
    
Ese día, coincidiendo con el aniversario de la firma de la
      Constitución de los Estados Unidos, se inauguró la escultura de
      Abraham Lincoln en el monte Rushmore
    
El 18 de septiembre los defensores de
      El Mazuco se quedaron sin municiones y empezaron a retroceder
      masivamente, lo que permitió el avance de las fuerzas nacionales.
      Mientras tanto, el avance desde el oeste continuó con la toma de Ribadesella.
      
    
El 20 de septiembre los nacionales
      controlaban El Mazuco.
    
Un grupo de intelectuales estadounidenses había organizado el Comité
        Americano para la Defensa de León Trotski, más conocido como
      la Comisión Dewey, por el nombre de su presidente, el
      filósofo John Dewey. La comisión organizó un "juicio" no
      oficial con el fin de determinar lo que pudiera haber de cierto en
      las acusaciones que contra Trotski se formulaban desde Moscú. Una
      subcomisión viajó a México para interrogar al propio Trotski. El 21 de septiembre publicó sus conclusiones en
      un libro de 422 páginas titulado "Inocente", según las
      cuales los ya conocidos como "Juicios de Moscú" no eran
      más que un montaje.
    
La comisión tuvo sus detractores, en especial uno de sus
      miembros, el periodista Mauritz Alfred Hallgren,
      que presentó su dimisión a la vez que acusaba al Comité de ser una
      mera plataforma de promoción de Trotski. Hallgren alegaba que le
      parecía imposible que todos los acusados en los juicios de Moscú
      hubieran aceptado hacer declaraciones inculpatorias sabiendo que
      los iban a matar en cualquier caso. Al parecer, nadie lo había
      amenazado nunca con matar a todos sus familiares si no confesaba
      ser el asesino de los torsos de Cleveland, y su imaginación no le
      alcanzaba a concebir que los comunistas pudieran ser tan
      depravados como para aplicar sistemáticamente tales técnicas.
      Después de Hallgren dimitieron a su vez otros tres miembros de la
      comisión, y el Partido Comunista estadounidense usó sus cartas de
      dimisión como panfletos de propaganda para desprestigiar las
      conclusiones de la Comisión Dewey. Por aquel entonces ya pocos
      parecían acordarse de las crueles técnicas de represión que
      Trotski había aplicado cuando estaba al frente del Ejército Rojo
      y, aunque a sus 58 años estuviera en camino de convertirse en un
      anciano de gesto afable, seguía defendiendo la implantación de
      dictaduras comunistas en el mundo, pero de dictaduras en las que
      no se matara a quienes Stalin considerara oportuno, sino a quienes
      decidiera él.
    
Ese día se publicó El hobbit, una novela fantástica
      escrita por un profesor de filología de la universidad de Oxford
      llamado John Ronald Reuel Tolkien. En principio la había
      escrito para entretener a sus hijos, pero había distribuido copias
      entre algunos de sus amigos y uno de ellos, su colega Clive
        Staples Lewis, lo convenció para que publicara su trabajo, y
      para su sorpresa, no sólo tuvo un gran éxito entre el público
      infantil, sino también entre los adultos.
    
El 22 de septiembre los nacionales
      tomaron las últimas cumbres cercanas a El Mazuco que todavía
      estaban en poder de los republicanos, lo que despejó ya el avance
      sobre el resto de Asturias desde el este. Mientras tanto el
      ejército republicano intentaba una tercera maniobra de distracción
      en el frente de Aragón, esta vez por tres puntos, amenazando Sabiñánigo
      y Jaca, al norte de Huesca. Los nacionales fueron tomados
      completamente por sorpresa, pero entablaron una dura resistencia,
      especialmente en Gavín, donde el alférez Miguel Blasco
        Vilatela resistió al frente de 140 hombres durante más de 24
      horas, hasta que se quedó sin municiones y fue capturado y
      ejecutado; o en Yebra, donde 300 nacionales resistieron
      con éxito la acometida republicana. No obstante, los republicanos
      lograron tomar numerosas localidades de la zona, si bien no
      llegaron a cercar Sabiñánigo.
    
Yevgueni Miller era un antiguo general del ejército
      zarista que a la sazón encabezaba desde Francia la lucha contra el
      comunismo. Ese día fue secuestrado por agentes soviéticos que se
      hicieron pasar por alemanes. Fue drogado y embarcado en un buque
      soviético y al poco tiempo ya estaba siendo debidamente torturado
      en Moscú. Miller había dejado una nota para el caso en que no
      regresara de su entrevista con los que él creía agentes alemanes,
      en la que denunciaba como posible traidor a uno de sus
      colaboradores, Nikolái Skoblin. La policía francesa
      investigó y Skoblin se refugió en la embajada soviética en París,
      desde donde huyó a Barcelona, y las autoridades republicanas
      negaron su extradición porque todo comunista sabe que el secuestro
      es bueno o malo en función de la ideología del secuestrado. Lo que
      no sabían todos los comunistas (y mucho menos los novatos, como
      Skoblin) era que la mayor amenaza para un comunista era otro
      comunista. Existen diversas versiones sobre la muerte de Skoblin,
      que debió de suceder ese mismo año o el siguiente, y en casi todas
      muere a manos de un agente soviético (por ejemplo, Aleksándr
      Orlov). 
    
El 25 de septiembre los comunistas
      chinos tendieron una emboscada a un ejército japonés que circulaba
      por el desfiladero de Pingxingguan, en Shanxi, y
      capturaron armas, ropa y comida. No fue algo espectacular, pero la
      propaganda comunista lo presentó como si lo hubiera sido.
    
El 26 de septiembre cuatro
      enmascarados dispararon en Nazaret contra Lewis Yelland
        Andrews, el gobernador británico de Galilea, que murió al
      instante, mientras que su guardaespaldas murió unas horas más
      tarde en un hospital. Los asesinos pertenecían a la Mano Negra, la
      organización terrorista dirigida por Izzedin al-Qassam. Poco
      después los británicos ilegalizaron en Alto Comité Árabe y
      emitieron una orden de busca y captura contra su presidente, el
      gran mufti de Jerusalén, Amin al-Husseini, como
      "responsable moral" del asesinato, ya que no existía ninguna
      prueba que lo vinculara directamente con el crimen. al-Husseini
      logró burlar a las autoridades británicas y escapó al Líbano
      disfrazado de beduino. Otros líderes del Alto Comité fueron
      capturados y deportados a las Seychelles.
    
El dictador dominicano Rafael Leónidas Trujillo ordenó al
      ejército el exterminio de la población haitiana que vivía en las
      zonas fronterizas con el país vecino. El 28 de
        septiembre se produjo la primera de las matanzas, que
      continuaron durante algo más de una semana. Fueron conocidas como
      la "masacre del perejil", porque los soldados usaban un
      método científico para identificar a los haitianos, consistentes
      en hacerles pronunciar la palabra "perejil". En teoría los
      haitianos no sabían pronunciar el sonido "ere" y pronunciaban la
      palabra con la erre uvular francesa, lo cual los delataba.
    
El dictador brasileño Getúlio Vargas debía abandonar el poder al
      año siguiente, de acuerdo con su propia Constitución, pero el 29 de septiembre el general Eurico
        Gaspar Dutra, colaborador de Vargas, desveló al país que se
      estaba fraguando una conspiración comunista conocida como "Plan
      Cohen" de la que el país tenía que ser salvado, y pidió al
      gobierno que declarara el estado de sitio.
    
El 30 de septiembre el exausto
      ejército chino tuvo que retirarse de Luodian.
    
El 1 de octubre los nacionales tomaron
      Covadonga, en Asturias. Barcelona sufrió uno de los bombardeos más
      intensos, que dejó 55 muertos.
    
En su avance hacia Taiyuan, la capital de Shanxi, el 2 de octubre atacaron Gouxian. 
    
Rafael Leónidas Trujillo, en un baile celebrado en su honor,
      pronunció un discurso en el que acusó a los haitianos de robar
      ganado y cosechas, a la vez que anunciaba que "remediaría el
      problema", cosa que ya estaba haciendo. Las cifras sobre el número
      de haitianos muertos en las matanzas que había ordenado son muy
      dispares según las fuentes, algunas de las cuales llegan hasta los
      35.000, si bien otras son mucho más moderadas.
    
Ese día se estrenó Love is on the Air, una película de
      detectives de serie B que no destacaba en gran cosa salvo porque
      fue la primera protatonizada por un joven actor de 26 años llamado
      Ronald Reagan. 
    
Los nacionales enviaron al frente de Aragón más legionarios y
      artillería, con lo que se dispusieron a organizar un contraataque
      en Sabiñánigo, que se inició el 3 de octubre.
      Mientras tanto Valencia sufría un nuevo bombardeo que dejó 50
      muertos, 78 heridos y 160 casas destruidas.
    
El 4 de octubre la Sociedad de
      Naciones, con su contundencia característica, resolvió la cuestión
      de la guerra sino-japonesa dando a China su "apoyo espiritual".
    
Ese día tuvo lugar en Mongolia un juicio contra figuras eminentes
      del clero budista. De 23 acusados, 19 fueron condenados a muerte.
    
El 7 de octubre los nacionales
      recuperaron la loma de Punta Güe, donde un batallón
      republicano había resistido hasta haber perdido la mitad de sus
      hombres. Gijón fue bombardeada y, como represalia, varias decenas
      de presos derechistas fueron fusilados. Por su parte, los
      republicanos bombardearon el aeródromo de Palma de Mallorca.
    
El primer ministro yugoslavo, Milan Stojadinović, estaba tratando
      de reforzar el partido gubernamental confiriéndole tintes
      fascistas (con organizaciones juveniles, desfiles, saludos, etc.),
      si bien no tenía demasiado éxito. Para contrarrestarlo, el año
      anterior el croata Vladko Maček había puesto en funcionamiento
      unas milicias ilegales, la Defensa Campesina Croata y la
      Defensa Civil Croata, en el campo y en las ciudades,
      respectivamente. El 8 de octubre varios
      partidos de la oposición firmaron un acuerdo de cooperación contra
      el régimen en el que exigían una nueva ley electoral, nuevas
      elecciones libres y la formación de una asamblea constituyente.
    
Ese día se estrenó Damas del teatro, una película
      protagonizada por Katherine Hepburn, en la que interpreta una
      joven aspirante a actriz que llega a una pensión en la que se
      hospedan otras tantas con idéntica aspiración, entre ellas Ginger
      Rogers, que tuvo ocasión de mostrar sus grandes dotes dramáticas.
      Las cuatro últimas películas de Katherine Hepburn habían sido poco
      rentables, y con ésta consiguió finalmente buenas críticas, aunque
      la recaudación no fue tan buena como la RKO esperaba. No obstante,
      el estudio siguió apostando por la actriz.
    
El 9 de octubre Franco aprobó un
      decreto-ley que declaraba nulas todas las concesiones hechas por
      cualquier autoridad. Esto se prestaba a diversas intepretaciones.
      La Junta Técnica explicó a los alemanes que se trataba de negar
      validez a las concesiones realizadas por el gobierno de Valencia,
      pero luego fue empleado para impedir que Alemania obtuviera 73
      concesiones mineras que reclamaba como pago a la deuda de guerra.
      Los alemanes pidieron que Alemania fuera equiparada a España a
      efectos de dicho decreto-ley, pero los españoles no lo aceptaron y
      recomendaron a los alemanes que esperaran a la formación de un
      gobierno nacional (la Junta Técnica era sólo una administración
      provisional).
    
Gouxian cayó en manos de los japoneses, desde donde pasaron a
      atacar Yuanping. 
    
El duque de Windsor, antes rey Eduardo VIII de Gran Bretaña, realizó una visita a Alemania con su esposa en contra de la voluntad del gobierno británico. Se entrevistó con Hitler, el cual declaró, al parecer: Estoy seguro de que a través de él se podrían haber logrado relaciones permanentes de amistad. Si se hubiera quedado, todo habría sido diferente. Su abdicación fue una grave pérdida para nosotros.
El 10 de octubre dos cañoneros
      nacionales avistaron en la costa argelina un mercante armado que
      se dirigía sin escolta hacia Valencia cargado con material de
      guerra soviético. El mercante, tras recibir algunos impactos, tuvo
      que dirigirse hacia la costa y encalló.
    
Para entonces, los nacionales dominaban ya las dos orillas del
      río Sella, en Asturias, y el 11 de
        octubre tomaron Cangas de Onís. 
    
El 12 de octubre los japoneses tomaban
      Yuanping. El objetivo siguiente era Xinkou, que era donde
      Chiang Kai-shek había dispuesto la principal línea de defensa.
    
Ese día fue ejecutado el escritor y explorador soviético Maximilian
        Kravkov, acusado de espiar para los japoneses.
    
El 13 de octubre 50.000 japoneses bajo
      el mando del general Itakagi Seishiro atacaron Xinkou.
    
El 15 de octubre el único submarino
      republicano en la costa norte sufrió un impacto y fue hundido para
      evitar que cayera en poder de los nacionales. Mientras tanto la
      aviación republicana realizaba un exitoso bombardeo sobre el
      aeródromo de Zaragoza.
    
Ese día se estrenó Doble boda, una comedia protagonizada
      por William Powell y Myrna Loy. Powell estaba prometido a Jean
      Harlow, y había tenido que terminar el rodaje a pesar del golpe
      que le había producido su muerte. Poco después le diagnosticaron
      un cáncer. Ese año había estrenado otras dos películas: la comedia
      El final de la señora Cheyney (junto a Joan Crawford) y Los
        candelabros del zar, una película de espionaje en la Rusia
      imperial.
    
Shirley Temple protagonizó Heidi. La actriz fue la más
      taquillera del año, seguida de Clark Gable.
    
El 16 de octubre los chinos lanzaron
      un contraataque en Xinkou. El general Hao Mengling se
      convirtió en el primer general chino que moría en combate durante
      la segunda guerra sino-japonesa. Las guerrillas comunistas
      realizaron varios ataques sobre la retaguardia japonesa en los
      días siguientes. En general, los comunistas actuaban sin
      prácticamente coordinación alguna con las fuerzas nacionalistas.
    
Ese día se estrenó en París Los fusiles de la señora Carrar,
      escrita por Bertolt Brecht y ambientada en la guerra civil
      española.
    
En Shanghái, Chiang Kai-shek había reunido todos los efectivos
      disponibles para defender Dachang. El 17
        de octubre, después de recibir refuerzos, los chinos
      lanzaron una contraofensiva para consolidar sus posiciones y
      retomar algunas perdidas días antes. Sin embargo, la operación
      estuvo mal coordinada, y la respuesta japonesa fue tan enérgica
      que hubo momentos en los que las bajas chinas eran del orden de
      más de mil soldados por hora.
    
El 19 de octubre Franco nombró a los
      primeros 50 miembros del Consejo Nacional del Movimiento,
      compuesto por falangistas como Sancho Dávila o Pilar Primo de
      Rivera, carlistas, como Manuel Fal Conde o el conde de Rodezno,
      monárquicos, como José María Pemán, y militares como Gonzalo
      Queipo de Llano o Juan Yagüe. Al contrario de lo que sucedía en el
      bando republicano, con el decreto de unificación, Franco había
      eliminado todas las disensiones internas entre las distintas
      facciones que habían apoyado la insurrección.
    
Un ataque comunista a una base aérea japonesa destruyó 24
      aviones. Para entonces los japoneses habían perdido 20.000 hombres
      sin haber logrado grandes progresos en la toma de Xinkou.
    
Ese día murió el físico británico Ernest Rutherford. 
    
Gijón fue bombardeado cuatro días seguidos por la aviación
      nacional (y cada uno de los ataques había sido respondido con un
      asesinato de presos). El cuarto día, el 20 de
        octubre, resultó alcanzado el destructor Císcar,
      que estaba en su puerto, que terminó hundiéndose. Con ello
      desaparecía toda posibilidad de evacuación tras la caída de Gijón,
      que se veía inminente. Una oleada de pánico hizo que unos sesenta
      barcos de todo tipo trataran de burlar desesperadamente el bloqueo
      nacional para llegar a Francia.
    
Ese día terminó en Ulán Bator un juicio público contra 14
      antiguos miembros del gobierno, de los cuales 13 acabaron
      fusilados. El primer ministro Anandyn Amar lloró abiertamente al
      ver cómo algunos de sus amigos eran condenados a muerte, pero la
      máxima autoridad de facto en el país era el ministro
      Choybalsan, contra el que nada podía hacer. Tal vez empezó a
      preguntarse quién le había mandado a él afiliarse al Partido
      Comunista Mongol treinta y cuatro años atrás.
    
 El 21 de octubre
      las tropas nacionales entraban en Gijón, lo que constituía la
      desaparición del frente Norte. Ahora los nacionales tenían en su
      poder las minas asturianas y la industria vasca.
El 21 de octubre
      las tropas nacionales entraban en Gijón, lo que constituía la
      desaparición del frente Norte. Ahora los nacionales tenían en su
      poder las minas asturianas y la industria vasca.
    
En vista de la dificultad de tomar Xinkou, los japoneses
      aumentaron su presión sobre Niangziguan, desde donde los
      chinos habían estado organizando varios contraataques.
    
Columbia Pictures había descubierto el potencial de Cary Grant como actor de comedia y lo aprovechó en La terrible verdad, bajo la dirección de Leo McCarey, que obtuvo un gran éxito. Aunque no figura en los créditos, en la película aparece el perro Skippy interpretando el papel de Mr. Smith, pero en una escena se oye cómo Cary Grant lo llama Skippy por error. McCarey había dirigido a Laurel y Hardy, los hermanos Marx (en Sopa de ganso) y a Harold Lloyd (en La vía láctea).
El 22 de octubre las autoridades
      francesas dejaron en la frontera los refugiados que habían llegado
      a sus costas procedentes de Asturias.
    
El dictador ecuatoriano Federico Páez estaba tratando de atar
      cabos para asegurarse la típica constitución a medida, pero el
      ejército decidió derrocarlo y en su lugar proclamó Jefe Supremo al
      general Alberto Enríquez Gallo, hasta entonces ministro de
      defensa.
    
Ese día se estrenó Conquista, en la que Greta Garbo
      interpreta a la condesa polaca Marie Walewska, que se convirtió en
      amante de Napoleón para influir en el trato de éste hacia su país.
      La Metro Goldwyn Mayer invirtió un gran presupuesto en publicidad,
      pero el resultado fue un fracaso de taquilla.
    
El 24 de octubre el compositor Cole
      Porter tuvo un accidente mientras montaba a caballo por el que
      estuvo a punto de perder ambas piernas. En contra de la opinión
      médica se negó a que se las amputaran y, en efecto, pudo
      salvarlas, aunque sufrió fuertes dolores el resto de su vida.
    
El 25 de octubre Dachang cayó en manos
      japonesas. A partir de esos momentos todas las tropas chinas que
      defendían Dachang tuvieron que parapetarse en la propia Shanghái.
    
Ese día fue fusilado el poeta soviético Nikolái Kliúyev.
    
El 26 de octubre los japoneses
      rompieron la línea defensiva china en Niangziguan, y los chinos
      tuvieron que retirarse a Taiyuan.
    
En Shanghái, los chinos eran incapaces de contener el ataque
      japonés en el sector de Zhabei, así que Chiang Kai-shek
      ordenó la retirada de todos los efectivos a otros sectores, pero
      indicó que se dejara una división en parte para cubrir la retirada
      y en parte porque la zona colindaba con la parte de la ciudad
      ocupada por las concesiones a las grandes potencias, a las cuales
      se quería dar una muestra de la determinación de China de resistir
      la invasión japonesa, de cara a lograr apoyos internacionales. Los
      generales chinos rechazaron la idea de sacrificar una división por
      razones de imagen, y estaban a punto de desobedecer la orden
      cuando a uno se le ocurrió que, para tal fin, daba igual dejar una
      división o unos pocos soldados. Por ello al final se decidió que
      un regimiento formado por 423 hombres (incluyendo 16 oficiales),
      bajo el mando del coronel Xie Jinyuan, se parapetara en
      los almacenes de Sihang, separados por el río Suzhou de
      las concesiones internacionales. El 27 de
        octubre, antes del amanecer, se instalaron en los
      almacenes y empezaron a organizar su defensa.
    
Una exploradora china de 22 años llamada Yang Huimin
      (miembro de una rama femenina de los Boy Scouts) observó
      cómo un soldado británico que estaba de guardia en la orilla norte
      del Suzhou, la opuesta a las concesiones, arrojaba un paquete de
      cigarrillos a través de una ventana de los almacenes. Le preguntó
      por qué lo hacía y el soldado le respondió que había soldados
      chinos dentro. Entonces ella escribió un mensaje y le pidió al
      soldado que lo metiera dentro de otro paquete y que lo arrojara
      también. Poco después desde el almacén lanzaron un mensaje en el
      que decían que necesitaban comida, municiones y lubricante para
      armas. Yang se fue entonces a ver al presidente de la Cámara de
      Comercio de Shanghái, que no creyó su historia.
    
Sobre las una de la tarde llegaban los japoneses hasta los
      almacenes y, cogidos por sorpresa, los defensores mataron a una
      decena de ellos. Pronto se organizó un ataque y varios japoneses
      se situaron en un punto al que no llegaban los tiradores del
      almacén, pero algunos soldados subieron al tejado y lanzaron
      granadas de mano, causando unos 20 heridos. Mientras tanto, los
      japoneses saqueaban y quemaban el distrito de Zhabei.
    
Ese día fue fusilado el lingüista soviético Nikolái Durnovo.
      Había creado una clasificación de los dialectos rusos. No es
      probable que lo fusilaran por eso, pero todo podría ser.
    
El 28 de octubre Xie Jinyuan contactó
      con el presidente de la Cámara de Comercio de Shanghái, cuyo
      número de teléfono le había facilitado Yang Huimin. La situación
      de los almacenes era muy ventajosa por su proximidad a las
      concesiones internacionales, que hacía que los japoneses no se
      atrevieran a bombardearlos (ante el temor de que una bomba pudiera
      alcanzar por error a las concesiones y provocar un conflicto
      internacional) ni tampoco a usar gas mostaza, algo que era
      habitual en ellos, pero no a la vista de las grandes potencias. Un
      ataque japonés resultó frustrado, pero logró cortar el suministro
      de agua y electricidad a los almacenes.
    
El presidente de la Cámara de Comercio difundió por radio lo que
      estaba sucediendo en los almacenes y una multitud de chinos se
      agolpó en la orilla sur del Suzhou para vitorear a los defensores.
      Varios camiones fueron llenados con material donado por los
      habitantes de Shanghái, y por la noche fueron llevados a los
      almacenes. Yang Huimin llevó una bandera de la República de China,
      que fue recogida personalmente por Xie Jinyuan. Yang le preguntó
      por sus planes, y la respuesta fue "resistir hasta la muerte".
      Luego le pidió los nombres de los soldados presentes, para
      difundirlos por radio. Xie no consideró oportuno revelar a los
      japoneses a cuántos hombres se enfrentaban, así que dio orden a
      uno de sus soldados que escribiera en un papel una lista de 800
      nombres de soldados de su división, así que los defensores fueron
      conocidos como los 800 héroes. 
    
Marlene Dietrich había estado en Londres rodando Caballero
        sin armadura, para una productora británica, que había sido
      un gran fracaso. Durante su estancia en Gran Bretaña funcionarios
      de la Alemania nazi se habían puesto en contacto con ella para
      ofrecerle una suculenta oferta de trabajo como estrella
      cinematográfica del Tercer Reich. La respuesta de la actriz fue
      regresar a los Estados Unidos y solicitar la nacionalidad
      estadounidense. Allí rodó Ángel, una comedia romántica,
      bajo la dirección de Ernst Lubitsch (que el año anterior había
      obtenido también la nacionalidad estadounidense). La película se
      estrenó el 29 de octubre y también
      obtuvo malos resultados de taquilla. Poco después se iría a pasar
      a unas largas vacaciones en Europa con su familia.
    
Los habitantes de Shanghái pudieron ver la bandera de cuatro
      metros de ancho ondeando sobre los almacenes de Sihang. En la
      orilla sur del río se concentró una multitud que gritaba "larga
      vida a la República de China". Los japoneses trataron de
      derribarla desde el aire, pero las precauciones para no bombardear
      las concesiones internacionales les hicieron fracasar en el
      intento.
    
Al mediodía los japoneses trataron de asaltar los almacenes con
      tanquetas y cañones. Los disparos abrieron boquetes en la pared
      oeste, que carecía de ventanas, lo cual benefició a los
      defensores. Un grupo de soldados trató de acceder al segundo piso
      mediante escalas, pero fueron rechazados por el propio Xie. Un
      soldado, alterado por el combate, se arrojó del edificio con un
      cinturón de granadas de mano, con lo que se suicidó matando a unos
      20 japoneses. Los ciudadanos de Shanghái informaban a los
      defensores de los movimientos enemigos escribiendo grandes
      carteles o incluso llamando por teléfono.
    
Ese día tuvo lugar en Túnez el segundo congreso del Neo-Destour.
      Durante los últimos años sus dirigentes habían entablado
      conversaciones más o menos prometedoras con el gobierno francés de
      Léon Blum, pero con la llegada al poder de Chautemps algunos
      consideraban que la vía diplomática estaba agotada y el partido
      estaba dividido en dos facciones. Habib Burguiba trataba de ser
      conciliador para mantener la unidad de acción, pero se mostró
      partidario del diálogo con Francia:
    
La independencia sólo vendrá de tres maneras: una revolución popular, violenta y extendida que ponga fin al protectorado; una derrota militar francesa durante una guerra contra otro país; una solución pacífica y gradual, con la ayuda de Francia y bajo su supervisión. El desequilibrio de fuerzas de poder entre el pueblo tunecino y el francés elimina toda posibilidad de que haya una victoria popular. Una derrota militar francesa no traerá la independencia, porque caeremos bajo las garras de un nuevo colonialismo. Por lo tanto, sólo queda el camino de una liberación pacífica bajo la supervisión de Francia.
El 30 de octubre fue fusilado Vladímir
      Miliutin, apenas un día después de haber sido condenado a muerte.
    
Boris Karloff estrenó la película Al oeste de Shanghái,
      en la que interpreta a un señor de la guerra chino. Bela Lugosi
      estaba interpretando a un científico loco en un serial.
    
Los japoneses sometieron a los almacenes de Sihang a un intenso y
      continuado bombardeo de artillería. Mientras tanto, lejos de las
      concesiones, los japoneses habían cruzado el río Suzhou y
      amenazaban con rodear a las fuerzas chinas que defendían Shanghái.
    
Las potencias occidentales no veían con buenos ojos tener la
      guerra tan cerca, y habían empezado a negociar con ambos bandos la
      rendición de los almacenes de Sihang "por razones humanitarias".
      Chiang Kai-shek consideraba que la batalla ya había sido ganada,
      pues el efecto propagandístico había sido un éxito y como maniobra
      de distracción también le había permitido redistribuir sus tropas.
      Los japoneses también accedieron a la retirada de los chinos, pero
      luego se desdijeron. Por su parte, Xie Jinyuan era partidario de
      resistir hasta el final. Finalmente, fue convencido y el 1 de noviembre 376 defensores fueron
      evacuados en pequeños grupos hasta la concesión británica (otros
      27 estaban demasiado graves para moverse). Los japoneses
      dispararon sobre el puente por el que cruzaban el río e hirieron a
      diez de los soldados. Luego se les incautaron las armas y fueron
      puestos bajo arresto bajo custodia italiana, porque los japoneses
      habían amenazado con invadir las concesiones si se les permitía
      salir de la zona. No obstante, en su reclusión recibían frecuentes
      visitas de los ciudadanos de Shanghái, que organizaban actuaciones
      de todo tipo para entretenerlos, y también clases de lenguas
      extranjeras, de matemáticas y hasta de teología cristiana.
    
Agatha Christie publicó ese año dos novelas protagonizadas por
      Hércules Poirot: El testigo mudo y Muerte en el Nilo.
      
    
Pío Baroja publicó su novela Locuras de carnaval.
    
El 2 de noviembre Lérida sufrió uno de
      los bombardeos más cruentos de toda la guerra civil. Por motivos
      desconocidos, las sirenas de alarma no sonaron, y la población fue
      tomada por sorpresa. En un colegio, unos 60 alumnos quedaron
      sepultados, y un autobús recibió un impacto que no dejó
      supervivientes. En total se calcula que hubo unos 250 muertos y
      750 heridos.
    
El 3 de noviembre se reunieron en
      Bruselas a instancias de Chiang Kai-shek representantes de los
      Estados Unidos, Bélgica, Gran Bretaña, China, Francia, Italia, los
      Países Bajos y Portugal. Japón y Alemania habían sido invitados,
      pero habían rechazado su participación. Chiang apelaba a un
      antiguo tratado firmado por las grandes potencias hacía ya quince
      años sobre sus relaciones con China, pero que nunca había tenido
      un contenido claro, y esperaba que las potencias occidentales
      ayudaran a China a enfrentarse a la invasión japonesa.
    
Ese día fue fusilado el director de cine y teatro soviético Les
        Kurbas, tras haber pasado cuatro años en campos de trabajo.
      En cambio, el escritor Mykola Kulish sólo había pasado
      tres.
    
El 6 de noviembre Italia se sumó al pacto
        antikomitern que habían firmado Alemania y Japón el
      año anterior.
      
El 7 de noviembre se estabilizó de
      nuevo el frente de Aragón después de que los nacionales tomaran la
      sierra de San Pedro. Nuevamente, los republicanos habían ganado un
      poco de terreno, pero que no compensaba el esfuerzo bélico
      realizado.
    
Por esas fechas los nacionales liberaron a unos 11.000 de los
      soldados vascos que se habían rendido en Santoña, pero otros 5.400
      estaban asignados a "batallones de trabajo", es decir, obligados a
      realizar trabajos forzados, y otros 5.600 siguieron en prisión. Se
      había ejecutado a 510 de ellos.
    
El "rey" Javier I de España entró en el país para declarar
      expulsados del movimiento carlista a todos los que habían aceptado
      el decreto de unificación franquista, y para protestar
      personalmente ante Franco por dicho decreto. Después de haber
      visitado varias ciudades del norte y de Andalucía, fue conminado a
      abandonar el país, y entonces marchó a Portugal, para regresar
      finalmente a Francia.
    
El 9 de noviembre desembarcó al sur de
      Shanghái un nuevo ejército japonés, bajo el mando del general Heisuke
        Yanagawa, frente al cual el agotado ejército chino no tenía
      ninguna posibilidad de resistir, así que Chiang Kai-shek ordenó la
      retirada general del frente de Shanghái y dispuso a sus tropas
      para defender la capital Nankín de un posible ataque japonés. La
      pérdida de Shanghái fue un duro golpe para China, pues el 85% de
      los ingresos del gobierno de Chiang Kai-shek provenían de
      Shanghái, que era la capital económica del país.
    
Cinco agricultores judíos fueron asesinados en Palestina mientras
      trabajaban la tierra.
    
En Brasil, el 10 de noviembre Getúlio
      Vargas anunció por radio que asumía poderes excepcionales, disovía
      el Congreso y anulaba las elecciones presidenciales que tenían que
      celebrarse el año siguiente, en parte por la amenaza comunista, en
      parte porque él no podía presentarse a ellas. Esa misma noche
      publicó un documento que sustituía a la Constitución y que
      concentraba todo el poder en sus manos. El régimen definido por
      dicho documento se conoce como el Estado Novo. En la
      práctica Vargas protagonizó un autogolpe sin violencia. Vargas
      abolió los partidos políticos, impuso la censura a los medios de
      comunicación y llenó las cárceles de disidentes.
    
El 11 de noviembre el Irgún mató a dos
      árabes en unas cocheras de autobuses en Jaffa, e hirió a otros
      cinco.
    
Los japoneses tomaron Shouyang, con lo que los chinos
      tuvieron que abandonar Xinkou y retirarse a Taiyuan para no ser
      rodeados. La capital cayó poco después, y así los japoneses se
      hicieron con el control de todo el norte de China.
    
Ese día fue fusilado el poeta Serguéi Grigórievich Chaváin.
      
    
El 12 de noviembre se estrenó El
        último gangster, con Edward G. Robinson interpretando su
      típico papel de gangster junto a James Stewart, quien ese
      año estrenaría también con éxito otras dos películas: El
        séptimo cielo y Los cadetes del mar. Robinson había
      estrenado poco antes Kid Galahad, dirigida por Michael
      Curtiz, junto a Bette Davis y Humphrey Bogart, en la que
      interpreta al manager de un boxeador, malhumorado pero en el fondo
      de buen corazón.
    
El 13 de noviembre los japoneses
      rebasaron la nueva línea defensiva que los chinos habían
      establecido frente a Nankín.
    
El año anterior el director Henry King había dado un
      papel secundario a un joven actor de 22 años llamado Tyrone
        Edmund Power III, y los resultados no habían sido malos.
      Ahora estrenaba La segunda luna de miel, una comedia
      romántica, la tercera que protagonizaba este año después de Amor
        y periodismo y Romance sobre hielo, todas ellas con
      muy buenos resultados.
    
El 14 de noviembre el Irgún perpetró
      una serie de atentados casi simultáneos en Jerusalén. A las 7 de
      la mañana dos peatones árabes fueron tiroteados en una calle,
      media hora después cayeron otros dos, en ambos casos sobrevivió
      una de las dos víctimas. Poco después otra unidad del Irgún
      atacaba un autobús, matando a tres pasajeros y dejando heridos a
      otros ocho. Ese día fue recordado como "el domingo negro", si bien
      el Irgún se refería a él como "el día en que se rompió la
        Havlagah", es decir, la política de contención que hasta
      entonces había sido autoimpuesta.
    
Seyid Riza y varios de sus seguidores habían sido juzgados por
      rebelión. El juicio se desarrolló en turco, lengua que los
      acusados no entendían, y no se les proporcionó ni un intérprete ni
      un abogado. Once acusados fueron condenados a muerte, aunque
      cuatro penas fueron rebajadas luego a 30 años de cárcel. Como Riza
      tenía casi 78 años, la ley impedía que fuera ejecutado, pero el
      tribunal resolvió el problema decidiendo que su edad pasara a ser
      de 54 años. Las sentencias se dictaron precipitadamente, porque
      estaba prevista una visita de Atatürk y las autoridades locales
      temían que pudiera indultarlo si era puesto al corriente del caso.
      Seyid Riza no entendió nada hasta el 15 de
        noviembre, cuando vio el patíbulo. Entonces dijo: "Vais
        a ahorcarme". Luego se dirigió al ministro de Asuntos
      Exteriores turco, que estaba presente, y le preguntó: "¿Has
        venido desde Ankara para ahorcarme?". Cuando le preguntaron
      si quería decir unas últimas palabras, dijo: "Tengo cuarenta
        liras y un reloj. Dádselo a mi hijo". Seguidamente se
      dirigió a la sala casi vacía como si estuviera llena de gente y
      dijo: "Somos los hijos de Karbala, somos intachables. ¡Esto es
        una vergüenza, es cruel, es un crimen!" Luego apartó al
      verdugo de un empujón, se subió él mismo a la silla, se ajustó la
      soga, dio una patada a la silla y se ahorcó a sí mismo.
    
Chiang Kai-shek reunió a su Estado Mayor y propuso defender
      Nankín a toda costa. Argumentaba que había que ganar tiempo a ver
      si las grandes potencias terminaban interviniendo a favor de
      China, o al menos imponiendo sanciones a Japón, y además, aducía
      que conservar la capital aumentaría su capacidad de negociación en
      una conferencia de paz. La mayor parte de sus oficiales
      discrepaban, aduciendo que el ejército chino necesitaba tiempo
      para recuperarse después del desgaste sufrido en Shanghái, así
      como que Nankín era indefendible por su topografía. Chiang se puso
      furioso y llegó a afirmar que defendería él sólo la capital, pero
      entonces el general Tang Shengzhi le mostró su apoyo y se
      ofreció a organizar la defensa. Ese mismo día la conferencia de
      Bruselas emitió un comunicado en el que, en contra de la tesis
      japonesa de que la guerra sino-japonesa era un asunto particular
      de ambos países, las potencias consideraban que debía resolverse
      mediante una negociación en la que participaran todas las naciones
      que habían participado en la conferencia.
    
El 19 de noviembre el general Yanagawa
      rompió la última línea defensiva china que lo separaba de Nankín.
      Con ello estaba desobedeciendo órdenes de sus superiores, ya que
      el gobierno japonés había prohibido al ejército alejarse de
      Shanghái, pues tenía intención de poner fin a la guerra. El
      general Iwane Matsui, que estaba al mando de las fuerzas
      japonesas que estaban en Shanghái antes de la llegada de Yanagawa,
      se opuso nominalmente a su iniciativa, pero al mismo tiempo se
      ofreció a enviarle refuerzos.
    
Fred Astaire estrenó Una damisela en apuros, dirigida por
      George Stevens y con música del ya fallecido George
      Gershwin. Astaire había insistido en rodar una película sin Ginger
      Rogers, simplemente por no encasillarse, y en esta película su
      pareja fue Joan de Beauvoir de Havilland, la hermana menor
      de Olivia de Havilland, que había iniciado su carrera hacía dos
      años, aunque su primer papel protagonista lo había tenido ese
      mismo año (y ésta era la cuarta película que protagonizaba). Había
      adoptado el nombre artístico de Joan Fontaine. La película
      no tuvo éxito (en parte porque Fontaine ni cantaba ni bailaba,
      cosa extraña en un musical), así que Astaire reconsideró volver a
      trabajar con Ginger Rogers y la RKO empezó a cuestionarse las
      posibilidades de su nueva promesa.
    
Olivia de Havilland, en cambio, protagonizó con éxito tres
      comedias ese año: Un día de primavera, El gran Garrick y La
        aventura de medianoche, la tercera de las cuales se
      estrenaba el 20 de noviembre. 
    
El ejército chino y equipos de trabajadores reclutados para tal efecto se apresuraron a reforzar las defensas de Nankín, pero el gobierno se trasladó a Chongqing, que a partir de ese momento fue la capital de China.
El 21 de noviembre se estrenó en
      Leningrado la quinta sinfonía de Shostakovich. Aunque hubo algunos
      críticos que quisieron continuar las acusaciones de "formalismo"
      que habían obligado al compositor a retirar su cuarta sinfonía, lo
      cierto fue que la obra tuvo un gran éxito popular y las
      autoridades comunistas admitieron que Shostakovich había enmendado
      todos los "errores estilísticos" que se le habían reprochado
      anteriormente. Es posible que eso le librara de seguir el camino
      de su colaborador Adrian Piotrovsky, que unos días antes había
      sido arrestado por la NKVD y ese mismo día fue fusilado sin
      necesidad de pasar por el tedioso trámite de un juicio. Sobre la
      sinfonía de Shostakovich, se dice que hubo asistentes al estreno
      que lloraron de emoción, pero es posible que las virtudes que el
      público encontró en la obra no fueron las mismas que encontró la
      censura soviética: el tercer movimiento tiene un tono fúnebre
      capaz de excitar fácilmente recuerdos y emociones en muchos de los
      desdichados ciudadanos soviéticos que habían perdido recientemente
      familiares y amigos víctimas de los comunistas.
    
A Serguéi Prokófiev se le estaba dando peor que a Shostakovich la
      labor de hacer la pelota a los comunistas. Había compuesto una Cantata
        por el vigésimo aniversario de la revolución de octubre,
      pero no pudo estrenarla. En una audición previa ante el Comité
        de Asuntos de Arte, el crítico Platón Mijáilovich
        Kerzhentsev le había preguntado: ¿Pero qué crees que
        estás haciendo, Serguéi Serguéyevich, tomando textos que
        pertenecen al pueblo y acompañándolos de esa música
        incomprensible? Y cuando un miembro reputado del Partido
        Comunista de Toda la Unión te hacía una pregunta así, lo más
      prudente era hacer lo que hizo el compositor: retirar la obra.
    
El 24 de noviembre se reunió por
      última vez la conferencia de Bruselas sin acordar ninguna medida
      que pudiera detener el avance japonés en China. Mientras tanto el
      gobierno japonés anulaba la orden de no atacar Nankín "debido
        a circunstancias fuera de su control". 
    
Ese día fue ejecutado por "escritura subversiva" el dramaturgo
      soviético Nikolay Oleynikov. La misma suerte corrió el
      sinólogo Nikolai Nevsky, acusado de espiar para los
      japoneses. No pudo negar las evidencias concluyentes que pesaban
      sobre él, como que su esposa fuera japonesa.
    
El 25 de noviembre se clausuró la
      Exposición Universal de París. Había contado con más de 31
      millones de visitantes.
    
El 26 de noviembre fue ejecutado en
      Moscú el ex primer ministro mongol Peljidiin Genden.
    
Los distintos oficiales japoneses habían iniciado una competición
      particular para ver quién llegaba antes a Nankín. El 30 de noviembre el ejército de Yanagawa
      tomaba la ciudad de Guangde tres días antes de lo
      previsto.
    
El gobierno republicano español se trasladó de Valencia a
      Barcelona.
    
El 2 de diciembre los japoneses
      tomaron Danyang cinco días antes de lo previsto. Para avanzar a
      tal velocidad, los japoneses llevaban poco equipaje y se proveían
      de alimentos mediante saqueos.
    
Ese día se reunió por primera vez el Consejo Nacional del
      Movimiento, aunque no tenía un gran papel político. En palabras de
      José María Pemán, "es un órgano colegiado que se reúne de vez
        en cuando para escuchar lo que dice el aconsejado". 
    
La Metro Goldwyn Mayer no sabía bien qué hacer con Judy Garland
      hasta que alguien tuvo la idea de emparejarla con Mickey Rooney en
      la comedia musical Los caballeros no lloran. Fue un
      fracaso de taquilla, pero mostró que la pareja encajaba
      perfectamente y que esto podía ser explotado.
    
El 5 de diciembre Chiang Kai-shek se
      presentó personalmente en un campamento cerca de Jurong
      para animar a los soldados a resistir la acometida japonesa, pero
      ese mismo día tuvieron que salir huyendo de la artillería enemiga.
    
El 6 de diciembre Franco decretó el
      bloqueo de todos los puertos republicanos. La flota nacional se
      atribuía el derecho de detener barcos fuera de las aguas
      territoriales en caso de sospecha de que transportaran
      "contrabando", sin que se especificara qué clase de cargas se
      considerarían como tal. Los soviéticos empezaron a usar una ruta
      alternativa de abastecimiento a la república: desde el mar Báltico
      transportaban las mercancías hasta la costa atlántica de Francia,
      y el resto del trayecto se hacía por tierra.
    
Los chinos lograron contener en Chunhuazhen la vanguardia
      del ejército japonés hasta el 8 de diciembre,
      cuando llegó el grueso del ejército. A partir de ese momento
      Nankín quedaba al alcance de la artillería japonesa.
    
El plazo que la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje había
      dado a las petroleras mexicanas para acatar su laudo había pasado,
      y los sindicatos convocaron otra huelga para presionar a la Junta
      a que adoptara una resolución final.
    
En Portugal se creó la Mocidade Portuguesa femenina,
      cuyos objetivos eran formar una nueva mujer, buena católica,
      futura madre y esposa obediente.
    
El 9 de diciembre el general Matsui
      ofreció a los chinos la posibilidad de negociar la rendición
      pacífica de Nankín, pero el general Tang no respondió.
    
Alemania y Rumanía firmaron un tratado comercial, y al mismo
      tiempo el rey Carlos II se reunía con el embajador francés para
      asegurarle que Francia podía seguir considerando a Rumanía como un
      aliado.
    
El 10 de diciembre Matsui lanzó un
      ataque a gran escala contra Nankín.
    
Ese día se celebró, como cada año, la ceremonia de entrega de los
      Premios Nobel.
    
Ernest Lawrence, el constructor del primer ciclotrón, había
      construido otro mayor y más potente, y ese año recibió la medalla
      Hughes de la Royal Society de Londres. El año anterior
      había recibico la visita del físico italiano Emilio Gino Segrè,
      quien consiguió que le cediera algunas piezas de su ciclotrón que
      habían sido retiradas porque se habían vuelto radiactivas. Segrè y
      uno de sus colaboradores, Carlo Perrier, analizaron la
      pieza y obtuvieron las primeras muestras de un nuevo elemento
      químico, al que posteriormente llamarían Tecnecio. Se
      trataba del elemento de número atómico 43, el más bajo de todos
      los "agujeros" que todavía tenía la tabla periódica, al que
      Mendeleev había llamado eka-manganeso. Hacía más de medio
      siglo que los químicos lo estaban buscando infructuosamente, y fue
      el primero en haberse sintetizado artificialmente (aunque
      inadvertidamente, con el ciclotrón) antes de ser encontrado en la
      naturaleza (en la naturaleza es muy escaso, porque es radiactivo y
      se desintegra en otros elementos).
    
Los físicos Carl David Anderson y Seth Neddermeyer, estudiando rayos cósmicos con una cámara de niebla descubrieron una nueva partícula subatómica que creyeron que era el mesón predicho por Hideki Yukawa dos años atrás, pero resultó ser otra distinta que más adelante sería llamada muón.
James Hillier y Albert Prebus, en la universidad
      de Toronto, construyeron el primer microscopio electrónico,
      capaz de ampliar 7.000 veces un objeto, basándose en un prototipo
      diseñado cinco años antes por los alemanes Ernst Ruska y Max
        Knoll.  Un microscopio óptico usual no puede ampliar
      más de 2.000 veces.
    
Ese año la BBC británica retransmitió por televisión la primera
      obra de Shakespeare (una versión reducida a 30 minutos de Noche
        de Reyes) y también el primer partido de fútbol.
    
El 11 de noviembre Chiang Kai-shek
      telegrafió a Tang para ordenar la evacuación de Nankín. Esto
      suponía cruzar el río Yangtze, que cortaba la retirada.
    
Ese día Italia se retiró de la Sociedad de Naciones.
    
El 12 de diciembre se inició la
      evacuación de Nankín, que resultó bastante caótica. Algunas
      unidades lograron cruzar ordenadamente el Yangtze, pero otras
      cayeron en campos de minas dispuestos por los propios chinos, y
      miles de soldados y civiles que trataban de llegar al río fueron
      detenidos por otros soldados que disparaban contra la multitud.
      Finalmente algunos se abrieron paso hasta saturar embarcaciones
      que se hundieron por el sobrepeso. Algunos se lanzaron al río
      usando troncos u otros materiales como flotadores, de los cuales
      muchos fueron arrastrados por la corriente y murieron ahogados. En
      un momento dado los japoneses estuvieron en posición de disparar
      sobre quienes trataban de cruzar el río de un modo u otro, por lo
      que muchos chinos se resignaron a volver a la ciudad. Los soldados
      se quitaban sus uniformes y robaban ropas de civiles a quienes
      podían. Las calles quedaron cubiertas de armas y ropa militar.
    
Ese día se celebraron en la Unión Soviética elecciones a las dos
      cámaras que establecía la constitución aprobada el año anterior,
      el Soviet de la Unión y el Soviet de las Nacionalidades.
      Teóricamente cualquier partido podía presentarse a ellas, e
      incluso algunos miembros de la Iglesia Ortodoxa Rusa pretendieron
      formar un partido religioso, dado que la constitución garantizaba
      la libertad de religión. Sin embargo, los candidatos que se
      presentaron como alternativas a los del PCUS fueron arrestados a
      mitad de año y se pasó a un sistema de candidatos únicos más
      propio de una democracia comunista (no fuera a parecerse demasiado
      a las deplorables democracias burguesas). Por si a algunos
      ciudadanos les pudiera quedar alguna duda de a qué candidatos
      debían votar libremente, la policía secreta había hecho arrestos
      masivos unos días antes de las elecciones. Todas las religiones
      distintas del marxismo-leninismo empezaron a ser perseguidas y
      presentadas como un instrumento de la sociedad capitalista.
    
Ese año terminó el segundo plan quinquenal soviético. El
      resultado conjunto de los dos primeros planes era un crecimiento
      del 690% de la metalurgia y la siderurgia. En otros sectores
      industriales el crecimiento también había sido espectacular. En
      gran parte se debió a la mano de obra esclava de los presos
      políticos, y también contribuyó significativamente la mano de obra
      estúpida de los trabajadores estajanovistas, que se
      esforzaban por batir los objetivos de producción a cambio de una
      medalla y una mención especial. La propaganda que hizo el gobierno
      soviético del estajanovismo era capciosa. Por ejemplo, se alardeó
      de que un obrero llamado Bussigin había fabricado 127
      berbiquíes por hora, mientras que en la Ford estadounidense apenas
      se llegaba a 100. El truco estaba en que los trabajadores
      estajanovistas obtenían esas marcas haciendo esfuerzos olímpicos
      un día, pero en los siguientes su productividad se reducía
      drásticamente por el agotamiento, mientras que las tasas de
      producción occidentales con las que se comparaba eran sostenidas
      en el tiempo. Además, el estajanovismo provocaba averías en las
      máquinas y, como no podía ser de otro modo, descontento entre los
      trabajadores cuerdos. El régimen soviético trató de ocultar esos
      hechos, pero se sabe que a un estajanovista de una fábrica de
      cartón le quemaron cartón bajo sus pies, y también hay datos de
      otro estajanovista asesinado por sus compañeros.
    
En el campo la colectivización de tierras había llegado al 99%
      (al precio de unos cinco millones de muertos de hambre o por
      persecución). Es interesante señalar que, mientras a los
      campesinos se les prohibía cualquier clase de propiedad privada,
      Stalin disfrutaba de varias residencias y casas de campo
      destribuidas por todo el país, que eran mantenidas y vigiladas con
      recursos públicos para su uso privado. Y no era el único caso. En
      el momento de su detención, Guénrij Yagoda tenía dos pisos y una
      casa de campo en Moscú (en los que tenía abundante material
      pornográfico). Se había gastado cuatro millones de rublos en su
      decoración, que incluía un jardín con 2.000 orquídeas y rosas.
    
En otro orden de cosas, la educación básica estaba extendiéndose
      hasta casi la totalidad de la población soviética. Ahora bien, las
      llamadas "purgas estalinistas" fueron acompañadas de una
      revisión de la historia que se enseñaba en las escuelas, en cuyos
      libros de texto fueron desapareciendo paulatinamente nombres y
      fotografías de bolcheviques que habían participado en la
      revolución rusa. Al final daba la impresión de que Lenin y Stalin
      habían derrotado ellos solos a todos los ejércitos zaristas e
      implantado el comunismo justo a continuación.
    
El 13 de diciembre Nankín estaba en
      manos de los japoneses, y a patir de esa noche los soldados
      ocupantes iniciaron una oleada de saqueos, matanzas, violaciones y
      toda clase de excesos que se prolongaron durante varias semanas,
      de lo que fueron testigos muchos de los occidentales que vivían en
      la ciudad. Mataban a hombres, mujeres, niños y ancianos. Algunos a
      punta de bayoneta, otros rociados con gasolina y luego quemados,
      otros decapitados, muchos eran obligados antes a cavar sus propias
      fosas. Otros eran enterrados vivos, y a algunos se les dejaba la
      cabeza a ras de tierra, para después ser pisoteados por caballos o
      por tanques, o regados con agua hirviendo. Hay testigos que hablan
      de soldados que lanzaban bebés al aire para recogerlos
      ensartándolos con sus bayonetas. Las mujeres eran violadas y luego
      mutiladas hasta morir. Se obligaba a padres a violar a sus hijas,
      a hijos a violar a sus madres, a monjes a violarse entre ellos...
      En total se calcula que murieron más de 100.000 chinos.
    
El 14 de diciembre los japoneses
      establecieron en
      
      Běipíng un gobierno títere llamado Gobierno provisional de la
        República de China, bajo el cual la ciudad volvió a
      recuperar su nombre tradicional de Pekín (capital del
      norte). No tuvo ninguna autoridad real.
    
Ese día se estrenó Manequin, dirigida por Frank Borzage y
      protagonizada por Spencer Tracy y Joan Crawford. Dos años de
      éxitos consecutivos estaban convirtiendo a Spencer Tracy en una de
      las grandes estrellas de Hollywood. 
    
Tras la conquista de Asturias, Franco se proponía tomar
      Guadalajara para luego lanzar la ofensiva definitiva contra
      Madrid. Ya estaba ultimando los preparativos cuando se vio
      sorprendido por un ataque republicano sobre Teruel. Tras los
      fallidos intentos de tomar Zaragoza y Huesca, ahora la república
      ponía su punto de mira sobre la tercera capital aragonesa. En la
      ciudad los nacionales contaban con más de 3.000 hombres armados
      bajo el mando del coronel Domingo Rey d'Harcourt. En
      cuanto se inició el ataque se le sumaron civiles sin entrenamiento
      militar hasta alcanzar casi los 4.000 hombres. Los republicanos
      contaban con casi 100.000 hombres bajo el mando del teniente
      coronel Juan Hernández Saravia. El ataque se inició la
      tarde del 15 de diciembre con la toma
      de Concud. 
    
José Robles Pazos era profesor de lengua española en una
      universidad de Baltimore, donde se había hecho amigo de John Dos
      Passos, varias de cuyas obras había traducido al español. Solía
      veranear con su familia en España, su país natal, y allí le había
      pillado el estallido de la guerra civil. Simpatizante socialista,
      pidió un permiso a su universidad para permanecer en España y se
      puso al servicio de la República. Fue asignado como traductor al
      Ministerio de la Guerra, donde alcanzó el grado de teniente
      coronel. Sus conocimientos de ruso hizo que lo asignaran como
      intérprete y colaborador del general soviético Vladimir Gorev,
      que había quedado cercado en Asturias por las tropas franquistas
      hasta que finalmente pudo ser evacuado y recientemente había
      regresado a la Unión Soviética. En su contacto frecuente con los
      comunistas debió de traslucir que Stalin no le caía muy bien,
      porque por esas fechas fue arrestado en Valencia por agentes del
      Partido Comunista de España al servicio de la NKVD. Su mujer logró
      averiguar su paradero y pudo verlo en un par de ocasiones, en las
      cuales Robles le aseguró que todo era un error y que en breve
      sería liberado. Sin embargo, no fue así. Desapareció sin que se
      volviera a saber de él. Todo apunta a que fue torturado y
      asesinado por los soviéticos.
    
Dos Passos se encontraba también en España. Había llegado ese año
      para colaborar con el cineasta neerlandés Joris Ivens en
      un documental. Ivens, a su vez, había llegado acompañado del
      periodista estadounidense Ernest Hemingway. La desaparición de
      Robles Pazos hizo que Dos Passos rompiera su amistad con
      Hemingway, pues éste se burló de los lamentos de Dos Passos
      calificando el asesinato de Robles como "necesario y correcto para
      la causa". Dos Passos escribiría más tarde:
    
He llegado a pensar, sobre todo desde mi viaje a España, que las libertades civiles deben protegerse en todo momento. Estoy convencido de que la introducción por parte de los comunistas de los métodos de la GPU [la antigua policía política soviética, antecesora de la NKVD] hizo tanto daño como bien hicieron sus tanques, sus pilotos y sus soldados experimentados. El problema de una policía secreta todopoderosa en manos de fanáticos, o de cualquiera, es que una vez que se pone en marcha no se detiene hasta que no ha corrompido todo el cuerpo político. Me temo que eso es lo que está pasando en Rusia.
Hemingway publicó ese año su novela Tener y no tener. 
    
John Steinbeck publicó De ratones y hombres, considerada
      una de sus mejores novelas.
    
El 16 de diciembre el embajador alemán
      Eberhard von Stohrer se entrevistó con Nicolás Franco para
      exigirle la venta de las 73 concesiones mineras que Alemania
      aspiraba a conseguir en España. Franco se negó a aceptar la venta
      en bloque.
    
El 17 de diciembre los republicanos ya
      tenían rodeada Teruel.
    
Chiang Kai-shek emitió un discurso por radio en el que dijo:
    
El resultado de esta guerra no se decidirá en Nankín ni en ninguna otra gran ciudad, sino en el campo de nuestro vasto país y por la voluntad inflexible de nuestro pueblo [...] Al final abatiremos al enemigo. En su momento el poder militar del enemigo no importará nada. Puedo aseguraros que la victoria final será nuestra.
El 18 de diciembre la Junta Federal de
      Conciliación y Arbitraje hizo firme su dictamen que obligaba a las
      petroleras mexicanas a aceptar las reivindicaciones de sus
      trabajadores. 
    
El 19 de diciembre los republicanos
      entraron en Teruel mientras los nacionales les presentaban una
      enérgica resistencia en las calles. Los nacionales se parapetaron
      en la zona sur de la ciudad.
    
El 20 de diciembre el embajador alemán
      von Stohrer se entrevistó con el propio Franco para exigir una vez
      más la venta de las 73 concesiones mineras que ambicionaban los
      alemanes. La conversación fue agria, pero Franco se mantuvo en su
      negativa a una venta en bloque, si bien se comprometió a estudiar
      cada caso por separado.
    
El 21 de diciembre Mussolini nombró
      virrey del África Oriental Italiana al príncipe Amadeo de
        Saboya, tercer duque de Aosta, hijo del duque Manuel
      Filiberto y nieto del que fuera rey Amadeo I de España.
    
Ese día se estrenó "la locura de Disney", es decir, Blancanieves
        y los siete enanitos, el primer largometraje de dibujos
      animados, que fue un rotundo éxito de público y crítica. A
      mediados de año Disney se había quedado sin dinero, y para obtener
      el crédito necesario para terminar la película tuvo que mostrar
      una versión provisional a los directivos del Banco de América.
      El presupuesto previsto había sido de 250.000 dólares, pero
      finalmente el coste fue de 1.488.000 dólares. Disney había tenido
      que hipotecar todas sus propiedades y, si los resultados no
      hubieran sido buenos, su ruina habría sido completa. Pero la
      crítica calificó la película como una auténtica obra de arte,
      recomendable para niños y adultos. Disney había cuidado hasta el
      último detalle: nuevas técnicas de animación, Technicolor,
      números musicales, un guión tan cuidado como el de la mejor
      película con actores reales, personajes con una psicología muy
      bien definida, etc. Cuando terminó la película el público le
      dedicó una enorme ovación. Durante los años siguientes se
      convirtió en la película sonora que más dinero había recaudado en
      todo el mundo hasta entonces. En la actualidad es la décima
      película más taquillera de la historia (teniendo en cuenta la
      inflación).
    
El 23 de diciembre Franco ordenó
      suspender las operaciones previstas en Guadalajara para reforzar
      Teruel.
    
En Rumanía se celebraron elecciones parlamentarias, en las que
      Corneliu Zelea Codreanu había entablado una alianza con Iuliu
      Maniu, el líder del Partido Campesino Nacional, a la que se
      adhirieron otros partidos para oponerse a las habituales
      manipulaciones electorales que permitían al rey y a su gobierno
      obtener los resultados deseados (la Guardia de Hierro estaba
      ilegalizada, pero Codreanu se presentó a las elecciones bajo un
      nuevo partido político llamado Todo por la Patria). El
      resultado fue que el partido del gobierno obtuvo un 36% de los
      votos, que no le bastaban para tener la mayoría absoluta. El
      primer ministro Tătărescu presentó su dimisión, pero el rey podía
      elegir libremente al primer ministro, así el 28
        de diciembre Carlos II entregó el cargo al líder de uno
      de los partidos menos votados: el poeta Octavian Goga,
      fundador del Partido Nacional Cristiano, cuya ideología
      era también nacionalsocialista, pero era monárquico, enemigo de
      Codreanu y mantenía mejores relaciones con los nazis alemanes y
      los fascistas italianos. El rey confiaba en que, desde el
      gobierno, Goga pudiera ganarse con su radicalismo a los votantes
      de Codreanu. Además, Carlos II escribió en su diario que el
      patentemente estúpido Goga no duraría mucho como primer ministro,
      y su caída le permitiría "adoptar medidas más fuertes que me
        liberarían a mí y a país de la tiranía de los intereses
        partidistas". 
    
Ese día murió el compositor Maurice Ravel.
    
El primer ministro egipcio, Mostafa El-Nahas había estado
      presionando al rey Faruq I en varios sentidos. Por una parte,
      había tratado de que despidiera a sus criados italianos, así como
      a su principal consejero, Ali Maher Pasha, su antecesor en
      el cargo, y por otra parte, ante sus diferencias de criterio con
      el monarca, El-Nahas apelaba a la autoridad del Parlamento.
      Finalmente, el 29 de diciembre el rey lo destituyó y nombró en su
      lugar a Mohamed Mahmoud Pasha, que también era miembro del
      Wafd. Cuando el Alto Comisionado Británico, Sir Miles
      Lampson, trató de explicarle que el gobierno británico no aprobaba
      el cambio, Faruq I le respondió que no le importaba si el Wafd
      tenía mayoría en el Parlamento, pero que quería un primer ministro
      que le obedeciera a él y no al Parlamento.
    
Ese día empezó el contraataque nacional en Teruel, bajo el mando
      de los generales José Enrique Varela y Antonio Aranda, que
      lograron un avance después de un intenso bombardeo. No obstante,
      el frente republicano resistió la acometida sin romperse.
    
Las empresas petroleras mexicanas presentaron un recurso de
      amparo ante el Tribunal Supremo de México frente a las exigencias
      que le imponía la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje. Al
      mismo tiempo las empresas empezaron a retirar su capital de los
      bancos mexicanos para llevarlo a los países de las empresas de las
      que eran filiales (principalmente los Estados Unidos, Gran Bretaña
      y los Países Bajos).
    
En Irlanda entró en vigor la nueva constitución, con lo que Éamon
      de Valera cambió su cargo de Presidente del Consejo Ejecutivo por
      su nuevo equivalente, que recibía el nombre de Taoiseach
      (una palabra irlandesa que significa "jefe").
    
El 31 de diciembre los nacionales llegaron hasta La Muela, cerca de Teruel los intensos bombardeos de la Legión Cóndor tuvieron que suspenderse durante dos días debido a una ventisca. Desde su posición, la artillería nacional podía bombardear el centro de Teruel, y durante la noche algunos soldados republicanos abandonaron sus posiciones sin que lo notaran los hombres de Rey d'Harcourt, pero al poco tiempo las volvieron a ocupar, con lo que fue como si no hubiera pasado nada.
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