Cartelera Túria

5/7/92

 

SALON DE LOS VITUPERADOS

"Belcebú o La Gula" 1995 de Alfonso Herráiz

La sala de exposiciones de la Universidad comienza la temporada con una estimulante colectiva que lleva por título "Objetos e imágenes de otros mundos", en la que pueden contemplarse trabajos de Teresa Tomás, Paco de la Torre, Alfonso Herraiz, Federico Fusi y Enric Balanzá. Para la ocasión, y como es práctica habitual en esta sala, se ha editado un atractivo catálogo con textos de Carlos Pérez, Adolfo Barberá e Isabel Ramallo, Juan Mocholí, José Antonio Garzón, Miguel Molina, Claude Denon Doubre, J. M. Olmos, que tratan de argumentar -como es, al fin y al cabo, su obligación- los productos artísticos expuestos, y explorar sus posibles puntos en común, que como también suele ocurrir suelen ser bastante peregrinos o arbitrarios. Pero qué importa que sea heteróclito el conjunto si el resultado es, como decíamos, estimulante.

Teresa Tomás y Paco de la Torre son dos artistas adscritos al movimiento de la metafísica mediterránea, que tiene entre sus referencias más notorias a cierta vanguardia italiana de principio de este siglo (de Chirico, señaladamente).

Luego observamos la inserción pintoresca (y que ratifica la simpática arbitrariedad de la que hablábamos más arriba) del artista italiano Federico Fusi.

Pero lo que más nos ha llamado la atención ha sido los trabajos de Alfonso Herráiz y Enric Balanzá. Herráiz expone piezas como "Lucifer o la soberbia" o "Belcebú o La Gula", que constituyen atinadas mezclas de inquietud e ironía. Esta última pieza ("Belcebú o La Gula") tiene ese toque de imagen que sabe encontrar un rápido acomodo en nuestra memoria visual, y no debido a la mera extravagancia -como pudiera parecer- sino a otra cualidad que nos sería difícil definir, y que quizá esté relacionada con el humor; el cual (según afirman algunos teólogos), es una de las armas más refinadas de las que se vale el Señor de las Moscas para tentar a las almas frágiles y dubitativas...

Por último observemos el políptico de Enric Balanza titulado, "Anotaciones". Balanzá es un pintor que creativamente se está poniendo cada vez más estupendo. Sus polípticos son como relatos o frases, donde la sintaxis está adquiriendo una creciente relevancia.

Hay algo decididamente poético en los polípticos de Enric Balanzá. El cine y las instantáneas de los periódicos le han llevado a una técnica próxima a los retablos medievales. Pero en los retablos medievales se narraba la historia de la Sagrada Familia con su contexto de entidades celestes y objetos sacros. En los retablos de Balanzá, por el contrario, se cuentan los eventos domésticos, triviales de una familia de la urbe contemporánea, rodeada de objetos solteros, aislados, náufragos de una sociedad postindustrial...

Entre los textos programáticos del catálogo de esta exposición, destacaremos el de Carlos Pérez titulado "Vituperados" en el que dice, entre otras cosas:

-Los "instaladores" odian la ironía y les repele el humor. Atraídos por la alquimia, desprecian el sano espíritu industrial de los electricistas, fontaneros y tipógrafos. Por ese motivo, la vanguardia es para ellos algo estúpido, caduco y sin sentido (... )-.

-Frente a los "instaladores" se sitúan los "vituperados". Mientras los primeros intentan que su obra genere una gran tensión en el entorno, los segundos optan por fórmulas relacionadas, fundamentalmente, con el impacto visual. Los "vituperados" (...) retoman el viejo empeño (utópico) de llevar las formas del arte moderno a la vida cotidiana-.

Concluye Carlos Pérez con esta acertada caracterización del grupo de «vituperados»: "Son artistas que han unido su imaginación para desterrar toda descripción inútil".

R. BALLESTER AÑÓN