ANTERIOR
ESTROFA LI SIGUIENTE

Del Júpiter soy hijo, de las ondas,
aunque pastor; si tu desdén no espera
a que el monarca de esas grutas hondas
en trono de cristal te abrace nuera,
Polifemo te llama, no te escondas,
que tanto esposo admira la ribera
cual otro no vio Febo más robusto
del perezoso Volga al Indo adusto.

Comentarios:

Ésta es la petición de mano. El cíclope ha descrito sus riquezas, ahora presume de ascendencia (de la que intenta resaltar el prestigio llamando a su padre Júpiter de las ondas) y a continuación ensalza su poderío físico. Sus méritos en este sentido (o lo que él considera como tales) se desarrollan en las estrofas siguientes.

ANTERIOR
ÍNDICE
SIGUIENTE