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LA INDEPENDENCIA DE TEXAS SIGUIENTE

El 1 de enero de 1836 la reina María II de Portugal se casó con Fernando de Sajonia-Coburgo, sobrino del duque Ernesto I de Sajonia-Coburgo.


Ese mismo año el duque Ernesto I visitó el palacio de Kensington, donde vivía su sobrina, la princesa Victoria de Gran Bretaña. El rey Leopoldo I de Bélgica estaba interesado en que su sobrino Alberto se casara con Victoria, principalmente porque el rey Guillermo IV de Gran Bretaña estaba interesado en casarla con uno de los hijos del rey Guillermo II de los Países Bajos. La visita fue un éxito, porque la joven Victoria se enamoró perdidamente de su primo Alberto.

El 6 de enero los semínolas atacaron la plantación de William Cooley, donde mataron a su esposa, a sus hijos y al tutor de sus hijos.

El 17 de enero una milicia de voluntarios se enfrentó a los semínolas en la batalla de Dunlawton. Los voluntarios tuvieron cuatro muertos y catorce heridos.

El 18 de enero Luis Fernández de Córdova expulsó al carlista Eguía de la ciudad de Arlabán, pero poco después tuvo que retirarse por el gran número de bajas que había sufrido.

El 26 de enero el peruano Felipe Santiago Salaverry fue derrotado en el combate del gramadal por el ejército Perú-boliviano dirigido por el general Anselmo Quiroz. Su derrota se debió fundamentalmente a que atacó únicamente con 600 hombres, sin esperar refuerzos. Salaverry se retiró entonces para unirse al grueso de su ejército.

En México Santa Anna había reunido un ejército de 6.000 hombres con el que avanzaba hacia Texas. Lo había dividido en dos columnas, una dirigida por él mismo marchaba directamente hacia Béxar por el interior, mientras que la otra, bajo el mando del general José de Urrea seguía la costa para asegurarse de que en cualquier momento podrían llegar suministros por mar. Sam Houston consideró que los texanos no estaban en condiciones de defender Béxar, así que envió al coronel James Bowie al mando de 30 hombres con instrucciones de llevarse la artillería de El Álamo y destruir el fuerte. Sin embargo, Bowie decidió que El Álamo tenía un gran valor estratégico y que había que defenderlo a toda costa. Envió mensajes al gobierno provisional texano comunicando su decisión y pidiendo hombres, dinero y pólvora de cañón. El 3 de febrero Travis llegó a Béxar con 30 hombres.

El 4 de febrero, con 2.000 hombres, Salaverry derrotó a Santa Cruz en la batalla de Uchumayo.

El ministro de economía francés había presentado al parlamento un proyecto de reducción de la deuda pública sin consultar a sus colegas y que obtuvo una oposición mayoritaria. El ministro había dimitido, pero el duque de Broglie no logró convencer a los diputados de que él no había estado al corriente del proyecto de su ministro, y el 5 de febrero se vio obligado a dimitir con todo su gobierno. El rey lo sustituyó por Adolphe Thiers, que ya había ocupado varios ministerios en los gobiernos precedentes.

El 7 de febrero Salaverry sufrió su derrota definitiva en Socabaya, donde fue hecho prisionero. En realidad se entregó bajo promesa de que se respetaría su vida, pero Santa Cruz ordenó que fuera fusilado pocos días después.

El 8 de febrero llegó a El Álamo Davy Crockett con otro pequeño grupo de voluntarios.

El 19 de febrero fueron guillotinados los autores del atentado contra el rey Luis Felipe I de Francia.

El 23 de febrero los habitantes de San Antonio de Béxar huyeron de la ciudad ante las noticias de la llegada de Santa Anna, que poco después la hizo ocupar por unos 1.500 soldados e inició el asedio a El Álamo.

El 24 de febrero Bowie cayó enfermo y Travis tomó el mando en El Álamo. Envió varios mensajes pidiendo ayuda, el más famoso de los cuales está fechado ese mismo día, y se ha convertido en un clásico del patriotismo norteamericano:

Ciudadanos y compatriotas:
Estoy siendo asediado por más de un millar de mexicanos bajo las órdenes de Santa Anna. He resistido un bombardeo continuo durante 24 horas y no he perdido un solo hombre. El enemigo ha pedido que nos rindamos incondicionalmente y en caso contrario la guarnición será pasada por la espada si el fuerte llega a ser tomado. He respondido a la petición con un disparo de cañón, y nuestra bandera todavía ondea orgullosa en las murallas. Nunca me rendiré o retiraré. Así que os pido en nombre de la Libertad, del patriotismo y de todo lo que es querido al carácter americano, que acudáis en nuestra ayuda con toda urgencia. El enemigo recibe refuerzos a diario y sin duda aumentará a tres o cuatro mil en cuatro o cinco días. Si esta llamada no es escuchada, estoy determinado a resistir tanto tiempo como me sea posible y morir como un soldado que nunca olvida lo que le debe a su propio honor y al de su país. Victoria o muerte.
    William Barret Travis

P.S.: El Señor está de nuestra parte. Cuando el enemigo apareció ante nuestra vista no teníamos ni tres celemines de maíz, pero hemos encontrado en las casas abandonadas 80 o 90 celemines y hemos traído al interior de las murallas 20 o 30 cabezas de ganado.

Mientras tanto, el 27 de febrero, los exploradores de Urrea encontraron a unos 70 soldados texanos acampados en San Patricio bajo el mando de Francis White Johnson, que estaba fraguando un insensato plan para atacar la populosa ciudad de Matamoros. Urrea lanzó un ataque por sorpresa que, tras unas horas de lucha, acabó con 20 texanos muertos y 32 prisioneros. Johnson fue capturado, pero logró escapar hasta Goliad.

Ese mismo día murió el presidente de México, Miguel Barragán, y José Justo Corro, uno de sus ministros, fue nombrado presidente interino.

El 1 de marzo los últimos militares rebeldes venezolanos se rindieron en Puerto Cabello. Mariño tuvo que marchar al exilio.

Ese mismo día los representantes texanos se reunieron de nuevo en Washington-on-the-Brazos y el 2 de marzo firmaron la Declaración de independencia de Texas, tras lo cual empezaron a redactar una constitución. Mientras tanto Urrea se enfrentaba en Agua Dulce con unos 27 soldados texanos que se dirigían a Goliad bajo el mando de James Grant, que resultó muerto junto con la mayoría de sus hombres. Santa Anna había dado orden de ejecutar a todos los prisioneros que fueran capturados, pero Urrea decidió encarcelar en Matamoros a los que se habían rendido.

El gobierno de los Estados Unidos había puesto la segunda guerra semínola en manos del general Winfield Scott. El general Edmund Pendleton Gaines reclutó unos 1.100 hombres en Nueva Orleans y embarcó hacia Florida y se internó en el territorio Semínola, donde construyó un fuerte desde el que pidió refuerzos al general Duncan Lamont Clinch. Sin embargo, Scott había ordenado a Chinch que permaneciera en Fort Drane. Tras permanecer unos días esperando órdenes, Clinch decidió marchar por su cuenta en ayuda de Gaines, de modo que la orden de hacerlo llegó un día después de su partida. Cuando encontró a Gaines, el 6 de marzo, éste llevaba ocho días resistiendo un ataque semínola y, faltos de suministros, sus hombres habían tenido que comerse a sus caballos. Clinch puso en fuga a los indios y así los soldados pudieron retirarse.

Ese mismo día Santa Anna lanzaba el ataque definitivo contra El Álamo, en el que no dejó supervivientes. Esto significa que mató a tanto los que se rindieron (se calcula que fueron unos seis) como a los heridos que estaban en la enfermería.

Dos decretos del primer ministro español, Juan Álvarez Mendizábal, el segundo de los cuales tenía fecha de 9 de marzo, establecieron una desamortización de los bienes eclesiásticos, por el que una gran cantidad de terrenos propiedad de la Iglesia fueron confiscados y subastados. El plan de Mendizábal era que la redistribución de estas propiedades creara una clase media que impulsara la economía española, pero el desarrollo del proyecto acabó en manos de comisiones municipales que fueron manipuladas por los grandes terratenientes. Éstos hicieron que las tierras fueran subastadas en grandes lotes cuyo precio sólo estaba al alcance de los nobles y burgueses adinerados. Así pues, los latifundios de la Iglesia siguieron siendo latifundios, sólo que ahora estaban en manos particulares. La Iglesia no recibió ninguna compensación, así que excomulgó tanto a los promotores de la desamortización como a los compradores. Esto hizo que muchos compradores adquirieran sus propiedades de forma indirecta, a través de testaferros, para que fueran éstos los que sufrieran la condenación eterna en su lugar.

El 15 de marzo el presidente Jackson nombró presidente del Tribunal supremo a Robert Taney, que había sido obligado por el Senado a dimitir de su cargo de secretario de Hacienda por el asunto del Banco de los Estados Unidos. Durante su mandato, Jackson tuvo ocasión de nombrar cinco miembros del Tribunal supremo, con lo que éste perdió la mayoría federalista que lo había caracterizado durante cuarenta años y en lo sucesivo se mostraría más predispuesto hacia la doctrina de los derechos de los Estados.

En el Canadá Inferior crecían las tensiones entre francófonos y anglófonos. El abogado y periodista Adam Thom fundó el Club Dórico, una organización paramilitar que agrupaba a jóvenes radicales que el 16 de marzo publicó un manifiesto en el que llamaba a todos los británicos leales a unirse contra la "dominación francesa": "Si el gobierno y el pueblo británico nos abandonan, antes que someternos a la degradación de ser súbditos de una república canadiense-francesa, estamos decididos a emplear legítimamente nuestras propias armas para lograr nuestras determinaciones". 

La Constitución de Texas fue redactada y aprobada a toda prisa. Era mayoritariamente un calco de la Constitución de los Estados Unidos. Reconocía la esclavitud, negaba la ciudadanía a negros e indios y declaraba ilegal emancipar un esclavo sin el consentimiento del Congreso. El 17 de marzo fue elegido como presidente interino de la república de Texas el abogado David Gouverneur Burnet, y como vicepresidente Lorenzo de Zavala.

El 20 de marzo Urrea derrotó a un ejército de 300 texanos bajo el mando de James Fannin que, viéndose acorralado, terminó rindiéndose y hecho prisionero junto con la mayor parte de sus hombres, que fueron llevados a Goliad, donde se unieron a otros prisioneros, sumando un total de unos 400 hombres. Urrea tenía órdenes de no hacer prisioneros, pero escribió a Santa Anna solicitando clemencia. Santa Anna envió su respuesta por triplicado exigiendo la ejecución de los prisioneros.

El presidente Burnet trasladó la capital de Texas de Washington-on-the-Brazos a Harrisburg, más cerca de la frontera con los Estados Unidos. El 25 de marzo declaró a Texas bajo la ley marcial y decretó el servicio militar obligatorio para todos los texanos en condiciones de combatir.

El 27 de marzo fueron fusilados y rematados a cuchillo los prisioneros texanos tomados por los mexicanos. Fannin fue el último en morir, después de presenciar la ejecución de sus hombres. Antes de ser ejecutado hizo tres peticiones: que sus efectos personales fueran enviados a su familia, que se le disparara en el pecho y no en la cara y que fuera enterrado según los usos cristianos. Los soldados se quedaron con sus efectos personales, le dispararon en la cara y quemaron su cuerpo junto con los de los demás fusilados. Esa política de matar a gente indefensa y ensañarse con ella era frecuente en hispanoamérica, pero para los estadounidenses ponía a los mexicanos al nivel de los indios salvajes, que eran los únicos a quienes hasta entonces habían visto emplear semejantes técnicas terroristas y los únicos contra los que los estadounidenses las habían aplicado en represalia. De hecho, se refirieron a estos sucesos como la masacre de Goliad, empleando el mismo término que solían usar para referirse a los cruentos ataques indios.

Ese mismo día Joseph Smith inauguraba su templo en Kirtland. En un intento de eludir a los acreedores de las numerosas deudas a que había dado lugar el templo, marchó a Salem, donde el Señor le había informado de la presencia de un tesoro escondido, pero el Señor no estuvo muy inspirado, pues al cabo de un mes Smith volvió con las manos vacías.

El general Scott dirigió su propia campaña contra los semínolas. Dividió a sus 5.000 hombres en tres columnas y se adentró en Florida, pero no existían mapas del territorio y sus hombres sufrieron toda clase de contratiempos y, cuando llegaron a los poblados semínolas, los encontraron desiertos. Escasos de víveres, tuvieron que retirarse sin haber sostenido más que alguna escaramuza con los indios. El 31 de marzo las tres columnas estaban de regreso en Fort Brooke.

El 1 de abril Espoz y Mina dimitió de su cargo de capitán general de Cataluña. Sus acciones habían sido muy censuradas, especialmente el fusilamiento de la madre del general carlista Ramón Cabrera, en represalia por el fusilamiento de dos alcaldes.

El brigadier José de Sousa Soares fue nombrado presidente de la provincia brasileña de Grao Pará, y logró expulsar de Belém a los insurgentes, que continuaron su revuelta en el interior (Belém está en la costa norte del país).

El 7 de abril murió el político y escritor británico William Godwin.

El 13 de abril el gobierno de Texas se trasladó de Harrisburg a Galveston. El 15 de abril Santa Anna llegó a Harrisburg, pero encontró la ciudad desierta.

El presidente texano Burnet no dejaba de instar a Houston para que se enfrentara a Santa Anna, pero Houston, pese a las acusaciones de cobardía de las que era objeto, insistía en llevar su ejército hacia el norte y dejarse perseguir por Santa Anna esperando el momento oportuno. Probablemente confiaba en llegar a la frontera esadounidense donde el ejercito del país vecino podría intervenir a la menor provocación. El 19 de abril se vio acorralado por el río San Jacinto. Santa Anna le dio alcance el 20 de abril y, tras unos breves enfrentamientos, decidió acampar para permitir que sus hombres descansaran el día siguiente, posponiendo el ataque para dos días más tarde. El 21 de abril Houston convocó un consejo de guerra y, aunque la mayoría de sus oficiales propuso esperar al ataque de Santa Anna, Houston se decantó por atacar ese mismo día por sorpresa. Santa Anna contaba con unos 1.300 hombres, y Houston con 900. Su plan contó con la aprobación del ministro de defensa, que había sido enviado por Burnet para espiar a Houston. Éste esperó a que los mexicanos durmieran la siesta y, por increíble que pudiera parecer, se encontró con que Santa Anna ni siquiera había puesto centinelas alrededor de su campamento. Así, sus hombres pudieron acercarse en silencio y sólo cuando estuvieron a unos pocos metros de los mexicanos se repitieron los gritos de ¡Recordad El Álamo! y ¡Recordad Goliad! Los soldados mexicanos, indefensos, sin armas, fueron masacrados sin piedad. Murieron unos 700 y otros 730 fueron tomados prisioneros, entre ellos Martín Perfecto de Cos.

El 22 de abril fue enviada una partida en busca de Santa Anna, que había desaparecido. No tardaron en encontrarlo y hacerlo prisionero, pero se había despojado de todos los adornos de su uniforme para hacerse pasar por un soldado raso. Los texanos recelaron porque no era frecuente que un soldado llevara una camisa de seda. Cuando lo llevaron al campamento, junto con los demás prisioneros, algunos de sus hombres gritaron ¡El presidente!, lo cual lo delató y fue llevado ante Houston, donde pidió la clemencia que él nunca había tenido y mintió todo lo que pudo y supo sin vergüenza alguna para justificar sus actos.

El 24 de abril el presidente venezolano José María Vargas presentó su dimisión por la hostilidad que le demostraba el Congreso en todo momento. El vicepresidente, Andrés Narvarte, ocupó la presidencia.

El 25 de abril el general Vicente Filisola reunió todas las tropas mexicanas en Texas y en un consejo de guerra se decidió retirarse al sur del río Colorado.

Las noticias de la guerra semínola llegaron a los creeks que aún no habían emigrado hacia el oeste, y algunos decidieron seguir el mismo camino. En mayo una partida creek mató a cinco blancos en Alabama y un grupo de guerreros atacó la localidad de Roanoke, en Georgia. Esto era todo lo que necesitaba el gobernador de Georgia para desembarazarse definitivamente de los indios. Organizó milicias y pidió además la ayuda federal para enfrentarse a los indios.

El 14 de mayo Santa Anna y David Burnet, el presidente de Texas, firmaron un acuerdo en Velasco que constaba de una parte pública y otra privada. En la parte pública Santa Anna se comprometía a no tomar de nuevo las armas contra Texas en la guerra de Independencia y regulaba la retirada del ejército mexicano y el intercambio de prisioneros. En la parte secreta Santa Anna, a cambio de su libertad, se comprometía a usar su influencia para que Mexico reconociera la independencia de Texas y mantuviera con ella sus relaciones comerciales. Filisola ratificó el acuerdo y continuó la retirada de su ejército hasta salir de territorio texano.

Las leyes de desamortización de Mendizábal habían generado un gran descontento en los sectores más conservadores de la sociedad española, y el 15 de mayo la regente, María Cristina de Borbón, destituyó al primer ministro, nombrando en su lugar a Francisco Javier de Istúriz.

Una de las razones por las que el gobierno mexicano había autorizado la presencia de colonos estadounidenses en Texas había sido crear una pantalla de protección contra los ataques indios, que ahora sufrían los texanos. El 19 de mayo un grupo muy numeroso de indios Comanches y de otras tribus se presentaron ante Fort Parker, un fuerte ocupado por un grupo de unos 15 colonos y sus familias, mataron a la mayor parte de sus ocupantes y secuestraron a varias mujeres y niños.

El 20 de mayo el presidente de México, José Justo Corro, negó toda validez al acuerdo de Velasco y a cualquier otro compromiso que aceptara Santa Anna durante su cautiverio, aduciendo que no tenía ninguna autoridad legal para representar a México en ninguna clase de negociación. Por su parte, los texanos tampoco cumplieron su parte del acuerdo, ya que mantuvieron a Santa Anna preso en Velasco. El ex embajador estadounidense en México Joel Robert Poinsett hizo llegar un mensaje a Santa Anna que empezaba: "Dígale al general Santa Anna que, al recordar el ardiente defensor de la libertad que era hace diez años, no siento ninguna simpatía por él ahora que se ha llevado su merecido", y Santa Anna le contestó:

Dígale a Mr. Poinsett que es muy cierto que yo lanzaba al aire mi sombrero por la libertad con gran ardor y con total sinceridad, pero pronto comprendí que era una locura. Dentro de cien años mi pueblo no estará aún preparado para la libertad. No sabe lo que es. Con lo ignorante que es y bajo la influencia del clero católico, el despotismo es el gobierno adecuado para él, pero no hay razón para que no sea un gobierno sabio y virtuoso.

Cuando los indios Cherokee conocieron el tratado de New Echota arguyeron que había sido firmado unilateralmente por una minoría que de ningún modo se podía considerar que representaba a la nación Cherokee. John Ross instó al Senado de los Estados Unidos que no ratificara semejante tratado, pero el Senado lo ratificó por un solo voto de diferencia. Más aún, el presidente Jackson consideró superflua la cláusula que adjudicaba tierras a los indios que prefirieran permanecer en Georgia, y la suprimió. La facción Ridge, favorable al traslado, inició inmediatamente la migración. Por estas fechas se había completado el traslado de los choctaw. En total se habían desplazado unos 12.500 indios.

Los texanos tenían claro que no habían luchado por su independencia para ser independientes, sino para integrarse en los Estados Unidos. Sin embargo, la situación era delicada, porque actualmente la Unión constaba de doce Estados esclavistas y doce Estados libres, y el compromiso de Misuri exigía que la paridad se respetase. A corto plazo estaba previsto convertir en nuevos Estados los territorios de Arkansas (esclavista) y Michigan (libre), pero admitir a Texas supondría descompensar la proporción de representantes en el Senado por un plazo indeterminado.

El 25 de mayo el ex presidente John Quincy Adams, que ahora era diputado en la Cámara de Representantes, pronunció un discurso contra la anexión de Texas. Los abolicionistas acusaban ruidosamente a los Estados esclavistas (y a Jackson) de haber promovido la revolución de Texas para expandir la esclavitud. Al mismo tiempo que crecía la propaganda abolicionista crecían las peticiones que recibía la Cámara de Representantes, peticiones que amenazaban con saturar la actividad parlamentaria. Por ello, ese mismo día se aprobó una "regla mordaza" por la que se negaba la entrada a toda petición relacionada con el abolicionismo, sin que diera lugar a trámite parlamentario alguno. Desde entonces Adams, dado que la primera enmienda a la Constitución otorgaba a los ciudadanos el derecho de petición, asumió la tarea de presentarlas personalmente en la Cámara. Tan pronto como se detectaba que una intervención suya estaba relacionada con el abolicionismo se la declaraba improcedente, y Adams protestaba incansable, hasta el punto de que se ganó el apelativo de "el Viejo Elocuencia". Mantendría esta actitud durante varios años, de modo que las peticiones recibían más publicidad por las protestas de Adams que la que habrían tenido si se hubieran tramitado de forma ordinaria.

El 6 de junio murió el rey Antonio I de Sajonia. Ninguno de sus hijos había vivido más de dos años, así que fue sucedido por su sobrino Federico Augusto II. (Su padre, Maximiliano de Sajonia, tenía ya sesenta y siete años, y había renunciado a sus derechos sucesorios en favor de su hijo.)

El 9 de junio una milicia de Georgia se vio rodeada por los creeks y sólo pudo salvarse al recibir la ayuda de más milicianos, aunque hubo ocho muertos y varios heridos. Ese mismo día los creeks incendiaron un barco de vapor que circulaba por el río Chattahoochee. A lo largo del año se producirían numerosas escaramuzas entre indios y milicianos.

El 10 de junio murió el físico francés André Marie Ampère.

La guerra carlista se estaba reduciendo a una serie de marchas y contramarchas estériles por el norte de España (junto con acciones guerrilleras aisladas en el resto del país), y la camarilla del rey Carlos V estaba deseando enviar al ejército a combatir en lugares más alejados y aprovechar para organizar a sus partidarios. Nazario Eguía no estaba de acuerdo con semejante estrategia, y el 13 de junio fue sustituido por Bruno Villareal, quien envió al general Miguel Gómez Damas hacia el oeste al frente de 2.700 infantes y 180 jinetes, con los que tomó  Oviedo, Lugo, La Coruña y Santiago de Compostela.

El 15 de junio las últimas y desmoralizadas tropas mexicanas salieron de Texas.

El 23 de junio murió el filósofo británico James Mill.

El 25 de junio el rey Luis Felipe I de Francia sufrió un nuevo atentado: un disparo pasó cerca de su cabeza mientras viajaba en coche por las calles de París. Poco después se detuvo al responsable, un republicano llamado Louis Albaud, en cuyo juicio afirmó que doscientos republicanos habían jurado matar al rey.

Ese mismo día el territorio comprendido entre Luisiana y Misuri entró en la Unión estadounidense como el Estado de Arkansas. El 1 de julio Calhoun presentó una resolución para que se reconociera la independencia de Texas. La resolución fue aprobada por el Congreso, pero Jackson vaciló y no quiso pronunciarse sobre ella hasta después de las elecciones.

El 6 de julio el ejército francés derrotó en la batalla de Sikkak al emir argelino Abd al-Qádir.

La expansión territorial estadounidense fomentaba la especulación: se pedía un préstamo a un banco, se compraba un terreno adecuado y se vendía al cabo de un tiempo a un precio mucho mayor, lo que permitía devolver el préstamo con los intereses pertinente y, aun así, haber ganado una suma cuantiosa. Las transacciones no se hacían en metálico, sino que los bancos emitían su propio papel moneda. En general, los bancos se las arreglaban para disponer de efectivo suficiente para atender los flujos de caja cotidianos, pero no dudaban en emitir papel moneda por un importe mucho mayor que los fondos de los que disponían. Sólo tendrían problemas en el improbable caso en que todos sus clientes se pusieran de acuerdo para retirar a la vez sus depósitos. No existía ninguna ley que regulara la actividad bancaria, por lo que con ello no hacían nada ilegal. El endeudamiento, tanto a nivel individual como estatal estaba creciendo espectacularmente, de modo que un papel moneda por valor de 100$ no era ni más ni menos que eso: un documento por el que un determinado banco se comprometía a pagar 100$ al portador aunque carecía de los fondos necesarios para cubrir una mínima parte de sus compromisos. La gente empezaba a entender que aceptar tales papeles como si fueran dinero "de verdad" era asumir el riesgo de que el banco en cuestión pudiera cumplir su compromiso, por lo que algunos particulares empezaron a exigir pagos "en metálico", es decir, en oro o plata, y así se inició un proceso de devaluación: "si quieres pagarme en papel moneda, me has de pagar más, por el riesgo que supone para mí aceptarlo". La reticencia al papel moneda llegó finalmente al mismo gobierno federal, que era el propietario de todo el territorio situado fuera de las fronteras estatales, y el primer eslabón en la cadena de venta de terrenos. El 11 de julio el presidente Jackson promulgó la llamada "Circular del metálico", que exigía que las tierras vendidas por el gobierno fueran pagadas en metálico. Esto hizo que muchos de los que tenían papel moneda en su poder empezaran a acudir a los bancos a canjearlos por dinero en metálico, y así los bancos empezaron a verse en apuros. Era el principio de una crisis financiara a gran escala.

Ese mismo día fue guillotinado Louis Albaud.

Los liberales españoles no estaban satisfechos con la moderación del gobierno. El 25 de julio se produjo un motín en Málaga en el que fueron asesinados el gobernador civil y el militar. El 26 de julio se crea una junta de gobierno en la ciudad que proclama la constitución de Cádiz. El 29 de julio se subleva la Cádiz y crea su propia junta provincial. El 30 de julio hacen lo propio Sevilla y Granada y el 31 de julio Córdoba.

El uruguayo Fructuoso Rivera estaba apoyando la revuelta brasileña de Rio Grande do Sul, y el presidente Oribe, para evitar represalias brasileñas, se vio obligado a cesarlo de su cargo de Comandante general de campaña, que un poco más tarde asignó a su hermano Ignacio Oribe. Como consecuencia, Rivera se rebeló contra Oribe. Juan Antonio Lavalleja ofreció su apoyo al presidente uruguayo Manuel Oribe contra Fructuoso Rivera y el 1 de agosto desembarcó en el país con un centenar de hombres.

El 3 de agosto se inauguró la Asamblea de Huaura, en la que se proclamó la Confederación Perú-boliviana, integrada por tres Estados: el Estado Nor-peruano, con capital en Lima, el Estado Sur-peruano, con capital en Tacna, y Bolivia (de este modo, los dos Estados peruanos eran menores que Bolivia). El 11 de agosto Andrés de Santa Cruz fue nombrado Supremo Protector de la Confederación Perú-Boliviana reteniendo la presidencia de Bolivia, mientras que Orbegoso fue nombrado presidente del Estado Nor-peruano.

Tras las sublevaciones sucesivas de Zaragoza, Badajoz, Valencia, Alicante, Murcia, Castellón y Cartagena, el 12 de agosto un regimiento de la Guardia Real se dirigió al palacio de la Granja de San Ildefonso, donde veraneaba la familia real, y exigió la promulgación de la constitución de Cádiz. La regente no tuvo más remedio que aceptar, dictó un real decreto que promulgaba la constitución, convocó a las Cortes y el 14 de agosto nombró primer ministro a José María Calatrava, que había sido ministro de justicia durante el trienio constitucional. Éste nombró ministro de Hacienda a Mendizábal, con lo que el proceso de desamortización siguió su curso.

Desde principios de año, Gran Bretaña instaba a Francia a aportar tropas en la lucha contra los carlistas españoles, sin embargo, esta medida contaba con la oposición de Austria y el rey Luis Felipe I estaba tratando de complacer a los austriacos, porque pretendía casar a su heredero Fernando con una archiduquesa austriaca. Sin embargo, Austria terminó rechazando la petición francesa por considerar que la monarquía de la casa de Orleans no estaba suficientemente consolidada. Ante semejante desprecio, el primer ministro Thiers, que había sido partidario de la intervención desde un principio, consideró que el rey ya no tenía excusa e insistió en el proyecto, con más justificación después de los sucesos de La Granja que habían implantado de nuevo en España la constitución de Cádiz, lo que indicaba que la causa isabelina tenía apoyo suficiente en el país. El general Jean-Lous Baux, (llamado Lebeau) organizó una legión de voluntarios dispuestos a pasar a España en cuanto recibieran la autorización pertinente. Sin embargo, el rey se mostró decidido a no intervenir en España, secundado por Talleyrand y por Soult, el cual guardaba un amargo recuerdo de su presencia en el país bajo Napoleón. La discrepancia se zanjó el 16 de agosto con la dimisión de Thiers.

En Perú se hallaba exiliado el ex director supremo chileno Ramón Freire, quien logró convencer a Santa Cruz y Orbegoso para que "le dejaran prestados" dos barcos, con los que se dispuso a invadir Chile y derrocar al dictador José Joaquín Prieto. Su empresa resultó frustrada, fue capturado por los chilenos y condenado a muerte, aunque se le conmutó la pena por el destierro. Como respuesta, la noche del 21 de agosto una flota chilena apresó varios barcos peruanos en El Callao. Santa Cruz quiso resolver el conflicto por la vía diplomática y solicitó a Chile que enviara una embajada.

Durante el verano la guerra semínola fue dirigida por el gobernador de Florida, Richard Keith Call, y el resultado fue un completo desastre. Muchos fuertes tuvieron que ser abandonados, tanto por los ataques indios como por las enfermedades.

El 9 de septiembre fue nombrado primer ministro francés el conde Louis-Mathieu Molé, que tensó las relaciones con Gran Bretaña al sostener la política de Luis Felipe I de no intervención en España.

El 11 de septiembre el coronel brasileño Antonio de Sousa Neto proclamó la República Riograndense ante sus tropas.

El 19 de septiembre Ignacio Oribe y Juan Antonio Lavalleja derrotaron en la batalla de Carpintería a Fructuoso Rivera, que contaba con el apoyo de los unitarios rioplatenses exiliados en Uruguay, dirigidos por Juan Lavalle. Rivera tuvo que huir al Brasil, donde se unió a la revolución de los farrapos. En dicha batalla, los partidarios de Lavalleja llevaban como distintivos unas cintas blancas con el lema "Defensores de las leyes", mientras que los partidarios de Rivera llevaban unas cintas rojas sacadas del forro de los ponchos. Desde entonces las dos facciones rivales uruguayas fueron conocidas como "los blancos" y "los colorados".

El carlista Miguel Gómez Damas había iniciado una larga marcha hacia el sur en la que sus filas se fueron engrosando con nuevos voluntarios. A su paso por la provincia de Albacete contaba ya con 4.000 hombres. El 20 de septiembre fue derrotado en Villarrobledo por un ejército isabelino de unos 10.000 hombres. En la batalla Gómez Damas perdió casi toda su caballería y unos 2.000 fusiles.

Ese año se celebraron en Texas elecciones presidenciales, y el vencedor fue Sam Houston, que el 22 de octubre tomó posesión de su cargo.

El 23 de octubre el carlista Gómez Damas fue derrotado en la batalla del Majaceite (río que recorre la provincia de Cádiz) por un ejército isabelido dirigido por el general Ramón María Narváez. Gomez Damas tuvo que retirarse a Villamartín.

El 2 de octubre llegaba a Gran Bretaña el Beagle, el barco del capitán FitzRoy, que había dado la vuelta al mundo en su misión científica. Charles Darwin, que había partido como un modesto aprendiz, se encontró a su regreso con que se lo tenía por toda una autoridad en geología, pues uno de sus antiguos profesores había ido distribuyendo entre sus colegas los informes que iba enviando con sus observaciones. Se dedicó entonces a organizar la clasificación de todo el material biológico y geológico que traía consigo, que incluían fósiles de numerosas especies extinguidas desconocidas hasta la fecha.

El rey Luis XVI había sido guillotinado en una plaza de París que entonces se llamaba plaza de Luis XV, por la estatua ecuestre que había en su centro, que después se convirtió en plaza de la Revolución y que tras el terror fue rebautizada como plaza de la Concordia. El lugar que había ocupado la estatua de Luis XV seguía vacío, y no era fácil seleccionar un monumento con que llenarlo. Finalmente el rey Luis Felipe I decidió erigir en él uno de los dos obeliscos del templo de Luxor que Mehmet Alí había regalado a Francia seis años atrás y que llevaba ya dos años en la capital francesa. Al ser un objeto ajeno completamente a la historia de Francia, ninguna facción tendría nada que objetar. En efecto, el 25 de octubre, la muchedumbre ovacionó al rey tras presenciar el complejo trabajo de ingeniería que supuso levantar una única pieza de 23 metros de alto y 230 toneladas de peso.

El 30 de octubre se iniciaron las negociaciones de paz entre Chile y la confederación Perú-boliviana. Los chilenos exigieron varias condiciones de índole económico y financiero además de la disolución de la confederación. Santa Cruz no estaba dispuesto a aceptar esto último y no hubo acuerdo.

Mientras tanto, Luis Napoleón Bonaparte, con la complicidad de su tío José, pero no con la de su padre, Luis Bonaparte, intentaba provocar un alzamiento en Estrasburgo contra el rey Luis Felipe I, pero los conjurados fueron detenidos en poco tiempo. Los tíos de Luis Napoleón condenaron el suceso, y su madre, Hortense de Beauharnais, escribió al rey para pedirle que dejara salir a su hijo de Francia.

El 6 de noviembre murió de cólera el rey Carlos X de Francia. La mayor parte de los legitimistas franceses consideraron que su hijo Luis Antonio era el nuevo rey Luis XIX de Francia (aunque él se mantuvo apartado de la política y nunca aceptó el título). A decir verdad, Luis XIX fue oficialmente rey de Francia durante los veinte minutos que pasaron entre la abdicación de su padre y su abdicación en su sobrino Enrique V, considerado como nuevo rey de Francia por otra facción (minoritaria) de legitimistas, que se unió a la que desde un principio había aceptado la soberanía de Enrique V, que ahora tenía dieciséis años.

El 11 de noviembre Chile declaró la guerra a la Confederación Perú-boliviana, con la ayuda de los "restauradores" peruanos, partidarios de disolver la confederación. Los chilenos no eran los únicos que recelaban del expansionismo boliviano, sino que lo mismo sucedía en la Confederación Argentina. En los últimos años Bolivia había acogido unitarios huidos de la Confederación, desde donde realizaron varias incursiones frustradas en territorio argentino. Un espía de Juan Manuel de Rosas le aportó documentación que indicaba que el unitario Juan Galo Lavalle estaba en tratos con Santa Cruz para formar un estado independiente entre Argentina y Bolivia, así como que el uruguayo Fructuoso Rivera también estaba implicado en el plan.

Mientras Abd al-Qádir dirigía la resistencia argelina a la invasión francesa, el último resto del poder otomano en Argelia era Ahmed Bey, que se mantenía atrincherado en Constantina. El 13 de noviembre un ejército de 7.000 hombres partía de Bone con la misión de asediar la ciudad. Entre los generales que dirigían la operación estaba Enrique de Orleans, el hijo menor del rey Luis Felipe I.

El 15 de noviembre murió de neumonía el mexicano (a la sazón texano) Lorenzo de Zavala.

Después de varias expediciones frustradas, el gobernador Call logró acercarse a un poblado semínola, con lo que obligó a éstos a presentar batalla para proteger a sus familias. La batalla de Wahoo Swamp tuvo lugar el 21 de noviembre, y terminó cuando los semínolas se replegaron a la otra orilla de un río. Los soldados de Call trataron de cruzarlo, pero desconocían su profundidad y los semínolas les disparaban desde la otra orilla, así que terminaron retirándose. Entre los que murieron tratando de encontrar un vado estaba el mayor David Moniac, el primer indio (creek mestizo) graduado en West Point.

Mientras tanto, por orden del rey Luis Felipe I De Francia, con la aprobación del gobierno y en contra de todo procedimiento legal, Luis Napoleón Bonaparte fue embarcado rumbo a los Estados Unidos provisto de una cierta suma de dinero. En Argelia se iniciaba el asedio de Constantina, pero el 24 de noviembre el ejército francés tuvo que huir perseguido por los turcos y bereberes que defendían la ciudad. El 27 de noviembre cesó la persecución. El balance francés de la expedición fue de 453 muertos y 304 heridos.

Mientras Gómez Damas recorría España, los carlitas seguían activos en el norte y Villareal había puesto bajo asedio a Bilbao. El 1 de diciembre llegó un ejército isabelino bajo el mando del general Baldomero Espartero dispuesto a romper el sitio. Gómez Damas regresó al norte con aproximadamente el mismo número de hombres con que había partido meses atrás, aunque no eran los mismos. Había llegado a contar con cerca de 6.000. Su expedición había sido un fracaso: había tomado todas las ciudades por las que había pasado, pero su dominio sobre cada una de ellas no había durado más que los pocos días que las había ocupado.

El 7 de diciembre se celebraron las elecciones presidenciales en los Estados Unidos. Webster obtuvo los 14 votos de Massachussets, White los 26 de Tennessee y Georgia, Mangum los 11 de Carolina del Sur y Harrison reunió 73 votos de siete Estados. En total los candidatos whig sumaron 124 votos, pero Van Buren obtuvo 170, con lo que se convirtió en el octavo presidente de los Estados Unidos. Más complicada estuvo la elección del vicepresidente. Johnson, el candidato demócrata, obtuvo 147 votos, con lo que le faltaba uno para tener la mayoría absoluta. En estas condiciones, el Senado debía elegir entre los dos candidatos más votados, es decir, entre Johnson y Francis Granger, que había obtenido 77 votos.

El 9 de diciembre tomó la dirección de la guerra semínola el general Thomas Jesup, que venía de obtener grandes progresos en la lucha contra los creeks. Comprendiendo que los intentos de forzar a los semínolas a luchar en campo abierto no daban resultado, cambió de estrategia y procuró hacerlos huir hacia el sur, para arrinconarlos contra el mar. Contaba con unos 9.000 hombres y el apoyo de la marina. Los semínolas eran unos 1.400 guerreros, y no tenían medios de compensar las pérdidas.

El 14 de diciembre murió en Barcelona Francisco Espoz y Mina, mientras se preparaba para marcharse a Francia.

El 25 de diciembre Espartero lograba entrar en Bilbao tras haber expulsado a los carlistas que asediaban la ciudad.

El 26 de diciembre otra bala pasó cerca de la cabeza del rey Luis Felipe I de Francia. Esta vez la había disparado un crío de veintidós años, apellidado Meunier, que en el juicio explicó que había disparado al rey porque sus lecturas le habían enseñado que los Orleans sólo habían traído desgracias a Francia.

El 27 de diciembre murió de neumonía Stephen F. Austin, tras haber ejercido durante dos meses de secretario de Estado de la república de Texas.

Ese año nueve barcos en los que viajaban 636 personas procedentes de Londres habían llegado a la Isla Canguro, en el sur de Australia. Su misión era fundar una nueva colonia que tendría por nombre Australia Meridional y capital en Adelaida, si bien todavía no estaba decidido el lugar que tendría dicha capital. Desde allí los colonos exploraron la zona y finalmente le encontraron un emplazamiento, en la costa continental, un poco más hacia el norte. El 28 de diciembre llegó el gobernador británico, que proclamó la fundación de la nueva colonia, sobre territorio cedido por Nueva Gales del Sur.

Ese mismo día España reconoció la independencia de México.

Tras el facaso del asedio a Bilbao y a raíz de las muchas críticas que había recibido, el 29 de diciembre Bruno Villareal presentó su dimisión como general en jefe del ejército carlista. Fue sucedido por el infante Sebastián Gabriel de Borbón y Braganza, un bisnieto del rey Carlos III de España.

El 30 de diciembre el presidente mexicano José Justo Corro promultó las Siete leyes, que modificaban sustancialmente la Constitución mexicana, según las cuales los Estados mexicanos se convertían en departamentos sin legislatura propia, pero lo más sorprendente era que, además de los poderes legislativo, ejecutivo y judicial, preveía la existencia del Supremo poder conservador, formado por cinco ciudadanos con poder —telepático, al parecer— de interpretar la voluntad de la nación. Este cuarto poder podía deponer presidentes, disolver congresos o anular sentencias judiciales.

En 1837, tras un brote de cólera, se produjo un levantamiento en Sicilia que enseguida tomó un cariz político, pues fue controlado por los liberales que exigían una constitución, pero el rey Fernando II se las arregló para sofocarla.

En los Estados Unidos, la última de las "cinco tribus civilizadas", los Chickasaw, aceptó trasladarse al territorio indio sin violencia. Su población era de unos 5.000 indios y entre sus pertenencias había más de un millar de esclavos negros. Durante el traslado, que se efectuó a lo largo de una década, más de medio millar murió de disentería o de viruela. En el territorio indio se mezclaron con los Choksaw.

Jammes W. Parker era uno de los supervivientes de la masacre de Fort Parker sucedida el año anterior (gracias a que no estaba en el fuerte en el momento del ataque), y desde entonces había empleado todos sus esfuerzos en encontrar por cualquier medio a su hija, a su nieto y a sus sobrinos, secuestrados por los Comanches. Intentó obtener financiación para reclutar tropas con las que perseguir a los captores, pero finalmente fueron un grupo de comancheros (mexicanos que comerciaban con los comanches) quienes localizaron a su hija Rachel Plummer (capturada con 17 años) y la compraron. Rachel había presenciado cómo los indios torturaban a su abuelo, violaban a su abuela y capturaban a su hijo y a sus primos. Durante veintiún meses vivió como esclava a cargo de varias mujeres que la golpeaban frecuentemente, hasta que un mes antes de su liberación había decidido terminar con todo y fue ella la que dio una paliza a una de sus amas. Pensaba que así no tardarían en matarla, pero, para su sorpresa, los guerreros se limitaron a ver luchar a las dos mujeres y, cuando ella salió victoriosa, dejaron de considerarla como esclava y fue tratada con mucha mayor consideración, aunque tuvo que vérselas con otra de sus antiguas amas, que trató de quemarla viva.

Un barco mercante estadounidense recogió unos náufragos japoneses y, cuando se acercaba a la costa japonesa para devolverlos fue cañoneado.

Dirichlet demostró ese año un resultado que Legendre y Gauss habían conjeturado, pero que ninguno de los dos había logrado demostrar. Su enunciado es muy sencillo: toda sucesión de la forma an + b, donde a y b son dos números enteros primos entre sí y en la que n recorre los números naturales, contiene números primos. Dirichlet demostró que, de hecho, contiene infinitos números primos, y lo más interesante de su demostración fue que por primera vez empleó técnicas analíticas para la demostración de un teorema que hablaba exclusivamente de números naturales. El teorema de los números primos de Dirichlet se considera el origen de la teoría analítica de números. Hoy en día se sigue sin conocer una prueba puramente algebraica de dicho resultado.

Un botánico alemán llamado Matthias Jakob Schleiden formuló la teoría de que todas las plantas están formadas por células, que son unidades mínimas de vida, y que su crecimiento se produce por la multiplicación de estas células. Conjeturó además que las nuevas células se generan a partir de los núcleos de las células viejas.

Hans Cristian Andersen publicó sus cuentos El traje nuevo del emperador y La sirenita. Ese año visitó Suecia.

Dickens terminó la publicación por entregas de Los papeles póstumos del club Pickwick y empezó con una nueva novela: Oliver Twist, la primera novela en lengua inglesa que tiene por protagonista a un niño. En ella Dickens denuncia las lastimosas condiciones laborales de los niños, una situación que él mismo había experimentado de joven, cuando su padre fue encarcelado por deudas y él tuvo que ponerse a trabajar con doce años en una fábrica de betún.

Mary Shelley publicó su novela Falkner.

Washington Irving publicó su novela Las aventuras del capitán Boneville, basada en los mapas y anotaciones que había comprado al explorador Benjamin Boneville, al que había conocido durante su estancia en la colonia de Astoria, en Oregón.

Delacroix presentó su cuadro Ceremonia nupcial judía en Marruecos, basado en la ceremonia que había presenciado en Tánger cinco años atrás.

El rey Rajendra del Nepal, a sus veinticuatro años, decidió asumir personalmente el poder y despojó a su primer ministro Bhimsen Thapa de su autoridad militar. Poco después murió uno de sus hijos y Thapa fue acusado de haberlo envenenado. Fue absuelto tras un largo proceso judicial, pero para entonces ya carecía de toda influencia política.

La revolución texana
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