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El 1 de septiembre de 1943 un destructor estadounidense hundió un submarino japonés en el Pacífico.
Los alemanes iniciaron la liquidación del gueto de Tarnów,
en Polonia. El encargado fue el capitán Amon Göth que, según
testigos presenciales, mató personalmente entre 30 y 90 mujeres y
niños en el proceso. Unos 25.000 judíos fueron enviados a
Auschwitz, aunque menos de la mitad sobrevivieron al viaje. La
mayoría de los supervivientes no fueron considerados aptos para el
trabajo y fueron liquidados inmediatamente.
Karl Plagge era un oficial nazi al que se le había
asignado la dirección de un campo de trabajo destinado al
mantenimiento y reparación de vehículos blindados en las afueras
de Vilna, en Lituania. Cuando se enteró de que el gueto de Vilna
iba a ser liquidado en breve, despidió a sus trabajadores polacos
y, con la excusa de abaratar costes con mano de obra esclava, se
las arregló para proporcionar una tarjeta de "trabajador esencial"
a unos 1.000 judíos de Vilna, a pesar de que la mayoría de ellos
no tenían los conocimientos de mecánica que se supone que los
hacía "esenciales". Ese día miembros de las SS fueron sacaron del
gueto a unos 300 de sus trabajadores para ser deportados a un
campo de concentración en Estonia. El propio Plagge, al enterarse,
fue a la estación de trenes para discutir con el responsable de la
deportación y exigir que le devolvieran a sus trabajadores. Sin
embargo, órdenes superiores zanjaron la disputa. Entonces Plagge
logró al menos que le asignaran otros 300 judíos para sustituir a
los que había perdido.
El general Castellano había regresado a Roma para reunirse con
Pietro Badoglio y su entorno. El ministro de asuntos exteriores
afirmó que no estaban en condiciones de rechazar las condiciones
de los aliados. Otros generales objetaron que no estaban en
condiciones de defender Roma ante un ataque alemán, y que el
armisticio debía ser pospuesto. Badoglio no opinó. Por la tarde
informó al rey y éste también se mostró partidario de aceptar las
condiciones del armisticio. Se envió entonces un telegrama de
confirmación a los aliados, que fue interceptado por los alemanes.
Cuando le pidieron explicaciones al primer ministro, éste aseguró
que la lealtad inquebrantable de Italia para con su aliado alemán
no admitía la menor duda. En efecto, las dudas de los alemanes no
eran menores, y por ello empezaron a preparar la puesta en
práctica de la Operación Eje para tomar el control de
Italia en cuanto se anunciara su defección.
El 2 de septiembre submarinos
estadounidenses hundieron un carguero (Fusei Maru) y un
buque de escolta japonés (Mutsure) en el Pacífico. La
aviación hundió otros dos barcos de un convoy japonés (Hankow
Maru y Nagato Maru) en Wewak.
Ante Pavelić, el "poglavnik" del Estado Independiente de
Croacia no tenía muy conento a Hitler por sus dificultades para
mantener el orden en su territorio. En un intento de aplacar al Führer,
Pavelić cedió el cargo de primer ministro, que hasta entonces
detentaba él mismo, al septuagenario Nikola Mandić,
que fue muy cuestionado por algunos miembros del gobierno, que
ponían en duda su capacidad.
Un judío de 18 años llamado Seweryn Klanman logró huir
del campo de exterminio de Treblinka junto con otros 13
prisioneros. Mataron con una herramienta al guardia ucraniano que
los supervisaba, Klanman se puso su uniforme y salió con un rifle
en la mano gritando órdenes fingiendo que trasladaba a los
prisioneros a otra zona.
La aviación soviética hundió un carguero sueco (Svea Reuter)
en el Báltico.
Castellano estaba de nuevo en Cassibile, donde anunció la
conformidad del primer ministro y del rey de Italia a las
condiciones impuestas por los aliados, aunque no llevaba ningún
documento escrito que lo atestiguara.
Ese día se estrenó El límite es el cielo, una comedia
romántica musical protagonizada por Fred Astaire y Joan Leslie. La
película produjo beneficios, pero no está entre las más exitosas
del bailarín.
El 3 de septiembre un destructor
estadounidense hundió dos submarinos japoneses en el mar del
Coral. Dos submarinos estadounidenses hundieron otros tantos
cargueros japoneses (Akama Maru y Tagonoura Maru)
ante las costas japonesas.
Esa noche tropas estadounidenses y australianas desembarcaron al
oeste de Lae, en Nueva Guinea, más al norte de Salamaua.
Las pocas tropas japonesas que vigilaban la costa se retiraron, si
bien la aviación atacó y lanzó doce bombas, una de las cuales
incendió uno de los transportes, que quedó en la playa sirviendo
de referencia para los ataques japoneses, por lo que tuvo que ser
remolcado lejos de la costa.
Avanzando desde Smolensk, los soviéticos habían alcanzado la
orilla oriental de Dniéper.
Una brigada partisana atacó a los chetniks en Sveti
Gregor, en Yugoslavia, forzándolos a retirarse a Grčarice,
donde se fortificaron conectando dos edificios y la iglesia.
Las tropas de Montgomery empezaron a cruzar el estrecho de
Messina para desembarcar cerca de Reggio Calabria. Mongtomery
cumplía órdenes, pero consideraba la misión que le habían
encomendado como una pérdida de tiempo y de recursos. Se trataba
de una maniobra de distracción, pensada para que los alemanes
concentraran tropas en el sur de Italia y fueran pillados por
sorpresa por un desembarco posterior mucho más al norte, en
Salerno, cerca de Nápoles. Montgomery predijo que los alemanes no
morderían el anzuelo y que no ofrecerían resistencia en Calabria,
con lo que el resultado sería que sus tropas quedarían a 480 km de
donde tendrían que estar. Los hechos le dieron la razón. La
guarnición alemana más próxima estaba en Bagnara, a 40 km
del punto de desembarco, y
Kesselring le había dado órdenes de resistir unos días para cubrir
la retirada del resto de las tropas. Las fuerzas italianas,
desconcertadas y desmoralizadas por la situación política, apenas
ofrecieron resistencia, salvo en unos pocos lugares.
A las 14:00 se firmó el Armisticio de Cassibile, en
nombre de Eisenhower y de Pietro Badoglio. Churchill fue informado
de que el armisticio había sido firmado sin ninguna clase de
enmienda. Un bombardeo a Roma con 500 aviones fue suspendido en el
último momento. Probablemente fue un farol de Eisenhower para
acelerar la firma, porque un bombardeo a Roma después de que
hubiera sido declarada ciudad abierta no habría sido nada popular
en los países aliados, por la relevancia cultural y religiosa de
la capital italiana. La fecha de entrada en vigor del armisticio
no fue concretada, sino que dependería de cuándo los aliados
estuvieran en condiciones de desembarcar en la Italia central, si
bien Castellano entendió que sería el 12 de septiembre. Badoglio
empezó a concentrar soldados en torno a Roma.
Los nazis empezaron a arrestar miles de judíos en Bélgica, con
dos días de redadas en Bruselas y Amberes.
Ese día se estrenó Romeo y Julieta, una comedia de Mario
Moreno, Cantinflas. Previamente había estrenado El circo.
El 4 de septiembre submarinos
estadounidenses hundieron dos cargueros japoneses, uno junto a
Nueva Guinea (Heijo Maru) y otro junto a Formosa (Kozan
Maru).
Pese a los ataques, el desembarco en Lae siguió según lo
planeado y 8.000 hombres llegaron a tierra. Sobre las 13:00 y las
15:30 se produjeron nuevos ataques aéreos que provocaron algunas
bajas.
El último patriarca de la Iglesia Ortodoxa Rusa había muerto en
1925, y desde entonces el gobierno comunista había impedido la
elección de un sucesor de acuerdo con el protocolo debido, así que
la Iglesia había sido dirigida por una sucesión de patriarcas
provisionales que se nombraban unos a otros a medida que iban
siendo arrestados. El actual era Ivan Nikolayevich
Stragorodsky. Ese día se reunión con Stalin, que le ofreció
autorizar el culto a cambio de que la Iglesia reconociera la
legitimidad del Estado Soviético y se abstuviera de criticar las
políticas del gobierno. El patriarca y los clérigos que lo
acompañaban aceptaron el trato.
Las tropas de Montgomery llegaron a Bagnara.
El 5 de septiembre un submarino
estadounidense hundió un carguero japonés (Tenkai Maru) en
el Pacífico.
Un total de 302 aviones aliados que
habían partido de distintos aeropuertos de Nueva Guinea se
reunieron sobre Tsili Tsili y desde allí llegaron a Nadzab,
cerca de Lae, hacia el interior de la isla. En cabeza iban 28
aviones que se separaron para bombardear las posiciones japonesas
a mitad de camino entre Nadzab y Lae. Los restantes lanzaron
tanques que formaron una densa cortina de humo. A las 10:22
empezaron a descargar paracaidistas. Cada avión lanzó más de 20
hombres en 10 segundos y así unos 6.000 hombres fueron lanzados en
cuatro minutos y medio. Detrás venían cinco aviones con cargamento
distribuido en paquetes con paracaídas que eran lanzados sobre las
zonas donde los paracaidistas hacían señales. El propio McArthur
estaba, junto con sus colaboradores más cercanos, observando la
operación desde otro avión. El descenso no encontró oposición
alguna por parte de los japoneses, aunque tres paracaidistas
murieron durante el descenso y 33 que sufrieron heridas leves. Uno
de los aviones no pudo descargar a sus hombres por una avería y
volvió sin problemas a su base. Más tarde otros aviones lanzaron
más equipamiento, incluyendo cañones desmontados.
Los paracaidistas se dirigieron entonces hacia Nadzab —parte por
tierra, parte descendiendo por el río Markham— donde había
un aeropuerto abandonado desde hacía más de un año.
Mientras tanto, desde Lae, los aliados habían penetrado casi 10
km hacia el interior. Por la noche se produjeron más desembarcos.
A lo largo de los últimos 30 días, los alemanes habían deportado
a Estonia a 7.130 judíos del gueto de Vilna, en Lituania.
Un submarino británico hundió un petrolero italiano (Dora C)
en el Mediterráneo.
El 6 de septiembre un submarino
estadounidense hundió un carguero japonés (Shogen Maru)
cerca de la costa japonesa.
Aviones estadounidenses bombardearon Rangún y hundieron dos
cargueros japoneses (Annan Maru y Milan Maru).
Una compañía de unos 60 soldados japoneses atacó una de las
posiciones defensivas principales establecidas por los
australianos que habían desembarcado junto a Lae. El ataque fue
repelido, pero los australianos estaban sobre la línea de retirada
de los japoneses, así que fueron sometidos a seis ataques
sucesivos que finalmente los obligaron a retirarse en medio de una
intensa lluvia.
A las 11:00 el aeropuerto de Nadzab estaba listo para ser usado.
A lo largo de la tarde aterrizaron más de 40 aviones, en los que
llegaron varios ingenieros que pronto organizaron la construcción
de una nueva pista.
Siguiendo las órdenes recibidas, las tropas alemanas se retiraron
de Bagnara eludiendo el enfrentamiento directo con los británicos.
Un submarino alemán hundió un carguero noruego (Christian
Michelsen) en el Mediterráneo. Otro hundió el destructor
británico HMS Puckeridge cerca de Gibraltar.
El 7 de septiembre un avión que
despegaba de Port Moresby con destino a Rabaul, para una misión de
reconocimiento, rozó un árbol, se estrelló contra otros dos y
explotó arrojando combustible ardiendo a su alrededor, que a su
vez incendió cinco camiones que transportaban soldados. Los once
hombres a bordo del avión fallecieron al instante, al igual que 15
de los ocupantes de los camiones. Más tarde otros 44 murieron de
las heridas, y otros 92 heridos sobrevivieron.
La Asamblea Nacional Filipina aceptó el borrador de constitución
que había elaborado la comisión encabezada por José P. Laurel y se
inició el proceso para ponerla en vigor.
El avance soviético en Smolensk se había detenido y los combates
cesaron a la espera de que llegaran refuerzos. El ejército alemán
seguía retirándose en Ucrania, y Himmler ordenó que dejaran
"tierra quemada" a su paso: no debía quedar ninguna persona,
nada de ganado, nada de trigo, ninguna vía férrea [...] ninguna
casa o ninguna mina que no hubiera sido destruida [...] ningún
pozo que no hubiera sido envenenado.
Unos 2.000 partisanos yugoslavos rodearon Grčarice.
Una delegación aliada llegó a Roma para informar a Badoglio de
que el día siguiente entraría en vigor el armisticio, hasta
entonces secreto. Además anunció que al día siguiente llegaría
también una división aerotransportada que aterrizaría en varios
aeropuertos alrededor de la capital italiana. Badoglio respondió
que la zona estaba bajo el control de los alemanes y que no
disponía de recursos suficientes para neutralizarlos, por lo que
pidió que la fecha del armisticio se retrasara unos días.
Eisenhower descartó la petición.
A las 12:10, aviones aliados bombardearon la ciudad de Frascati,
cercana a Roma. Se produjeron graves daños y murieron 485 civiles,
pero la misión fue un fracaso, pues su objetivo era matar al
mariscal Albert
Kesselring y no lo consiguieron.
Kesselring no dejó de observar que en el momento del bombardeo no
había ningún italiano en el cuartel general alemán, de donde
dedujo (correctamente) que los italianos estaban informados que lo
que iba a suceder.
Un submarino italiano (Velella) fue hundido cerca de
Salerno por otro británico.
La aviación británica encontró en el Atlántico un submarino
alemán y lo atacó con cargas de profundidad, pero se escapó y unos
días más tarde logró llegar, muy dañado, hasta el puerto de El
Ferrol, en España.
Ese día Orson Welles se casó con Rita Hayworth. Welles había sido
declarado no apto para el servicio militar por varias razones
médicas, lo que alivió en parte la presión de los periódicos de
William Randolph Hearst, que llevaban un tiempo preguntando por
qué Welles no había sido alistado. Desde el mes anterior Welles
protagonizaba un espectáculo en Hollywood llamado The Mercury
Wonder Show, que constaba de varios números de magia y
variedades al que los miembros de las Fuerzas Armadas podían
asistir sin pagar la entrada. Al principio Hayworth actuó de
ayudante de Orson el Magnífico en sus trucos de magia,
pero la Columbia Pictures se opuso a ello y amenazó con
rescindir el contrato de la actriz y pedirle una indemnización,
así que Welles telefoneó a su amiga Marlene Dietrich y ésta se
ofreció inmediatamente a sustituir a Hayworth.
El 8 de septiembre un submarino
estadounidense hundió un carguero japonés (Hakutetsu Maru)
cerca de Nueva Guinea.
Con fuerzas aliadas avanzando hacia Lae desde el oeste y desde el
este, la guarnición japonesa recibió la orden de iniciar una
retirada hacia el norte. Mientras tanto los australianos habían
llegado al río Busu, que estaba crecido y era muy difícil
de cruzar. Un primer intento de tender un cable sobre el río
fracasó cuando un soldado que lo cruzó para ello resultó muerto
por los japoneses. Entonces trataron de llevar a cabo el cruce
cerca de la desembocadura, donde una isla en el centro podía
cubrir en parte la operación. Cubiertos por la artillería,
iniciaron el cruce, pero la artillería japonesa también actuó
desde lugares camuflados en la otra orilla. El resultado fue de 13
australianos ahogados, y muchos otros fueron arrastrados por el
río y tuvieron que ser rescatados. Pese a todo, los australianos
cruzaron y establecieron una cabeza de playa en la orilla opuesta.
Ivan Nikolayevich Stragorodsky fue finalmente elegido patriarca
de Moscú, con el nombre de Sergio. Tenía entonces 76 años.
Los partisanos atacaron Grčarice, pero fueron rechazados por los chetniks.
Los alemanes enviaron una flota de 2 acorazados, 9 destructores y
600 soldados para destruir las instalaciones aliadas en la isla
noruega de Spitsbergen. El ataque duró ocho horas. Los alemanes
desembarcaron, expulsaron a los noruegos, que se retiraron hacia
el interior, destruyeron unos depósitos de carbón y otras
instalaciones, y luego se retiraron. Dejaron 11 noruegos muertos y
tomaron 74 prisioneros. A su vez, las bajas alemanas fueron de 16
heridos, uno de los cuales murió más tarde como consecuencia de
las heridas.
Las tropas de Montgomery avanzaban hacia el norte manteniendo
esporádicos contactos con tropas alemanas en retirada, que
demolían puentes y otras instalaciones a su paso, que constituían
el único obstáculo real a su avance.
Badoglio había enviado un telegrama urgente a Eisenhower en el
que volvía a pedir que se retrasara la fecha del armisticio unos
días. Eisenhower, tras haber consultado a Washington, se negó,
pero en el último momento anuló el plan de enviar tropas a Roma
por aire. A las 18:00 tuvo lugar una reunión de urgencia en el
Palacio Quirinal, con el rey, Badoglio y otras autoridades civiles
y militares. Se planteó incluso la posibilidad de desdecirse del
acuerdo firmado con los aliados, pero pronto se convino en que eso
tendría consecuencias nefastas. A las 18:30, desde Argel, el
general Eisenhower anunció por radio el armisticio entre Italia y
los Aliados.
A las 19:00, el embajador alemán en Roma, Rudolf Rahn,
fue informado desde Berlín de la declaración del armisticio.
Sorprendido, porque esa misma mañana el rey le había asegurado que
Italia no iba a rendirse, fue a ver al ministro de asuntos
exteriores, quien le confirmó la noticia. Rahn respondió con malos
modos y se dirigió a Frascati junto con el personal de su embajada
a reunirse con
Kesselring. A las 19:40 fue Badoglio el que anunció el armisticio
por radio:
El gobierno italiano, reconociendo la imposibilidad de continuar la lucha desigual contra una fuerza enemiga incontenible, para evitar a la Nación nuevos y más graves desastres, pidió un armisticio al general Eisenhower, comandante en jefe de las fuerzas aliadas angloestadounidenses. La petición fue aceptada. Consecuentemente, todos los actos de hostilidad contra las fuerzas angloestadounidenses por parte de fuerzas italianas debe terminar en todas partes. Pero éstas deben reaccionar ante posibles ataques de cualquier otro origen.
A las 19:50 todas las unidades alemanas en el Mediterráneo
recibieron por radio la palabra clave Achse (Eje) que
indicaba que debía ponerse en marcha la Operación Eje. Los
alemanes empezaron a pedir la rendición o la colaboración de todas
las unidades italianas con las que hasta entonces colaboraban. La
reacción de los oficiales italianos, cansados de la guerra, fue
más bien de pasividad, y muchas unidades, sin órdenes claras,
optaron por disolverse. Muchos soldados empezaron a marcharse a
sus casas, sin dar más explicaciones. Rommel no tuvo así
dificultades en hacerse con el control del norte de Italia, como
tenía ordenado.
Kesselring debía ocuparse de la ocupación de Roma y el centro de
Italia. A las 20:30 se produjo el primer enfrentamiento cuando los
alemanes atacaron un depósito de combustible en Mezzocamino.
El avance alemán sólo encontró alguna resistencia en Lanuvio,
Albano Laziale y Ardea. A las 21:30 los alemanes
entraban en Roma, donde encontraron una fuerte oposición por parte
del ejército italiano.
En los días siguientes, los alemanes apresaron a unos 600.000
soldados italianos, que fueron llevados a campos de concentración.
Por el contrario, la pasividad de los italianos ante los nuevos
acontecimientos permitió que la mitad de los 70.000 prisioneros de
guerra aliados que estaban recluidos en Italia pudieran escapar
ese día, sin más que salir de los campos de concentración que se
habían quedado sin vigilancia.
De las 17 divisiones italianas en Yugoslavia, ninguna quiso
unirse a los alemanes. Dos se unieron a los partisanos de
Montenegro, otra pasó a Albania para unirse a los partisanos
albaneses, otras se rindieron ante los alemanes, otras ante el
Estado Independiente de Croacia y otras se disolvieron y sus
soldados trataron de llegar a Italia a pie o en barco.
En la isla de Rhodas había una guarnición de unos 39.000 soldados
italianos (entre infantería, armada y aviación), bajo el mando del
almirante Inigo Campioni y, desde principios de año,
también había unos 7.000 alemanes bajo el mando del general Ulrich
Kleeman. La única información que Campioni tenía del
armisticio era el comunicado emitido por radio por el primer
ministro. A las 20:30, poco después de haberlo recibido, Campioni
reunió a sus colaboradores para decidir qué hacían. Fue informado
de que los alemanes que custodiaban el aeropuerto estaban viendo
una película desarmados, por lo que sería fácil tomar el control.
Sin embargo, el mensaje de Badoglio no hablaba de atacar a los
alemanes, sino únicamente de defenderse en caso de ataque. Se optó
por ordenar a todas las fuerzas que se mantuvieran en estado de
alerta, y en especial a los barcos, para que estuvieran preparados
para abandonar rápidamente el puerto si así se les ordenaba.
Las tropas alemanas tenían órdenes de retirarse de Córcega y
Cerdeña. Las destinadas en Cerdeña estaban pasando a Córcega y en
total en el puerto corso de Bastia había unos 30.000
alemanes pendientes de ser evacuados. Éstos habían llegado a un
"acuerdo de caballeros" con los italianos por el que no
combatirían a cambio de que se les permitiera abandonar la isla
sin problemas. Sin embargo, los alemanes traicionaron a los
italianos y a las 23:45 un grupo de alemanes abordó la torpedera Ardito,
donde mataron a 70 de sus 180 tripulantes, y se hicieron con el
control del barco. Igualmente se apoderaron de los cargueros Sassari
y Humanitas.
Un destacamento británico desembarcó en la isla griega de Kastelorizo
y la guarnición italiana se rindió sin ofrecer resistencia.
El 9 de septiembre un submarino
estadounidense hundió un carguero japonés (Koyo Maru) cerca
de la costa japonesa.
Un carguero británico (Larchbank) fue hundido en el océano Índico por un submarino japonés.
Irán le declaró la guerra a Alemania.
Los chetniks rodeados en Grčarice, viendo que no podían
contener el ataque partisano (apenas eran 350 hombres) decidieron
salir durante la noche abriéndose paso para eludir el cerco. Lo
hicieron dejando 11 muertos y 171 heridos. Muchos de los chetniks
se rindieron cuando los partisanos les aseguraron que respetarían
sus vidas, pero los partisanos eran comunistas, así que unos meses
más tarde los ejecutaron en secreto. Sólo 21 oficiales capturados
fueron sometidos a un juicio que condenó a muerte a 16 de ellos y
condenó a los otros 5 a trabajos forzados.
A medianoche, en Rhodas, el general Kleeman pidió permiso a los
italianos ara redistribuir sus tropas para prevenir un posible
desembarco británico, pero le fue enérgicamente denegado. Entonces
se reunió con Campioni, con quien tuvo una acalorada discusión
sobre la disposición de las tropas alemanas en la isla. Mientras
tanto un avión británico sobrevoló la isla y arrojó miles de
papeles firmados por el general Henry Maitland Wilson, al
mando de las tropas aliadas en Oriente Medio, en los que se
ordenaba a los italianos a tomar el control de las posiciones
alemanas y a trasladar sus barcos y aviones a bases británicas.
Campioni no hizo caso por considerar que el origen de esos papeles
era dudoso.
A las 2:00 los alemanes tomaron el aeropuerto Ciampino,
en Roma.
El armisticio establecía que la flota italiana debía salir de
Italia hasta Malta o el norte de África para no caer en manos de
los alemanes. Así, a las 2:30 los acorazados Roma, Vittorio
Veneto e Italia, junto con tres cruceros o ocho
destructores, zarparon de La Spezia rumbo a África al tiempo que
los alemanes entraban en la ciudad. Otros capitanes que no
pudieron poner en movimiento a sus barcos, los hicieron hundir
(entre ellos los destructores Niclolò Zeno y FR22,
el crucero Taranto y el submarino Antonio Bajamonti).
Los alemanes los arrestaron y los fusilaron allí mismo. Acciones
similares ocurrieron en todos los puertos donde los alemanes
tenían acceso a barcos italianos.
A las 3:00 los alemanes estaban ya a 8 km del centro de la
ciudad. Tras un intento fallido de Badoglio de contactar con
Kesselring, el general Mario Roatta recomendó al rey Víctor Manuel
III y a Badoglio que abandonaran la ciudad hacia el sur, para
conseguir la protección aliada.
A las 3:30 unos 190.000 soldados británicos y estadounidenses se
disponían a desembarcar en Salerno. No se había llevado a cabo un
bombardeo previo para tomar a los alemanes por sorpresa, pero la
sorpresa se la llevaron los aliados cuando la primera oleada de
barcazas llegó a la costa de Paestum. Un altavoz dijo en
inglés: Sigan adelante y ríndanse, les tenemos cubiertos.
En efecto, los alemanes habían distribuido tanques y artillería a
lo largo de la costa, pese a lo cual el desembarco continuó. A las
4:00 la Luftwaffe empezó a bombardear las cabezas de playa
aliadas.
A las 5:10 el rey, su familia, Badoglio y Ambrosio salieron de
Roma junto con otras autoridades en siete coches. Roatta cubrió la
retirada y luego él mismo se dio a la fuga dejando a sus
subordinados sin ninguna orden de actuación. Llegaron a Pescara y
luego a Ortona. Las fuerzas italianas en Roma quedaron
desconcertadas, pero consideraron que lo que correspondía era
continuar defendiendo la capital contra los invasores, así que
continuaron la lucha.
A las 7:00 una división Panzer inició un ataque contra
las posiciones aliadas en Salerno que causó muchas bajas, pero fue
contrarrestada por la artillería de la armada. El desembarco
progresó lentamente.
En Córcega, un contraataque italiano logró recuperar los barcos Sassari
y Humanitas, así como el control del puerto. Los barcos
alemanes zarparon, pero fueron atacados por las baterías costeras.
Una torpedera italiana (Aliseo) salió detrás de los barcos
alemanes. Uno de ellos le disparó y estropeó sus motores, pero
fueron rápidamente reparados. Entonces el Aliseo fue
atacando y hundiendo sucesivamente a cada uno de los barcos
alemanes, al final con la ayuda de una corbeta. En total hundió
dos cazasubmarinos, cinco torpederas y una lancha de la Luftwaffe.
Los alemanes contaron 160 muertos.
Sobre el mediodía, tras algunas tensiones previas, se inició el
combate abierto entre alemanes e italianos en Rhodas. Tanques
alemanes ocuparon el aeropuerto, pero fueron destruidos por la
artillería italiana (que también dañó los aviones italianos que
había allí).
Aviones estadounidenses bombardearon Scanzano, en el sur
de Italia, y poco después una flota británica se acercaba a
Tarento para llevar a cabo un nuevo desembarco. Entonces los
acorazados Andrea Doria y Caio Dullio salieron del puerto con tres
cruceros. Los británicos se prepararon para el combate, pero los
barcos italianos pasaron a su lado rumbo a Malta, para rendirse,
según lo acordado. A las 15:00 un destructor británico sorteó el
campo de minas que protegía Tarento y llegó hasta el puerto. A las
17:00 el destructor salió llevando a bordo a un oficial del puerto
que guió al resto de la flota a través del campo de minas. El
desembarco se produjo con la completa cooperación de los
italianos. Desde Tarento los británicos empezaron a avanzar hacia
el norte, sin encontrar oposición alemana.
En Italia empezó a formarse una resistencia contra el fascismo y
la ocupación alemana, integrada por soldados italianos veteranos,
prisioneros de guerra aliados liberados el día anterior, civiles
que eludían el alistamiento o el trabajo obligatorio en Alemania,
etc. En Nápoles se constituyó el Comité de Liberación
Nacional, que agrupaba a políticos de diversas ideologías,
presidido por Ivanoe Bonomi.
Entre tanto la resistencia corsa había iniciado un alzamiento, en
principio contra la ocupación italiana, pero al final se
enfrentaron a los alemanes, que luchaban al mismo tiempo contra
los italianos. Henri Giraud recibió ese día un telegrama desde
Córcega que decía: Ajaccio se ha sublevado. Hay combates en
Bastia, y luego reclamaba ayuda. Giraud dijo: ¡Gente
valiente! No podemos dejarlos caer.
La aviación alemana atacó a la flota que había salido de La
Spezia. Varios barcos resultaron dañados y el acorazado Roma
se hundió. Unos 1.400 hombres murieron en el naufragio. En el
hundimiento del Roma la Luftwaffe usó por primera vez una
nueva arma: la bomba guiada antibuque Fritz X. Se trataba
de una bomba que se arrojaba desde un avión y podía ser guiada
desde el mismo para llevarla hasta el objetivo deseado.
Por la noche tres oficiales británicos fueron lanzados en
paracaídas sobre Rhodas y se reunieron con Campioni. Explicaron
que los británicos no podrían enviar refuerzos hasta una semana
más tarde, mientras que Campioni afirmó que no podría resistir
tanto tiempo.
A las 9:00 del 10 de septiembre un avión alemán lanzó papeles sobre Rhodas en los que se prometía una evacuación segura hasta Italia a cambio de la rendición. A las 13:00, uno de los enviados británicos (que había sido herido al aterrizar con su paracaídas) fue evacuado con una carta de Campioni dirigida al general Wilson, en el que solicitaba ayuda inmediata.
Al amanecer, los británicos desembarcados en Tarento llegaron a Massafra,
donde fueron vitoreados por la población. Luego llegaron a Mottola,
que todavía estaba ocupada por los alemanes. Éstos se resistieron
brevemente y luego se retiraron. Los británicos entraron también
sin oposición en los puertos de Brindisi y Bari. Sobre las 14:30
llegó a Brindisi una corbeta en la que viajaban el rey Víctor
Manuel III y sus acompañantes.
Los alemanes seguían capturando o hundiendo barcos italianos. Por
ejemplo, el destructor Antonio Pigafetta fue hundido por
los italianos y luego reflotado por los alemanes en Fiume, el
submarino Argo fue hundido en Monfalcone y el
crucero Piero Foscari en Castiglioncelo. Por otra
parte, a Malta habían llegado 22 barcos de guerra italianos,
incluyendo cuatro acorazados, siete cruceros y once destructores.
Los alemanes no tuvieron dificultades en hacerse con el control
de Albania. El general Maximilian von Weichs emitió este
comunicado:
La ocupación de Albania era necesaria. No venimos a Albania como enemigos, sino como amigos, y no tenéis nada que temer. Abandonaremos Albania en cuanto lo consideremos necesario. Os dejaremos libres en vuestros asuntos internos y no interferiremos con ellos. Os pedimos obediencia y los que no obedezcan serán castigados.
El primer ministro fascista albanés, Eqrem Libohova, fue cesado y
los alemanes prometieron la organización de un gobierno
genuinamente albanés cuya independencia reconocerían
inmediatamente. Esto llevó al Frente Nacional a entablar
negociaciones con los alemanes.
Por la mañana los alemanes habían llegado al centro de Roma. Los
italianos seguían ofreciendo resistencia en algunos sectores de la
ciudad, pero por la tarde, tras haber recibido varias amenazas y
un ultimátum, las autoridades militares capitularon. Los alemanes
se comprometieron a aceptar la creación de un mando provisional
italiano bajo el mando del general Giorgio Calvi di Bergolo.
En la ocupación de Roma, los alemanes habían sufrido unos 100
muertos y 500 heridos. Las bajas italianas fueron de 659 soldados,
121 civiles y 204 "no identificados" muertos.
El padre Marie-Benoît estaba en Roma y tuvo el coraje de
presentarse ante el jefe de la Gestapo —La Gestapo
lo había estado investigando en muchas ocasiones— para pedirle que
no actuara contra los judíos de Roma. Para los alemanes, ocupando
una Italia hostil, no era el mejor momento y lugar para ponerse a
cazar judíos, así que el jefe de la Gestapo le aseguró que
no haría nada si los sacaba de Roma lo antes posible. El capuchino
le respondió que eso no era problema, que ya habían salido de Roma
y se dirigían hacia el sur. Sin embargo, los judíos seguían en la
capital italiana bajo identidades falsas, con documentos que les
había proporcionado él mismo.
En Nápoles se habían producido algunos incidentes entre la
población local y las tropas alemanas presentes en la ciudad, pero
ahora se producía el primer conflicto de envergadura. Algunos
napolitanos cortaron el paso de varios vehículos alemanes, se
produjo un combate en el que murieron seis alemanes y otros fueron
capturados, pero un militar italiano logró convencer a los
manifestantes para que soltaran a los rehenes y depusieran las
armas. Poco después, los alemanes, como represalia, incendiaron la
Biblioteca Nacional y dispararon contra una multitud reunida ante
ella.
Ese día los alemanes entraron en Livorno.
A las 19:45 los dos emisarios británicos que seguían en Rhodas
marcharon en barco hasta Kastelorizo, donde trataron de gestionar
un envío urgente de tropas a Rhodas. Por la noche Campioni fue
informado de que las fuerzas italianas de Creta y de la Grecia
continental se habían rendido a los alemanes.
Angelico Carta, una de las máximas autoridades militares
italianas en Creta, había huido a Egipto, y esto había desatado el
rumor de que los aliados iban a invadir la isla en breve. Alentado
por esta falsa creencia, una guerrilla de la resistencia griega
dirigida por Manolis Bandouvas mató a dos soldados
alemanes en Kato Simi y arrojó los cadáveres a una zanja.
El 11 de septiembre Japón fue
bombardeado por 20 aviones estadounidenses, de los que nueve
fueron derribados. Submarinos estadounidenses hundieron dos
cargueros japoneses (Hokusho Maru y Yoko Maru) en
el Pacífico.
En Nueva Guinea, los japoneses habían abandonado Salamaua, que
fue ocupada por los aliados. Las bajas japonesas en el último
medio año ascendían a 2.700 muertos y más de 5.000 heridos. Los
combates continuaban en Lae. Las tropas que habían sido lanzadas
en paracaídas en Nadzab habían avanzado hacia la costa. Ese día
una brigada de infantería australiana, apoyada por la artillería,
se enfrentó a unos 200 japoneses a una distancia de unos 30
metros. Los japoneses terminaron retirándose dejando 33 muertos
tras de sí.
El crucero alemán Mitchel hundió un petrolero noruego (India)
en el océano Índico.
Torpederas noruegas hundieron un carguero alemán (Anke) en
el mar de Noruega.
En Italia los alemanes entraron en Nápoles, donde ejecutaron al
comandante de las tropas italianas. El destructor Giuseppe La
Masa fue hundido antes de que los alemanes pudieran
apoderarse de él. Lo mismo sucedió en Venecia con el destructor Quintino
Sella. Mientras tanto los alemanes completaban la ocupación
de la región de Liguria, mientras que en Piombino un
intento de desembarco alemán fue rechazado por soldados ayudados
por voluntarios civiles. Varios cientos de alemanes fueron
capturados. Hitler ordenó que todos los oficiales italianos que
hubieran colaborado con los aliados fueran ejecutados, y que los
soldados y civiles arrestados por cualquier motivo fueran enviados
a Alemania para realizar trabajos forzados.
Sólo ese día la aviación italiana recibió órdenes de volar hacia
aeropuertos controlados por los aliados. De unos 800 aviones, sólo
246 lograron escapar, otros 43 fueron abatidos por los alemanes y
el resto fue capturado por los alemanes.
Lanchas alemanes torpedearon y hundieron un destructor
estadounidense (USS Rowan) en Salerno. El crucero USS
Savannah resultó dañado por el impacto de una bomba Fritz
X, pero logró llegar hasta Malta para ser reparado.
En la ciudad de Rhodas, el almirante Campioni recibió
sucesivamente a otro emisario británico y a varios emisarios
alemanes. El último llegó con un ultimatum para una rendición
incondicional y con apenas media hora de plazo para decidir, tras
la cual la ciudad sería bombardeada. Campioni consultó a sus
oficiales y acordaron negociar la rendición. Luego se reunió con
Kleeman en las afueras de la ciudad. Se acordó que Campioni
continuaría como gobernador, pero que sus tropas serían
desarmadas. Ninguna unidad alemana entraría en la ciudad salvo en
situaciones excepcionales. Los italianos destruyeron los libros de
claves y los documentos secretos, y mantuvieron escondida una
emisora de radio. La rendición indignó a los soldados italianos,
que consideraban que estaban ganando la batalla a los alemanes.
Muchos acusaron a Campioni de ser proalemán, o de haberlos
vendido.
El 12 de septiembre un carguero
japonés (Fujikawa Maru) fue hundido en el Pacífico por un
submarino estadounidense.
El patriarca Sergio fue investido en la catedral Yelokovsky
de Moscú, en la primera ceremonia religiosa de este tipo desde la
revolución rusa.
Los nacionalistas albaneses aspiraban a que Kosovo, que había
formado parte de Yugoslavia, pasara a ser parte de Albania, y la
situación política estaba alentando sus aspiraciones. Ese día una
milicia albanesa comandada por Amdija Jašarević asesinó a
unos 60 servios cerca de Uroševac.
Los alemanes habían descubierto los cadáveres de los dos alemanes
asesinados en Kato Simi, y enviaron una compañía de infantería a
la aldea para investigar lo sucedido. Los hombres de Bandouvas les
tendieron una emboscada en la que mataron unos 400 alemanes y
apresaron a otros 12.
En la isla griega de Leros había una guarnición de unos
7.600 soldados italianos bajo el mando del capitán Luigi
Mascherpa. Ese día llegaron oficiales británicos que
tantearon a Mascherpa sobre una posible cooperación entre
italianos y británicos frente a la amenaza de los alemanes.
Mascherpa se mostró cauto, pues los términos del armisticio eran
vagos.
Los militares italianos en Piombino rindieron la ciudad a los
alemanes obedeciendo órdenes de sus superiores. Rommel organizó el
traslado a Alemania de los soldados italianos capturados, parte en
tren y parte a pie. Ese día los alemanes entraron en Ancona, donde
la armada italiana hundió dos submarinos (Ametiste y Serpente).
Hitler había encomendado al capitán de las SS Otto Skorzeny
la búsqueda del lugar donde estaba retenido Mussolini, y
finalmente lo había encontrado. A las 13:05, 10 planeadores, con 9
soldados y un piloto cada uno, fueron remolcados desde el
aeropuerto de Pratica di Mare, cerca de Roma con rumbo al
hotel de Campo Imperatore donde estaba el Duce. A las
14:00 dos compañías de paracaidistas atacaron la estación de
funicular que constituía la única comunicación con el hotel y
cortaron la línea telefónica. A las 14:05 los planeadores, ya
liberados de sus aviones remolcadores, aterrizaron en Campo
Imperatore. Uno se estrelló y varios de sus ocupantes resultaron
heridos. Skorzeny había llevado como rehén a un general italiano,
al que amenazó con matar si los centinelas de Mussolini ofrecían
resistencia. Éste ordenó a los italianos que colaboraran y así,
sin un solo disparo, al cabo de 10 minutos Mussolini salía del
hotel acompañado de varios miembros de las SS. Cuando Scorzeny le
informó de que estaba siendo rescatado por orden directa de
Hitler, Mussolini respondió emocionado: ¡Ya sabía que el
Führer no me abandonaría! Unos minutos más tarde llegó una
avioneta que se llevó a Mussolini hasta Pratica di Mare, desde
donde fue llevado en avión hasta Viena.
Mientras tanto los alemanes lanzaron finalmente un contraataque
contra las fuerzas estadounidenses que habían desembarcado en
Salerno, con seis divisiones de tropas motorizadas, con el
propósito de expulsarlas antes de que pudieran reunirse con las
tropas de Montgomery, que avanzaban lentamente desde el sur y
estaban a unos 130 km de Salerno. Los estadounidenses tuvieron que
reducir el perímetro de la cabeza de playa y 4.000 paracaidistas
fueron lanzados para reforzar los puntos más débiles, con el apoyo
de la artillería naval.
La aviación británica localizó y atacó un submarino alemán en el
Mediterráneo, que terminó encallando en la colonia española de
Melilla, donde luego fue bombardeado por corbetas británicas y
australianas.
El 13 de septiembre un submarino
estadounidense hundió un carguero japonés cerca de la costa china.
Murieron cuatro de sus tripulantes y 29 pasajeros.
Las tropas procedentes de Nadzab continuaban su camino hacia Lae.
Una ametralladora oculta japonesa causó varias bajas entre los
australianos, y entonces el soldado Richard Kelliher, por
iniciativa propia, corrió hacia el lugar y lanzó dos granadas de
mano que mataron a parte de los japoneses atrincherados, pero no a
todos. Entonces retrocedió, cogió una ametralladora ligera, corrió
de nuevo hasta la posición japonesa y liquidó a los que quedaban.
Luego volvió y pidió permiso para ir a rescatar a un compañero
herido, bajo el fuego de otra posición japonesa, y así lo hizo.
Más adelante sería condecorado por su acción.
A Leros llegaron más oficiales británicos, que contemplaron con
inquietud el pésimo estado de sus defensas. Al mismo tiempo el
capitán Mascherpa recibió una oferta de "rendición honorable" por
parte de los alemanes, pero la rechazó.
Mussolini fue llevado de Viena hasta Munich.
El enviado alemán al Vaticano aseguró en nombre de Hitler que
protegería la soberanía del Vaticano como Estado independiente y
que nunca sería atacado. Mientras tanto, Hitler le decía a uno de
sus ayudantes que quería que el papa Pío XII fuera deportado a
Alemania.
Los italianos hundieron uno de sus submarinos en Castellammare
di Stabia para evitar que cayera en manos alemanas.
El crucero británico HMS Uganda fue alcanzado por una
bomba Fritz X ante la costa de Salerno, pero no se hundió
y pudo ser llevado a Malta para ser reparado. También fue
bombardeado un barco hospital británico (Newfoundland).
Todos los pacientes pudieron ser salvados, pero murieron 21
tripulantes. Luego el barco fue hundido por un destructor
estadounidense.
El día anterior el coronel Walter Schöll había asumido el
mando de las fuerzas alemanas en Nápoles y, dado que los
disturbios continuaban, ese día los napolitanos pudieron leer en
carteles distribuidos por toda la ciudad:
Con efecto inmediato desde hoy, asumo el control absoluto con plenos poderes de la ciudad de Nápoles y sus alrededores.
1. Todo ciudadano que actúe con tranquilidad gozará de mi protección. Por el contrario, cualquiera que abierta o subrepticiamente actúe contra las fuerzas armadas alemanas será ejecutado. Más aún, la casa del malhechor y sus alrededores serán destruidos y reducidos a ruinas. Cada soldado alemán herido o asesinado será vengado cien veces.
2. Ordeno un toque de queda de 8 pm a 6 am. Sólo en caso de alarma se permitirá acceder a las calles para alcanzar el refugio más cercano.
3. Se proclama el estado de sitio.
4. En un plazo de 24 horas todas las armas y munición de cualquier clase, incluyendo pistolas, granadas de mano, etc., deben ser entregadas. Cualquiera que, tras dicho plazo, sea hallado en posesión de un arma será ejecutado inmediatamente. La entrega de armas y municiones debe hacerse a las patrullas militares alemanas.
5. Todos deben mantener la calma y actuar razonablemente.
Para ayudar a que la gente mantuviera la calma, ocho prisioneros
de guerra fueron fusilados en la calle y un tanque abrió fuego
contra unos estudiantes que habían empezado a reunirse en la
Universidad. Un marinero fue ejecutado en las escaleras de su
cuartel general, ante miles de personas forzadas a presenciar el
acto por las tropas alemanas. Además, 500 personas fueron
obligadas a presenciar la ejecución de 14 policías que habían
ofrecido resistencia armada a los alemanes, y luego fueron
deportadas a Teverola.
Un submarino francés llegó a Córcega con unos 100 soldados
enviados por el general Giraud. Esta iniciativa no tuvo el visto
bueno de Eisenhower, que consideraba que todos los esfuerzos
debían centrarse en ese momento en la invasión de Italia, y De
Gaulle aprovechó para señalar el inconveniente de que Giraud
controlara el ejército de la Francia Libre a su capricho.
La aviación alemana hundió un carguero británico (Fort Babine)
cerca de la costa atlántica española.
La segunda película de Gene Kelly había sido un drama bélico
propagandístico (Una vida por amor) que no tuvo gran éxito
ni de crítica ni de audiencia. Luego había vuelto al género
musical con Du Barry era una dama, con música de Cole
Porter, que tuvo mucho más éxito. Ahora estrenaba El desfile
de las estrellas, una comedia musical que fue la cuarta
película más taquillera del año. Es famosa la escena en que Kelly
baila con una fregona como compañera. Fue la primera película en
la que apareció el pianista y director de orquesta español José
Iturbi, interpretándose a sí mismo. Unos meses más tarde
Gene Kelly protagonizaría también La cruz de Lorena, un
drama sobre dos prisioneros franceses que escapan de una cárcel
alemana y se unen a la resistencia. La recaudación apenas compensó
el coste.
El 14 de septiembre los japoneses que
se habían retirado de Salamaua llegaron a Lae, donde se unieron a
la guarnición que había allí para continuar retirándose hacia el
norte a lo largo de los días siguientes.
Un submarino japonés hundió un petrolero noruego (Bramora)
en el océano Índico.
Los soviéticos reanudaron los combates en el sector de Smolensk.
Ese día avanzaron creando un saliente en el frente de 30 km de
ancho y cuya profundidad llegó a los 13 km.
El primer ministro búlgaro, Bogdan Filov, había renunciado a su
cargo al asumir la regencia, y ahora era sustituido por Dobri
Bozhilov Khadzhiyanakev, que resultó ser una marioneta
perfecta movida por los alemanes.
Los partisanos yugoslavos rodearon el castillo de Turjak,
donde había unos 650 chetniks y milicianos anticomunistas.
La reacción ante la matanza de alemanes en Kato Simi no se había
hecho esperar. El día anterior, tropas alemanas habían rodeado los
alrededores de la ciudad cretense de Viannos, y anvanzaron
sobre ella desde todas direcciones obligando a quienes encontraban
por las montañas a entrar en la ciudad. Ese día iniciaron una
oleada de ejecuciones masivas, saqueos, incendios, demolición de
casas y destrucción de cosechas que se prolongó durante los dos
días siguientes. A los supervivientes se les prohibió regresar a
la ciudad siquiera para enterrar a los muertos. Se calcula que
murieron al menos 500 personas y otras 200 fueron tomadas como
rehenes.
Un cazasubmarinos alemán hundió un submarino griego (Katsonis)
cerca de la isla de Skiathos, en el Egeo.
En Albania se constituyó un gobierno provisional presidido por Ibrahim
Aqif Biçakçiu, que declaró a Albania independiente de
Italia. Mientras tanto, unos 2.000 guerrilleros comunistas y del
Frente Nacional atacaron un cuartel italiano en Drashovicë,
que ahora estaba el bajo control de unos 3.500 soldados alemanes
que custodiaban a unos 7.000 soldados italianos. Los alemanes,
rodeados, se dispusieron a resistir un asedio.
Mussolini se encontró finalmente con Hitler en La Guarida del
Lobo, su búnquer en Rastenburg, en Polonia. Mussolini
declaró estar mal de salud y expresó su deseo de retirarse de la
política, pero Hitler le propuso volver a Italia y organizar una
república fascista bajo protección alemana. Era la mejor forma de
lograr que una parte de las tropas italianas volvieran a ser
leales al Eje. Mussolini insistió en que no se encontraba con
fuerzas, pero su amigo Hitler supo cómo convencerlo: le aseguró
que si no aceptaba destruiría Milán, Génova y Turín.
El ataque alemán en Salerno casi había llegado hasta las playas,
pero finalmente fue rechazado. El general estadounidense Mark
Wayne Clark, fue condecorado posteriormente por haber
dirigido la crisis desde la primera línea de fuego. La suerde de
los aliados fue que Rommel había convencido a Hitler de que
defender Italia más allá de Roma no era prioritario, por lo que
Hitler había prohibido a Kesselring reclamar tropas del norte de
Italia.
La aviación aliada hundió dos cargueros estadounidenses (Bushrod
Washington y James W. Marhall) cerca de Salerno. Una
bomba Fritz X impactó con el acorazado británico HMS
Warspite, que pudo ser llevado hasta Malta.
Los alemanes hundieron un submarino italiano en Córcega.
El general Ugo Cavallero fue encontrado muerto en el hotel en el
que se alojaba. Todo apunta a que se había disparado él mismo.
Cavallero había sido encarcelado cuando Mussolini fue arrestado y
luego liberado por los alemanes. La noche anterior había estado
cenando con Kesselring. Su muerte puede estar relacionada con una
carta que escribió a Badoglio cuando estaba en prisión, en la que
pedía su puesta en libertad y afirmaba que despreciaba a Mussolini
y al fascismo. Los alemanes habían encontrado la carta.
El 15 de septiembre un destructor
estadounidense hundió un submarino japonés en el mar del Coral.
En su camino hacia Lae, una patrulla avanzada australiana
encontró a unos 200 japoneses que cruzaban el río Bumbu.
Los atacaron y los obligaron a volver a la otra orilla dejando
atrás muchas bajas.
En Smolensk, los soviéticos iniciaron un ataque en otro punto del
frente, donde crearon un segundo saliente de unos 20 km de ancho y
con una profundidad de 10 km. Ese día tomaron Yartsevo.
Las tropas soviéticas llegaron al río Desna, el principal
afluente del Dniéper, sobre el que formaron varias cabezas de
puente.
Hitler ordenó ese día a las tropas en la zona sur del frente
soviético que se retiraran a la línea defensiva levantada en la
orilla occidental de Dniéper. Al sur, los soviéticos sobrepasaron
las primeras líneas defensivas alemanas en el delta del Kuban. Los
alemanes empezaron a evacuar la península de Taman cruzando el
estrecho de Kerch hasta Crimea.
Los italianos hundieron uno de sus submarinos en Génova. Para
estas fechas los alemanes habían desarmado ya a todas las fuerzas
italianas en el centro y norte de Italia. En la isla griega de Cefalonia
había todavía unos 11.500 soldados italianos bajo el mando del
general Antonio Gandin, así como una guarnición de unos
2.000 soldados alemanes. Gandin había estado a punto de aceptar un
ultimátum alemán, pero las protestas de sus hombres lo llevaron a
rechazarlo en última instancia. Ahora cinco batallones alemanes
desembarcaban en la isla dispuestos a hacerse con el control.
El ejército estadounidense había desarrollado una granada capaz
de detener los tanque alemanes, pero era demasiado pesada para
lanzarla a mano o siquiera con un fusil lanzagranadas. Sin
embargo, siguiendo una idea de Robert Goddard que databa del final
de la Primera Guerra Mundial, fue acoplada a un cohete y se diseñó
un cañón ligero que podía lanzarla apoyado sobre el hombro de un
soldado. Tras un proceso de perfeccionamiento que se había
desarrollado a lo largo del año anterior, los primeros modelos
utilizables habían sido probados en la campaña contra Rommel en el
norte de África y también se les había prestado algunos prototipos
a los soviéticos. Recientemente se habían probado también en la
invasión de Sicilia. Durante una de las primeras pruebas, el
general de división Gladeon Marcus Barnes había comentado:
Se parece al bazooka de Bob Burns, y desde entonces el
nombre informal de la nueva arma fue bazzoka. Bob
Burns era un humorista que había inventado un instrumento
musical con ese nombre, derivado de bazoo, una palabra de
argot que significa algo así como "bocazas". Los alemanes habían
arrebatado algunos modelos a los soviéticos e incluso habían
fabricado su propia versión mejorada, así que ya no tenía sentido
mantener el secreto, por lo que ese día el ejército hizo pública
su hasta entonces arma secreta. La publicidad afirmaba que era tan
potente como un cañón de 155 mm, lo cual era una exageración, pero
causó muy buena impresión.
El 16 de septiembre los australianos
estaban llegando ya hasta Lae. Tras haber liquidado a los últimos
grupos aislados de japoneses, el único obstáculo para entrar en la
ciudad, ya abandonada por los japoneses, era la aviación aliada,
que los confundía con japoneses y trataba de ametrallarlos y les
lanzaba bombas de fragmentación. Un mensaje enviado a la base
resolvió el problema. Todavía había japoneses en el aeropuerto,
pero no tardó en caer, con 15 japoneses muertos y uno capturado.
Allí los australianos fueron atacados por otra división
australiana que llegaba con retraso y que también quiso tomar el
aeropuerto.
La retirada de Lae fue penosa para los japoneses. Tuvieron que
cruzar la cordillera Saruwaged con escasez de alimentos y
atravesando cumbres heladas. Por otra parte, la victoria aliada en
Salamaua y Lae convenció al Alto Mando japonés de que el frente
era demasiado amplio, y que era imposible llevar a cabo nuevos
ataques. Por el contrario, los esfuerzos futuros debían dedicarse
a establecer sólidas líneas de defensa con la esperanza de
contener el avance aliado.
Hacía algo más de un año que Chiang Kai-shek había hecho
encarcelar al vietnamita Hồ Chí Minh tras un intento de lograr el
apoyo del gobierno chino en la lucha contra la ocupación francesa
de Vietnam. Ese día los comunistas lo liberaron y así pudo
regresar a su tierra.
La aviación neozelandesa hundió un carguero noruego (Graziella)
cerca de la costa noruega.
Los soviéticos ocuparon el puerto de Novorossiysk, en el
mar Negro.
Para evitar que las SS le volvieran a quitar parte de sus
trabajadores judíos. Karl Plagge logró convencer a los
responsables del gueto de Vilna que era "esencial" que sus
"trabajadores esenciales" permanecieran en su campo de trabajo,
donde pudieron trasladarse junto con sus esposas y hasta dos hijos
cada uno. Allí recibieron un trato relativamente más benigno que
en el gueto. Para justificar la presencia en el campo de judíos
que no sabían nada de mecánica, estableció varias ocupaciones
adicionales, incluyendo una guardería y una granja de conejos
claramente "esenciales para la producción bélica", y se opuso
vehementemente a cualquier intento de las SS de llevarse a
cualquiera de sus trabajadores.
Kesselring llevó a cabo el que sería su último intento de
apoderarse de la cabeza de playa estadounidense en Salerno, pero
fracasó de nuevo ante la superioridad naval y aérea de los
aliados. Ese día murió en combate a los 31 años el capitán Henry
Wellesley, el sexto duque de Wellington, descendiente del
que derrotó a Napoleón. Ese día, 300 soldados que habían luchado
bajo las órdenes de Montgomery en el norte de África fueron
llevados a Salerno como reservas. Al embarcar se les había dicho
que iban a reunirse con sus antiguas unidades en Sicilia para poco
después regresar a Gran Bretaña. Sin embargo, en el último momento
se les informó de un cambio de planes, debido a que un cuerpo
británico integrado en el quinto ejército estadounidense
necesitaba reservas. Al llegar a Salerno se encontraron con una
situación de desorganización que los irritó aún más, y se negaron
a cumplir las órdenes recibidas. Para entonces las tropas de
Montgomery llegaban a Sapri, y su vanguardia entró en
contacto con las tropas estadounidenses desembarcadas en Salerno.
Las tropas desembarcadas en Tarento ascendían desde Bari siguiendo
la costa adriática.
Los judíos de la ciudad italiana de Merano fueron
desalojados. Al cabo de un tiempo terminaron en Auschwitz.
El 17 de septiembre los soviéticos
tomaron la ciudad de Dukhovshchina, un paso clave para
llegar a Smolensk. El general alemán Walther von
Seydlitz-Kurzbach, al que Hitler había condenado a muerte in
absentia por haberse entregado a los soviéticos en la
batalla de Stalingrado, era el presidente de la Liga de
oficiales alemanes, en nombre de la cual presentó a los
soviéticos una oferta de formar un ejército de 30.000 prisioneros
de guerra alemanes para luchar contra Adolf Hitler.
Destructores británicos hundieron dos cargueros alemanes (Paula
y Pluto) en el Egeo. Los alemanes detectaron que el único
aeropuerto aliado en las islas griegas que forman el Dodecaneso
estaba en la isla de Cos, y esa noche llevaron a cabo el
primer de una larga lista de bombardeos.
La pequeña guarnición italiana de la isla de Alimia se
trasladó a Leros con sus armas en dos barcos pesqueros. También
habían llegado algunos soldados desde Rhodas, con lo que la
guarnición italiana tenía ahora 8.350 hombres, a los que se
sumaban ahora 400 soldados británicos.
El aeropuerto de Ciampino, junto a Roma, fue bombardeado por 55
aviones estadounidenses.
Joseph Darnand fue uno de los firmantes de un texto dirigido al
gobierno francés y a las autoridades alemanas en el que se instaba
a convertir a Francia en un Estado Nacional-Socialista. Los
firmantes lamentaban la inacción del gobierno de Laval contra los
comunistas y los maquis y aconsejaban el incremento de la
colaboración con Alemania, para participar en una defensa común
del continente, previa a la reconquista de los territorios
africanos.
Unos 500 soldados bosnios musulmanes que formaban una división de
las SS se amotinaron en Villefranche-de-Rouergue, en
Francia y mataron a varios oficiales fuera de servició. Los
alemanes sofocaron la revuelta matando a unos 150 de los
amotinados, y varios más fueron sometidos a un consejo de guerra y
condenados a muerte.
El 18 de septiembre submarinos
estadounidenses hundieron dos cargueros (Chowa Maru y Yowa
Maru) y un transporte japonés (Kansai Maru) en el
Pacífico.
La ciudad griega de Paramythia está cerca de la frontera
con Albania. Al inicio de la guerra, en ella vivían unos 3.000
griegos cristianos y otros tantos albaneses musulmanes. Los
albaneses de la zona habían colaborado habitualmente con los
italianos, y ahora lo hacían también con los alemanes. Ese día una
patrulla alemana que buscaba miembros de la resistencia con el
apoyo de albaneses locales detuvo a 60 griegos, entre los cuales
encontró a ocho hombres y una mujer que fueron considerados
miembros de la resistencia.
El aeropuerto de Ciampino volvió a ser bombardeado, esta vez por
35 aviones estadounidenses.
Ese día los italianos pudieron oír por radio una voz que decía:
Tras un largo silencio, he aquí que mi voz os llega de nuevo, y estoy seguro de que la reconocéis...
Era Mussolini, que hablaba desde Mónaco. Anunció la creación de
la República Social Italiana, que sería "nacional y
social en el más alto sentido de la palabra, es decir, que será
fascista, con lo que volveremos a nuestros orígenes."
Hasta entonces, Mussolini había defendido la monarquía, pero ahora
explicaba que "cuando la monarquía no cumple con su deber,
pierde su razón de ser." El Partido Fascista cambió su
nombre por el de Partido Fascista Republicano.
Los alemanes completaron la evacuación de Cerdeña. Todas sus
tropas en la isla, casi 26.000 solados, habían pasado a Córcega y
estaban a su vez pasando a la Italia continental.
El 19 de septiembre un submarino
estadounidense hundió un carguero japonés (Kachisan Maru)
cerca de la costa japonesa.
Las tropas estadounidenses y australianas en Nueva Guinea habían ascendido por el río Markham y ese día una compañía de 226 australianos atacó Kaiapit, cerca de sus fuentes, donde había unos 500 soldados japoneses. Cuando los australianos se encontraban a poco más de 1 km empezaron a recibir fuego enemigo de algunas trincheras avanzadas. Los australianos las rodearon y las asaltaron con granadas de mano y bayonetas. Los japoneses se retiraron dejando 30 muertos. Los australianos organizaron defensas para pasar la noche.
Los soviéticos habían penetrado las líneas alemanas de Smolensk
en un tramo de 250 km de frente, donde habían avanzado unos 40 km.
Un submarino alemán hundió un carguero británico (Fort
Longueuil) en el océano Índico.
Los nueve griegos arrestados por los alemanes y albaneses cerca
de Paramythia fueron fusilados ante la escuela de la ciudad.
Los partisanos yugoslavos entraron en el castillo de Turjak y
organizaron la típica purga comunista que se llevó por delante a
casi un millar de personas.
Los alemanes completaron la ocupación del centro y el norte de
Italia. Sin embargo, Kesselring había autorizado la retirada de
Salerno, y las tropas aliadas empezaron a avanzar hacia el norte,
hacia Nápoles.
Tras la elevada cifra de submarinos hundidos en el Atlántico, el
almirante Karl Dönitz había dado órdenes de evitar cualquier
ataque a la espera de mejoras técnicas y tácticas. Ahora un grupo
de 20 submarinos (con el nombre de Leuthen), armados con
un nuevo modelo de torpedo acústico, había salido a reanudar la
lucha. Ese día uno de ellos fue hundido por la aviación
canadiense.
El 20 de septiembre un submarino
estadounidense hundió un carguero japonés (Katsura Maru)
cerca de la costa japonesa.
Esa noche los japoneses abandonaron la isla de Arundel, en el
archipiélago de las Salomón.
Poco antes del amanecer, los japoneses atacaron a las tropas
australianas que amenazaban Kaiapit. Se inició un combate que
terminó antes de las 10:00, cuando los australianos tomaron la
aldea. Los japoneses se retiraron dejando unos 250 muertos. Las
bajas australianas fueron de 14 muertos y 23 heridos. Durante los
días siguientes los australianos despejaron una pista de
aterrizaje y fueron recibiendo refuerzos desde Nadzab.
El capitán Mascherpa, enterado de que iba a llegar a Leros el
general de división británico Frank Brittorous, solició a
sus superiores ser ascendido a vicealmirante para que su
graduación no fuera inferior a la de Brittorous. Su ascenso fue
aprobado y así Mascherpa recibió a su invitado en calidad de
vicealmirante, pero esto no impidió a Brittorous declararse como
el oficial al mando en la isla. Trajo consigo 600 hombres, víveres
y otro equipamiento.
Un representante del Reichsbank llegó a la sede de la Banca
d'Italia en Roma y ordenó que 119 toneladas de oro, casi la
totalidad de las reservas italianas, fueran llevadas a Milán donde
quedarían bajo custodia alemana.
Los 300 soldados británicos que habían llegado recientemente a
Salerno seguían negándose a aceptar el destino asignado. El
oficial que tuvo que tratar con ellos admitió que se había
cometido un error y prometió que serían enviados a sus antiguas
unidades una vez que Salerno estuviera asegurado, a la vez que les
advirtió de las consecuencias de un motín en tiempo de guerra.
Entonces 108 soldados aceptaron cumplir las órdenes, y los otros
192 fueron acusados de amotinamiento, arrestados y llevados a
Argelia.
Los alemanes enviaron a Auschwitz un "cargamento" de 1.000
prisioneros judíos.
Los submarinos Leuthen atacaron el convoy ON 202
y hundieron dos cargueros estadounidenses (Frederick Douglass
y Theodore Dwight Weld), así como uno de los destructores
británicos de la escolta (St Croix). A su vez, uno de los
submarinos alemanes fue hundido por una corbeta canadiense. Otro
submarino que no pertenecía al grupo hundió el carguero británico
(St Usk).
El 21 de septiembre un submarino
estadounidense hundió un carguero japonés (Argun Maru)
cerca de Formosa.
Los australianos iniciaron un movimiento de pinza para acorralar
a los pocos japoneses que quedaban en Vella Lavella en el extremo
noroccidental de la isla, pero los japoneses opusieron una enorme
resistencia.
Los soviéticos establecieron una cabeza de puente en el Dniéper,
pero la aviación alemana impidió un cruce masivo de tropas.
Un submarino alemán hundió un carguero estadounidense (Cornelia
P. Spencer) en el océano Índico.
Las elecciones en el Líbano habían dado la victoria a los
nacionalistas contrarios a la ocupación francesa, y su líder, Bechara
El Khoury fue nombrado presidente.
Amon Göth fue encargado de liquidar el campo de concentración de
Szebnie. Durante los meses siguientes, los 4.000 judíos y
1.500 polacos que alojaba empezaron a ser trasladadas a un bosque
cercano y ejecutadas. Así murió cercad de un millar de personas.
Las restantes fueron llevadas a Auschwitz, donde fueron ejecutadas
en el acto.
Un submarino polaco hundió un carguero alemán (Nikolaus)
cerca de Bastia. Un submarino alemán hundió un carguero
estadounidense (William W. Gerhard) cerca de Salerno.
Lae se encuentra situada en la base meridional de la península de
Huon, y el 22 de septiembre una
flota aliada que había partido de Lae llegó hasta una playa al
norte de Katika, en la punta de la península, donde había
unos 5.000 soldados japoneses. Tras un bombardeo de 11 minutos, se
inició un desembarco. Creían que la playa estaba despejada, pero
unos 300 japoneses ocupaban una serie de nichos conectados por
trincheras. Hacia las 6:30 la playa estaba limpia de japoneses. A
partir de las 6:45 llegó la aviación, que a las 9:10 abatió un
avión de reconocimiento japonés.
A la 1:20 una bomba estalló en Kiev bajo la cama de Wilhelm
Kube, el gobernador alemán de Bielorrusia, que murió al
instante. La había escondido el día anterior una de sus criadas, Yelena
Mazanik, tras lo cual se había marchado de la casa alegando
un dolor de muelas. Para entonces la resistencia la había sacado
ya de Minsk en un camión y los nazis nunca la encontraron. Eso sí,
no les costó nada encontrar a 1.000 bielorrusos inocentes que
fueron obligados a cavar su propia fosa antes de ser ametrallados.
En Szebnie 700 judíos fueron asesinados ese día. Sus cuerpos
fueron incinerados a lo largo de los días siguientes.
Un submarino británico hundió un barco de pasajeros italiano (Andrea
Sgarallino) en el Mediterráneo. Murieron unos 300 civiles.
Torpederas británicas hundieron otro (Rovigno) cerca de
Albania.
Las tropas italianas en Cefalonia se rindieron a los alemanes.
Sin embargo, su destino no fue el que hubiera cabido esperar.
Antes del anuncio del armisticio italiano, Pietro Badoglio, en sus
intentos de contener a los alemanes, había aceptado la unificación
de las fuerzas alemanas e italianas bajo mando alemán, y Hitler se
había apoyado en eso para ordenar que cualquier soldado italiano
que desobedeciera órdenes de los oficiales alemanes era culpable
de traición, lo que justificaba su ejecución. Así, los alemanes
empezaron a asesinar con ametralladoras a los italianos que
acababan de rendirse. Durante la semana siguiente fueron
ejecutando prisioneros poco a poco.
Los británicos tomaron Acerno. La RAF bombardeó
el aeropuerto de Ciampino con 55 aviones.
Esa noche seis minisubmarinos británicos se dispusieron a colocar
minas en varios barcos de guerra alemanes en Noruega. Tres de
ellos debían atacar al Tirpitz en Kåfjord, otros
dos al Scharnhorst en el mismo puerto y el último al Lützow
en Langfjord. De los tres minisubmarinos destinados contra
el Tirpitz, uno desapareció, y los otros dos lograron
colocar las cargas, pero fueron descubiertos y sus tripulantes
fueron apresados. No obstante, las cargas explotaron y el
acorazado resultó gravemente dañado, aunque no se hundió. De los
que debían atacar al Scharnhorst, uno se hundió con toda
su tripulación y el otro tuvo que abandonar la misión por
problemas mecánicos. El último tuvo también problemas con sus
cargas de demolición, tuvo que expulsarlas, estallaron y el
minisubmarino quedó gravemente dañado.
Un barco de guerra británico hundió un submarino alemán del grupo
Leuthen cerca de Groenlandia.
El 23 de septiembre un submarino
estadounidense hundió un petrolero (Daishin Maru) y un
carguero (Kowa Maru) japonés cerca de la costa japonesa.
Otro hundió dos cargueros (Rytoku Maru y Yamashiro Maru)
cerca de las Filipinas.
El grueso de las tropas japonesas en la península de Huon se
encontraba alrededor de la ciudad de Finschhafen, unos 10
km más al sur de Katika. Los australianos empezaron a descender
hacia el sur, dejando una guarnición en la cabeza de playa. El
contacto con los japoneses se produjo junto al río Bumi,
donde había una guarnición de unos 300 japoneses con órdenes de
meramente retrasar el avance enemigo, pero el oficial al mando
decidió mantener su posición. Sin embargo, los australianos
cruzaron el río más arriba y atacaron a los japoneses por un
flanco, matando a 52 en el asalto. Para entonces los australianos
estaban empezando a notar que el número de japoneses en la zona
parecía ser muy superior al previsto, así que pidieron refuerzos.
Un bombardeo llevado a cabo por 32 aviones japoneses causó 14
muertos y 19 heridos entre los australianos.
Los soviéticos lograron consolidar su cabeza de puente en el
Dniéper, que alcanzó una anchura de más de 15 km entre Kaniv
y Rzhishchev y una profundidad de unos 30 km. Los
soviéticos trataban de extenderlo mediante lanzamientos en
paracaídas. El mal tiempo había hecho que los aviones necesarios
no llegaran o se retrasaran, por lo que la operación tuvo que
hacerse improvisadamente con menos aviones. Los alemanes usaban
paracaídas como señuelos para capturar paracaidistas soviéticos
que acudían a lo que creían que era equipamiento lanzado desde sus
aviones. Muchos soldados capturados llevaban órdenes escritas que
permitían a los alemanes conocer los objetivos soviéticos y llegar
a ellos primero para protegerlos.
Los alemanes liquidaron el gueto de Vilna. Los judíos que todavía
quedaban fueron enviados a un campo de concentración en Estonia,
matados en un bosque cercano o bien enviados a campos de
exterminio en Polonia.n Karl Plagge logró llevarse 100 judíos más
a su campo de trabajo, y otros 100 fueron evacuados por la
resistencia con la connivencia de Plagge.
Una división italiana que trataba de regresar a Italia desde
Albania fue rodeada por los alemanes y tuvo que rendirse. Su
general y 130 de sus oficiales fueron ejecutados.
A la 1:10 un destructor británico encontró el vapor Gaetano
Donizetti que navegaba escoltado por una torpedera alemana.
Inmediatamente abrió fuego, hundió el Donizetti y dañó la
torpedera. En el barco viajaban 220 soldados alemanes y 1.576
prisioneros de guerra italianos (hacinados en unas bodegas con
espacio para unos 700) que estaban siendo trasladados a Italia
desde Rhodas. Todos murieron.
La aviación aliada hundió un carguero alemán (Dithmarschen)
en el Egeo.
Mussolini proclamó la República Social Italiana, con él mismo
como jefe de Estado y de gobierno. Su capital oficial era Roma,
pero, temporalmente, el gobierno residiría en el pueblo de Salò,
entre Milán y Venecia. Por ello en la práctica fue conocida como
la República de Salò. El nuevo Estado apenas tenía una
estructura definida, y dependía completamente de Alemania. Era
sólo un medio al que recurrió Hitler para tratar de conservar la
lealtad de una parte de los italianos y de reprimir más fácilmente
a otra parte de ellos. Sólo fue reconocida por Alemania, Japón y
sus estados títere. Ni siquiera España la reconoció.
Mussolini explicó que el fascismo era un movimiento de
izquierdas, y que el inicio de la guerra le había obligado a
paralizar un proyecto de nacionalizar la propiedad, pero que
ahora, con la abolición de la monarquía, podría revertir el apoyo
que el Partido Fascista había dado hasta entonces a la propiedad
privada y a los grandes empresarios nacionalizando todas las
empresas con más de 100 empleados.
Mientras tanto los alemanes, contraviniendo lo pactado,
arrestaron a Calvi di Bergolo y asumieron el control de Roma.
Afirmaron que el estatus de ciudad abierta que había proclamado el
gobierno italiano se mantenía, pero eso era contradictorio con la
presencia de tropas en ella, así que los aliados nunca lo
reconocieron.
En Nápoles, el coronel Schöll seguía haciendo amigos. Ese día
ordenó la evacuación (en un plazo de 20 horas) de toda la zona
costera, hasta 300 metros del mar. Eso suponía que unas 240.000
personas tenían que abandonar sus casas. Era evidente que los
alemanes planeaban destruir el puerto. Al mismo tiempo, se anunció
que todos los varones entre 18 y 30 años debían presentarse para
ser destinados a trabajos forzosos en Alemania. De los 30.000
afectados, apenas 150 se presentaron, así que Schöll ordenó
arrestar a los que faltaban con órdenes de ejecutarlos si oponían
resistencia.
Un submarino británico hundió un carguero alemán (St. Nazaire)
cerca de Córcega.
Un bombardeo aliado sobre Nantes hundió tres petroleros alemanes
(Ermland, Monsun y Wangerland) y un carguero
neerlandés (Kertosono).
El grupo de submarinos Leuthen había seguido acechando al
convoy ON 202 y ahora hundía cuatro más de sus barcos, un
carguero británico (Fort Jemseg), otro estadounidense (Steel
Voyager), otro noruego (Oregon Express) y un
petrolero noruego (Skjelbred).
Desde Kaiapit, los australianos estaban avanzando hacia el oeste,
y el 24 de septiembre pasaron del valle
del Markham al valle del Ramu, otro río que nace en las
mismas cumbres, pero que fluye por la vertiente opuesta.
Un intento soviético de ganar terreno a los alemanes mediante
anzamientos en paracaídas en la retaguardia alemana resultó un
fracaso, aunque ayudó a crear una segunda cabeza de puente sobre
el Dniéper, esta vez cerca de Dniprodzerzhynsk. Ese día
entraron en Boryspil.
Un submarino japonés hundió un carguero británico (Elias Howe)
en el océano Índico, cerca de la costa de Somalia.
En Cefalonia, tras haberlos sometido a un consejo de guerra, los
alemanes ejecutaron al general Gandin y a 137 altos oficiales que
habían estado bajo su mando. Mientras tanto seguían las
ejecuciones de soldados. En total, en la isla fueron asesinados
unos 400 oficiales y más de 4.000 soldados, a los que hay que
sumar los 1.300 que habían muerto durante los combates.
En la zona de Paramythia se habían producido varios
enfrentamientos entre la resistencia griega y las patrullas
alemanas. Ese día cinco soldados alemanes cayeron en una emboscada
y sus cadáveres desfigurados fueron encontrados al día siguiente.
Al acercarse a Sagerak, tuveron una primera escaramuza con
fuerzas japonesas.
De los 20 submarinos del grupo Leuthen, 3 habían sido
hundidos y otros 3 dañados en apenas una semana, así que el
almirante Dönitz suspendió la operación.
El 25 de septiembre submarinos
estadounidenses hundieron un carguero japonés (Taiko Maru)
en el Pacífico.
Átaques aéreos japoneses en la península de Huon causaron 8
muertos y 40 heridos entre las tropas australianas.
En el valle del Ramu, los australianos entraron en Sagerak, que
había sido abandonada por unos 16 japoneses, que habían huido a
toda prisa abandonando documentos, material médico y otro
equipamiento. Mientras tanto, varias patrullas informaban de que
varias localidades habían sido abandonadas por los japoneses. Se
concluía así que estaban retirándose.
Los soviéticos tomaron la ciudad de Smolensk a los alemanes, tras
un combate por las calles. El mismo día Roslavl cayó
también en manos soviéticas. Mientras tanto creaban una tercera
cabeza de puente sobre el Dniéper, en Dnipropetrovsk.
Aunque les había costado caer en la cuenta, los nazis finalmente
habían comprendido por qué les estaba yendo mal la guerra, y
rápidamente tomaron la medida necesaria para invertir la
situación: a partir de ese día quedaban expulsados de ejército
alemán todos los que tuvieran al menos dos abuelos que no fueran
de raza aria. Ahora ya la victoria era sólo cuestión de tiempo.
Riad Al Solh fue nombrado Primer Ministro del Líbano.
La aviación alemana hundió un destructor italiano (Enrico
Cosenz) en el Mediterráneo.
El envío de fuerzas francesas a Córcega por parte de Henri Giraud
ya no había gustado de antemano a los aliados, pero ahora se veía
además que lo que había conseguido había sido ayudar a los
comunistas a hacerse con el control de la isla. Esto fue más que
suficiente para que De Gaulle lo tuviera fácil para cortarle las
alas a su colega. En una carta dirigida a los miembros del Comité
Francés de Liberación Nacional explicó, que el asunto de Córcega
hacía evidente la necesidad de un mando militar único supeditado
al gobierno (o sea, a él), en lugar de un mando militar paralelo
bajo la responsabilidad de Giraud. Para ello reclamaba la elección
de un presidente único que dispusiera de poderes "reales y
definidos" sobre todos los ámbitos.
El 26 de septiembre los australianos
continuaron su avance hacia Finschhafen desde el río Bumi.
Encontraron una posición defendida por los japoneses y, aunque los
australianos lograron tomar una colina de donde los japoneses se
retiraron dejando 52 muertos y mucho armamento, seguían
manteniendo su posición principal.
Dos días antes había llegado a Singapur un barco con 14
australianos disfrazados de pescadores asiáticos. Por la noche,
seis hombres salieron en canoas y pusieron minas lapa en varios
barcos japoneses, que hundieron dos petroleros (Arare Maru
y Hakusan Maru) y un carguero (Kizan Maru), y
dañaron al menos otros tres barcos. Los australianos esperaron
unos días a que se calmara el revuelo y luego regresaron a
Australia sin que los japoneses sospecharan del falso barco
pesquero.
La aviación soviética hundió un carguero alemán (Hildegard)
ante la costa de Letonia.
Los bombardeos alemanes habían reducido las fuerzas de la RAF en
la isla de Cos a cuatro aviones en condiciones de volar.
Durante los días anteriores, la Luftwaffe había
bombardeado Leros con papeles amenazadores. Ahora cambiaba los
papeles por bombas, que hundieron el destructor griego (incautado
por los itailanos) Vasilissa Olga y el británico Intrepid.
Las defensas de la isla derribaron siete aviones alemanes. Durante
los días siguientes, la isla fue sometida a una media de cuatro
bombardeos al día.
Milicianos albaneses registraron la ciudad griega de Paramythia,
casi casa por casa, y arrestaron a 53 griegos, que fueron
encerrados en la escuela.
Cuando se anunció el armisticio en Italia, la isla griega de
Corfú contaba con una guarnición de unos 4.500 soldados italianos
que capturaron fácilmente a los 500 soldados alemanes presentes en
la isla, pero desde entonces los alemanes habían desembarcado más
y más fuerzas, que contaron con el apoyo de la Luftwaffe,
hasta que finalmente los italianos se rindieron. El coronel Luigi
Lusignani fue ejecutado junto con 28 de sus oficiales.
La máxima autoridad de las SS en Roma era el mayor Herbert
Kappler, que ese día dio un ultimátum de 36 horas a la
comunidad judía para que llevaran 50 kg de oro y 100 millones de
liras al cuartel general de las SS si querían evitar un arresto
masivo y la deportación a campos de concentración. Israel
Zoller, el Gran Rabino de Roma, logró reunir 35 kg, por lo
que pidió ayuda a la Iglesia Católica. Tras consultar al papa, la
respuesta que le dieron fue que acudiera antes de la una y que "las
oficinas estarán vacías, pero le esperarán dos o tres empleados
para entregarle el paquete". Zoller acudió a la hora
prevista para anunciar que había conseguido por otros medios el
oro que necesitaba, en parte gracias a los aportes de numerosas
organizaciones católicas. Poco después renunció al cargo de Gran
Rabino sin explicar sus motivos.
En Nápoles una multitud desarmada salió a las calles para
oponerse a las redadas con que los alemanes arrestaban a quienes
habían hecho caso omiso de la orden de presentarse para ser
deportados a Alemania. A los manifestantes se unieron varios
soldados italianos que hasta entonces habían permanecido ocultos.
Un submarino alemán hundió un carguero estadounidense (Christian
Michelsen) ante la costa de Argelia. Otro hundió un carguero
brasileño (Itapagé) ante la costa brasileña.
La Kriegsmarine había trazado un plan para rescatar a
cuatro experimentados capitanes de submarino que estaban
prisioneros en el campo de Bowmanville, en Canadá. Los
cuatro oficiales escaparían del campo y luego recorrerían 1.400 km
hasta llegar a Pointe Maisonnette, donde los recogería un
submarino. Los servicios secretos canadienses habían interceptado
mensajes cifrados que los prisioneros habían recibido a través de
la Cruz Roja, y estaban al tanto de sus planes. Así que les
dejaron excavar varios túneles, a los que los prisioneros dotaron
incluso de una rudimentaria vía férrea. Uno de los túneles se
derrumbó debajo de uno de los edificios del campo y los
prisioneros trataron de disimularlo, pero los guardias canadienses
estaban al corriente de todo. Cuando se acercaba la fecha prevista
para la huida, arrestaron a todos los implicados en la
construcción de los túneles y los derrumbaron. Pese a todo, Wolfgan
Heyda logró escapar deslizándose por unos cables eléctricos
que pasaban sobre las vallas del campo. Logró despistar a la
policía local, pero los canadienses no estaban muy preocupados,
porque sabían adónde iría. En efecto, la policía montada lo
arrestaba ahora en Pointe Maisonnete, a la vez que trataban de
capturar al submarino que tenía que llegar a recogerlo. Sin
embargo, el capitán sospechó de una encerrona y se sumergió justo
cuando los barcos que estaban al acecho empezaron a lanzar cargas
de profundidad, pero logró evitarlas y escapar.
El 27 de septiembre un ataque aéreo a
Wewak (Nueva Guinea) hundió cuatro cargueros japoneses (Fuji
Maru, Kiri Maru, Sakihana Maru y Taisho Maru), un
petrolero (Kashima Maru) y un barco de transporte de tropas
(Taisei Maru).
El general chino Sheng Shicai ejecutó a varios comunistas que
había arrestado, entre ellos Mao Zemin, el hermano menor
de Mao Zedong.
Como represalia por los cinco soldados alemanes muertos días
antes cerca de Paramythia, fuerzas alemanas y albanesas llevaron a
cabo una redada a gran escala en la que destruyeron varias
ciudades de la zona, como Eleftherochori, Seliani,
Semelika y Aghios Nikolaos. Unos 50 griegos
murieron.
En Split (Croacia) una división de infantería italiana que había
estado resistiendo a los alemanes con la ayuda de los partisanos
yugoslavos acabó por rendirse. Tres generales italianos y 46
oficiales fueron ejecutados.
En las semanas anteriores algunos napolitanos habían logrado
hacerse con armas, y ahora empezaron a aflorar. Más de 400
insurgentes armados empezaron a atacar a soldados alemanes para
liberar italianos arrestados. Uno de los primeros incidentes
consistió en que un grupo de insurgentes detuvieron un coche
alemán y mataron a su conductor. Más tarde unos 200 insurgentes se
apoderaron de un arsenal, aunque los alemanes lograron recuperarlo
por la noche. Otros asaltaron varias armerías.
En su avance por la costa adriática italiana, los británicos
tomaron Foggia y los aeropuertos de los alrededores. Ahora
los aliados tenían bajo el alcance de su aviación el sur de
Alemania, Polonia y los Balcanes.
Submarinos británicos hundieron un petrolero alemán (Champagne)
cerca de Córcega. Torpederas británicas hundieron un carguero
alemán (Madali) en el canal de la Mancha.
En el Atlántico los aliados hundieron dos submarinos alemanes.
Uno a manos de la aviación británica y otro de la estadounidense.
El 28 de septiembre submarinos
estadounidenses hundieron dos cargueros japoneses en el pacífico (Akashi
Maru y Taian Maru). La aviación japonesa hundió un
submarino estadounidense (Cisco) cerca de las Filipinas.
Tras un rápido avance por el valle del Ramu sin encontrar
oposición por parte de los japoneses, una compañía australiana
bien armada tendió una emboscada a unos 60 soldados japoneses
cerca de Kesawai.
Los soviéticos crearon una cuarta cabeza de puente sobre el
Dniéper, cerca de Kremenchuk. Unos días más tarde el
número de cabezas de puente llegó hasta 23. El cruce del río bajo
fuego alemán acarreaba muchas bajas.
Con la deportación de los últimos 674 judíos, Luxemburgo fue
declarado judenfrei.
Un dragaminas italiano (Ardena) en poder de los alemanes
que transportaba 840 prisioneros de guerra de Cefalonia a Italia
impactó con una mina y se hundió. Murieron 720 de los prisioneros.
En Nápoles cada vez más ciudadanos se unían a los insurgentes.
Unos 40 hombres armados cortaron una calle, mataron a seis
soldados alemanes y capturaron a otros cuatro. Los alemanes, por
su parte, llevaron a cabo sus propias incursiones contra la
población.
Los británicos tomaron Avellino, en Italia.
Julius Ritter era el oficial de las SS encargado de
supervisar el envío a Alemania de trabajadores forzados franceses.
Ese día, apenas había subido a su coche un miembro de la
resistencia francesa disparó tres veces sobre el vehículo. Ritter
trató de salir por el lado opuesto, pero al abrir la puerta se
encontró con Marcel Rajman, que lo mató con otros tres
disparos. El atentado causó un gran impacto en Berlín, donde
Himmler ordenó represalias contundentes.
El 29 de septiembre un submarino
estadounidense hundió un carguero japonés (Masaki Maru) en
el Pacífico.
Un submarino alemán hundió un carguero británico (Banffshire)
en el océano Índico.
Los alemanes estaban usando a los 292 prisioneros judíos de un
campo de concentración cercano a Kiev para desenterrar e incinerar
los más de 30.000 cadáveres resultantes de la matanza que los
nazis habían llevado a cabo hacía ya dos años. Los prisioneros
comprendieron que, si el propósito de los alemanes era que ocultar
que la matanza había tenido lugar, en cuanto acabaran su trabajo
ellos serían los siguientes en morir. Por ello, esa noche
acordaron saltar todos en estampida las vallas del campo. Los
centinelas mataron a 280 y capturaron a uno más, pero otros 11
lograron escapar.
Los soviéticos tomaron la ciudad de Kremenchuk.
A medianoche, alemanes y albaneses sacaron de la escuela de
Paramythia los prisioneros que habían arrestado unos días antes y
los fusilaron.
Georg Ferdinand Duckwitz era un diplomático alemán que
trabajaba en la embajada alemana en Copenhague. Había ingresado en
el partido nazi a los 28 años (ahora tenía 39), pero tres años más
tarde ya desaprobaba la política de Hitler. Hacía unas semanas se
había enterado de que la Gestapo planeaba arrestar y
deportar a todos los judíos daneses en una operación que empezaría
el mes siguiente. Se calcula que en Dinamarca había unos 7.800
judíos y unos 700 cónyuges de judíos.
Duckwitz había viajado a Berlín para tratar de impedirlo, pero
sus gestiones no tuvieron efecto alguno. Luego viajó a Suecia con
la excusa de negociar algunas cuestiones sobre el tráfico de
barcos mercantes alemanes, pero aprovechó para preguntarle al
primer ministro Per Albin Hansson, si Suecia estaría
dispuesta a acoger refugiados judíos daneses. Al cabo de dos días
había obtenido una respuesta positiva. Ahora, ya de regreso en
Copenhague, se puso en contacto Hans Hedtoft, el líder del
Partido Socialdemócrata Danés, que a su vez avisó al rabino Marcus
Melchior, que a su vez se encargó de alertar a la comunidad
judía de los planes de la Gestapo. Varios funcionarios
daneses, al enterarse de lo que sucedía, colaboraron advirtiendo a
sus amigos judíos, e incluso tomando la guía telefónica y llamando
a personas con apellidos judíos. La resistencia danesa empezó a
organizar una evacuación clandestina de judíos a Suecia. Ese mismo
día salió el físico Niels Bohr (cuya madre era judía) junto con su
esposa. En cuanto llegó a Suecia, representantes del gobierno le
dijeron que estaba todo dispuesto para que embarcara en un avión
con rumbo a los Estados Unidos. Pero Bohr se negó. Dijo que no
iría a ninguna parte hasta que el gobierno sueco anunciara en la
prensa y en la radio que abriría sus fronteras a los refugiados
daneses judíos.
En Nápoles los disturbios armados continuaban por tercer día
consecutivo. Un grupo numeroso de soldados alemanes apoyados por
tanques atacaron a unos 50 rebeldes y mataron a 15 de ellos. Un
barrio obrero fue bombardeado por la artillería y a continuación
los alemanes llevaron a cabo ataques indiscriminados contra la
población.
En un acorazado británico anclado en Malta, los generales
Badoglio y Eisenhower firmaron una versión extendida de las
condiciones de rendición de Italia.
El 30 de septiembre un submarino
estadounidense hundió un transporte japonés (Maebashi Maru)
que costó la vida a unos 1.400 soldados.
El avance australiano por la península de Huon, en Nueva Guinea,
se había visto interrumpido en Jivevaneng por un
regimiento de infantería japonés que estaba tratando de abrirse
paso hacia la costa. Tras haber resistido seis ataques japoneses,
ahora llegaba otro batallón de refuerzo.
Un submarino alemán hundió un carguero soviético (Arkhangel'sk)
en el océano Glaciar Ártico.
Hitler se entrevistó con Rommel y Kesselring para discutir la
situación en Italia. Rommel propuso crear una sólida línea
defensiva al norte de Roma, mientras que Kesselring la quería al
sur de Roma. Hitler se decantó por la opción de Kesselring.
Una llamada de Greta Garbo consiguió que el rey Gustavo V de
Suecia recibiera a Niels Bohr, que abogó ante él por los judíos
daneses.
Aviones canadienses hundieron un barco de pasajeros noruego (Sanct
Svithum) cerca de la costa noruega. Murieron unos 20
tripulantes noruegos, unos 25 pasajeros noruegos y casi 20
pasajeros alemanes.
Un submarino alemán hundió un carguero británico (Fort Howe)
cerca de la costa de Argelia.
Las tropas aliadas se acercaban a Nápoles y los alemanes se
retiraban con la presión adicional de la insurrección que estaba
teniendo lugar en la ciudad. En su retirada los nazis quisieron
dejar constancia de su firme compromiso con la destrucción de la
cultura sacando a las calles unos 200.000 libros y otros
documentos históricos de valor incalculable para quemarlos, muchos
procedentes de los Archivos Estatales o de la Universidad
de Nápoles. Muchos edificios fueron incendiados o dañados,
entre ellos el Teatro di San Carlo. En realidad la
precipitación hizo que los destrozos fueron menos de lo que
podrían haber sido, pues Hitler había ordenado que la ciudad fuera
arrasada en caso de que tuviera que ser abandonada.
El 1 de octubre submarinos
estadounidenses hundieron un submarino japonés cerca de Vella
Lavella y dos cargueros (Kinkasan Maru y Tonei Maru).
El avance de los australianos por el valle del Ramu estaba yendo
tan deprisa que los suministros tenían que ser transportados por
el aire. En la península de Huon los australianos cruzaron el río
Mape mientras otra brigada atacaba a los japoneses en Kakakog
con el apoyo de la aviación. Casi 100 japoneses resultaron
muertos. Este avance llevó a los japoneses a evacuar Finschhafen.
Un submarino japonés hundió un carguero noruego (Storviken)
en el océano Índico. Un submarino alemán hundió un carguero
británico (Tahsinia) cerca de la India.
Un submarino alemán hundió un carguero soviético (Sergej Kirov)
en el océano Glaciar Ártico.
La aviación alemana hundió un destructor italiano (Euro)
en la isla griega de Leros.
La resistencia griega mató al coronel Josef Salminger,
responsable de varias matanzas en Grecia, como la que había tenido
lugar en Kommeno unos meses atrás.
A las 9:30 entraban en Nápoles las primeras tropas aliadas. Tras
el desembarco aliado en Italia Vito Genovese se había apresurado a
romper sus estrechos vínculos con el fascismo y había hecho que el
gobernador de Nueva York recibiera de su parte un coche de lujo.
Con su intercesión, logró que las fuerzas estadounidenses en
Nápoles lo aceptaran como oficial de enlace e intérprete. El año
anterior, Lucky Luciano, encarcelado en Nueva York, había llegado
a un acuerdo con las autoridades con el que esperaba obtener la
conmutación de su pena. Luciano prometió usar sus contactos para
proporciona información relevante a la Marina en Italia. Uno de
sus aliados, Albert Anastasia, que controlaba los muelles
neoyorquinos, había prometido que no habría huelgas mientras
durara la guerra.
Un submarino alemán hundió un petrolero británico (Empire
Commerce) cerca de la costa argelina.
El 2 de octubre los australianos
llegaron a la confluencia de los ríos Ramu y Gusap. En la
península de Huon entraron en Finschhafen sin apenas oposición.
El gobierno japonés eliminó la exención del servicio militar a
los estudiantes.
El avance soviético en Smolensk había tensado al máximo las
líneas soviéticas, así que se le puso fin. Durante 20 días de
lucha, los soviéticos habían avanzado más de 100 km en un
importante sector del frente.
En la Unión Soviética se creó la División Tudor Vladimirescu,
formada por prisioneros de guerra rumanos a los que se les había
dado a elegir entre continuar prisioneros o presentarse
"voluntarios" para luchar contra los alemanes.
Un submarino alemán hundió un carguero británico (Haiching)
cerca de la India.
El gobernador alemán de Polonia, Hans Frank, creó un tribunal
especial compuesto por miembros de la Gestapo que podía
ejecutar sus sentencias inmediatamente, para evitar las molestias
derivadas de respetar los enojosos trámites judiciales. Así, en
sus primeras sesiones, cientos de ciudadanos de Cracovia que
llevaban meses encarcelados a la espera de juicio pudieron
conseguir sin más dilación su sentencia de muerte.
La Gestapo había llevado a cabo la noche anterior la
redada para arrestar a todos los judíos daneses. Para ello empleó
dos batallones de policía y unos 50 voluntarios daneses divididos
en grupos de cinco miembros, cada uno de los cuales disponía de un
vehículo y de una lista de nombres y direcciones. Sin embargo, la
mayoría de los equipos no encontraron a nadie en las direcciones
indicadas. Una gran cantidad de daneses se habían ofrecido
voluntarios para ocultar judíos hasta que pudieran ser llevados
clandestinamente a Suecia. El gobierno sueco anunció que su país
acogería a todos los judíos daneses que llegaran a su territorio.
Se discute si la intervenció de Bohr fue decisiva para ello o si,
por el contrario, la actuación del gobierno respondía a criterios
adoptados ya el año anterior. A lo largo de dos meses,
embarcaciones de todo tipo fueron usadas para evacuar judíos:
barcos pesqueros, botes de remos, canoas. Algunos (especialmente
niños y ancianos) fueron ocultados en camiones cerrados con sellos
alemanes falsificados o robados y embarcados en transbordadores.
Muchos pescadores cobraron entre 1000 y 50.000 coronas danesas por
persona transportada, cuando un precio en condiciones normales
hubiera estado en unas 500 coronas.
Un submarino alemán hundió un carguero británico (Stanmore)
cerca de la costa de Argelia.
Los alemanes seleccionaron a 50 franceses de un campo de
prisioneros y los ejecutaron en París como represalia por el
asesinato de Julius Ritter. Hacía casi un año que los alemanes
habían dejado de aplicar este tipo de represalias.
El 3 de octubre un submarino japonés
hundió un destructor estadounidense (USS Henley) cerca de
Finschhafen, en Nueva Guinea.
Los australianos se tomaron el domingo de descanso junto a los ríos Ramu y Gusap. No obstante, algunas patrullas fueron enviadas a explorar los alrededores. Una de ellas sufrió una emboscada cerca de la aldea de Namaput, donde un soldado resultó muerto. Luego los australianos atacaron la aldea y mataron a siete japoneses. Más tarde tuvieron que retirarse de la aldea bajo intenso fuego enemigo. Tres australianos resultaron heridos, uno de los cuales murió poco después. Las bajas japonesas fueron de 14 muertos.
Wernher von Braun logró la primera prueba satisfactoria de sus
cohetes. El prototipo alcanzó una altura de 84.5 km.
A las 4:30 los alemanes iniciaron un desembarco en la isla de
Cos. Hacia el mediodía, 1.200 soldados bien armados con artillería
ligera y carros blindados estaba en tierra. Por la tarde tomaban Antimachia.
Los británicos no pudieron hacer más que replegarse alrededor de
la ciudad de Cos y su aeropuerto. Por la noche las fuerzas
alemanas alcanzaban ya los 4.000 hombres.
Como represalia por la muerte del coronel Samlinger, los alemanes
rodearos la aldea griega de Lyngiades, llevaron a la plaza
central a todos los habitantes que pudieron encontrar, registraron
y saquearon todas las casas, repartieron en pequeños grupos a los
arrestados, los llevaron a los sótanos de varias casas y allí los
ametrallaron. Luego indendiaron todos los edificios menos la
iglesia y la escuela. En total murieron 92 personas,
mayoritariamente mujeres, niños y ancianos. Muchos hombres se
libraron porque estaban trabajando en ciudades vecinas.
Los alemanes declararon a Dinamanrca judenfrei, pero no
porque no quedaran judíos, sino porque eran incapaces de
encontrarlos. Muchos estaban todavía escondidos esperando su turno
para salir hacia Suecia.
Esa noche las últimas unidades alemanas salían de Córcega.
La línea defensiva más meridional que los alemanes habían
establecido en Italia era la línea Volturno, que en el
Tirreno seguía el curso del río Volturno (al norte de Nápoles) y
llegaba hasta Térmoli en el Adriático. A las 2:15 un total
de 650 soldados británicos desembarcaron tras la línea Volturno y
entraron en Térmoli sin ser detectados por los alemanes. Allí se
enzarzaron en una lucha contra la guarnición alemana y a las 8:00
tenían la ciudad bajo control. El comandante alemán fue capturado
en pijama.
Un cazasubmarinos alemán hundió un submarino británico (Usurper)
en el golfo de Génova.
El 4 de octubre los australianos
cruzaron el río Gusap por un puente construido el día anterior y
continuaron su avance hacia Dumpu. A las 14:00 entraron en
Wampun, donde no había rastro de japoneses. El teniente Ralph
Horner fue enviado junto con algunos hombres en busca de
agua. Sobre las 15:00 entraron en una plantación de plátanos donde
vieron algunas tropas que creyeron australianas, pero que
resultaron ser japonesas. Cuando se acercaron fueron recibidos con
disparos y Horner resultó herido en el muslo. Su ayudante, también
herido, intentó arrastrarlo, pero Horner le ordenó ir en busca de
ayuda. Un pelotón fue enviado y encontró a Horner cubierto de
sangre y de hormigas negras. Horner se negó a ser llevado en
camilla bajo el fuego enemigo, pues los camilleros estarían
indefensos. En su lugar, usó una radio para organizar un ataque a
la plantación de plátanos, que se llevó a cabo a las 18:00.
Mientras estaba en curso Horner fue trasladado en camilla hasta un
hospital de campaña.
Los australianos pusieron en funcionamiento un aeropuerto en
Finschhafen.
Heinrich Himmler pronunció un largo y famoso discurso en el
ayuntamiento de Poznań, en Polonia, ante casi un centenar de
oficiales de las SS. En él dijo lindezas como éstas:
Los hombres de las SS deben respetar absolutamente un principio básico: Debemos ser honestos, decentes, leales y compañeros de los miembros de nuestra propia sangre y de nadie más. Lo que les suceda a los rusos, lo que les suceda a los checos, no me interesa lo más mínimo. Lo que puedan ofrecer otras naciones en forma de buena sangre de nuestra raza, lo tomaremos, si es necesario secuestrando a sus niños y trayéndolos junto a nosotros. Si las otras razas viven confortablemente o mueren de hambre sólo me interesa en la medida en que podamos necesitarlas como esclavas para nuestra cultura. Por lo demás, no me interesa. Si 10.000 mujeres rusas mueren de agotamiento mientras cavan trincheras antitanque sólo me interesa en lo que respecta a si las trincheras se terminan o no. [...]
Nunca seremos bruscos ni desalmados si no es necesario, eso está claro. Nosotros, los alemanes, que somos el único pueblo en el mundo con una actitud decente hacia los animales, también adoptaremos una actitud decente hacia esos animales humanos [...]
Aquí os hablaré con toda sinceridad de un asunto muy grave. Lo trataremos abiertamente entre nosotros, pero nunca hablaremos de ello en público. Me refiero a la evacuación de los judíos, el exterminio de la raza judía. Es una de esas cosas que se dicen fácilmente: El pueblo judío está siendo exterminado —dice cada miembro del partido— esto es muy obvio, está en nuestro programa, eliminación de los judíos, exterminio, lo estamos haciendo, ah, un asunto menor. Y luego vienen los 80 millones de alemanes y cada uno tiene su judío decente. Dicen que todos los demás son unos cerdos, pero éste en particular es un judío espléndido. Pero nadie lo ha visto, nadie lo ha comprobado. La mayoría de ustedes saben lo que significa que 100 cadáveres yazgan uno junto a otro, o 500, o 1.000. Haber pasado por esto y continuar siendo personas decentes — con excepciones debidas a la debilidad humana— nos ha hecho fuertes, y es un capítulo glorioso del que no se ha hablado y no se hablará. Porque nosotros sabemos lo difícil que sería para nosotros tener todavía judíos como saboteadores secretos, agitadores y revoltosos en cada ciudad, con los bombardeos, la carga y las dificultades de la guerra. Si los judíos fueran todavía parte de la nación alemana, llegaríamos seguramente al estado en que estábamos en 1916 y 17.
Pese a su interés por el secretismo, Himler hizo llegar copias de
su discurso a unos 50 oficiales de las SS que no estuvieron
presentes, y que tuvieron que acusar recibo.
A las 6:00 cesó toda resistencia organizada por parte de los
británicos en la isla de Cos. Un total de 1.388 británicos y 3.145
italianos fueron apresados por los alemanes. Los oficiales
italianos de mayor rango fueron ejecutados tras su rendición
(cerca de un centenar). Así los británicos perdieron su único
aeropuerto en la zona. En la isla había una pequeña comunidad
judía que inmediatamente fue deportada. Ninguno de sus miembros
sobrevivió a la guerra.
Tras dos semanas de asedio, las fuerzas albanesas lograron
irrumpir en Drashovicë. En total, unos 3.000 de los 3.500 alemanes
que componían la guarnición de la ciudad habían muerto, y unos
7.000 prisioneros italianos fueron liberados.
El centro de Frankfurt fue bombardeado por 406 aviones de la RAF.
Una bomba impactó en el refugio de un hospital infantil y murieron
529 civiles, entre ellos 90 niños 14 enfermeras y un médico.
Un submarino alemán hundió un petrolero noruego (Marit) en
el Mediterráneo.
A lo largo de los días precedentes, una flota aliada había
logrado acercarse sin ser detectada hasta unos 250 km de la costa
Noruega. Desde allí despegaron 42 aviones británicos y
estadounidenses divididos en dos grupos. El primero salió a las
6:18, y llegó hasta su objetivo en Bodø. Cuatro aparatos
se separaron para bombardear el carguero alemán La Plata,
que terminó encallando con graves daños. A las 7:08 salió el
segundo grupo de aviones. A las 7:30 el primer grupo bombardeó y
dañó el petrolero Schleswig, que también embarrancó. Luego
fueron atacados cuatro cargueros, de los cuales el Rabat
fue hundido y otro (Cap Guir) sufrió daños graves. Dos
aviones fueron abatidos por baterías costeras. Mientras tanto el
segundo grupo hundía el carguero noruego Topeka, cerca de
Sandnessjøen. Uno de los aviones fue derribado.
Seguidamente resultó hundido otro carguero noruego (Vaagan),
y a continuación un barco alemán de transporte de tropas (Skramstad),
en el que viajaban 850 soldados alemanes. El barco embarrancó y
estuvo ardiendo durante días. A las 9:00 todos los aviones estaban
de regreso hacia su portaaviones menos cuatro que habían sido
abatidos. Otros tres llegaron con daños. A las 2:00 mientras la
flota aliada navegaba de regreso, tres aviones alemanes de
reconocimiento se aproximaron a ella, pero dos de ellos fueron
derribados y el tercero escapó.
La artillería costera británica hundió un carguero alemán (Livadia)
a su paso por el canal de La Mancha.
La aviación aliada hundió cuatro submarinos alemanes en el
Atlántico. Dos de ellos pertenecían al grupo Rossbach, que
se había formado recientemente con 12 submarinos del grupo Leuthen
más otros 9 procedentes de bases en Francia y Alemania.
El 5 de octubre un submarino
estadounidense hundió un barco de pasajeros (Konron Maru)
ante la costa japonesa, causando 544 muertos. Otro hundió un
carguero (Chicago Maru) en el mar de la China Oriental.
La aviación estadounidense bombardeó la isla Wake, por primera
vez desde hacía un año. Un prisionero estadounidense debió de
aprovechar el bombardeo para escapar, pues grabó en una roca (que
todavía se conserva) el mensaje: 98 US PW 5-10-43 (98
prisioneros de guerra estadounidenses, 5-10-43).
Los japoneses que Horner había encontrado en la plantación de
plátanos se retiraron finalmente dejando 26 muertos y un
prisionero. A las 15:15 los australianos cruzaron el río Surinam
y algunas patrullas llegaron a las afueras de Dumpu, y constataron
que estaba ocupada por los japoneses. No obstante, éstos fueron
desalojados sin oponer apenas resistencia. Los australianos
encontraron agua y provisiones en abundancia.
En el sector de Finschhafen los japoneses estaban atacando las
posiciones australianas en Jivevaneng. Los australianos trataban
de avanzar hacia Kumawa para flanquearlos, pero la
resistencia japonesa era enérgica.
Por algún motivo desconocido, los alemanes abandonaron su
proyecto de intercambiar los niños de Białystok por prisioneros de
guerra. Ese día los 1.196 niños que quedaban y sus 53 acompañantes
fueron metidos en un tren que les dijeron les conduciría a Suiza,
pero su destino fue Auschwitz, donde fueron gaseados
inmediatamente.
La aviación alemana hundió un carguero italiano (Prode) en
la isla de Leros y un carguero británico (Fort Fitzgerald)
cerca de la costa de Argelia.
El 6 de octubre submarinos
estadounidenses hundieron un petrolero (Kosahaya) y un
carguero japonés (Kanko Maru) en el Pacífico.
Finalmente, los australianos había logrado arrinconar a los
japoneses en un extremo de Vella Lavella. Eran apenas 600 y una
flota japonesa formada por 20 barcazas escoltadas por 9
destructores se dispuso a evacuarlos. Los estadounidenses la
habían detectado y dos grupos de tres destructores se dirigieron a
toda prisa hacia Vella Lavella. A las 23:00 el primer grupo de
destructores atacó sin esperar la llegada del segundo. Un error
táctico del almirante japonés hizo que uno de sus destructores, el
Yugumo, recibiera varios torpedos y se hundiera a
las 23:10. No obstante, antes de hundirse había logrado lanzar un
torpedo sobre el destructor Chevalier, que chocó entonces
con el O'Bannon y durante un tiempo ambos permanecieron
enganchados. El tercer destructor, el Selfridge, atacó en
solitario a la flota japonesa, pero fue dañado gravemente a las
23:06. Los otros tres destructores llegaron a las 23:35, pero para
entonces los japoneses ya habían completado la evacuación y la
flota se había marchado. El Chevalier terminó hundiéndose,
mientras que los otros dos destructores pudieron regresar a sus
bases para ser reparados. La batalla fue una derrota para los
aliados, pero supuso el fin de la campaña de Nueva Georgia, que
globalmente fue una victoria, ya que los japoneses habían sido
expulsados completamente del archipiélago y ello constituía un
paso más para acabar expulsándolos de Rabaul, que era el objetivo
a largo plazo.
La Luftwaffe hundió tres destructores soviéticos (Besposhchadny, Kharkov y Sposobny)
en Crimea.
Himmler dio otro discurso en Poznań, esta vez ante los dirigentes
locales de las SS en las distintas zonas del Reich. En él
explicó con más detalle los motivos del holocausto:
Les pido que lo que les digo en este círculo sea únicamente escuchado y nunca discutido. Nos enfrentamos a la pregunta: ¿qué pasa con las mujeres y los niños? Decidí encontrar una solución clara a este problema también. No me consideraba legitimado a exterminar sólo a los hombres; en otras palabras, matarlos o hacer que los maten, y permitir que crezcan vengadores contra nuestros hijos y nietos en la forma de sus hijos. Se tuvo que tomar la difícil decisión de que esta gente desapareciera de la tierra. Para la organización que tuvo que ejecutar esta tarea, fue la más difícil que tuvimos. [...] Me he sentido obligado ante ustedes, como los mayores dignatarios del partido, de este orden político, de este instrumento político del Führer, a hablarles también sobre esta cuestión de manera muy abierta y decir cómo ha sido. La cuestión judía en los países que ocupamos se resolverá a finales de este año. Solo quedarán restos de judíos molestos que lograron encontrar escondites.
En Szebnie otros 500 judíos fueron asesinados e incinerados.
Esa noche dos cruceros y dos destructores británicos destruyeron
un convoy alemán que transportaba tropas a la isla de Cos. Esto
obligó a los alemanes a posponer un desembarco en la isla de
Leros.
Los alemanes no estaban teniendo mucho éxito en su intento de
capturar a los judíos daneses. Ese día encontraron a unos 80
judíos escondidos en una iglesia en Gilleleje, gracias al
aviso de una chica danesa que estaba enamorada de un soldado
alemán. Desde entonces se tomaron más precauciones. Como los
alemanes buscaban por la costa, muchos pasaron a esconderse en
bosques más hacia el interior a la espera de su turno de ser
embarcados, y los puntos de embarque se eligieron apartados de los
puertos. En total se pudo evacuar a 7.220 judíos y 686 parientes
no judíos. Unos 580 judíos no lograron escapar y
permanecieron escondidos. Algunos se suicidaron o murieron por
accidentes diversos, pero la mayoría (464) fueron deportados a
Theresinstadt. El gobierno danés presionó para que la Cruz Roja
danesa pudiera realizar un seguimiento de los deportados. Se
calcula que apenas unos 50 murieron en el campo de concentración,
principalmente ancianos.
Las tropas británicas que habían tomado Térmoli habían resistido
enérgicos contraataques alemanes hasta que finalmente el Octavo
Ejército Británico llegó a la ciudad y afianzó definitivamente la
posición.
Niels Bohr llegó a Gran Bretaña desde Suecia en un avión que
sobrevoló a gran altura la Noruega ocupada por los nazis. Se
trataba de un "Mosquito", un bombardero ligero capaz de
volar a gran velocidad y a gran altura, pero sin apenas espacio.
Bohr tuvo que pasar las tres horas que duró el vuelo en el
depósito para las bombas, equipado con un casco, un paracaídas y
una bombona de oxígeno, pero se quitó el casco porque le venía
estrecho, y ello hizo que no oyera el mensaje del piloto a través
del intercomunicador en el que le advertía de que debía usar la
máscara de oxígeno porque iban a ascender a una gran altura. Así,
quedó inconsciente y sólo despertó cuando el avión pasó a volar a
menos altura al llegar al mar del Norte.
El 7 de octubre un buque de escolta
japonés hundió un submarino estadounidense en el Pacífico.
El comandante japonés en la isla Wake, el contralmirante Shigematsu
Sakaibara, interpretando el bombardeo sucedido dos días
antes como el preludio de una invasión, ametralló a los 98
prisioneros estadounidenses que hasta entonces eran empleados para
realizar trabajos forzados. Los cadáveres fueron enterrados en una
fosa común. El prisionero (cuyo nombre nunca se ha averiguado) que
hizo la inscripción en la roca fue capturado y Sakaibara lo
decapitó personalmente con una katana. La inscripción está muy
cerca de la fosa, por lo que tal vez fue hecha después de la
ejecución en masa, pero la fecha es dos días anterior.
Un submarino japonés hundió un carguero británico (Martaban)
en el golfo de Bengala.
Un submarino polaco hundió un carguero italiano (Eridania)
en el Egeo.
En la central de correos de Nápoles estalló una bomba que habían
dejado los alemanes antes de abandonar la ciudad. Murieron más de
100 personas, mayoritariamente civiles.
Howard Peck era un entrenador de animales, pero no pudo
conseguir que uno de sus perros, un collie de ocho meses
llamado Pal, dejara de ladrar incontroladamente, ni que
abandonara su costumbre de perseguir motos. Por ello lo había
llevado a Rudd Weatherwax, un entrenador de animales que
trabajaba para los estudios de Hollywood. Weatherwax consiguió
controlar los ladridos de Pal, pero el perro seguía persiguiendo
todas las motos que veía pasar. Decepcionado, Peck acordó pagar a
Weatherwax sus servicios dándole el perro. Luego Weatherwax se
enteró de que la Metro Goldwyn Mayer estaba planeando
rodar Lassie vuelve a casa, una película para niños
protagonizada por una perra. Presentó a Pal a unas pruebas a las
que se presentaron 1.500 perros y fue rechazado porque buscaban
una hembra, y además sus ojos eran demasiado grandes y su cabeza
demasiado plana. No obstante, Weatherwax fue contratado para
entrenar a la perra elegida, y Pal fue contratado como doble para
las escenas más complicadas. Sin embargo, durante el rodaje, Pal
había impresionado tanto al director, Fred McLeod Wilcox,
que finalmente le dio el papel protagonista, aunque eso supusiera
volver a rodar varias secuencias ya rodadas. Pal respondía
perfectamente a lo que se requería de él, y rara vez era necesario
repetir tomas. Además no necesitaba dobles.
Ese día se estrenó Lassie vuelve a casa, con el actor
británico Roddy McDowal (de 15 años) como protagonista
humano. Había interpretado su primer papel a los 10 años, y cuando
su familia se trasladó a los Estados Unidos huyendo de la guerra,
no tardó en conseguir papeles en Hollywood. Ésta era su novena
película estadounidense, su decimocuarta en total y su segunda
película como protagonista.
Entre los secundarios de la película figuraba una niña de 11 años
que llamaba la atención por sus ojos de color violeta y una doble
fila de pestañas debida a una extraña mutación genética. Había
nacido en Londres, pero sus padres eran estadounidenses y habían
regresado a los Estados Unidos huyendo de la guerra. Se instalaron
en Los Angeles, y su madre pronto descubrió que la gente de
Hollywood veía futuras actrices en todas las caras bonitas. Le
habían insistido para que presentara a su hija para el papel de Scarlett
O'Hara de niña en Lo que el viento se llevó, pero
ella se había negado. Finalmente, ante la insistencia y las
dificultades económicas que había traído la guerra, el año
anterior la había presentado a unas pruebas en la Universal
y había obtenido un papel secundario en una película, pero el
contrato finalizó sin que le hubieran ofrecido otro papel. Ahora
había vuelto a probar suerte en la Metro y tras el éxito
de la película, la joven Elizabeth Taylor firmó un
contrato por siete años. Además se hizo amiga de McDowal y la
amistad duraría toda su vida.
Howard Peck trató de reclamar a Pal tras su éxito
cinematográfico, pero Weatherwax fue reconocido como el dueño
legal del perro.
El 8 de octubre submarinos
estadounidenses hundieron un carguero (Taian Maru) y dos
barcos de transporte de tropas japoneses (Kashu Maru y Dainichi
Maru) con el Dainichi Maru se hundieron más de 2.000
personas, cerca de las Filipinas.
De los más de 7.000 judíos que había en Liepaja antes de la
invasión alemana de Letonia, quedaban menos de un millar, y ahora
fueron metidos en vagones de ganado y llevados a Riga. El gueto de
Liepaja fue clausurado.
El grupo de submarinos Rossbach atacó un convoy aliado en
el océano Atlántico, y logró hundir un destructor polaco (Orkan)
de la escolta, pero la aviación británica hundió tres de los
submarinos. En total, de los 21 submarinos que había tenido
inicialmente el grupo, 7 habían sido hundidos, otros 4 tuvieron
que regresar a sus bases para ser reparados y otros 3 fueron
dañados, aunque pudieron continuar con su misión. Tras este último
desastre el grupo fue disuelto y todos los submarinos regresaron a
puerto.
El 9 de octubre submarinos
estadounidenses hundieron dos cargueros japoneses (Hancow Maru
y Kogane Maru) en el Pacífico.
En Borneo estalló una revuelta de nativos contra la ocupación
japonesa, dirigida por Albert Kwok. Los rebeldes lograron
apoderarse de Hefferson, Tuaran y Kota Belud,
matando a más de 50 japoneses.
La península de Tamán estaba ya completamente bajo control
soviético. Todas las fuerzas alemanas de la zona se habían
retirado a Crimea.
Un crucero y dos destructores británicos salieron a interceptar
un convoy alemán en el Egeo, pero fueron detectados por la
aviación alemana, que dañó irreparablemente el crucero (Carlisle)
y hundió uno de los destructores (Panther).
La aviación estadounidense hundió un barco hospital alemán (Stuttgart)
en Gdynia (Polonia).
Un submarino alemán hundió un destructor estadounidense (Buck)
en Salerno. Otro hundió un carguero estadounidense (Yorkmar)
cerca de Islandia.
El 10 de octubre un submarino
estadounidense hundió dos barcos de un convoy japonés (Isuzugawa
Maru y Teibi Maru) cerca de las Filipinas. La
aviación estadounidense hundió otro (Hino Maru) cerca de la
isla de Bouganville.
Tras el triunfo de la revuelta en Borneo, los rebeldes izaron
banderas chinas y británicas.
La aviación estadounidense bombardeó Münster con 236 aviones que
formaron un frente de 24 km. La Luftwaffe puso en el aire
350 cazas para hacerles frente. El resultado del combate fue de 30
aviones estadounidenses derribados y 105 gravemente dañados.
Murieron 308 aviadores. Por su parte, el bombardeo causó unos 700
muertos civiles en la ciudad.
La aviación aliada hundió cerca de Corfú un barco alemán que
transportaba unos 5.500 prisioneros de guerra italianos. Murieron
más de 1.000 personas a bordo.
El 11 de octubre la aviación japonesa
hundió un carguero estadounidense (John H.Couch) en
Guadalcanal y el submarino Wahoo, en el mar del Japón.
Murieron sus 60 tripulantes, incluyendo su capitán, Dudley W.
Morton.
Fuerzas japonesas llegaron a los alrededores de Sattelberg,
en Nueva Guinea, para un próximo ataque contra las posiciones
australianas en Finschhafen. Los australianos conocían los planes
japoneses gracias a algunos documentos que habían capturado.
Los japoneses no habían logrado averiguar nada sobre los
responsables del hundimiento de varios barcos en Singapur el mes
anterior. Los responsables habían sido australianos que habían
llegado en un falso barco pesquero y luego se habían vuelto a
marchar, pero los japoneses pensaban que el sabotaje había sido
organizado por alguna organización local. A alguien se le ocurrió
la idea de que tal vez había sido organizado por alguna
organización clandestina en la prisión de Changi. Para
"investigarlo", ese día todos los internos fueron obligados a
formar en el exterior a las nueve de la mañana. No se les dio
ninguna explicación. El comandante de la prisión llegó acompañado
de varios soldados y de policías militares, unos pocos hombres
fueron llamados para ser arrestados y al mismo tiempo los
barracones fueron sometidos a un minucioso registro. Encontraron
lo típico: diarios con noticias de guerra recopilados a partir de
informes de la BBC, radios caseras, y una caja de hojalata que
contenía una gran suma de dinero, perteneciente a un exbanquero.
Los prisioneros que fueron relacionados con dichas "pruebas",
fueron arrestados también. En total, 57 civiles fueron llevados a
los cuarteles de la policía militar, donde fueron sometidos a
continuos interrogatorios y torturas para que confesaran lo que
sabían sobre algo de lo que no sabían nada. En total, 15 murieron,
y el resto acabó siendo liberado con graves secuelas cuando los
japoneses se convencieron de que eran inocentes, o bien condenados
a penas de cárcel por delitos secundarios que habían aparecido
durante los interrogatorios.
Un submarino alemán hundió un carguero indio (Jalabala)
cerca de la India.
Los partisanos de Tito habían llegado a los suburbios de Zagreb, y Ante Pavelić abandonó su capital.
El 12 de octubre 87 bombarderos
estadounidenses atacaron Rabaul, donde hundieron un transporte (Keisho
Maru), dos cargueros (Kurogone Maru y Wakamatsu
Maru) y algunos barcos más. Dos destructores japoneses
resultaron dañados y la zona de almacenes fue incendiada. Dos
cazas japoneses fueron abatidos y nueve fueron destruidos en
tierra. Los estadounidenses perdieron 5 aviones.
En su avance por la península de Huon, el día anterior los
australianos habían ocupado dos posiciones que amenazaban las
líneas de comunicaciones japonesas, por lo que tres compañías
japonesas habían salido de Kankiryo para recuperarlas. Los
australianos rechazaron un primer ataque, y otros muchos se fueron
sucediendo a lo largo del día, hasta que finalmente los japoneses
se retiraron dejando unos 200 muertos. Los australianos contaron 7
muertos y 28 heridos.
Yelena Mazanik, junto con sus colaboradoras en el asesinato de
Wilhelm Kube, Nadezhda Troyan y Mariya Osipova,
volaron hasta Moscú.
Los soviéticos habían planeado un ataque conjunto con tres
regimientos de infantería polacos contra el frente oriental en un
punto situado al norte de la ciudad de Lenino, en
Bielorrusia. Aunque el ataque debía iniciarse a las 8:20, los
mandos soviéticos habían ordenado a última hora que los polacos
iniciaran un ataque a las 6:00 para reconocer el terreno. Los
polacos lograron llegar hasta la primera línea de trincheras
alemanas, y lograron resistir a duras penas durante tres horas,
para luego retirarse con un 50% de bajas y sin haber obtenido más
resultado que haber prevenido a los alemanes del ataque. El
bombardeo masivo previsto para las 8:20 se retrasó hasta las 9:00
a causa de la niebla, y en lugar de durar 100 minutos, como estaba
previsto, los soviéticos lo redujeron a una hora considerando que
las líneas alemanas ya habían quedado destruidas. A las 10:00 se
inició el avance polaco que llegó sin dificultad a la primera
línea de trincheras alemanas simplemente porque los alemanes se
habían retirado hasta la segunda para eludir el ataque de la
artillería. Cuando los polacos intentaron avanzar hasta la segunda
línea de trincheras, sufrieron grandes bajas, debido en parte al
fuego alemán y a que los soviéticos, que debían cubrir los dos
flancos del avance polaco, no se movieron de sus posiciones, e
incluso dispararon involuntariamente contra los polacos. Pese a
todo, los polacos lograron tomar la ciudad de Polzukhi,
situada entre la primera y la segunda línea de trincheras
alemanas. Los alemanes contraatacaron y se llevó a cabo una
batalla por las calles de la ciudad, que ardía en llamas. Otro de
los regimientos polacos estaba siendo atacado por los alemanes
desde Trigubovo, ciudad que debía haber sido tomada por
los soviéticos, pero no fue así. Finalmente fueron los polacos los
que la tomaron.
Hacia el mediodía, los polacos habían logrado abrir una cuña de
unos tres km de ancho en el frente, pero tuvieron que detener su
avance por falta de suministros. Los tanques soviéticos que tenían
que haber apoyado el avance no cruzaron el río Mereya y la
infantería soviética se detuvo tras haber avanzado un poco. Sólo
después del mediodía los tanques soviéticos cruzaron el río,
aunque su avance fue detenido por la aviación alemana. A las 14:00
la niebla se disipó y los alemanes iniciaron un contraataque que
expulsó a los polacos de Trigubovo, y luego de Polzukhi. Uno de
los regimientos polacos había contado originalmente con 2.800
hombres y sólo quedaban 500. A las 19:20 el tercer regimiento,
hasta entonces en reserva, trató de retomar la ofensiva, pero los
alemanes habían reforzado considerablemente sus posiciones y una
serie de ataques y contraataques que se prolongaron hasta la noche
resultaron inútiles, y se cobraron numerosas bajas en ambos
bandos. Entonces los polacos intentaron un ataque sorpresa a
Trigubovo que logró destruir el cuartel general de una división de
infantería alemana, pero los alemanes enviaron tropas alemanas que
hablaban polaco que causaron confusión entre los enemigos y
lograron matar varios oficiales y algunos soldados, si bien todos
los infiltrados murieron también.
En vista del curso de la guerra, Franco ordenó que la División
Azul fuera disuelta y sus integrantes regresaran a España. Sin
embargo, algunos de los soldados españoles quisieron continuar
combatiendo a los soviéticos y se incorporaron voluntariamente a
diversas unidades del ejército alemán. Estas tropas españolas
(unos 2.000 hombres) fueron conocidas globalmente como la Legión
Azul, si bien no constituían una unidad, sino que eran
varias unidades adscritas al ejército alemán o a las SS,
independientes entre sí.
A sus 25 años, Willi Graf fue decapitado en Munich, por su
implicación en la Rosa Blanca. Desde que fuera condenado a muerte
hasta este momento, la Gestapo había tratado de sacarle
información sobre otros miembros de la organización, pero sin
resultado. Sus últimas palabras fueron: ¡Viva la libertad!
Tras la caída de Térmoli, la caída de la línea Volturno era
cuestión de tiempo, y finalmente Kesselring ordenó la retirada
hasta otra línea defensiva situada un poco más al norte, la línea
Bárbara, que en el Adriático empezaba siguiendo el curso del
río Trigno.
La marina alemana había organizado un nuevo grupo de submarinos
para operar en el Atlántico, bajo el nombre de Schlieffen.
Constaba de 14 submarinos, 6 de las cuales provenían del disuelto
grupo Rossbach. Ese día un ataque por parte de la aviación
británica dañó uno de ellos, y otro ataque posterior obligó a
regresar a su base a otro de los submarinos.
Frank Sinatra dio un concierto en Nueva York y unas 40.000
admiradoras colapsaron las calles que rodeaban el teatro. Ese año
había aparecido interpretándose a sí mismo en papeles menores en
un par de películas.
El 13 de octubre un submarino
estadounidense hundió un carguero japonés (Kenkoku Maru) en
el Pacífico. Un ataque aéreo estadounidense hundió otro (Daishin
Maru) junto con un caza submarinos (Kongo Maru).
La ofensiva en Lenino estaba resultando un fracaso. Las bajas
habían sido enormes y las tropas andaban escasas de suministros,
pero el máximo responsable soviético, el general Vasiliy Nikolayevich Gordov, decidió
que merecía la pena continuar. Su homólogo polaco, el general Zygmunt Berling, discrepaba. Más
tarde escribiría: No importa si fue por estupidez o por
otros motivos, la decisión de Gordov de continuar la ofensiva
fue un acto de locura. Así que llamó por teléfono al
mariscal Alexander
Vasilevsky, el jefe del Estado Mayor soviético, para
explicarle la situación. Vasilevsky estuvo de acuerdo con
Berling, y haciendo uso de su autoridad suprema sobre el
Ejército Rojo, le respondió que le preguntaría a Stalin si le
parecía bien suspender la ofensiva, a le vez que le recomendaba
no informar a Gordov de la conversación que acababan de mantener
(por si a Stalin no le parecía bien suspender la ofensiva).
Mientras tanto, el combate continuó sin que los polacos y
soviéticos lograran progreso alguno. La respuesta del Estado
Mayor soviético no llegó hasta las 17:00, según la cual Stalin
había desaprobado enérgicamente el criterio de Gordov y había
ordenado que en un máximo de 24 horas una división de infantería
soviética reemplazara a los polacos en el frente, y que éstos se
retiraran para recuperarse de las pérdidas sufridas. La ofensiva
en Lenino nunca llegó a continuarse. Los polacos y soviéticos
habían contado 502 muertos, 1.776 heridos y 663 capturados o
desaparecidos, frente a unas 1.500 bajas alemanas. La única
ganancia de la operación fue una cabeza de puente en Lenino que
los soviéticos pudieron conservar.
La propaganda soviética presentó la
batalla como un gran éxito, al igual que los comunistas polacos,
que la describieron como "un gran y significativo
acontecimiento en la historia de Polonia" o como "un
hito en la lucha de los polacos contra el fascismo".
Otros críticos más imparciales consideraron que la batalla había
sido un baño de sangre sin sentido en el que los polacos fueron
usados como carne de cañón, al más puro estilo ruso.
Un submarino alemán hundió un destructor estadounidense (Bristol) ante la costa de Argel.
A las 15:00 el primer ministro italiano
Pietro Badoglio emitió un comunicado por radio en el que
anunciabla la declaración de guerra de Italia a las potencias
del Eje.
La aviación estadounidense hundió uno de los submarinos del grupo
Schieffen, en el Atlántico. Otro chocó con otro submarino
que no pertenecía al grupo y sus tubos lanzatorpedos quedaron
dañados, con lo que a partir de ese momento sólo pudo emprender
misiones de observación. El otro submarino tuvo que regresar a su
base.
El 14 de octubre un submarino
estadounidense hundió un petrolero japonés (Kozui Maru) en
el mar de la China Oriental.
Ese día se proclamó la Segunda República Filipina, con José P.
Laurel y García como primer ministro títere de Japón.
Paralelamente, seguía existiendo el gobierno filipino en el
exilio, presidido por Manuel L. Quezón.
Hacía ya meses que los prisioneros del campo de concentración de Sobibor temían que los alemanes iban a cerrarlo pronto, y que todos ellos serían asesinados cuando llegara el momento. Por ello habían estado planeando una insurrección. El mes anterior había llegado un grupo de prisioneros procedente del gueto de Minsk con experiencia militar, lo que resultó ser una valiosa ayuda. Esa noche los prisioneros lograron matar 11 oficiales de las SS sin ser descubiertos y entraron en el almacén de armas. Mientras tanto, otro grupo redujo a los guardas del campo. El plan era matar a todos los miembros de las SS, pero finalmente fueron descubiertos y tuvieron que salir de estampida bajo fuego alemán. Unos 300 prisioneros lograron escapar (la mitad de los que había en el campo), de los que sólo 58 (48 hombres y 10 mujeres) se sabe que sobrevivieron a la guerra. La mayoría murieron por las minas que rodeaban el campo o en la persecución que inmediatamente organizaron los alemanes. Pocos días después de la fuga Himmler ordenó que el campo fuera cerrado, desmantelado y replantado con árboles.
La aviación estadounidense bombardeó de nuevo Schweinfurt, esta
vez con 291 bombarderos. El ataque llevado a cabo dos meses antes
había terminado con una cantidad desproporcionada de bajas, y el
plan de ataque había sido mejorado tratando de aprender de la
experiencia anterior. Sin embargo, el resultado fue similar. Unos
60 bombarderos fueron derribados y otros 133 sufrieron daños
graves. De los 2.900 hombres que participaron en la misión,
murieron unos 600 y otros 64 fueron capturados. El objetivo era
paralizar la fábrica de cojinetes, pero, aunque los daños causados
fueron considerables, la producción sólo se detuvo seis semanas.
El 15 de octubre un submarino alemán
hundió un carguero estadounidense (James Russell Lowell)
cerca de la costa de Argelia. El grupo de submarinos Schlieffen
atacó esa noche un convoy aliado cerca de Groenlandia y hundió un
carguero británico (Essex Lance), pero le salió cara la
jugada, porque horas después, pasada la medianoche, la aviación
británica hundió tres de los submarinos del grupo.
Un avión de pasajeros estadounidense con diez personas a bordo se
estrelló en Tennsesee, sin supervivientes.
El 16 de octubre los japoneses
lanzaron un ataque a gran escala sobre las posiciones australianas
en Finschhafen, en Nueva Guinea. Atacaron por tres frentes
distintos, uno de los cuales era meramente de diversión, que fue
fácilmente contenido sin haber logrado sus objetivos, y otro era
un desembarco, que se vio mermado porque cuatro de las siete
barcazas que estaba previsto emplear habían sido destruidas unos
días antes. Los japoneses sufrieron muchas bajas durante el
desembarco. No obstante, los japoneses lograron penetrar en las
líneas australianas hasta aislar a la guarnición de Jivevaneng.
Los australianos usaron aviones para abastecerlos.
Al puerto de Mormugao, en la India Portuguesa, llegó el
barco sueco Gripsholm cargado con 1.500 japoneses que
habían residido hasta entonces en los Estados Unidos, donde fueron
intercambiados por 1.500 estadounidenses, británicos y canadienses
que habían llegado en el Teia Maru.
La aviación británica hundió un submarino alemán en el golfo de
Omán.
Un submarino británico hundió un carguero alemán (Kari)
cerca de Atenas.
En Albania se reunió por primera vez una Asamblea Nacional
compuesta por 243 representantes. Los alemanes hicieron un
esfuerzo por que los albaneses pudieran considerarse un Estado
independiente. En particular, no intentaron llevar albaneses a
trabajar forzosamente a Alemania.
La policía alemana arrestó 1.259 judíos en Roma, de los cuales
252 fueron liberados cuando fueron reconocidos como hijos de
matrimonios mixtos. Muchos otros judíos habían sido alertados y se
habían refugiado en casas de gentiles o en iglesias católicas.
Raymond Burgard había sido deportado a Alemania silenciosamente,
según el decreto Noche y niebla. Ese día fue condenado a
muerte, juntamente con otros miembros de la resistencia francesa,
como Paul Petit, que había editado un periódico
clandestino llamado Francia continúa, del cual Burgard
había sido un de sus principales colaboradores.
El 17 de octubre un submarino
estadounidense hundió el crucero alemán Michel, cerca de
Yokohama. Era el último barco "pirata" alemán, es decir, un barco
de guerra que se acercaba a los barcos enemigos camuflado como
mercante.
Los japoneses completaron la construcción del ferrocarril de
Birmania, que unía Bangkok con Rangún. Se calcula que unos 250.000
trabajadores asiáticos y 61.000 prisioneros de guerra aliados
habían sido empleados en la construcción en unas condiciones que
convertían los campos de concentración nazis en complejos
vacacionales. Unos 90.000 asiáticos y 61.000 aliados murieron
durante la construcción. Cuando terminó la construcción, algunos
supervivientes fueron llevados a hospitales y campos de
reubicación, y otros fueron llevados a japón como mano de obra
esclava.
Mientras tanto, el Alto Mando estadounidense expresaba su alarma
por las fotos que aparecían en los periódicos, cada vez con más
frecuencia, en las que se veía a soldados con pulseras hechas de
dientes de japoneses, o hirviendo cabezas para limpiar cráneos y
guardarlos como recuerdo, o convertirlos en ceniceros, etc.
El grupo de submarinos Schileffen no pudo desembarazarse
de la aviación británica y ese día perdió otros tres de sus
integrantes. Tras haber perdido seis submarinos en dos días, el
grupo fue disuelto.
El 18 de octubre submarinos
estadounidenses hundieron dos cargueros japoneses (Taichi Maru
y Tairin Maru) en el Pacífico.
Ese día se hizo efectiva la transferencia a Tailandia de las
provincias birmanas de Kedah, Perlis, Kelantan y Terengganu, según
el acuerdo firmado entre Japón y Tailandia dos meses atrás. No
obstante, los japoneses mantuvieron una fuerte presencia militar
en la zona.
También fue la fecha de inicio de la Tercera Conferencia de
Moscú, en la que participaron los ministros de asuntos
exteriores británico (Anthony Eden), estadounidense (Cordell Hull)
y soviético (Vyacheslav Molotov).
De los judíos arrestados por los alemanes en Roma dos días antes, 1.007 fueron enviados a Auschwitz, para ser exterminados.
El ministro de asuntos exteriores español, Francisco
Gómez-Jordana, envió en nombre de Franco un telegrama de
felicitación a José Paciano Laurel, por su nombramiento como
primer ministro filipino. Este mensaje, al igual que otro similar
de Hitler, fue difundido ampliamente por la prensa y la radio
japonesa, y los aliados lo tomaron como una forma de reconocer un
Estado creado por los japoneses. Varios periódicos
estadounidenses, entre ellos el New York Times, pidieron
sanciones duras contra España.
El 19 de octubre tuvo lugar el primer
intercambio de prisioneros de guerra entre Gran Bretaña y Alemania
en el puerto sueco de Goteborg bajo la supervisión de la
Cruz Roja.
Ese día el gobierno alemán firmó un contrato con la empresa Mittelwerk
GmbH para la construcción de 12.000 cohetes-bomba A4,
diseñados por Wenher von Braun, y que fueron más conocidos como V2
(Vergeltungswaffe 2, Arma de represalia 2). Las V1 eran
unas bombas volantes que todavía estaban en fase experimental.
Para proteger la producción de bombardeos, el gobierno alemán
había expropiado una mina a otra empresa y la había acondicionado
para albergar las instalaciones necesarias. Para los trabajos que
no requerían una gran cualificación se empleó mano de obra
esclava.
Hitler puso a Kesselring al mando de las tropas alemanas en
Italia, que pasó a estar a partir de entonces por encima de
Rommel.
Un submarino británico hundió un carguero alemán (Aversa)
en el Mediterráneo. La aviación británica hundió un transporte
alemán (Sinfra) sin saber que transportaba prisioneros de
guerra italianos. Murieron 1.857 de las 2.593 personas a bordo.
Cuando el barco se incendió, los alemanes cerraron las bodegas
donde iban los prisioneros y arrojaron granadas en ellas. Los
prisioneros lograron salir de las bodegas presos del pánico y
lograron arrollar a algunos alemanes, que se defendieron con armas
cortas y metralletas. Aunque, durante el rescate, los alemanes
dieron prioridad a sus compatriotas, unos 500 italianos fueron
rescatados, pero la mitad fueron luego fusilados por
"comportamiento indisciplinado" y por haber matado a algunos
alemanes.
Albert Schatz era un microbiólogo estadounidense de 23
años que el año anterior, tras haberse graduado, había empezado a
trabajar como ayudante bajo la dirección del doctor Selman
Waksman, en un proyecto de investigación destinado a
encontrar antibióticos eficaces contra bacterias inmunes a la
penicilina generados por bacterias presentes en el suelo
ordinario. Los equipos dirigidos por Waksman ya habían encontrado
otros antibióticos efectivos, como la actinomicina
(aislada en colaboración con Harold Boyd Woodruff) o la patulina
(aislada ese mismo año en colaboración con Nancy Atkinson).
Al cabo de cinco meses fue reclutado y trabajó como bacteriólogo
en un hospital militar en Florida, pero fue dispensado del
servicio militar por problemas de espalda. Entonces había vuelto a
su trabajo con Waksman, y ese día, como fruto de una intensa labor
de tres meses y medio, Schatz aisló dos cepas relacionadas de una
bacteria que producían un antibiótico al que denominó estreptomicina
y que resultó efectivo contra el bacilo de la tuberculosis y otros
más.
El 20 de octubre un submarino
estadounidense hundió un carguero japonés (Sana Maru) cerca
de la costa de la Indochina francesa. Otro (Nagaragawa Maru)
fue hundido por la aviación aliada cerca de las Indias Orientales
Neerlandesas.
Charles de Gaulle devolvió a los 140.000 judíos argelinos la
ciudadanía francesa.
El 21 de octubre el primer ministro
japonés Hideki Tojo junto al ministro de Educación pasaron revista
en Tokio a unos 25.000 estudiantes recientemente enrolados en el
Ejército Imperial.
Los australianos seguían conteniendo el ataque japonés en
Finschhafen. Aunque habían experimentado dificultades, la cabeza
de playa se mantenía a raya y finalmente los japoneses fueron
expulsados de su posición más amenazante, si bien los combates
continuaron por varios intentos de recuperarla.
En un pequeño fragmento de la India ocupado por los japoneses
junto a la frontera birmana se proclamó la India Libre,
con Subhas Chandra Bose como presidente provisional.
Fuerzas alemanas que llegaban a Ucrania en retirada desde
Bielorrusia iniciaron la liquidación del gueto de Minsk. Durante
las dos semanas siguientes, los más de 2.000 judíos que quedaban
en el gueto fueron trasladados al campo de exterminio de Maly
Trostenets, situado en las afueras de la ciudad.
La aviación alemana hundió un carguero británico (Saltwick)
y otro estadounidense (Tivives) cerca de Argelia. La
aviación británica hundió un submarino alemán en la misma zona.
La esposa de Raymond Aubrac se presentó en la cárcel de Lyon
donde lo retenía la Gestapo asegurando ser su prometida.
Explicó que había sido detenido en la casa del doctor Dugoujon
accidentalmente, pues él estaba allí como paciente. Cuando le
informaron de que Aubrac iba a ser ejecutado por colaboración con
la resistencia, ella pidió casarse con él. Una cláusula de la ley
francesa daba derecho a unos prometidos a casarse inmediatamente
si la vida de uno de ellos corría peligro. Aprovechando el momento
en que Aubrac salió de su celda para "casarse", la resistencia
atacó la prisión y lo liberó junto a otros 15 presos. Aubrac logró
salir de Francia y llegar hasta Argelia.
El 22 de octubre un submarino
estadounidense torpedeó un transporte japonés (Awata Maru)
cerca de Formosa y provocó una explosión que mató a 223
tripulantes y a 1.087 soldados. El barco no tardó en hundirse.
Esa noche 569 aviones británicos lanzaron 416.000 bombas
incendiarias sobre el centro de la ciudad alemana de Kassel
durante 15 minutos, causando la muerte de más de 10.000 personas
de un total de 150.000 habitantes. Los numerosos incendios
provocaron una tormenta de fuego. Para proteger a los aviones
atacantes, la RAF puso en práctica la Operación
Corona, consistente en que hablantes alemanes nativos
(principalmente judíos huidos de Alemania) se hicieron pasar por
oficiales alemanes que daban órdenes falsas por radio a los
pilotos de la Luftwaffe. Cuando los alemanes entendieron
lo que había sucedido, trataron de evitar que volviera a suceder
usando a mujeres para dar las órdenes por radio a los pilotos,
pero los británicos también disponían de mujeres cuya lengua
materna era el alemán.
Un submarino alemán hundió un petrolero británico cerca de Sierra
Leona.
El 23 de octubre la aviación
estadounidense hundió un transporte japonés (Kyowa Maru) en
el Pacífico.
La India Libre declaró la guerra a Gran Bretaña y los Estados
Unidos.
Un submarino japonés hundió un carguero griego (Faneromeni)
cerca de Madagascar.
Los soviéticos expulsaron a los alemanes de Melitopol, en
Ucrania.
Las autoridades británicas estaban al tanto de que un barco
alemán, el Münsterland, había salido de Brest para llevar
a Francia suministros importantes tratando de burlar el bloqueo
con una escolta de 6 dragaminas y 5 torpederos. Para impedir que
llegara a su destino se reunió una flota integrada por el crucero
Charybdis y 6 destructores. Los radares alemanes detectaron
la flota británica e informaron rápidamente a los barcos alemanes.
El contacto por radar entre ambas flotas se estableció sobre la
1:30, cerca de Sept-Îles, en el canal de la Mancha, cuando
se encontraban a unos 13 km de distancia. Un error de comunicación
hizo que la flota británica se desorganizara. Uno de sus barcos
lanzó bengalas que iluminó a los barcos británicos más avanzados
en lugar de a los alemanes. Los torpederos alemanes lanzaron 24
torpedos y los vigías británicos vieron sus estelas acercarse
cuando ya era tarde. El Charybdis recibió dos impactos que
lo dañaron gravemente, y poco después el destructor Limbourne
recibió un tercer impacto. En apenas media hora el Charybdis
se hundió con casi 500 de sus tripulantes, incluido su capitán, George
Voelker. El Limbourne perdió 42 hombres, y sus daños
obligaron a hundirlo. Los otros destructores se retiraron y así el
Münsterland pudo llegar a su destino sano y salvo.
El capitán estadounidense John T. Compton fue absuelto en un
consejo de guerra de la acusación de haber matado a 36 prisioneros
de guerra en Biscari el pasado mes de julio. La defensa había
alegado entre otras cosas que Compton había seguido las órdenes
que Patton había dado en una arenga a sus tropas, en la que al
parecer había dicho:
Si vosotros, oficiales de compañía, cuando os dirijáis contra el enemigo, lo encontráis disparándoos, y cuando llegáis a 200 metros de ellos pretenden rendirse, ¡ah, no!, ¡ese bastardo morirá! Vosotros lo mataréis. Apuntadle entre la tercera y la cuarta costilla. Decid a vuestros hombres que deben tener instinto asesino. Decid que disparen contra ellos, que apunten al hígado. Así obtendréis fama de asesinos y los asesinos son inmortales. Cuando corra la voz de que se enfrentan a un batallón asesino, lucharán menos. Debemos crearnos la fama de asesinos.
Durante la investigación se preguntó a Patton por el discurso, y
su respuesta fue que había sido malinterpretado y que sólo con un
exceso brutal de la imaginación podía interpretarse como una orden
para matar a prisioneros de guerra. Las conclusiones del consejo
de guerra fueron que Patton no había hecho nada incorrecto.
Técnicamente, Patton había instado a no aceptar rendiciones en
determinadas circunstancias, no a matar prisioneros cuya rendición
ya había sido aceptada.
No había corrido la misma suerte el sargento H.T. West, que había
sido condenado a cadena perpetua por el asesinato el mismo día de
otro grupo de prisioneros de guerra. No obstante, un año más tarde
se le anuló la condena y fue reincorporado a filas.
La Kriegsmarine había organizado un nuevo grupo de
submarinos para atacar convoyes en el Atlántico Norte bajo el
nombre Siegfried. Su primer objetivo fue el convoy ON 207,
y ese día la escolta hundió uno de los submarinos del grupo cerca
de Islandia.
Un submarino alemán hundió un carguero brasileño (Campos) cerca de la costa de Brasil.
El 24 de octubre un submarino
estadounidense atacó un convoy japonés y hundió un carguero (Kazan
Maru), un transporte (Johore Maru) y un petrolero (Tennan
Maru) en el Pacífico. La aviación estadounidense hundió un
destructor japonés (Mochizuki) cerca de Rabaul.
Finalmente los japoneses cancelaron el ataque a Finschhafen, tras
haber sufrido numerosas bajas debido a problemas tácticos, de
coordinación y falta de artillería. A partir de ese momento
iniciaron una retirada para evacuar la península de Huon.
La isla de Leros estaba siendo abastecida por submarinos
británicos e italianos, e incluso por la aviación, pero estos
medios resultaban insuficientes y faltaban municiones y
medicamentos. Esa noche, un destructor británico (Eclipse) que
transportaba a Leros parte de un batallón británico chocó contra
una mina y se hundió. Más de 250 hombres perdieron la vida.
Los cuerpos de 21 marines británicos víctimas del hundimiento del
Charybdis llegaron hasta las playas de Guernsey, donde los
alemanes los enterraron con honores militares. Unos 5.000 isleños
asistieron al funeral llevando 900 coronas de flores. Esa
manifestación de lealtad hacia los británicos irritó a los
alemanes, que desde entonces prohibieron la entrada de civiles a
los funerales militares. En general, los nazis trataban de mostrar
su cara más amable a los habitantes de las islas del Canal, pero
los alemanes habían llevado a las islas unos 16.000 esclavos,
muchos de ellos soviéticos, para construir fortificaciones, y los
isleños habían tenido muchas ocasiones de comprobar el trato que
recibían. También había algunos trabajadores "semivoluntarios"
franceses, belgas y neerlandeses. Más difícil resultaba a los
alemanes lograr la colaboración de los isleños. Los únicos que se
prestaban a ello sin necesidad de amenazas y coacciones más o
menos veladas eran los irlandeses (técnicamente porque Irlanda era
un país neutral, y en la práctica porque el nacionalismo irlandés
siempre había simpatizado con el nazismo) y —hasta que Alemania
atacó a la Unión Soviética— los comunistas británicos.
André Lassagne, uno de los miembros de la resistencia francesa
arrestados junto a Jean Moulin en Lyon fue deportado
"discretamente" a un campo de concentración Alemán, según el
decreto "noche y niebla".
La aviación británica hundió un submarino alemán en el Atlántico,
cerca de las Azores. Un submarino alemán hundió un carguero
noruego (Siranger) cerca de Brasil.
El 25 de octubre un submarino
estadounidense hundió un petrolero japonés (Nissho Maru)
cerca de las Filipinas.
Los soviéticos tomaron Dnepropetrovsk a los alemanes en
Ucrania.
El 26 de octubre la aviación
estadounidense hundió dos cargueros japoneses (Hachiman Maru
y Hokuzan Maru) y un transporte (Yamatogawa Maru)
cerca de China. Otro carguero (Dover Maru) fue hundido
cerca de Birmania.
Un submarino soviético hundió un carguero finlandés (Betty H)
en el mar Báltico.
El mes anterior las SS habían tomado el control del gueto de
Kovno en Lituania y lo habían convertido en un campo de
concentración. Más de 3.500 judíos fueron dispersados en varios
subcampos para evitar revueltas y ahora 2.700 judíos del campo
principal eran deportados. Los considerados aptos para el trabajo
fueron enviados a un campo en Estonia, mientras que el resto,
incluyendo niños y ancianos, fueron enviados a Auschwitz.
La aviación británica hundió otro de los submarinos del grupo Siegfried.
El 27 de octubre un submarino
estadounidense atacó un convoy japonés y hundió un carguero (Nanman
Maru) en el Pacífico.
En el archipiélago de las islas Salomón, al noroeste de Vella
Lavella, pero más cerca de la isla de Bouganville, se encuentran
las Islas del Tesoro, que fueron el paso siguiente del
avance aliado por el archipiélago. Tras un corto bombardeo aéreo y
naval, dos batallones de infantería estadounidense y neozelandesa
desembarcaron cerca de Falamai, en la costa meridional de
la Isla del Mono. Al mismo tiempo un destacamento
desembarcaba en la isla Stirling. En total, 3.795 hombres
desembarcaron en las islas. Durante el mes siguiente el número
iría aumentando paulatinamente hasta los 6.574 hombres. Los
japoneses fueron tomados por sorpresa y no lograron enviar la
aviación durante el desembarco. Luego 25 bombarderos atacaron a
dos destructores estadounidenses, uno de ellos resultó dañado y
tuvo que ser remolcado para su reparación, pero 12 aviones fueron
derribados. La resistencia en tierra fue débil y fue superada con
pocas bajas. En pocas horas, las cabezas de playa estaban
aseguradas.
Era evidente que la ocupación de las Islas del Tesoro era sólo el
preludio de un desembarco en Bouganville, pero el 28 de octubre los estadounidenses llevaron a
cabo una operación de distracción para que los japoneses creyeran
al menos que el desembarco se iba a producir en el este de la
isla, en lugar de en el oeste. Para ello, un batallón de 650
hombres desembarcó en la isla de Choiseul, situada al
suroeste de Bouganville. Desde Bozo, una parte inició un
avance hacia el norte y otro hacia el sur, siguiendo la costa.
Un submarino japonés hundió un carguero británico (Congella)
en el océano Índico.
Un cazasubmarinos alemán hundió un submarino soviético en el mar
Negro.
Ese día se probó en Peenemünde el primer prototipo de bomba V1,
diseñada por los ingenieros Robert Lusser y Fritz
Gossau, que trabajaban para empresas privadas alemanas. Se
trataba de un misil guiado por un sencillo piloto automático que
regulaba su altura y velocidad. Fue lanzado desde un bombardero,
aunque también existía la posibilidad de lanzarlos desde unas
rampas de lanzamiento especiales.
La aviación estadounidense hundió un submarino alemán en el
Atlántico Norte.
La guarnición principal de los japoneses en las Islas del Tesoro
estaba en Soanotalu, y el 29 de
octubre inició una serie de enérgicos ataques contra las
fuerzas aliadas, pero todos ellos fueron rechazados.
Yelena Mazanik, Nadezhda Troyan y Mariya Osipova fueron
condecoradas como Heroínas de la Unión Soviética por el asesinato
de Wilhelm Kube.
Ese día tuvo lugar otra fuga en el campo Stalag Luft III. En esta
ocasión fue una "iniciativa privada" de dos prisioneros, los
tenientes Michael Codner y Eric Williams, con la
cooperación del resto de los prisioneros. Codner y Williams habían
construido un potro de madera para practicar gimnasia, dentro del
cual cabían un par de hombres y utensilios. Cada día, los
prisioneros llevaban el potro al mismo lugar cerca de las vallas
exteriores del campo y se ponían a practicar gimnasia. Codner y
Williams se habían estado turnando para excavar un tunel cuya
entrada quedaba justo debajo del potro, en el cual se almacenaba
la tierra excavada para luego deshacerse de ella en otra parte. El
teniente Oliver Philpot, que en un principio les ayudaba a
desprenderse de la tierra, fue invitado a unirse a ellos en el
plan de fuga. Finalmente, los tres abandonaron el campo por el
túnel, que había llegado a medir unos 30 metros. Fingiendo ser
trabajadores franceses, lograron llegar en tren hasta el Báltico.
Luego se separaron. Philpot se dirigió a Danzig y los otros dos a
Stettin, y al final los tres llegaron a Suecia, desde donde fueron
repatriados a Gran Bretaña.
Meses atrás, Roger Bushell había concebido un ambicioso plan de
fuga sin precedentes. Su intención era sacar del campo nada menos
que a 200 hombres para lo cual habían iniciado la construcción de
tres túneles, llamados Harry, Dick y Tom. Los
alemanes habían descubierto a Tom hacía dos meses, y
habían empezado a construir nuevas instalaciones donde estaba
prevista la salida de Dick, así que este túnel fue
abandonado y pasó a usarse como almacén secreto. La excavación de
Harry había quedado en suspenso hasta que pasara el revuelo
(léase visitas de la Gestapo) causado por el
descubrimiento de Tom.
Un submarino británico hundió un carguero alemán (Ingeborg) en el Egeo.
Ese día fue ejecutado en Berlín Robert Dorsay, un actor,
bailarín y cantante alemán de 39 años que había sido acusado de
una continuada actividad hostil al Reich y
grave socavamiento del esfuerzo defensivo alemán. Los medios
de los que se había valido para amenazar tan gravemente la
seguridad de Alemania eran especialmente ruines e inquietantes: un
informador de la Gestapo lo había oído un día hacer un
chiste sobre el gobierno y, cuando a raíz de la alarma causada por
denuncia, se registró urgentemente su casa, se encontró en ella
una carta no enviada en la que Dorsay se burlaba del partido nazi
y describía el esfuerzo bélico alemán como "idiota".
En Argelia fueron juzgados los soldados estadounidenses
responsables del motín de Salerno que había tenido lugar el mes
anterior. Tres sargentos fueron condenados a muerte, aunque la
sentencia fue conmutada por 12 años de trabajos forzados. Más
tarde se suspendería la sentencia, pero los inculpados tuvieron
que sufrir un hostigamiento constante por parte de los militares
durante el resto de sus carreras.
El grupo de submarinos Siegfried seguía acosando sin
éxito al convoy ON 207, y la escolta hundía ese día un tercer
submarino, mientras que un cuarto tuvo que regresar a su base con
graves daños.
El 30 de octubre el gobierno chino de
Wang Jingwei firmó un tratado en Tokio según el cual Japón se
comprometía al retirar sus tropas de China cuando terminara la
guerra.
Los participantes en la Conferencia de Moscú hicieron pública una
declaración conjunta sobre las intenciones de los aliados:
La marina de los Estados Unidos probó el helicóptero Sikorsky
R-4, diseñado por Igor Sikorsky.
El 31 de octubre un submarino
estadounidense hundió un petrolero japonés (Koryo Maru)
cerca de Borneo, y un transporte (Ujigawa Maru) se hundió
en Rabaul como consecuencia de un bombardeo.
Los soviéticos capturaron Chaplynka, con lo que privaron
a los alemanes de la vía férrea que los comunicaba con Crimea.
La resistencia noruega, con apoyo británico, estallar explosivos
para destruir en Thamshavn varias locomotoras empleadas para el
transporte de piritas. Sin embargo, algunas no estaban donde los
saboteadores creían, y sólo destruyeron cuatro de ellas. Al mismo
tiempo, una vía férrea iba a ser volada en Løkken, pero un
error en los temporizadores hizo que el intento fracasara.
Entonces los noruegos detuvieron un tren y trataron de volarlo,
pero otro error hizo que uno de ellos, Odd Nilsen, muriera
en una explosión. Ante el cúmulo de fracasos, abandonaron la zona,
pero uno de ellos, Paal Skjærpe, fue capturado en Hovin
y tordurado por la Gestapo en Trondheim, si bien no reveló
información alguna.
Kurt Blome era un reputado "científico" nazi, que había
estado dirigiendo una investigación, no contra, sino a favor del
cáncer. Su propósito era buscar sustancias cancerígenas que
pudieran ser usadas como armas de guerra, y para estudiar la
viabilidad de sus planes había experimentado con 1.700 prisioneros
del campo de concentración de Mauthausen. También inoculaba a sus
víctimas enfermedades como el cólera, el ántrax, el tifus, etc.
para estudiar la eficacia de diversas vacunas. Recientemente había
tenido otra brillante idea: la posibilidad de que aviones
sembraran mosquitos infectados con enfermedades como la malaria
para provocar epidemias.
Submarinos alemanes hundieron un carguero noruego (Hallfried)
en el Atlántico Norte y otro británico (New Columbia) cerca
de la costa africana. Por otra parte, la marina y la aviación
aliada hundieron tres submarinos alemanes en varios puntos del
Atlántico. Uno de ellos pertenecía al grupo Siegfried, que
seguía acosando sin éxito al convoy ON 207. A las 19:43 el
destructor USS Borie divisó a otro más de los submarinos
del grupo, que inmediatamente se sumergió. Las cargas de
profundidad lo obligaron a emerger en tres ocasiones, hasta que se
detecto una gran mancha de petróleo en el agua. El capitán del Borie
lo dio por hundido, aunque en realidad el submarino pudo regresar
a su base muy dañado.
A las 7:10 del 1 de noviembre una
primera oleada de marines estadounidenses desembarcó en 12 playas
repartidas a lo largo de 7 km de costa en el cabo Torokina,
en la isla de Bougainville. Los japoneses tenían dos aeropuertos
al sur de la isla, uno al norte y otro en Buka, una isla
separada de Bougainville por un estrecho. En lugar de atacar estas
zonas fuertemente defendidas, los estadounidenses desembarcaron en
el centro de la isla, con poca presencia japonesa, con la
intención de construir su propio aeropuerto en esa zona.
Mientras se producía el desembarco 31 aviones atacaban las
posiciones japonesas en las playas. Otros 40 aviones atacaban los
aeropuertos japoneses cercanos. El desembarco fue precedido de un
intenso fuego por parte de la artillería de la armada. A las 7:30
unos 7.500 marines habían desembarcado. A las 7:35 llegaron desde
Rabaul 53 aviones japoneses, que tuvieron que enfrentarse a los
aviones aliados procedentes de Munda y de Vella Lavella, así como
a las baterías antiaéreas de los destructores que escoltaban el
desembarco. La zona de la isla había sido elegida por la escasa
presencia de fuerzas japonesas. Un batallón de marines usó perros
para localizar japoneses escondidos y hacia las 11:00 la zona
estaba ya despejada. Por la tarde llegaron otros 100 aviones
japoneses, pero sólo 12 lograron rebasar un escudo de 34 cazas
aliados, los cuales poco daño pudieron causar. Hacia las 17:30
habían desembarcado 14.000 hombres y 6.200 toneladas de
suministros. Por la noche la cabeza de playa estaba firmemente
asegurada.
Los portaaviones USS Saratoga y USS Princeton
neutralizaban mientras tanto otros aeropuertos japoneses. Por otra
parte, una flota compuesta por dos cruceros pesados, dos cruceros
ligeros y seis destructores, además de cinco destructores de
transporte que llevaban 1.000 soldados de refuerzo había salido de
Rabaul con destino a Bougainville y había sido detectada por los
estadounidenses, que ya habían preparado otra flota de cuatro
cruceros ligeros y 8 destructores para oponerse a ella.
Mientras tanto los neozelandeses tomaron Falamai, la
capital de las Islas del Tesoro e izaron en ella la bandera
británica. Durante los días siguientes se dedicaron a limpiar las
islas de japoneses.
Esa noche los soviéticos desembarcaron en Eltigen, en
Crimea, y lograron consolidar una cabeza de playa.
La aviación soviética hundió un carguero alemán (Marienburg)
cerca de Steinort, en Polonia.
La aviación aliada hundió el crucero italiano Ottaviano
Augusto, que ahora navegaba con bandera alemana.
Dillon Seymour Myer era el máximo responsable de los
campos de internamiento de japoneses en los Estados Unidos.
Durante una visita al campo de Tule Lake, los internos rodearon
pacíficamente el edificio de administración en señal de protesta.
Viéndose rodeado por más de 5.000 personas, hombres, mujeres y
niños, Myer aceptó recibir a unos representantes de los
prisioneros, que les expusieron sus quejas. Myers prometió tomar
medidas y los japoneses regresaron a sus barracones.
A la 1:53 el sonar del Borie detectó otro submarino del
grupo Siegfried. Llegó hasta él antes del amanecer y le
lanzó cargas de profundidad que lo obligaron a emerger a unos 400
metros del destructor. Éste empleó su artillería y el submarino
respondió con sus ametralladoras, que no causaron ningún daño
significativo, sobre todo desde el momento en que las bombas del Borie
acabaron con los alemanes que las manejaban expuestos en la
cubierta. Entonces el Borie embistió al submarino, pero
una ola muy alta hizo que la proa del barco cayera sobre la del
submarino, y ambos quedaron enlazados. Continuamente salían
alemanes a cubierta para hacerse cargo de las ametralladoras y
eran sustituidos a medida que morían. La tripulación del Borie
usaba todas las armas disponibles: pistolas, rifles antidisturbios
y hasta bengalas. Con ello impedían que los alemanes llegaran
hasta un cañón que el submarino tenía en su cubierta. Cuando los
estadounidenses se estaban quedando ya sin municiones, dos
alemanes salieron de su posición a cubierto detrás del puente y
trataron de llegar al cañón. Uno de ellos cayó al mar después de
que le lanzaran una navaja que se le clavó en el abdomen, y al
otro lo tiraron arrojándole la carcasa vacía de un proyectil.
Cuando las dos naves se pudieron separar, 35 de los 49
tripulantes del submarino estaban muertos o perdidos en el mar. El
capitán del submarino hizo un trabajo impresionante maniobrando
con su escasa tripulación para evitar el fuego enemigo. Por su
parte, el Borie estaba muy dañado por el impacto. Entonces
apagó el reflector con el que había mantenido iluminado al
submarino para hacerle creer que abandonaba el combate. El
submarino empezó a alejarse y, cuando estuvo a una distancia
prudencial para volver a emplear técnicas de combate ortodoxas, el
reflector se encendió de nuevo y el Borie volvió a
disparar y a lanzar cargas de profundidad. Entonces los pocos
hombres que quedaban en el submarino lo abandonaron en botes de
goma haciendo señas de rendición. Varios de ellos estaban heridos.
El capitán del Borie ordenó el alto el fuego y poco
después el submarino se hundió. En palabras del capitán, el grito
de júbilo que dieron sus hombres al advertir el hundimiento debió
de oírse en Berlín.
Los alemanes lanzaron una bengala desde sus balsas, y los
estadounidenses creyeron que estaban pidiendo auxilio, pero luego
vieron otra bengala a lo lejos: había sido una señal para otro
submarino alemán que había respondido. El caso fue que tanto el Borie,
muy dañado, como el otro submarino, se alejaron huyendo el uno del
otro y nadie rescató a los náufragos. Los daños sufridos por el Borie
pasaron factura. Falló el sistema eléctrico y varias vías de agua
estaban inundándolo. Tras grandes esfuerzos por salvarlo, el
capitán tuvo que ordenar que se abandonara el barco, que otro
destructor estadounidense se encargó de hundir definitivamente.
El Siegfried fue dividido en tres subgrupos de submarinos
con la intención de abarcar una zona más extensa, pero su
inefectividad siguió siendo la misma.
Stan Laurel y Oliver Hardy habían estrenado hacía unos meses Ladrón
que roba a ladrón y ahora estrenaban Maestros de baile.
En esta película intervino un joven de 27 años que ese mismo año
había aprecido como secundario, a menudo sin figurar siquiera en
los títulos de crédito, en 19 películas. Se llamaba Robert
Charles Durman Mitchum.
El 2 de noviembre submarinos
estadounidenses hundieron dos transportes (Delagoa Maru y Yawata
Maru) y un carguero (Ehime Maru) cerca de la costa
japonesa.
A la 1:30 uno de los cruceros japoneses que se dirigían hacia
Bougainville (el Haguro) fue dañado por la aviación
estadounidense y tuvo que reducir su velocidad, lo que a su vez
obligó al resto de la flota a hacer lo mismo. La flota
estadounidense se dividió en varias columnas para recibir a la
flota japonesa. A las 2:46 los estadounidenses lanzaron una
primera andanada de torpedos y poco después los japoneses hicieron
lo mismo. Ambas andanadas fueron detectadas y ambas flotas
maniobraron para esquivar los torpedos, pero la flota japonesa se
desorganizó en el proceso. Tras un ataque estadounidense que no
dio resultado, a las 2:50 abrieron fuego los cruceros, que dañaron
el crucero japonés Sendai, cuyo timón quedó bloqueado. El
destructor japonés Samidare chocó con Shiratsuyu y
tuvieron que retirarse de la batalla. A las 3:00 Samidare
recibió varios impactos. El crucero Myōkō fue gravemente
dañado al chocar con el destructor Hatsukaze, mientras el
Haguro recibía impactos procedentes de los cruceros
estadounidenses. Por su parte, los destructores estadounidenses Spence
y Thatcher también chocaron entre sí, pero los daños no
les impidieron seguir en combate. El Foote recibió un
impacto de torpedo que le destrozó la proa y dejó 19 muertos y 17
heridos. El Denver recibió tres impactos de proyectiles
que no detonaron. El Spence también recibió una bomba que
no explotó. Los artilleros japoneses carecían de radares y tenían
que ajustar visualmente sus disparos ayudados por bengalas que
trataban de iluminar los barcos enemigos. Paulatinamente habían
afinado su puntería, pero los estadounidenses desplegaron una
cortina de humo que disminuyó significativamente su eficacia.
A las 3:37 los japoneses, creyendo que habían hundido un crucero
pesado estadounidense y temiendo que al amanecer pudiera aparecer
un portaaviones, iniciaron la retirada. Los estadounidenses
redoblaron sus ataques al advertir la maniobra. A las 4:00 parte
de los barcos estadounidenses se mezclaron confusamente con los
japoneses y hundieron el Sendai. A las 5:10 varios
destructores atacaron al Hatsukaze, que había quedado
rezagado debido a los daños que sufría y que terminó explotando y
hundiéndose.
Al amanecer la flota estadounidense dejó de perseguir a la
japonesa y se reagrupó, lo que le permitió rechazar eficazmente un
ataque aéreo por parte de unos 100 aviones procedentes de Rabaul.
El balance de la batalla fue de dos barcos japoneses hundidos (un
crucero y un destructor) y otros cuatro gravemente dañados, además
de 25 aviones derribados. La flota estadounidense acabó con un
crucero y dos destructores dañados. Fue una rotunda victoria que
no sólo protegió los transportes que se habían encargado del
desembarco en Bougainville, sino que infligió un daño considerable
en la flota japonesa, todo ello con tan sólo 19 marines muertos,
frente a más de 500 japoneses muertos.
En Choiseul los japoneses tendieron una emboscada que dejó
atrapados a casi 50 marines.
Ese día fue el primero de una campaña de bombardeos sobre Rabaul.
Un total de 72 bombarderos y 80 cazas de escolta atacaron el
puerto japonés y sus defensas antiaéreas. En total se perdieron 8
bombarderos y 9 cazas. Varios varios barcos resultaron hundidos,
entre ellos los cargueros Manko Maru y Seinko Maru.
En Nueva Guinea los japoneses se replegaron hacia Sattelberg.
Un ejército de 60.000 soldados japoneses inició un ataque contra
la ciudad china de Changde. En la zona había más de 8.000
soldados chinos. El objetivo de los japoneses no era tanto tomar
la ciudad como retener tropas chinas en la zona para que no
pudieran auxiliar a los británicos en Birmania.
Los alemanes deportaron a unos 2.000 judíos (principalmente
mujeres, niños y ancianos) del gueto de Riga hasta Auschwitz. A lo
largo del mes, el gueto terminó siendo clausurado. Todos sus
ocupantes fueron asesinados o transferidos a campos de
concentración.
Las fuerzas de Mongtomery empezaron a atacar la Línea Barbara en
el río Trigno, en Italia.
La marina y la aviación aliada hundió un submarino alemán cerca
de la costa atlántica de Marruecos. Más al sur, otro submarino
alemán hundió un carguero británico (Baron Semple).
El 3 de noviembre un submarino
estadounidense hundió dos cargueros japoneses (Chihaya Maru y Ume
Maru) en el Pacífico.
Muchos de los marines atrapados en Choiseul pudieron ser
rescatados con la ayuda de barcos torpederos. Los estadounidenses
evacuaron la isla con unos 12 muertos y 15 heridos. No está claro
que la incursión hubiera ayudado como distracción a la invasión de
Bougainville, pero lo cierto es que a raíz de ella los japoneses
llevaron miles de hombres de refuerzo a Choiseul.
Siete cruceros japoneses llegaron a Rabaul.
Los soviéticos establecieron una segunda cabeza de playa en
Crimea, esta vez en Yenikale, donde desembarcaron 4.400
soldados.
Hasta el momento, los alemanes habían tratado de liquidar los
guetos polacos uno a uno, pero esto había hecho que a muchos de
ellos llegaran noticias de lo que estaba sucediendo y, en cuanto
tenían indicios de que su gueto o su campo de concentración iba a
ser "liquidado", los prisioneros organizaban revueltas
desesperadas, que los alemanes habían podido sofocar en todos los
casos, pero con algunos costes nada desdeñables. Por ello, Himmler
había decidido liquidar todos los campos de trabajo que quedaban
en la región polaca de Lublin en una única operación masiva que
tomara a los prisioneros por sorpresa. Eso fue la "acción
Fiesta de la Cosecha". Al amanecer, el campo principal de
Majdanek y sus dos subcampos (Trawniki y Poniatowa)
fueron rodeados por las SS, un batallón de la policía alemana y
auxiliares ucranianos y los judíos fueron siendo sacados en
grupos, llevados a unas "trincheras antitanque" que les habían
hecho excavar unos días antes, asesinados y dispuestos en capas
compactas. En los campos potentes altavoces hacían sonar música a
todo volumen (era la fiesta de la cosecha y, sorprendentemente,
los nazis se habían preocupado de amenizarla) para que no se
oyeran los gritos o los disparos junto a las fosas comunes. En
Majdanek y Trawniki todos los judíos fueron exterminados en un
día, mientras que en Poniatowa la operación se retrasó porque en
uno de los barracones estalló una revuelta. Las SS le prendieron
fuego, los rebeldes salieron y la operación pudo continuar, pero
se prolongó hasta el día siguiente.
Hitler emitió una orden que establecía el traslado de tropas a
Europa occidental en previsión de un futuro "desembarco
anglosajón". Sin saber el punto en que se produciría, trató
de distribuir sus tropas de modo que pudieran concentrarse
rápidamente donde fueran necesarias.
Tras un duro combate, los británicos habían cruzado el Trigno y
alcanzaban San Salvo. Los alemanes empezaron a retirarse
hasta el río Sangro, donde tenían su siguiente línea
defensiva, la Línea Gustav. El extremo occidental de la Línea
Gustav se dividía en tres: la Línea Gustav
propiamente dicha, la Línea Bernhardt, un poco más
adelantada, y la Línea Adolf Hitler, en la retaguardia.
Un submarino alemán hundió un carguero francés (Mont Viso)
cerca de la costa de Argelia.
Torpederas alemanas atacaron un convoy británico en el Canal de
la Mancha y hundieron tres cargueros (Doña Isabel, Foam Queen
y Storaa).
El 4 de noviembre la aviación
estadounidense hundió dos cargueros japoneses (Asayama Maru
y Giyu Maru) cerca de las islas Salomón.
La flota que los japoneses estaban reuniendo en Rabaul era una
serie amenaza para la cabeza de playa que los estadounidenses
acababan de establecer en Bougainville. Aunque Rabaul era
considerado "un avispero" por los aviadores, porque contaba con
cinco aeropuertos y numerosas baterías antiaéreas, la marina
estadounidense consideró inevitable enviar a Rabaul los dos
portaaviones disponibles en la zona: el Saratoga y el Princeton.
Esa noche se acercaron lo necesario para lanzar un ataque aéreo al
amanecer.
En Moscú se estrenó la Octava sinfonía de Shostakovich.
No gustó al gobierno soviético, porque era triste y sombría, por
lo que no servía como propaganda. Fue considerada como
"antisoviética", porque si el compositor escribía música triste
cuando los alemanes estaban perdiendo la guerra, es que era un
fascista, evidentemente. No obstante, para aprovecharla en lo
posible le impusieron el sobrenombre de Sinfonía Stalingrado,
y así Shostakovich se enteró que que lo que había querido expresar
en ella era un homenaje a los muertos (pero a los soviéticos) en
la batalla de Stalingrado.
La acción Fiesta de la Cosecha puso término a la acción
Reinhardt, que tenía como objetivo el exterminio de los
judíos polacos. En dos días los nazis habían asesinado a unos
43.000 judíos. En total, se calcula que la acción Reinhardt
había acabado con la vida de al menos 1.7 millones de judíos y
varios centenares de miles de gitanos. Por otro lado, la
incautación de bienes a los judíos había proporcionado al Reich
una importante riqueza (entre plata, joyas y también ropa)
valorada en más de 178 millones de marcos. (En realidad, muchos
oficiales nazis se habían quedado con buena parte del botín
ocultándolo al gobierno. Varios de ellos serían incluso juzgados y
condenados por ello.) Los principales campos de exterminio que
habían participado en la operación (Bełżec, Sobibór y Treblinka)
serían desmantelados en breve.
La liquidación del campo de Szebnie seguía su curso. Ya habían
sido asesinados más de 1.000 prisioneros, y ahora el resto
organizaba una revuelta que fue rápidamente sofocada por las SS.
Finalmente se formó un gobierno en Albania con la aquiescencia
alemana. Su primer ministro fue Rexhep Mitrovica. En su
primer discurso ante la Asamblea Nacional afirmó que los cuatro
años y medio de dominación italiana habían llevado al país a la
anarquía. Los italianos habían destruido el ejército, la policía,
habían cambiado la bandera, alterado los saludos personales,
habían cambiado el nombre a las ciudades e incluso habían forzado
el cambio de algunos apellidos. Mitrovica se propuso reconstruir
el país, obtener reconocimiento internacional (cosa difícil,
teninendo en cuenta de quién era títere), llevar a cabo una
reforma agraria, y crear un ejército propio que garantizarla la
integridad nacional con sus fronteras étnicas (lo que
implicitamente suponía incorporar Kosovo a Albania).
Las tropas británicas que avanzaban por Italia entraron en Isernia.
Lanchas torpederas alemanas dañaron irreparablemente un petrolero
británico (British Progress) en el mar del Norte.
El 5 de noviembre el contralmirante Frederick
Sherman, al mando de los portaaviones Saratoga y Princeton,
lanzó sus 97 aviones disponibles contra Rabaul, sin dejar uno solo
de reserva para proteger siquiera sus barcos. Los pilotos tenían
instrucciones de dañar el máximo número de buques enemigos, más
que concentrarse en hundir alguno de ellos. De Vella Lavella
despegaron algunos aviones para encontrarse con los de los
portaaviones y proporcionar protección. Al bombardero que llevaron
a cabo los aviones de la marina, siguió otro una hora después por
parte de las Fuerzas Aéreas estadounidenses. Entre ambos dañaron
gravemente cinco de los siete cruceros que había en Rabaul.
Además, tres destructores sufrieron daños leves. Las pérdidas en
la aviación estadounidense fueron escasas, y la flota japonesa
dejó de ser una amenaza para Bougainville. De hecho, al día
siguiente la mayor parte de los barcos japoneses salió de Rabaul
para volver a Truk (en las islas Carolinas), ante el temor de
nuevos ataques aéreos.
En Tokio se inauguró la Conferencia de la Gran Asia Oriental,
en la que participaron el primer ministro japonés, Hideki Tōjō, el
primer ministro del Estado de Manchuria Zhang Jinghui, el
presidente del gobierno de Nankin (la parte de China ocupada por
Japón), Wang Jingwei, el Jefe de Estado de Birmania, Ba Maw, el
Jefe de Estado del Gobierno Provisional de la India Libre, Subhar
Chandra Bose, el presidente de la Segunda República Filipina (José
P. Laurel) y el príncipe Wan Waithayakon, enviado por el
reino de Tailandia. Tojo los recibió con un discurso en el que
alabó la "esencia espiritual" de Asia, frente a la "civilización
materialista" de Occidente.
Unos 2.800 judíos del campo concentración de Szebnie fueron
enviados en tren a Auschwitz, donde fueron asesinados. En los
alrededores de Stanisławów los alemanes lograron dar con el grupo
de guerrilleros de Anda Luft, que fue asesinada junto con su hija.
Un avión desconocido estuvo sobrevolando Roma y el Vaticano
durante un tiempo hasta que, cuando un escuadrón aliado pasó por
la zona, arrojó cuatro bombas y se marchó. Las bombas cayeron
sobre los jardines del Vaticano y causaron algunos daños
materiales, pero no pérdidas humanas. Británicos, estadounidenses
y alemanes negaron cualquier relación con el suceso. Las bombas
eran británicas, pero los británicos señalaron que eso no probaba
nada, pues podían proceder de material capturado en cualquier
parte. Las investigaciones más recientes apuntan a que el avión
era italiano y que el bombardeo fue ordenado desde Roma por
Roberto Farinacci, con la misión de destruir la emisora de radio
del Vaticano, pues Farinacci creía que se usaba para transmitir
información militar a los aliados.
Unos meses atrás, la RAF había bombardeado las fábricas
de Peugeot en Sochaux, donde se fabricaban
torretas para tanques y piezas de motor para la Wehrmacht,
y ello había causado la muerte de varios cientos de civiles
franceses. Para evitar que se repitiera algo así, un agente
británico, Harry Rée, se había puesto en contacto con Rudolph
Peugeot y le había preguntado si estaría dispuesto a
sabotear su propia fábrica. Para probarle que trabajaba para
Londres, Rée había anunciado a Peugeot que esa noche el servicio
de mensajes personales en francés de la BBC emitiría un mensaje
con unos versos de un poema que Rée citó. Al oír los versos en la
radio, Peugeot aceptó colaborar y proporcionó a Rée los planos de
su fábrica junto con los mejores lugares para situar explosivos
que inutilizaran las instalaciones sin riesgo para los
trabajadores. Esa noche se produjeron las explosiones y la
producción no se recuperó mientras duró la guerra. La familia
Michelin rechazó una oferta similar, y la RAF bombardeó su fábrica
en Clermont-Ferrand (la mayor proveedora de ruedas de la Wehrmacht)
dejándola completamente arrasada.
El embajador estadounidense en Madrid se entrevistó con el ministro Francisco Gómez-Jordana para expresarle su indignación por el mensaje de felicitación que había enviado al presidente filipino, y Gómez-Jordana llegó a ofrecerle su dimisión para apaciguar el conflicto.
La aviación estadounidense hundió un submarino alemán cerca de la isla Ascensión. Otro submarino alemán hundió un carguero británico (Beatrice Beck) cerca de la Martinica.
Lon Chaney Jr. protagonizó El hijo de Drácula, la primera
película en la que se ve a un murciélago convertirse en
hombre-vampiro. Además, Chaney se convirtió en el único actor que
ha interpretado los cuatro personajes más famosos de las películas
de terror: El hombre lobo, el monstruo de Frankenstein, la momia y
el conde Drácula.
La Conferencia de la Gran Asia Oriental terminó el 6 de noviembre sin que se hubiera tratado
ningún asunto de gran trascendencia. Los asistentes hicieron una
declaración conjunta en estos términos:
El principio básico para el establecimiento de la paz mundial es que cada nación del mundo tenga su espacio propio, y disfrute de prosperidad a través de la ayuda y asistencia mutua.
Los Estados Unidos de América y el Imperio Británico, en la búsqueda de su propia prosperidad, han oprimido otras naciones y pueblos. Especialmente en Asia Oriental, se han valido de una agresión insaciable y de la explotación, y han tratado de satisfacer su desmesurada ambición de esclavizar la región entera, y finalmente han terminado amenazando seriamente la estabilidad de Asia Oriental. Aquí reside la causa de la guerra actual. Los países de la Gran Asia Oriental, en su intención de contribuir a la causa de la paz mundial, se proponen cooperar en la continuación de la guerra de la Gran Asia Oriental hasta una conclusión exitosa, liberando la región del yugo de la dominación británico-estadounidense, y asegurando su autoexistencia y su autodefensa, así como construyendo una Gran Asia Oriental de acuerdo con los principios siguientes:
- Los países de la Gran Asia Oriental asegurarán a través de la cooperación mutual la estabilidad de su región y construirán un orden de prosperidad conjunta y bienestar basado en la justicia.
- Los países de la Gran Asia Oriental asegurarán la fraternidad de las naciones de su región respetando la soberanía y la independencia ajena y practicando la asistencia mutua y la amistad.
- Los países de la Gran Asia Oriental desarrollarán la cultura y la civiliación de la Gran Asia Oriental respetando las tradiciones ajenas y desarrollando las falcultades creativas de cada raza.
- Los países de la Gran Asia Oriental se esforzarán por acelerar su desarrollo económico a través de una estrecha cooperación sobre la base de la reciprocidad y por promover la prosperidad general en su región.
- Los países de la Gran Asia Central cultivarán relaciones amistosas con todos los países del mundo, y trabajarán para la abolición de la discriminación racial, la promoción de los intercambios culturales y la difusión de los recursos a lo largo del mundo, y contribuirán así al progreso de la humanidad.
Estas hermosas palabras no encajaban muy bien con los 670.000
coreanos y 41.000 chinos que los japoneses emplearon como esclavos
durante la guerra, y que eran tratados según el proverbio: ikasazu
korasazu (no les dejes vivir, no les dejes morir), o con los
más de 8 millones de chinos que murieron a manos de los japoneses,
o con las 300.000 jóvenes, principalmente coreanas, empleadas por
los japoneses como prostitutas forzosas, o con la costumbre de los
marineros japoneses de parar a cualquiera por la calle de las
ciudades en que desembarcaban y abofetearlo como expresión de la
superioridad de la raza Yamato, etc.
El propio Ba Maw, firmante de la declaración, afirmaría poco más
tarde:
Los militaristas veían todo sólo desde el punto de vista japonés y, aún peor, insistían en que todos los demás que trabajasen con ellos deberán hacerlo del mismo modo. Para estos militaristas sólo había un método de hacer las cosas, el japonés; una sola meta e interés, la japonesa; y un sólo destino para los países asiáticos orientales, hacerse tales como Manchukuo o Corea, países atados a Japón. Esas imposiciones raciales hacían virtualmente imposible cualqueir entendimiento real entre los militaristas japoneses y el pueblo de nuestra región.
Los japoneses llevaban ya tiempo desarrollando una campaña
publicitaria sobre la Esfera de coprosperidad de la Gran Asia
Oriental, lanzando octavillas multilingües en las que se veían
dibujos de asiáticos marchando juntos y alegres, o mapas de la
parte de la Tierra y planetas vecinos que estaría incluida en la
Esfera cuando terminara a guerra, distribuyendo documentales que
mostraban lo felices que eran los asiáticos en los territorios
bajo influencia japonesa, etc.
El Ejército Rojo entró en Kiev, la capital ucraniana, que había
sido abandonada por los alemanes.
La RAF hundió un carguero italiano (Esterina) ante
la costa yugoslava.
La aviación alemana hundió un destructor (USS Beatty) y un
transporte (Santa Elena) estadounidense, así como un
barco de pasajeros nerlandés (Marnix van St.Aldegonde) ante
la costa de Argelia.
Los soviéticos tomaron Fastiv, cerca de Kiev.
La aviación alemana inició una serie de intensos bombardeos sobre
la isla de Leros, con un total de 40 ataques en cinco días
llevados a cabo por 187 aviones.
El 8 de noviembre una andanada de
artillería de 20 minutos sobre las posiciones japonesas junto a la
laguna de Koromokina prececió a un ataque de la infantería
estadounidense apoyado por tanques ligeros. Se contaron unos 250
cadáveres japoneses en la zona, pero un número indeterminado de
japoneses se había adentrado en la selva y se les había perdido el
rastro. Mientras tanto los japoneses volvían a atacar desde Piva,
pero fueron rechazados de nuevo, con ayuda de tanques.
Submarinos estadounidenses hundieron un carguero y un petrolero
japonés (Kyokuei Maru y Tango Maru) en el Pacífico.
Radio Moscú informó de la toma de Kiev por el Ejército Rojo. Dijo
que en la ciudad sólo se había encontrado un judío, cuando antes
de la guerra había unos 140.000 judíos en la capital ucraniana.
El parlamento del Líbano aprobó por unanimidad el fin del mandato
francés sobre el país que había aprobado la Sociedad de Naciones
hacía ya más de veinte años. El presidente Bechara El Khoury firmó
la resolución.
El 9 de noviembre bombarderos
estadounidenses atacaron en las zonas de Bougainville donde
pensaban que podrían quedar algunos soldados de los que habían
desembarcado junto a la laguna Koromokina. Luego algunas patrullas
encontraron un gran número de cadáveres. No se detectó más
actividad japonesa en la zona. Al menos 377 japoneses habían
resultado muertos, frente a 17 estadounidenses muertos y 30
heridos. Mientras tanto, las tropas estadounidenses atacaron
también las posiciones japonesas alrededor Piva, que tuvieron que,
tras una enérgica resistencia, tuvieron que refugiarse en la
ciudad.
Un destructor estadounidense que transportaba tropas a
Bougainville divisó un bote salvavidas en el mar. Al acercarse a
él, vieron siete soldados japoneses tendidos que, de repente, se
levantaron y empezaron a hablar entre ellos. Luego uno —al parecer
un oficial— sacó una ametralladora y los soldados se turnaron para
ponérsela en la boca para dejar que el oficial les volara la
cabeza. Luego el oficial se puso en pie de cara al destructor,
pronunció un breve discurso que los estadounidenses no entendieron
y se disparó a sí mismo.
Un submarino estadounidense hundió un transporte japonés (Taga
Maru) cerca de Formosa.
De Gaulle renovó el Consejo Francés de Liberación Nacional del
que pasó a ser el único presidente y del que excluyó a Giraud y a
los pocos seguidores que le quedaban. Giraud seguía siendo el
comandante en jefe del ejército francés, pero ahora supeditado a
de Gaulle.
En Italia los aliados llegaron hasta el río Sangro, es decir,
hasta la línea Gustav.
La aviación británica hundió un submarino alemán cerca de las
islas Azores.
El 10 de noviembre, tras una
intervención de la aviación, los estadounidenses marcharon sobre
Piva, sin encontrar más resistencia que los cadáveres que
obstaculizaban el paso. A las 13:00 entraban en la ciudad. Se
calcula que los japoneses habían perdido unos 550 hombres en los
dos últimos días, frente a 20 marines estadounidenses muertos y 57
heridos.
Sukarno y Mohammad Hatta, los líderes nacionalistas de Sumatra,
visitaron Japón, donde fueron condecorados por el emperador
Hirohito y recibidos por el primer ministro Hideki Tojo.
Submarinos estadounidenses hundieron un carguero y un transporte
japonés (Kisogawa Maru y Tokio Maru) en el
Pacífico. Un submarino japonés hundió un carguero británico (Sambo)
en la entrada al mar Rojo.
Los cuatro clérigos y 18 laicos que habían sido arrestados en
Lübeck por sostener que Dios castigaba a los alemanes habían sido
juzgados. Los clérigos, el luterano Karl Friedrich Stellbrink y
los católicos Johannes Prassek, Eduard Müller y Hermann
Lange, fueron condenados a muerte por traición, infiltración
en el ejército, favoritismo hacia el enemigo y escucha de radios
enemigas. Los laicos (principalmente católicos) fueron condenados
a largas penas de cárcel. El obispo responsable de los tres
sacerdotes católicos los había visitado en la cárcel y había
presentado una petición de clemencia que había sido denegada. En
cambio, el pastor Stellbrink no recibió ningún apoyo de su
Iglesia, sino que, por el contrario, fue repudiado de su orden a
causa de la condena. Ese día los cuatro fueron guillotinados en
Hamburgo.
La aviación estadounidense hundió un submarino alemán cerca de la
costa atlántica española.
El 11 de noviembre submarinos
estadounidenses hundieron dos cargueros y un barco de pasajeros
japonés (Kanamayasai Maru, Kunitama Maru y Kosei Maru)
en el Pacífico. Un submarino japonés hundió un antiguo carguero
estadounidense, reconvertido en transporte (Cape San Juan).
Por otra parte, ese día los aviones de tres portaaviones
estadounidenses atacaron de nuevo Rabaul, donde el crucero Agano
resultó gravemente dañado y el destructor Suzunami resultó
hundido. En él murieron 148 de sus tripulantes. La aviación
japonesa trató de atacar los portaaviones, pero fue interceptada y
perdió 35 aviones sin causar daño alguno.
El 11 de noviembre se clausuró la
conferencia de Moscú.
En su avance por Ucrania, los soviéticos tomaron Radomsky.
En Crimea los soviéticos habían desembarcado ya 27.700 hombres en
la cabeza de playa de Yenikale.
Ante la "abolición" del mandato francés aprobado unos días antes,
agentes de la Sureté francesa en el Líbano llevaron a cabo
una redada a primeras horas de la mañana, arrestaron al presidente
El Khoury, a su primer ministro y a todos los miembros del
gobierno menos dos de ellos. El Alto Comisionado francés anunció
por radio que la constitución libanesa quedaba en suspenso, que el
parlamento quedaba disuelto y que, a partir de ese momento, el
presidente pasaba a ser Émile Eddé. Inmediatamente
estallaron revueltas por todo el país.
En su avance por Ucrania, los soviéticos tomaron Radomyshi.
Un destructor británico hundió un carguero alemán (Trapani)
cerca de la isla griega de Cos. La aviación alemana hundió dos
cargueros británicos (Birchbank y Indian Prince) y otro
belga (Carlier) de un convoy cerca de Orán, así como un
destructor británico (HMS Rockwood).
Ese día era el vigesimoquinto aniversario del final de la Primera
Guerra Mundial. Un grupo de maquis dirigidos por Henri
Romans-Petit entró en la ciudad francesa de Oyonnax
desfilando con uniformes improvisados y llevando una corona de
flores con la forma de la Cruz de Lorena que depositaron ante un
memorial de la guerra en la que se leía: Los vencedores de
mañana a los de 14-18. No había soldados alemanes en la
ciudad, y la gendarmería no hizo nada para oponerse al festejo. La
gente se unió a los maquis cantando la Marsellesa. La emisión
francesa de la BBC dedicó mucho tiempo a difundir cómo una ciudad
francesa había sido "liberada por un día".
Ese día se estrenó Sahara, una película bélica ambientada
en la caída de Tobruk ante las fuerzas de Rommel, cuyo papel
protagonista había sido rechazado sucesivamente por Gary Cooper y
varios actores más, hasta que finalmente lo aceptó Humphrey
Bogart. Las críticas fueron buenas (tanto para la película en
general como para la interpretación de Bogart en particular). Kurt
Kreuger, un actor alemán que interpretaba el papel de un
oficial nazi, contó que durante el rodaje de una escena, otro
actor saltó sobre él mientras huía por el desierto y aplastó su
cara contra la arena para ahogarlo, y que todo el equipo se quedó
tan embobado contemplando la dramática escena que él llegó a
perder el conocimiento y, si el director hubiera tardado un poco
más en gritar "¡corten!", no lo habría contado.
Bogart había estrenado ese año otra película bélica, Acción
en el Atlántico Norte, cuya acción transcurre en un
petrolero atacado por submarinos alemanes. El industrial
estadounidense Henry John Kaiser, cuyas técnicas de
producción le permitían construir un barco en 30 días, si bien
había saltado a la fama cuando logró construir uno en cuatro días,
quedó tan encantado con la película que se propuso que todos sus
empleados la viesen. También fue usada por las escuelas de Marina
Mercante para ser usada como parte del adiestramiento de los
marineros.
También se estrenó ese día El retorno del vampiro,
protagonizada por Bela Lugosi.
El 12 de noviembre un submarino
estadounidense hundió un transporte japonés (Muko Maru)
cerca de Truk. Los estadounidenses consideraron que las Islas del
Tesoro estaban ya limpias de japoneses, si bien unos meses más
tarde se divisarían todavía algunas posiciones aisladas en la
selva.
Un submarino soviético hundió un carguero alemán (Theodoric)
en la costa ucraniana.
A las 4:30 tropas alemanas empezaron a desembarcar en la isla de
Leros. Algunos barcos británicos e italianos habían detectado la
flota que las transportaba, pero problemas de comunicación y la
duda de si eran refuerzos británicos hizo que no hubiera respuesta
hasta el amanecer, cuando se vio finalmente que la isla estaba
siendo invadida. Aunque las fuerzas británicas e italianas en la
isla pudieron rechazar a los alemanes en varios puntos, finalmente
éstos lograron consolidar algunas cabezas de playa. A las 13:27
unos 600 paracaidistas alemanes fueron lanzados sobre la isla. La
mitad de ellos murieron durante el descenso, pero el resto atacó
con éxito las baterías cercanas y contribuyeron a consolidar la
posición alemana.
Los aliados bombardearon por primera vez la ciudad italiana de
Arezzo.
La aviación estadounidense hundió un submarino alemán en el
Atlántico.
Por primera vez, Stalin había accedido a reunirse con los jefes
de gobierno aliados fuera de la Unión Soviética, en Teherán,
concretamente. El presidente Roosevelt iba a trasladarse en el
acorazado Iowa, escoltado por tres destructores y dos
miniportaaviones. Uno de los destructores de la escolta era el William
S. Porter, bajo el mando del teniente Wilfred Walter.
El barco llevaba en servicio poco más de un año y ésta era su
primera misión. Ahora recibía la orden de trasladarse hasta la
desembocadura del río Potomac, en Chesapeake, a la espera de la
llegada del Iowa. Cuando zarpó, se oyó un sonido de maderas
resquebrajándose, y cuando Walter y sus oficiales corrieron a ver
qué pasaba, se encontraron con que el ancla del destructor se
había enganchado a un mercante y le había destrozado un lateral.
Ésta sería la metedura de pata más leve que iba a tener durante el
desempeño de su misión.
El 13 de noviembre submarinos
estadounidenses hundieron dos cargueros y un petrolero japonés (Nachisan
Maru, Nikkai Maru y Shireteko Maru) en el Pacífico.
Un submarino británico hundió otro japonés cerca de Malasia.
En el avance estadounidense en Bougainville, una patrulla recibió
órdenes de establecer un puesto avanzado, pero se acercó a una
zona conocida como "el palmeral", donde los japoneses
habían camuflado muchos morteros y ametralladoras. De repente los
estadounidenses se encontraron bajo fuego enemigo y solicitaron
refuerzos. A los estadounidenses les costó localizar las
posiciones precisas de donde procedía el fuego enemigo y luego
llevar a cabo las maniobras necesarias por la selva para conectar
adecuadamente las distintas unidades disponibles y organizar un
ataque. Durante la noche los japoneses dispararon esporádicamente,
pero no trataron de asaltar las posiciones estadounidenses.
El ejército soviético llegó a Zhytomyr, en Ucrania.
Una nueva oleada de paracaidistas alemanes cayó sobre Leros y más baterías italianas pasaron a manos alemanas. El contralmirante Marcherpa pidió refuerzos y apoyo aéreo, pero en vano. La aviación alemana hundió un destructor británico (HMS Dulverton) junto a Leros.
Un submarino alemán hundió un carguero panameño (Pompoon)
junto a la costa de Colombia.
El presidente Roosevelt embarcó en el Iowa y su flota inició su
viaje con destino a Egipto. Allí se reuniría con Churchill y
Chiang Kai-shek antes de marchar a Teherán para reunirse con
Stalin. A su paso por la zona del Atlántico conocida como el mar
de los Sargazos, se oyó una gran explosión que generó una
gran columna de agua. Los barcos tocaron a zafarrancho de combate
e iniciaron las maniobras evasivas pertinentes ante un ataque
submarino. Sin embargo, el William S. Porter comunicó que
no había sido ningún submarino alemán, sino que se le había
soltado una carga de profundidad que no llevaba puesto el seguro
reglamentario.
Más tarde, durante una tormenta, una ola se llevó por la borda a
un marinero del Willie Dee, como ya era conocido
familiarmente el William S. Porter, que ya estaba dando
lugar a todo tipo de murmuraciones entre los demás barcos de la
flota. Pasada la tormenta, un fallo en sus máquinas obligó a toda
la formación a disminuir su velocidad. El almirante Ernest
Joseph King, al mando de la misión, llamó al Iowa al capitán
Walter para reprocharle las continuas negligencias de su buque.
Ese día se estrenó Persecución en el norte, dirigida por
Raoul Walsh y protagonizada por Errol Flynn, que interpreta a un
miembro de la Policía Montada del Canadá que trata de descubrir un
complot nazi. Tuvo un éxito moderado.
Frank Capra estrenó la quinta entrega de documentales de la serie
¿Por qué luchamos? En total, ese año había estrenado El
ataque de los nazis (Sobre la invasión alemana a Austria,
Checoslovaquia y Polonia), Divide y conquistarás (sobre la
conquista de los Países Bajos y Francia), La batalla de Gran
Bretaña (donde describe la victoria británica sobre la
Luftwaffe) y La batalla de Rusia. Todos ellos se
tradujeron al francés, al español, al portugués y al chino.
Churchill ordenó que se exhibieran en todos los cines británicos.
El 14 de noviembre un submarino
estadounidense hundió un petrolero japonés (Kozui Maru) en
el mar de la China Oriental.
En "el palmeral", en la isla de Bougainville, la
artillería estadounidense lanzó bombas de humo sobre las
posiciones japonesas para señalar su ubicación a la aviación, que
empezó a bombardear y ametrallar la zona. Luego, tras un bombardeo
preparatorio de 20 minutos por parte de la artillería, atacó la
infantería apoyada por tanques. El ataque se desorganizó, pero
cuando el teniente al mando ordenó un alto el fuego para
reorganizarlo, se vio que los japoneses ya no disparaban. Varias
patrullas confirmaron que los japoneses se habían marchado. En la
zona los estadounidenses encontraron más de 40 cadáveres
japoneses, aunque tampoco buscaron mucho. Las bajas
estadounidenses fueron de 20 muertos y 39 heridos.
Los chinos seguían defendiendo Changde del ataque japonés. Ese
día los japoneses lograron flanquear las defensas chinas y se
acercaron a la ciudad.
Por la noche los británicos, ayudados por los italianos, lograron
retomar a los alemanes varias baterías en la isla de Leros, pero
la zona firmemente ocupada por los alemanes era ya amplia y poco
después atacaban la ciudad de Leros. Al mismo tiempo, refuerzos
británicos desembarcaban en la isla procedentes de Samos. Con la
ayuda de dos destructores, los británicos tomaron una batería
costera e hicieron unos 230 prisioneros.
Sofía, la capital búlgara fue bombardeada por primera vez desde
hacía más de dos años. Un total de 91 bombarderos aliados
destruyeron 47 edificios y otras estructuras, dejando 59 muertos y
unos 128 heridos.
En Verona tuvo lugar la primera reunión del Partido Fascista
Republicano. Mussolini no estuvo presente, sino que envió una
carta que fue leída en la ceremonia de apertura. Los delegados
publicaron el llamado manifiesto de Verona, un curioso
documento que devolvía en parte al fascismo a la ideología de
extrema izquierda que era en sus orígenes, pero combinada con unos
sorprendentes arrebatos democráticos y garantistas de derechos y
libertades incompatibles en la práctica con cualquier ideología de
extrema izquierda o extrema derecha. Por otro lado, los fascistas
incorporaban por primera vez el antisemitismo a sus principios
fundamentales y se reafirmaban en su irredentismo y en la
necesidad de un imperio colonial para Italia, aunque con
restricciones. Merece la pena leerlo.
En realidad, los fascistas sabían que la Repúbica Social Italiana
no tenía poder decisivo alguno y que daba igual lo que decidieran,
que iba a ser papel mojado, así que mejor decir cosas que gustaran
a cuantos más mejor.
Giraud presentó una carta de dimisión ante de Gaulle de su cargo
de comandante en jefe del Ejército de la Francia Libre. Sin
embargo, de Gaulle le envió un emisario para convencerlo de que se
mantuviera en el puesto, y Giraud accedió. De Gaulle había hecho
todo lo necesario para apartar a Giraud del poder político, pero
consideraba que su dimisión causaría mala impresión, e incluso
podría crear de nuevo una división entre los partidarios de uno y
otro.
Cuando la flota que transportaba al presidente Roosevelt navegaba
al este de las Bermudas, el almirante King ofreció a su pasajero y
sus acompañantes una demostración de las defensas antiaéreas del Iowa.
Unos globos meteorológicos fueron lanzados para servir de blancos
y la artillería del acorazado disparó contra ellos. Algunos globos
no fueron alcanzados y el viento los empujó hacia el William
D. Porter. El capitán Walter, deseoso de mejorar su imagen,
ordenó un zafarrancho de combate contra los globos y, para
completar el espectáculo, añadió un simulacro de lanzamiento de
torpedos. "Simulacro" quería decir en la práctica que había que
retirar las cargas explosivas que lanzaban los torpedos, de modo
que éstos no salían de los tubos. Como blanco para el simulacro se
usó el Iowa, que era el barco más grande y más cercano.
Tras el falso lanzamiento de dos torpedos, cuando el capitán
Walter ordenó el lanzamiento del tercero, se oyó un chapoteo que
dejó helados a todos. Habían lanzado realmente un torpedo contra
el barco que transportaba al presidente Roosevelt. El torpedo
impactaría en un par de minutos, por lo que había que avisar al Iowa
con urgencia, y aun así no lo tendría fácil para maniobrar y
esquivarlo. Como se había ordenado silencio de radio, el mensaje
fue enviado en morse por el telégrafo marino, pero el
telegrafista, entre su inexperiencia y sus nervios, en lugar de
decir que un torpedo se acercaba al Iowa, dijo que se
alejaba del Iowa. Luego, en lugar de avisar al Iowa
de que ordenara "atrás a toda máquina", lo que dijo
realmente fue que el William D.Porter se había atascado en
marcha atrás a toda máquina para perplejidad del telegrafista del
Iowa. Sin tiempo para más intentos, Walter rompió el
silencio de radio y avisó de lo que sucedía. Para entonces, los
vigías del Iowa ya habían detectado el torpedo por ellos
mismos y habían dado la alarma. El acorazado maniobró con rapidez
y logró esquivar el torpedo, pero el giro fue tan brusco que la
silla de ruedas del presidente se deslizó por la cubierta y estuvo
a punto de caer al mar.
Los marineros del Willie Dee respiraron aliviados, pero
entonces vieron que las torretas del Iowa giraban para apuntar a
su barco. El almirante King pedía explicaciones por radio, y
Walter no supo decir más que un "Hemos sido nosotros".
Furioso, King ordenó al William D. Porter que abandonara
la formación y que regresara a la base militar de las Bermudas,
donde toda la tripulación, incluido el capitán fueron arrestados a
su llegada. Más tarde serían sometidos a un consejo de guerra. En
la investigación se concluyó que el torpedero jefe Lawton
Dawson, de 22 años, no había quitado el detonador del
torpedo por error, y fue condenado a 14 años de trabajos forzados.
No obstante, Roosevelt le otorgó un perdón presidencial y ordenó a
la Marina que no se le impusiera ningún castigo. No obstante, el Willie
Dee se convirtió en el hazmerreír de la flota
estadounidense. Cuando se acercaba a otro barco no faltaba el
gracioso que gritaba ¡No disparen, somos del partido
republicano!, o pullas similares.
El director y pianista Bruno Walter debía dar un
concierto al frente de la Orquesta Filarmónica de Nueva York, pero
la gripe se lo impidió y un joven de 25 años contratado como
ayudante de dirección recibió en encargo de sustituirlo el mismo
día, sin posibilidad de ensayar previamente con la orquesta. Tan
sólo pudo hablar brevemente con Walter un poco antes del concierto
para que le indicara las dificultades principales del programa. El
concierto fue retransmitido por radio, y cuando al día siguiente
el New York Times contó la historia de la dirección
improvisada, el joven Leonard Bernstein se convirtió en
una estrella de la música clásica y no paró de recibir
invitaciones para aparecer como director invitado de muchas
orquestas estadounidenses.
El 15 de noviembre un submarino
estadounidense hundió un carguero japonés (Kyokko Maru) en
el mar del Sur de China.
Esa noche desembarcaron unos 1.000 soldados alemanes más en la
isla de Leros, equipados con artillería. También desembarcaron
algunas tropas británicas, pero la situación era cada vez más
desesperada para los defensores. La ciudad de Leros las fuerzas
italianas resistían únicamente en una ciudadela. Los británicos
habían decidido abandonarla, pero los italianos insistieron en
defenderla.
Los estadounidenses estaban teniendo problemas en su ataque a la
línea
Bernhardt, así que la operación fue cancelada temporalmente.
El 16 de noviembre la aviación
estadounidense hundió un transporte (Kyoritsu Maru) cerca
de Nueva bretaña y un carguero japonés (Tetsuwa Maru) en
Cantón. Un submarino japonés hundió otro estadounidense cerca de
Truk.
Una central hidroeléctrica en Vemork (Noruega), donde los
alemanes estaban sintetizando agua pesada, fue atacada por 160
bombarderos estadounidenses. También fue atacada una refinería de
molibdeno en Knaben.
A las 12:30 el contralmirante Mascherpa recibió una oferta
alemana para que rindiera las fuerzas italianas en Leros, pero la
rechazó. A las 17:30, con los alemanes a las puertas de su cuartel
general, los británicos se rindieron y a las 22:00 lo hizo
Mascherpa, tras haber recibido varias ofertas más por parte de los
alemanes y el consejo de aceptarlas por parte de los británicos.
Unos 3.200 británicos y 5.500 italianos fueron hechos prisioneros.
Algunos oficiales italianos fueron fusilados tras su rendición. No
obstante, las bajas alemanas habían sido cuantiosas: 4.800 hombres
y 160 aviones.
El mayor Axel von dem Bussche medía unos dos metros de
alto y era rubio y de ojos azules. Era el prototipo de varón de
raza aria, así que había sido elegido para servir de modelo ese
día en la presentación ante Hitler, Himmler y Göring de un nuevo
modelo de uniforme de invierno más adecuado para el frente
oriental. Alentado por el coronel
Claus Schenk Graf von Stauffenberg, von dem Bussche se
había ofrecido a llevar una mina en la mochila del uniforme y
hacerla estallar cuando estuviera ante Hitler. Stauffenberg y
otros miembros de la resistencia contra el nazismo habían
desarrollado un plan detallado para ocupar Berlín y varios
cuarteles en Prusia en cuanto se anunciara la muerte del Führer.
Sin embargo, la noche anterior, un bombardeo aliado había
destruido el tren que transportaba los uniformes y la presentación
fue pospuesta.
La aviación británica hundió un submarino alemán cerca de
Islandia. Ese día el almirante Karl Dönitz ordenó a todos los
submarinos en el Atlántico occidental que regresaran a sus bases
por sus escasos éxitos y sus numerosas pérdidas.
El 17 de noviembre la aviación
japonesa hundió un transporte estadounidense (USS McKean)
cerca de la isla de Bougainville. Sin embargo, los japoneses
habían perdido tantos aviones en sus ataques a la cabeza de playa
estadounidense, que ese día la división de portaaviones que se
encargaba de ellos recibió la orden de retirarse a Truk. Un
submarino estadounidense hundió un buque nodriza de submarinos
japoneses (Hie Maru) cerca de Truk.
En Nueva Guinea los australianos iniciaron un gran ataque contra
Sattelberg con un intenso bombardeo por parte de la artillería.
Los japoneses se sorprendieron al encontrarse con tanques
australianos, pues el ruido de la artillería había ocultado
llegada. Muchos soldados huyeron de sus posiciones al ver cómo los
tanques se acercaban a ellos. Sin embargo a lo largo del día se
recuperaron de la sorpresa y lograron inutilizar algunos tanques
con explosivos improvisados. El avance australiano se ralentizó.
Los japoneses resistieron tenazmente en lo que los australianos
llamaban la montaña de los cocoteros. A lo largo del día
soportaron una serie de ataques laterales que les costaron más de
80 muertos frente a 6 muertos y 26 heridos australianos. No
obstante, por la noche abandonaron el lugar.
Ese día se estrenó 10 negritos, una obra de teatro basada
en la novela del mismo título de Agatha Christie.
El presidente colombiano, Alfonso López Pumarejo, se había visto
envuelto en una serie de escándalos que señalaban que su hijo se
habría enriquecido gracias a ciertas operaciones bursátiles que
habían sido posibles gracias a ciertos decretos gubernamentales
oportunos. Con la excusa de acompañar a su esposa, enferma de
cáncer, para un tratamiento en los Estados Unidos, López Pumarejo
cedió el poder interinamente a Darío Echandía.
El 18 de noviembre submarinos
estadounidenses hundieron un destructor (Sanae) y un
petrolero japonés (Ondo) en el Pacífico.
En Nueva Guinea los australianos pudieron continuar su avance
sobre Sattelberg con más tanques de refuerzo al constatar que los
japoneses habían abandonado la montaña de los cocoteros. Pero
apenas habían logrado avanzar poco más de 200 metros cuando fueron
detenidos por un nuevo contingente de japoneses armado con cañones
antitanque. Varios de ellos acabaron siendo destruidos y los
japoneses tuvieron más de 40 muertos, pero francotiradores
japoneses provocaron varios heridos entre los australianos, aunque
ninguno mortal. Al anochecer los australianos se habían
atrincherado a unos 30 metros de las líneas defensivas japonesas.
Los japoneses pasaron la noche cavando trincheras antitanque.
Un submarino japonés hundió un carguero británico (Sambridge)
a la entrada del mar Rojo.
Los alemanes lograron expulsar a los soviéticos de Zhytomyr.
Los alemanes ocuparon las islas de Patmos, Fournoi e Icaria, en
el Dodecaneso.
Un submarino alemán embistió a otro accidentalmente en el mar
Báltico y lo hundió. Murieron 43 de sus 50 tripulantes.
Esa noche 440 aviones de la RAF bombardearon Berlín,
mientras otros 395 aviones realizaban ataques de diversión sobre
Mannheim y Ludwigshafen, y algunos "mosquitos"
sembraban la alarma en muchas otras ciudades. En la capital
alemana hubo unos 140 muertos, 400 heridos y más de 7.000 personas
se quedaron sin hogar. Más de 500 casas fueron destruidas y unas
8.500 resultaron dañadas. Por su parte, la RAF perdió 9
aviones y 53 aviadores.
Unos 1.000 prisioneros llegaron de Mauthausen al nuevo campo de
concentración de Ebensee, en Austria, que fueron empleados
para excavar túneles en una montaña, donde instalar fábricas de
armamento a salvo de bombardeos aliados. Pronto se convertiría en
el campo de trabajo con mayor índice de mortalidad, que llegó a
triplicar al de otros campos.
Un submarino alemán hundió un carguero británico (Empire
Dunstan) cerca de Tarento.
El 19 de noviembre un submarino
estadounidense hundió tres cargueros de un convoy japonés en el
Pacífico (Hokko Maru, Nekko Maru y Udo Maru). La
aviación estadounidense hundió otro (Daigen Maru) en
Cantón. Por otra parte, un destructor japonés dañó el submarino (USS
Sculpin) al norte de Nueva Guinea y tuvo que ser hundido.
El día anterior los estadounidenses habían detectado que los
japoneses habían bloqueado el camino de Numa-Numa a menos
de un kilómetro del perímetro de la cabeza de playa en
Bougainville. Ahora lanzaban un ataque apoyado por tanques ligeros
que expulsó a los japoneses de sus posiciones, los cuales dejaron
al menos 16 muertos en su retirada. Los estadounidenses se
prepararon para un posible contraataque.
En Nueva Guinea el avance hacia Sattelberg fue entorpecido por
las trincheras antitanque y otras defensas japonesas, pero a pesar
de ello prosiguió, llegándose incluso al combate cuerpo a cuerpo
en algunos momentos. Al anochecer los japoneses trataron de lanzar
un contraataque, pero fue rechazado con muchas bajas: 46 japoneses
muertos frente a 20 muertos y heridos australianos.
El campo de concentración de Janowska, cerca de Lwów, en
Ucrania, era un campo de tránsito, en el que los prisioneros eran
clasificados entre aptos y no aptos para el trabajo. Esa noche dos
grupos de prisioneros atacaron a los guardias en dos zonas del
campo, se hicieron con sus ametralladoras y dirigieron un escape
masivo. Sólo unos pocos lograron escapar. Los demás fueron
capturados y ejecutados.
Un submarino británico dañó un carguero alemán (Giovanni
Bocaccio) en el Egeo, que tuvo que embarrancar para evitar
su hundimiento.
La RAF bombardeó Leverkusen y otras ciudades de
alrededor.
La aviación estadounidense hundió un submarino alemán en el
Atlántico, cerca de las islas Azores.
Los planes de MacArthur para recuperar las Filipinas pasaban por ocupar las islas Marianas para instalar aeropuertos que proporcionaran el apoyo aéreo necesario para un desembarco. A su vez, para desembarcar en las islas Marianas, que estaban fuertemente defendidas, era necesario ocupar previamente las islas Marshall, que estaban suficientemente cerca de Hawai para que Pearl Harbor sirviera de base para un desembarco. Sin embargo, entre Hawai y las islas Marshall se encontraban las islas Gilbert, donde los japoneses tenían una base aérea, concretamente en la isla de Betio. Así, pues, éste era el primer paso requerido en la cadena de "saltos" de isla en isla que llevaría a la expulsión de los japoneses de las Filipinas. Para ello los estadounidenses habían reunido una flota como nunca se había visto otra en el pacífico: 17 portaaviones, 12 acorazados, 8 cruceros pesados, 4 cruceros ligeros, 66 destructores y 36 barcos de transporte ocupados por unos 35.000 marines. Al mismo tiempo, otra flota formada por 3 portaaviones, 4 acorazados y 16 destructores que transportaban casi 6.500 marines llegó a la isla de Makin.
Cuando la flota se acercó a Betio el 20 de
noviembre, las baterías costeras abrieron fuego, pero dos
acorazados respondieron y no tardaron en neutralizar varios de los
cañones enemigos. Una bomba impactó contra el almacén de
municiones de uno de ellos y estalló creando una gran bola de
fuego. Luego fue la aviación estadounidense la que atacó la isla y
a las 6:10 fueron los barcos los que la bombardearon durante tres
horas. Mientras tanto, dos dragaminas escoltados por destructores
despejaron la zona donde estaba previsto el desembarco.
La isla de Makin estaba menos defendida y a las 8:30 se inició el
desembarco en dos de sus playas. En una de ellas todo transcurrió
sin incidentes, pero en la otra los estadounidenses se encontraron
con que las lanchas blindadas de desembarco encallaban, lo que les
obligaba a abandonarlas y caminar con el agua hasta la cintura los
últimos 250 metros, lo que supuso la pérdida de buena parte del
equipo. Pese a todo, sólo tres hombres murieron en el desembarco,
porque los japoneses habían establecido su primera línea de
defensa lejos de la playa.
Los estadounidenses atribuyeron el problema a un error de cálculo
en la profundidad de la playa, pero en realidad la causa era otra:
ese día el sol y la luna formaban un ángulo de 90 grados, y en
esas condiciones la marea alta es mucho más baja de lo habitual.
Esto fue desastroso para el desembarco en Betio, que se inició a
las 9:00 en tres playas diferentes. Los marines habían calculado
que, con la marea alta, los arrecifes de coral quedaban a metro y
medio de profundidad, espacio suficiente para las lanchas
blindadas, a las que les bastaba poco más de un metro. Sin
embargo, ese día los arrecifes estaban a menos de un metro, por lo
que las tres primeras oleadas de lanchas quedaron atascadas. Sólo
los vehículos anfibios, dotados de orugas, pudieron rebasarlo,
pero no estaban blindados y muchos de ellos fueron inutilizados
por el fuego enemigo. Los marines tuvieron que llegar a tierra
caminando por el agua en condiciones precarias. No obstante, los
que iban llegando a tierra pudieron organizarse para ir expulsando
a los japoneses de sus posiciones en la playa. El desembarco de
los tanques también fue muy problemático, y varios se hundieron o
fueron inutilizados en el intento.
La ventaja principal de los estadounidenses fue que el bombardeo
previo había destruido las líneas de comunicación japonesas, por
lo que las distintas unidades actuaban independientemente, sin
ninguna clase de coordinación. Al mediodía los estadounidenses
habían logrado destruir la primera línea de defensa japonesa, pero
su posición en las playa era precaria. A las 15:30 el frente había
avanzado tierra adentro en algunas zonas, pero en otras seguía
estando a la altura de la primera línea defensiva. Al anochecer la
mayor parte de la segunda oleada de lanchas seguía atascada en los
arrecifes. Los marines trataban de dormir en ellas. Una batería de
obuses llegó a la playa y pudo ser montada para usarla al día
siguiente. En total, unos 5.000 marines habían desembarcado, de
los cuales había unos 1.500 muertos o heridos. Un contraataque
japonés durante la noche hubiera sido decisivo, pero los japoneses
seguían incomunicados y no pudieron organizar ninguno.
En Bougainville los japoneses lanzaron un contraataque en el camino
de Numa-Numa, tratando de flanquear a los estadounidenses,
pero fueron rechazados. Entonces los japoneses pasaron a hostigar
a los estadounidenses con fuego de francotiradores y de mortero
desde posiciones situadas entre las dos ramificaciones del río Piva.
Un regimiento de marines avanzó por la ramificación occidental
para capturar las posiciones japonesas. Cruzaron el río por un
puente de caoba construido apresuradamente y avanzaron haciendo
frente a una escasa resistencia por parte de los japoneses. Cuando
llegaron a las posiciones principales japonesas las hallaron
abandonadas. Por la tarde los estadounidenses descubrieron una
pequeña colina desde la que podía observarse toda la cabeza de
playa, así que un pelotón fue enviado para ocuparla.
Los estadounidenses llegaron a la colina que dominaba la cabeza
de playa de Bougainville y descubrieron que los japoneses la
usaban durante el día como puesto de observación y la abandonaban
por la noche. Cuando al amanecer llegaron los soldados japoneses
que debían instalarse en ella, les dispararon y éstos huyeron
colina abajo. A lo largo del día los japoneses hicieron varios
intentos por tomar la colina, pero el pelotón estadounidense
mantuvo la posición. Ese día los estadounidenses realizaron una
operación para expandir el perímetro de la cabeza de playa. Dos
batallones encabezaron el avance, cruzaron el río Piva sin
dificultad y al caer la tarde alcanzaron el perímetro previsto.
Los japoneses fracasaron en un contraataque que les ocasionó
muchas bajas. En el cadáver de un soldado japones, los
estadounidenses encontraron información valiosa sobre el estado de
las defensas japonesas que tenían ante ellos. En la rama oriental
del Piva había fuertes defensas, y los estadounidenses lograron
rebasar la primera línea de búnkers, pero fracasaron en su
intento de ir más allá. Entonces retrocedieron para que la
artillería pudiera barrer las posiciones japonesas, pese a los
esfuerzos de los japoneses por prolongar el enfrentamiento. Cuando
la retirada se hubo completado, los japoneses trataron de atacar
las líneas estadounidenses por dos frentes, pero lo hicieron con
su estupidez característica: una ametralladora mató a 74 de los 75
japoneses que se habían lanzado sobre ella antes de que pudieran
llegar a unos 20 metros de ella. Rechazado el ataque, ambas partes
se dedicaron a reforzar sus posiciones.
Un submarino francés hundió un carguero alemán (Nerucci)
cerca de Livorno.
Hitler nombró a Rommel Inspector General de las Defensas
Occidentales, con lo que Kesselring quedó como la máxima
autoridad militar alemana en Italia, con órdenes de mantener Roma
bajo control alemán el mayor tiempo posible.
Barcos británicos hundieron un submarino alemán cerca de Irlanda.
Un misil planeador lanzado desde un avión alemán hundió un
carguero británico (Marsa) en el Atlántico.
Un periodista estadounidense informó en un programa de radio que
el general Patton había sido amonestado oficialmente por
Eisenhower por haber abofeteado a un soldado. En su informe mezcló
los dos incidentes que Patton había protagonizado unos meses atrás
y exageró los hechos. Además afirmó sin base alguna que Patton no
volvería a dirigir tropas en combate. La noticia generó algo de
revuelo. El Ejército negó que Patton hubiera sido amonestado
oficialmente, pero reconoció que Patton había abofeteado a un
soldado. Dos miembros de la Cámara de Representantes se hicieron
eco de la noticia y solicitaron que Patton fuera relevado del
mando. Sin embargo, Eisenhower envió un informe al Secretario de
Guerra, Henry Lewis Stimson, en el que afirmaba que Patton
tenía un valor incalculable para el esfuerzo bélico, que confiaba
en que las medidas adoptadas eran suficientes para que no se
repitieran incidentes similares y que tenía constancia de que
Patton era abrumadoramente popular entre sus tropas. Tras haber
consultado a Stimson y al general Marshall (el jefe del Estado
Mayor estadounidense), Eisenhower mantuvo a Patton en Sicilia.
Stimson dirigió una carta al Senado en la que afirmaba que el
general Patton debía ser mantenido en su puesto porque era
necesario "su liderazgo enérgico y victorioso en las amargas
batallas que estaban por llegar antes de la victoria final".
El general retirado Charles Pelot Summerall, que había
sido Eefe del Estado Mayor Estadounidense hacía décadas, escribió
una carta a Patton en la que se mostraba indignado por que un
incidente insignificante hubiera trascendido de tal modo, y
afirmaba que, fuera lo que fuera lo que había hecho, estaba seguro
de que estaba justificado por la provocación. Esos cobardes solían
ser fusilados —afirmó— y ahora sólo se les anima. Por el
contrario, el general Pershing, héroe de la Primera Guerra
Mundial, hasta entonces amigo y mentor de Patton, condenó
públicamente lo sucedido y Patton no volvió a dirigirle la
palabra.
A las 8:00 del 22 de noviembre los
estadounidenses empezaron a desembarcar tanques y equipamiento
pesado en la cuarta playa que habían tomado en Betio. Sobre las
12:30 estuvieron en condiciones de iniciar una ofensiva y los
japoneses empezaron a retroceder. Un marine vio al contralmirante
Keiji Shibazaki, al mando de las fuerzas japonesas en
Betio, entrando en un puesto de mando al sur de la isla,
transmitió por radio su posición y un destructor bombardeó el
lugar. Shibazaki murió, pero pudo enviar un mensaje a Tokio en el
que informaba: Nuestras armas han sido destruidas y ahora
todos preparan una carga final. Que Japón exista por 10.000
años. Pero las predicciones no su fuerte. Tiempo atrás había
afirmado que un millón de estadounidenses no podría tomar
Tarawa (el archipiélago en el que se encuentra Betio) en
100 años. Sobre las 19:30 los japoneses organizaron un
contraataque y empezaron a infiltrarse en pequeños grupos como
preparativo para un ataque a gran escala, pero la artillería
destrozó las tropas que se estaban reuniendo y el ataque nunca
tuvo lugar.
Submarinos estadounidenses hundieron tres cargueros japoneses en
el Pacífico (Daishu Maru, Kiso Maru y Yamamoto
Maru), y otro más (Kinyamasan Maru) fue hundido por
la aviación.
Los japoneses llevaron a cabo un contraataque en Nueva Guinea con
la intención de recuperar Finschhafen, pero los australianos
lograron contenerlo. El avance hacia Sattelberg no se detuvo, pero
continuaba siendo frustrantemente lento. Mientras tanto los
japoneses empezaron a atacar la colina Pabu para proteger
sus líneas de comunicaciones. Llegaron a aislar las dos compañías
que la defendían, que fueron sometidas a continuos ataques.
Incapaces de resistir los bombardeos de la Luftwaffe, los
2.500 italianos que había en Samos se rindieron, con lo que se
completó la conquista alemana del Dodecaneso.
Ese día se inició la Conferencia de El Cairo, en la que
Roosevelt, Churchill y Chiang Kai-shek discutieron la situación de
la guerra contra Japón.
Bajo presión británica, los franceses liberaron a Bechara El
Khoury y lo restituyeron como presidente del Líbano.
La aviación británica hundió un carguero alemán (Arcturus)
cerca de la costa noruega.
Esa noche 764 aviones británicos bombardearon Berlín, dañando
barrios céntricos residenciales. Los incendios provocaron varias
tormentas de fuego. Unas 175.000 personas perdieron sus hogares y
varios edificios monumentales resultaron dañados. Sólo 26 aviones
fueron derribados.
A las 4:00 del 23 de noviembre unos
300 japoneses llevaron a cabo una carga banzai sobre las
posiciones estadounidenses en Betio que pilló por sorpresa a los
marines y se cobró 45 muertos y 128 heridos, pero inmediatamente
intervinieron dos destructores que suprimieron el ataque, dejando
unos 200 atacantes muertos más otros 125 que no habían intervenido
en la carga. La flota estadounidense hundió con cargas de
profundidad un submarino japonés en la zona. A las 7:00 los
aviones de la marina bombardearon las posiciones japonesas durante
media hora, a lo que siguió un ataque con obuses seguido de 15
minutos de bombardeo por parte de la artillería de la armada. Los
pocos japoneses que sobrevivieron al ataque fueron acorralados por
un avance de los marines apoyado por tanques. Los japoneses
acabaron huyendo desorganizadamente y cayendo rápidamente bajo el
fuego estadounidense. Se calcula que en unas horas murieron varios
centenares. A las 13:00 los estadounidenses declararon que Tarawa
(y Betio en particular) estaba bajo control. De los 3.636 hombres
que componían la guarnición japonesa, sólo 17 se habían rendido.
Además, de un total 1.200 trabajadores forzados coreanos, sólo 129
habían sobrevivido. La isla de Makin estaba también ya bajo
control estadounidense.
La opinión pública estadounidense se mostró indignada por el
número de bajas en la captura de un atolón insignificante. De
hecho, el primer ministro japonés, Hideki Tojo, consideró que la
batalla de Tarawa había sido algo parecido a una victoria, dada la
reacción del público estadounidense, de modo que unas cuantas
batallas más como ésa podrían minar la moral estadounidense y
forzar al gobierno a pedir la paz. Militares estadounidenses
discreparon posteriormente sobre si la ocupación de Tarawa había
merecido la pena.
Un submarino estadounidense atacó un convoy japonés en el mar de
la China Oriental y hundió uno de los barcos de escolta (Wakamiya),
en el que murieron 130 de sus 134 tripulantes, y un transporte (Nekka
Maru), en el que murieron 387 hombres, entre tripulantes y
soldados que estaban siendo transportados. Otro submarino hundió
un carguero (Kizam Maru) cerca de las Indias Orientales
Neerlandesas.
Tras haber recibido refuerzos, los estadounidenses empezaron a
emplear la artillería contra las posiciones japonesas en las dos
ramas del río Piva, en Bougainville. Los japoneses también
respondieron con la suya.
La aviación aliada bombardeó Sattelberg. Por su parte, los
japoneses bombardearon Jivevaneng.
Un submarino soviético hundió un carguero alemán (Santa Fé)
en la costa occidental de Crimea.
Hitler presenció ese día una demostración del nuevo avión Messerschmitt
Me 262, el primer avión a reacción. Los aliados trabajaban
en proyectos similares, como el Gloster Meteor británico o
el Bell P-50 Airacomet estadounidnese, que también estaban
en fase experimental.
Berlín volvió a ser bombardeada, ahora por 283 aviones
británicos. La Deutsche Opernhaus (el Palacio de la Ópera
Alemana) fue destruida, al igual que el Parque Zoológico de
Berlín, con la mayor parte de sus 4.000 animales. Otros edificios
resultaron dañados, como el Teatro Nacional Alemán, la Galería
Nacional y varios museos, hoteles, hospitales, etc.
La aviación británica hundió un petrolero alemán (Weissenberg)
cerca de la costa neerlandesa. Un submarino alemán hundió un
petrolero estadounidense (Elizabeth Kellogg) cerca de la
costa panameña.
A las 5:10 del 24 de noviembre uno de
los portaaviones de la flota que había participado en la ocupación
del archipiélago de Tarawa, en las islas Gilbert (el USS
Liscome Bay) fue hundido por un submarino japonés pocas
horas después de que hubiera llegado a la isla de Makin. Murieron
687 hombres, lo que aumentó considerablemente el número de bajas
de la invasión de Tarawa, ya de por sí elevadas. En total las
cifras fueron de unos 1.700 muertos y unos 2.100 heridos,
principalmente por la marea baja durante el desembarco. Las bajas
en la ocupación de Makin habían sido moderadas, pues no superaban
el medio centenar entre muertos y heridos.
A las 8:35 siete batallones de artillería abrieron fuego contra
las posiciones japonesas situadas entre las dos ramas del río
Piva, en Bougainville. Durante más de 20 minutos el ruido fue
ensordecedor. Se lanzaron más de 5.600 bombas, aparte de bombas de
humo para que los japoneses no pudieran observar sus movimientos.
Dos batallones de marines se acercaron al frente en preparación
del ataque terrestre, que empezó a las 9:00, apoyado por disparos
de mortero. Poco antes, una batería japonesa había empezado a
disparar, pero fue rápidamente localizada y dejada fuera de
combate. El bombardeo había destrozado las posiciones japonesas
avanzadas, sembradas de cadáveres, y que fueron rebasadas sin
oposición. Los marines tuvieron que cruzar ocho veces el mismo
río, que zigzagueaba sobre su eje de avance, y en cada tramo los
japoneses habían instalado puntos defensivos, que tuvieron que ser
neutralizados con lanzallamas. En otras zonas, muchos japoneses
murieron a manos de los marines antes de que hubieran podido
recuperarse de los efectos del bombardeo previo. Hacia las 12:00
todos los objetivos habían sido alcanzados y el ataque se detuvo
por un breve plazo para reorganizar las tropas. Cuando se reanudó
el avance, los japoneses ya estaban en mejores condiciones para
ofrecer resistencia, por lo que los combates fueron más duros,
pero al caer la noche una amplia zona había sido limpiada de
japoneses. Pequeños grupos de japoneses habían sido rebasados en
el avance y llevó algunos días localizarlos y reducirlos.
Los australianos lanzaron su ataque final sobre Sattelberg. Los
japoneses rechazaron un ataque tras otro, aunque cada vez los
australianos se aproximaban más. Finalmente, el sargento Tom
Derrick, aunque había recibido órdenes de retirarse,
persistió en avanzar con el pelotón bajo su mando y logró atacar
10 puestos defensivos japoneses con granadas de mano y
ametralladoras y pasó la noche a menos de 100 metros de las
defensas japonesas.
Durante la Conferencia de El Cairo, Churchill le manifestó a Roosevelt que le parecía lamentable no haber enviado ninguna clase de suministros y apoyo a los partisanos de Tito, pues éstos estaban reteniendo tantas fuerzas alemanas en Yugoslavia como las fuerzas aliadas en Italia, al sur de Roma. Para esas fechas los aliados ya no enviaban suministros a los chetniks de Mihailović, pues este no controlaba a gran parte de sus unidades, que, por el contrario, colaboraban con los alemanes. Recientemente los alemanes habían liberado a Pavle Đurišić y lo habían dotado de equipamiento para continuar su lucha contra los partisanos en Montenegro.
Sofía fue bombardeada por 60 bombarderos estadounidenses. Un
total de 87 edificios alrededor de la estación central fueron
destruidos. La aviación búlgara derribó dos aviones y perdió uno a
su vez en el combate. Después de dos grandes bombardeos
consecutivos, la RAF envió 6 "mosquitos" a sembrar el
pánico en Berlín. La aviación estadounidense bombardeó Toulon,
donde hundió un gran número de barcos franceses bajo control
alemán, incluyendo un crucero (FR 11), un destructor (Aigle),
dos submarinos (Achéron y Naïade).
Un submarino noruego hundió un carguero alemán (Eisstrom)
junto a la costa noruega.
Un submarino alemán hundió un carguero estadounidense (Melville
E. Stone) cerca de la costa panameña.
El 25 de noviembre un destructor
estadounidense hundió un submarino japonés junto a la isla de
Makin.
A lo largo del día, los marines terminaron de eliminar todo
rastro de resistencia japonesa en el río Piva, lo que eliminó toda
amenaza inmediata sobre la zona ocupada de Bougainville, con lo
que ya era posible instalar en ella una base aérea que permitiera
continuar con el avance hacia Rabaul. En lugar de responder
directamente a la invasión estadounidense, los japoneses habían
optado por reforzar la isla de Wuka, en la cual acababan de
desembarcar 920 soldados de tres destructores (Amagiri, Yūgiri
y Uzuki), escoltados por otros dos (Ōnami y Makinami)
y ahora la flota se disponía a regresar a Rabaul llevándose a unos
700 técnicos aéreos, ya que los bombardeos estadounidenses habían
inutilizado el aeropuerto de Buka. Sin embargo, la aviación aliada
había detectado la llegada de la flota y cinco destructores, tres
bajo el mando del capitán Arleigh Burke y otros dos bajo
el mando del comandante Bernard Austin, se dirigían hacia
ella para interceptarla en su viaje de regreso. A la 1:41 los
radares de la flota aliada detectaron los dos destructores de
escolta japoneses entre Cabo St. George, en el extremo sur
de Nueva Irlanda, y Buka. Sin ser detectados por los japoneses,
los estadounidenses lograron acercarse hasta unos 5 km y a la 1:55
lanzaron torpedos. El Ōnami recibió varios impactos y se
hundió inmediatamente. Murieron todos sus tripulantes, incluyendo
el contralmirante Kiyoto Kagawa, que estaba al frente de
la operación. El Makinami recibió sólo un impacto y no se
hundió, pero quedó inutilizado. Mientras tanto, los tres
destructores-transporte que seguían a la escolta aparecieron en
los radares a unos 12 km de distancia, y la Burke se lanzó en su
persecución. Esta vez fueron descubiertos y los tres destructores
japoneses trataron de huir hacia el norte, pero al ir tan cargados
no podían correr mucho y terminaron siendo alcanzados. A las 2:22
los estadounidenses abrieron fuego. El Uzuki recibió un
impacto que no provocó daños graves. A las 2:25 los tres
destructores japoneses se alejaron en tres direcciones distintas,
y Burke optó por seguir al Yūgiri con sus tres barcos,
mientras los dos barcos de Austin se ocupaban de hundir al Makinami.
Tras un enérgico combate, a las 3:38 el Yūgiri terminaba
hundido. A las 3:45 los destructores de Burke se reunían con los
de Austin para perseguir a los otros dos destructores japoneses,
pero a las 4:04 Burke canceló la operación debido a la escasez de
combustible y de municiones, así como a la proximidad del
amanecer, que permitiría atacar a la aviación japonesa. Los
japoneses perdieron 647 hombres, mientras que 278 náufragos fueron
rescatados por un submarino. Los estadounidenses no tuvieron
pérdidas humanas ni materiales. La actuación de Burke fue
considerada como casi perfecta y fue condecorado por ella.
Los australianos bombardearon Sattelberg al amanecer antes de
continuar su ataque, pero luego unas patrullas descubrieron que
los japoneses habían huido durante la noche. Los australianos
entraron en Sattelberg y se cedió al sargento Derrick el honor de
izar la bandera australiana. Otras patrullas fueron enviadas y
descubrieron que los japoneses se habían retirado también de las
posiciones cercanas, al parecer hacia Wareo.
Submarinos estadounidenses hundieron un carguero (Onoe Maru)
y dos petroleros japoneses (Kenzan Maru y Toa Maru)
en distintos puntos del Pacífico.
Un submarino soviético hundió un petrolero rumano (Wolga-Don)
en la costa occidental de Crimea.
Los soviéticos retomaron Gomel, en Bielorrusia, el penúltimo
bastión alemán al este del Dniéper. El último era una cabeza de
puente en Nikopol, en Ucrania.
Berlín fue atacada por 3 "mosquitos", pero el temible Sir Arthur
"Bombardero" Harris declaró que Berlín sería bombardeada hasta que
el corazón de la Alemania nazi dejara de latir.
Destructores británicos hundieron un submarino alemán cerca de
las Azores, mientras que la aviación estadounidense hundió otro en
el estuario del Congo.
El 26 de noviembre submarinos
estadounidenses hundieron tres petroleros (Ogurasan Maru, San
Ramon Maru y Yuho Maru), dos cargueros (Shini
Maru y Tainan Maru) y un transporte japonés (Nikkai
Maru) en distintos puntos del Pacífico.
En Nueva Guinea dos compañías australianas apoyadas por cuatro
tanques llegaron a la colina Pabu, que estaba sufriendo el
mayor ataque japonés desde que había sido ocupada.
Un terremoto en el norte de Turquía de magnitud 7.2 dejó casi
3.000 muertos y derribó unos 25.000 edificios.
Esa noche 7 "mosquitos" atacaron Berlín, pero esta vez acompañados de 443 bombarderos, mientras 178 aviones bombardeaban Stutgart a modo de distracción. En Berlín fue destruida una fábrica de vehículos blindados.
La aviación alemana hundió con un misil guiado un barco de
transporte de tropas británico (Rohna) cerca de la costa
argelina. La explosión mató a 481 hombres y otros 534 murieron
ahogados.
Ese día se estrenó Loco por ellas, un musical
protagonizado por Mickey Rooney y Judy Garland, dirigida por
Norman Taurog con música de George Gershwin. Las críticas fueron
excelentes y la película supuso un empujón para el tránsito de
Garland de actriz juvenil hacia la interpretación de papeles de
adulta. Rooney había protagonizado también ese año el drama La
comedia humana.
El 27 de noviembre un avión
estadounidense hundió un barco japonés de la Cruz Roja (Buenos
Aires Maru) cerca de Nueva Irlanda. Murieron 158 personas,
incluyendo algunas enfermeras. Otro avión hundió un carguero (Hakone
Maru) cerca de China. Un submarino estadounidense hundió un
carguero francés (Gouverneur General Van Vollenhoven) en la
costa de la Indochina Francesa. Un submarnino japonés hundió un
petrolero noruego (Scotia) en el océano Índico.
Un submarino británico hundió un carguero alemán (Palma)
cerca de la isla griega de Lemnos.
La Conferencia de El Cairo terminó y Roosevelt, Churchill y
Chiang Kai-shek firmaron la llamada Declaración de El Cairo,
que decía lo siguiente:
Las diversas delegaciones militares han acordado futuras operaciones militares contra Japón. Los Tres Grandes Aliados han expresado su determinación de ejercer una presión implacable contra sus brutales enemigos por tierra, mar y aire. Esta presión ya está aumentando.
Los Tres Grandes Aliados están luchando en esta guerra para contener y castigar la agresión de Japón. No codician ganancias para sí mismos y no piensan en la expansión territorial. Es su propósito que Japón sea despojado de todas las islas en el Pacífico que ha capturado u ocupado desde el comienzo de la Primera Guerra Mundial en 1914, y que todos los territorios que Japón ha robado a los chinos, como Manchuria, Formosa y Los Pescadores, sean restaurados a la República de China. Japón también será expulsada de todos los demás territorios que ha tomado con violencia y codicia. Las tres grandes potencias mencionadas, conscientes de la esclavitud del pueblo de Corea, están decididas a que, a su debido tiempo, Corea vuelva a ser libre e independiente.
Con estos objetivos a la vista, los tres Aliados, en armonía con los de las Naciones Unidas en guerra con Japón, continuarán perseverando en las operaciones serias y prolongadas necesarias para conseguir la rendición incondicional de Japón.
El 28 de noviembre submarinos estadounidenses
hundieron dos cargueros (Hokko Maru y Yuri Maru)
y dos transportes japoneses (Sydney Maru y Tonan Maru)
en varios puntos del Pacífico. Un barco alemán (Ramses)
que trataba de enviar provisiones a Japón fue hundido por su
tripulación cerca de la costa australiana para no ser capturado
por corbetas australianas.
A las 4:00 un batallón estadounidense desembarcó en Koiari,
al sur de la cabeza de playa estadounidense en Bougainville, con
la misión de detectar posibles movimientos de tropas japonesas,
destruir almacenes de suministros y sabotear las líneas de
comunicaciones japonesas, pero sin entrar en combate directo con
fuerzas japonesas demasiado numerosas. Inmediatamente asaltaron un
almacén de suministros y se adentraron unos 180 metros entre el
fuego enemigo. Otra compañía desembarcó unos 800 metros más al
sur. Los mandos estadounidenses no tardaron en comprender que la
presencia japonesa en la zona era mucho mayor de la esperada y los
marines desembarcados estaban en peligro. A las 9:30 el segundo
grupo que había desembarcado más al sur logró reunirse con el
primero, pero por el camino había perdido a 13 hombres. Los
marines también entendieron que su misión era imposible y pidieron
por radio ser recogidos, aunque para entonces ya se había dado la
orden de anular la misión. Sin embargo, no era fácil. Dos intentos
de recoger a los marines en barcazas fracasaron debido al potente
fuego enemigo. Los marines resistieron en la playa a la espera de
ser rescatados y ya les quedaba poca munición cuando a las 18:00
llegaron tres destructores que habían recibido órdenes urgentes de
abandonar sus actividades para dirigirse a Koiari. Con apoyo
aéreo, proporcionaron la cobertura necesaria para embarcar a los
marines. A las 20:40 se completó la operación, con 15 muertos, 7
desaparecidos y 99 heridos. Se estima que los japoneses contaron
más de 200 heridos.
La Unión Soviética creó un Departamento de Asuntos de los
Cristianos Ortodoxos Rusos, que gestionaría la apertura de
iglesias a través de un complejo procedimiento burocrático. Esto
suponía un giro en la política soviética, que previamente se había
marcado como objetivo la erradicación de la Unión Soviética de
toda religión distinta del marxismo-leninismo.
Ese día se inauguró la Conferencia de Teherán. La hora
prevista era las 16:00. Stalin llegó antes de la hora, y más tarde
acudió Roosevelt, lo que supuso el primer encuentro entre ambos
mandatarios. Churchill llegó media hora tarde. Iniciadas las
conversaciones, Stalin quiso insistir una vez más en su exigencia
de que se abriera un gran frente occidental contra Alemania, ya
que los recursos que Hitler tenía que destinar a Italia en ese
momento no eran comparables con los que estaba empleando contra
los soviéticos. Sin embargo, no tuvo necesidad de argumentar
mucho, ya que comprobó con satisfacción que sus aliados estaban ya
trabajando en un próximo desembarco en Francia. A partir de ahí,
no tuvo inconveniente en prometer que la Unión Soviética
declararía la guerra a Japón en cuanto Alemania hubiera sido
derrotada.
A continuación Stalin propuso modificar la frontera polaca hacia
el oeste, para ajustarse a la Línea Curzon fijada en 1920.
Para compensar a Polonia por las pérdidas territoriales que ello
supondría, Churchill propuso mover también hacia el oeste la
frontera entre Polonia y Alemania. En palabras de Churchill, "Polonia
debía moverse hacia el oeste, como soldados dando dos pasos a la
izquierda". Esta propuesta no fue mal recibida, pero no fue
ratificada formalmente.
Después trataron sobre Irán, y los tres mandatarios estuvieron de
acuerdo en apoyar el gobierno actual, y en la necesidad de
compensar al país de los sacrificios a los que estaban
sometiéndolo a causa de la guerra. Por otra parte, se instó a
Stalin a que se comprometiera a ayudar a Turquía si ésta entraba
finalmente en guerra, y todos estuvieron de acuerdo en que sería
deseable que esto sucediera antes de que terminara el año.
El sah de Irán, Mohammad Reza Pahleví, ejerció discretamente de
anfitrión de la conferencia. Tuvo que aceptar la humillación que
le impuso Stalin cuando, en el encuentro entre ambos en su
palacio, no permitió que los guardaespaldas del monarca estuvieran
presentes, sino que el Ejército Rojo fue el único encargado de la
custodia del palacio mientras duró la entrevista.
La aviación británica hundió un barco de pasajeros yugoslavo (Sebenico)
ante la costa de Croacia, en el Adriático.
La aviación británica hundió un submarino alemán junto a la isla
de Madeira, en el Atlántico.
El 29 de noviembre un submarino
estadounidense hundió un carguero japonés (Kenryu Maru)
cerca de la costa japonesa. Otros dos submarinos hundieron dos
cargueros (Manju Maru y Shiganoura Maru) y un
transporte (Yamafuku Maru) cerca de las islas Marianas. Un
tercer submarino hundió un transporte japonés (Suez Maru)
en el mar de Java, en el que viajaban enfermos japoneses y
prisioneros de guerra británicos y neerlandeses. En el hundimiento
murieron unos 850 prisioneros de guerra y 69 japoneses. Luego
llegó un dragaminas japonés que rescató a 205 soldados y a 93
tripulantes del barco, y asesinó a más de 200 prisioneros de
guerra que habían sobrevivido al naufragio. La aviación
estadounidense hundió un submarino japonés cerca de Tarawa. Otro
submarino japonés hundió un carguero griego (Athenia Livanos)
en la entrada del mar Rojo.
En su avance hacia el norte por la costa oriental de Nueva
Guinea, los australianos tomaron Bonga y, poco después, Gusika.
En las proximidades encontraron un campamento japonés abandonado
con grandes cantidades de equipamiento. A la colina Pabu llegaron
más refuerzos y finalmente los japoneses se retiraron (con Bonga
habían perdido la línea de comunicaciones que los australianos
amenazaban desde Pabu, por lo que el lugar carecía ya de interés
para ellos). Las pérdidas fueron de 195 japoneses muertos frente a
25 australianos muertos y 51 heridos.
Los participantes en la Conferencia de Teherán celebraron una
comida conjunta y en ella Churchill entregó a Stalin un regalo del
rey Jorge VI, una espada forjada para la ocasión en la que podía
leerse, en inglés y en ruso, la dedicatoria: Al espíritu de
acero de los ciudadanos de Stalingrado. Regalo del rey Jorge VI.
En señal de homenaje del pueblo británico. Stalin besó la
funda, luego se inclinó para enseñar la espada a Roosevelt, que no
podía levantarse. Tras haber examinado la hoja dijo: Realmente
tienen un espíritu de acero. Cuando terminó la ceremonia,
Stalin pasó de improviso la espada a uno de sus ayudantes, que,
cogido por sorpresa sujetó la vaina por el lado opuesto y la
espada se salió y cayó al suelo.
En una típica conversación de sobremesa, Stalin propuso ejecutar
a unos 50.000 o 100.000 oficiales alemanes para asegurarse de que
Alemania no pudiera planear otra guerra. Roosevelt, incapaz de
imaginar que Stalin pudiera hablar en serio, respondió bromeando:
Tal vez 49.000 serían suficientes. Pero Churchill conocía
mejor la mentalidad comunista y se rebajó a explicar indignado que
era inaceptable matar a sangre fría a soldados que han luchado por
su país, y que sólo los criminales de guerra debían ser juzgados y
condenados por sus crímenes. Dicho esto, se levantó y abandonó la
estancia, pero Stalin salió detrás de él y lo convenció para que
regresara asegurando que sólo estaba bromeando. Churchill se
alegró de que Stalin se hubiera retractado, pero sabía
perfectamente que no había estado bromeando, sino que estaba
tanteando.
El Consejo Antifascista de Liberación Nacional de Yugoslavia,
reunido en Jajce, creó un gobierno provisional presidido
por Tito (que fue ascendido a mariscal) y que dejó de reconocer al
gobierno yugoslavo en el exilio, así como al rey Pedro II, si bien
la mediación británica dejó este último punto en suspenso. También
decidió que, cuando terminara la guerra, Yugoslavia se organizaría
como un Estado federal de seis repúblicas bajo el mando de Tito.
También los griegos hacían planes para después de la guerra, y la
cuestión de si el rey Jorge II conservaría su trono habiendo
apoyado la dictadura de Metaxas suscitaba polémicas. Por esas
fechas Jorge II escribió una carta al primer ministro griego en el
exilio, en la que decía: Estudiaré de nuevo la cuestión sobre
la fecha de mi regreso a Grecia de acuerdo con el gobierno.
La carta fue presentada a la prensa, pero, accidental o
deliberadamente, se omitieron las palabras "sobre la fecha",
con lo que aparentemente el rey estaba admitiendo que la
continuidad de la monarquía fuera decidida en un plebiscito. Poco
después se publicó una recitificación, pero el debate ya estaba
abierto.
Destructores británicos hundieron un submarino alemán cerca de
las islas Azores.
El 30 de noviembre un submarino
estadounidense hundió un transporte japonés (Columbia Maru)
en el Pacífico. La aviación estadounidense hundió un barco de
transporte de tropas (Himalaya Maru).
En Nueva Guinea, los australianos habían iniciado un avance hacia
Wareo desde tres puntos distintos, con unos 13.000 hombres en
total. Un grupo salía ahora de Gusika hacia el oeste, que era el
punto más septentrional de la costa en manos australianas. Poco
después de haber pasado la colina Pabu, se encontraron una red de
defensas japonesas que no pudieron ser desalojadas hasta la noche.
Mientras tanto un segundo grupo salía de Katika, un poco más al
sur del punto donde se había producido el último desembarco hacía
ya dos meses, en dirección a Nongora. Tras verse detenidos
durante un tiempo por el fuego de ametralladora de una posición
japonesa fuertemente defendida, continuaron su avance y al
anochecer se atrincheraron en la base de la montaña en la que se
encontraba Nongora. Por último, una tercera columna salió de
Sattelberg hacia el norte y se enfrentó a los japoneses mientras
cruzaba el río Song.
Los soviéticos se retiraron de Korosten, en Ucrania, doce
días después de haberla ocupado.
La República Social Italiana ordenó el arresto de todos los
judíos que vivieran en su territorio para ser enviados a campos de
concentración.
Un submarino alemán hundió un carguero francés (Fort de Vaux)
en el Atlántico.
El 1 de diciembre submarinos
estadounidenses hundieron tres cargueros japoneses en el Pacífico
(Konei Maru, Nichirvo Maru y Shoko Maru). Un cuarto
carguero (Teiren Maru) fue destruido por la aviación
estadounidense en Hong Kong.
La columna australiana que avanzaba desde Sattelberg rechazó un
contraataque japonés en la orilla septentrional del río Song, tras
lo cual ocupó Kuanko, que había sido abandonada por los
japoneses. Un poco más al norte, los japoneses lanzaron otro
contraataque de mayor envergadura. La columna que había llegado a
Nongora lanzó un ataque contra la posición japonesa, pero fue
rechazado y ocasión 13 bajas. No obstante, al anochecer los
japoneses se retiraron sin ser vistos. Por último, una patrulla
avanzada de la columna que venía de Katika localizó una posición
japonesa cerca del río Kalueng y logró desalojarla, si
bien una segunda fuerza japonesa más numerosa en los lagos del
Kalueng los obligó a retroceder un trecho y atrincherarse.
Finalmente la patrulla logró reunirse con su batallón con algunas
bajas.
La conferencia de Teherán terminó con los acuerdos siguientes:
Rudolf Höss dejó su puesto al frente del campo de exterminio de
Auschwitz. Se calcula que durante su mandato fueron gaseados unos
dos millones y medio de prisioneros, y otro millón murió de hambre
o de enfermedades.
Británicos y estadounidenses retomaron su ataque a la línea
Bernhardt, al sur de Roma. Tras un intenso ataque por parte de la
artillería y un bombardeo aéreo, las fuerzas aliadas iniciaron un
combate en una ladera del monte Camino que se prolongaría
durante varios días.
El barco sueco MS Gripsholm llegó a Nueva York con 1.223
estadounidenses, 217 canadienses y varios americanos de otras
nacionalidades que habían sido capturados por los japoneses
durante los años anteriores, y que habían sido intercambiados por
prisioneros japoneses en Mormugao (en la India
Portuguesa).
El 2 de diciembre los australianos
entraron en Nongora.
Maurice Sarraut era el propietario del diario La
Dépêche de Toulouse. Antes de la guerra había sido
presidente del Partido radical-socialista, pero luego
había dado su aprobación al régimen colaboracionista de Pétain.
Pese a ello, era visto con desconfianza por los partidarios de
Pétain más radicales. A principios de año se había opuesto a la
formación de la Milicia francesa, y ello provocó que fuera
arrestado por la Gestapo, aunque fue liberado en poco
tiempo gracias a la intervención del secretario general de la
policía, que era amigo supo. Ese día fue asesinado ante su casa en
Toulouse. La prensa colaboracionista culpó inmediatamente a la
resistencia francesa, pero la policía no tardó en arrestar a los
asesinos, y resultaron ser milicianos, que no tardaron en ser
liberados gracias a la presión alemana.
Por otra parte, los alemanes arrestaron a 130 residentes de
Oyonnax como represalia por el desfile que los maquis habían
llevado a cabo el mes anterior. El médico de la ciudad fue
fusilado, el capitán de la gendarmería local fue torturado y todos
los prisioneros fueron llevados a un campo de concentración.
A las 19:25 dos o tres aviones alemanes sobrevolaron el puerto
italiano de Bari a unos 3.000 metros de altura y lanzaron
reflectores antirradar para confundir a los radares aliados. Luego
llegaron 105 bombarderos de la Luftwaffe que destrozaron
el puerto. Murieron alrededor de un millar de militares y otros
tantos civiles, y 28 barcos resultaron hundidos. Un oleoducto se
rompió y vertió petróleo al mar, donde se incendió y creó una capa
de fuego sobre el agua que rodeó a muchos barcos. Dos barcos que
transportaban municiones fueron alcanzados y explotaron lanzando
restos a 11 km de distancia. Otro de los barcos hundidos fue el
carguero estadounidense John Harvey, que transportaba una
carga secreta de bombas de gas mostaza, que habían sido enviadas
para ser usadas en caso de que Alemania cumpliera una amenaza de
emplear armas químicas en Italia. Parte del gas mostaza formó
nubes de humo, y otra parte se mezcló con el combustible que había
en el agua procedente de otros barcos hundidos o dañados y terminó
impregnando la piel de los marineros que se habían lanzado al
agua. Las autoridades médicas, sin saber de la existencia del gas
mostaza, no prestaron atención a los pacientes que llegaban
aparentemente sanos, pero con la piel manchada de lo que no
parecía más que combustible. Los primeros síntomas del
envenenamiento por gas mostaza empezaron a aparecer al día
siguiente en 628 personas, tanto pacientes como médicos, con
síntomas que iban desde las quemaduras químicas hasta la ceguera.
Pero los médicos seguían sin saber qué podía estar causando esos
síntomas, pues las autoridades militares mantuvieron en secreto la
existencia de las bombas, y todos los ocupantes del John
Harvey que conocían la presencia del cargamento habían
muerto. Había buenas razones para ocultar la existencia de las
bombas del gas mostaza: si los alemanes se enteraban y concluían
que los aliados iban a usar armas químicas, ello podría inducirlos
a usarlas primero de forma preventiva.
Por otra parte, más de 450 aviones bombardearon Berlín esa noche.
Fuertes vientos inesperados dispersaron los aviones, por lo que
los alemanes pudieron derribar varios de ellos (40 en total) con
cierta facilidad. El viento también disminuyó la precisión del
bombardeo, pero aun así dos fábricas de Siemens y varias
instalaciones ferroviarias resultaron dañadas.
A los Estados Unidos llegaron 15 físicos británicos para
incorporarse al proyecto de investigación sobre la energía
atómica. Entre ellos se encontraba Klaus Fuchs, nacido en
Alemania hacía 32 años. Pertenecía al Partido Comunista de
Alemania cuando el nazismo llegó al poder, y entonces huyó a Gran
Bretaña, donde se doctoró en física. El apoyo de la Iglesia
Luterana al partido nazi lo llevó a hacerse cuáquero. Había
solicitado la nacionalidad Británica antes de que estallara la
guerra, pero como todavía no la tenía, fue retenido en Quebec
durante un tiempo por su calidad de extranjero. Finalmente se le
concedió la nacionalidad y desde hacía dos años trabajaba en el
proyecto de investigación británico sobre la energía atómica. Por
esas fechas un antiguo amigo comunista lo puso en contacto con
alguien de la embajada soviética en Londres y desde entonces se
dedicó a transmitir información secreta a los soviéticos. A partir
de ese momento los servicios de espionaje soviéticos se ocuparon
directamente de la comunicación con Fuchs.
El 3 de diciembre un submarino
estadounidense hundió un petrolero japonés (Azuma Maru) en
el Pacífico.
Los australianos lograron finalmente vencer la resistencia
japonesa en los lagos del Kalueng y continuaron su avance hasta
reunirse con la columna que avanzaba desde Nongora. A partir de
ese momento avanzaron conjuntamente y volvieron a encontrar
resistencia en las montañas Christmas.
Esa noche una flota estadounidense de seis portaaviones atacó la
isla de Kwahalein, en el archipiélago de las islas
Marshall, donde los japoneses perdieron cinco barcos y más de 50
aviones. El portaviones Lexinton recibió un impacto y la
flota regresó a Pearl Harbor.
En Monte Camino, las tropas aliadas atacaron una fortaleza
alemana situada en la cima del Monte la Difensa.
527 aviones aliados se dirigieron hacia Berlín, pero en un
momento dado giraron hacia el sur y bombardearon Leipzig, dejando
sólo 9 "Mosquitos" en el rumbo aparente. Así la mayor parte de los
aviones alemanes se dirigieron hacia Berlín en su persecución y la
resistencia en Leipzig fue menor.
Franco se entrevistó con el embajador alemán en Madrid y le
comunicó que deseaba la victoria del Eje, ya que el triunfo de los
aliados "significaría su propia eliminación". También le explicó
que una España neutral que abastecía a Alemania de wolframio y
otros productos era de mayor valor para Alemania que una España
inmersa en la guerra.
Pocos días después, el embajador británico escribía a su
gobierno:
Resulta preocupante, aunque tal vez sea inevitable, que Franco se aproveche ahora de la paciencia aliada y de la ausencia de una oposición española eficaz como pruebas de la estabilidad de su régimen y de sus excelentes relaciones con Gran Bretaña y los Estados Unidos. Para mí, que estoy en Madrid, esta insolente actitud pagada de sí misma me resulta particularmente irritante [...] aunque quizás logremos contener o frenar muchos actos no neutrales, el presente gobierno español, con Franco a la cabeza es fundamentalmente hostil a los aliados y a los propósitos por los que luchamos».
Por otra parte, la Delegación Nacional de Propaganda se curaba en
salud dando estas instrucciones:
Como norma general, deberá tenerse en cuenta la siguiente: en ningún caso, bajo ningún pretexto, tanto en artículos de colaboración como en editoriales y comentario [...], se hará referencia a textos, idearios ejemplos extranjeros al referirse a las características y fundamentos políticos de nuestro movimiento. El Estado español se asienta exclusivamente sobre principios, normas políticas y bases filosóficas estrictamente nacionales. No se tolerará en ningún caso la comparación de nuestro Estado con otros que pudieran parecer similares, ni menos aún extraer consecuencias de pretendidas adaptaciones ideológicas extranjeras a nuestra patria.
Un submarino alemán hundió un petrolero estadounidense (Touchet)
en el golfo de México.
El 4 de diciembre submarinos
estadounidenses hundieron un portaaviones de escolta japonés (Chūyō)
en el Pacífico. Murieron 1243 personas a bordo. Un transporte (Hiyoshi
Maru) resultó hundido cerca de la costa japonesa.
Churchill y Rooselvelt se reunieron en El Cairo con el presidente
turco İsmet İnönü. Churchill estaba interesado en que Turquía
entrara en la guerra para abrir un nuevo frente en los Balcanes,
mientras que Roosevelt pensaba que una Turquía neutral cerraba el
paso a Alemania al petróleo de Oriente Medio. Por su parte, İnönü
había vivido 11 años de guerra casi consecutivos, (la guerra
ítalo-turca, la guerra de los Balcanes, la Primera Guerra Mundial
y la Guerra de Independencia Turca) y pretendía mantener a su país
en paz el mayor tiempo que le fuera posible. Su mayor temor eran
las intenciones manifestadas abiertamente por Stalin de tomar el
control del estrecho del Bósforo y de los Dardanelos.
Los alemanes iniciaron la operación Kugelblitz contra los
partisanos de Tito en Bosnia, empleando un total de 75.000 hombres
entre alemanes, búlgaros y chetniks.
Cuatro divisiones aliadas (una británica, otra canadiense, otra
india y otra neozelandesa) atacaron la Línea Gustav en su extremo
oriental, a lo largo del río Moro.
Un submarino alemán hundió un carguero cubano cerca de la costa
de Carolina del Norte.
El 5 de diciembre la aviación
estadounidense hundió un transporte japonés (Choko Maru) en
el Pacífico.
En Nueva Guinea, la columna australiana que avanzaba hacia Wareo
desde la costa se encontró con que, durante la noche, los
japoneses habían abandonado su primera línea de defensa en las
montañas Christmas, dejando atrás muchos cadáveres y equipamiento.
Entonces avanzaron tratando de flanquear la nueva línea defensiva
y se produjo un combate en el que murieron seis japoneses y siete
australianos. Finalmente los australianos fueron rechazados.
Mientras tanto, fuerzas australianas establecieron una cabeza de
puente en el río Kalueng. El 6 de diciembre
los australianos atacaron de nuevo en las montañas Christmas, con
un intenso bombardeo previo de artillería. Los japoneses lograron
rechazar el ataque, pero recibieron un segundo bombardeo por parte
de la artillería y un batallón australiano logró situarse en una
posición favorable. Por la noche los japoneses se retiraron.
La columna que avanzaba desde Sattelberg también estaba haciendo
que los japoneses se retiraran lentamente hacia Wareo, que ya
podían observar a lo lejos. Una vez más, los japoneses rechazaron
un ataque a sus posiciones en una colina, pero las abandonaron al
anochecer.
Refuerzos chinos pudieron abrirse paso hasta Changde, donde
apenas quedaban 100 soldados de los 8.000 que se habían opuesto al
ataque japonés y lo máximo que pudo hacerse fue evacuarlos antes
de que los japoneses entraran en la ciudad.
Infiltrados soviéticos lograron arrestar a los últimos agentes
alemanes que operaban en Chechenia.
Los alemanes atacaron la cabeza de playa soviética en Eltigen, en
Crimea, que hasta entonces se habían limitado a mantener bajo
asedio. La cabeza de playa de Yenikale resistía en mejores
condiciones. Los soviéticos habían desembarcado en ella 75.000
hombres, 582 cañones, 187 morteros, 128 tanques, 764 camiones y
más de 9.000 toneladas de municiones y otros materiales.
La Segunda Conferencia de El Cairo terminó con el acuerdo de que
la neutralidad Turca debía mantenerse. Churchill tuvo que admitir
que los esfuerzos bélicos que requería la operación Overlord
(la invasión de Francia) impedían proporcionar a Turquía el apoyo
que necesitaría en caso de declararle la guerra a Alemania.
Fuerzas canadienses bajo el mando del mayor Christopher Vokes
iniciaron una serie de ataques a gran escala en los principales
puntos de paso en el río Moro, con la intención de establecer una
cabeza de puente. Concretamente, atacaron en Villa Rogatti,
San Leonardo y San Donato. Tras cruzar el río, los
canadienses no tardaron en llegar a Villa Rogatti y amenazaron las
defensas alemanas. Finalmente las rompieron y los canadienses
ocuparon la ciudad poco antes del amanecer, aunque los alemanes
todavía mantenían posiciones defensivas en las afueras. A media
mañana los alemanes contraatacaron, pero los canadienses lograron
rechazar el ataque. No obstante, los alemanes rodearon la ciudad,
con lo que la cabeza de puente no podía ser aprovechada. En San
Leonardo y San Donato los canadienses no lograron sus objetivos y
terminaron cruzando de nuevo a la orilla meridional del Moro.
La productora Republic Pictures se dedicaba a las
películas de serie B, pero ese año se decidió a producir un western
con mayor presupuesto, En el viejo Oklahoma, protagonizada
por John Wayne, y resultó un éxito de taquilla que animó a la
empresa a continuar en esa línea.
El 7 de diciembre un submarino
estadounidense hundió un carguero japonés (Soyo Maru) en el
Pacífico.
Los australianos ocuparon las montañas Christmas, abandonadas por
los japoneses, con lo que pudieron continuar su avance hacia
Wareo. La columna que avanzaba desde Sattelberg estaba ya a casi
500 metros de Wareo, pero fue detenida una vez más por un intenso
fuego japonés. Patrullas enviadas a examinar la situación
informaron de que las defensas japonesas eran fuertes.
La cabeza de playa soviética en Eltigen sucumbió ante el ataque
alemán. Fuerzas rumanas tomaron 1.570 prisioneros soviéticos y
contaron 1.200 soviéticos muertos. Además capturaron 38 tanques y
25 cañones antitanque. Unos 829 soldados soviéticos habían logrado
escapar de Eltigen abriéndose paso hacia el monte Mitrídates,
donde derrotaron las posiciones de la artillería alemana y se
atrincheraron allí.
Dos brigadas neozelandesas atacaron Orsogna, en Italia,
donde los alemanes fueron pillados por sorpresa, pues pensaban que
el ataque se produciría al día siguiente. Al principio el ataque
progresó con éxito, pero los alemanes se reorganizaron y su
resistencia aumentó. Los neozelandeses habían entrado en la ciudad
y habían llegado hasta su centro combatiendo casa por casa.
Otros mil judíos salieron del campo de Drancy, en Francia, con
destino a Auschwitz. Sólo 42 sobrevivirían a la guerra.
El 8 de diciembre los australianos
capturaron Kwatingkoo, cerca de Wareo, que había sido
abandonada por los japoneses, y a mediodía Wareo cayó también en
sus manos. Los japoneses establecieron nuevas defensas alrededor
de Sio.
En Italia las fuerzas estadounidenses atacaron la línea
Bernhardt en el monte Sambúcaro y en San Pietro Infine.
Mientras tanto los neozelandeses tenían que retirarse de Orsogna.
Un submarino alemán hundió un carguero panameño (Colombia)
en el Caribe.
Ese día llegó a Washington Nicholas Baker, que era el
pseudónimo con el que había viajado desde Suecia el físico Niels
Bohr. Desde allí pasó a visitar a Albert Einstein y Wolfgang Pauli
en el Instituto de Estudios Avanzados de Princeton y luego marchó
a Los Álamos, en Nuevo México, donde se estaban diseñando las
bombas atómicas.
El 9 de diciembre un submarino
británico hundió un carguero alemán (Sonja) cerca de la
costa turca, mientras que un submarino alemán hundió un barco de
transporte de tropas británico (Cap Padaran) en el sur de
Italia.
Los aliados dominaban ya el Monte la Difensa. De entre los 50.000
hombres asignados a la batalla, las bajas fueron de unos 5.000.
Las bajas alemanas se estiman en unos 4.500 hombres. En el extremo
oriental de la línea Bernhardt Ingenieros indios lograron
construir un puente sobre el río Moro por el que pudieron cruza
suficientes tropas de infantería y tanques como para reforzar una
cabeza de puente. Desde allí, los canadienses tomaron San Leonardo
y los alemanes se retiraron a una segunda línea defensiva que los
aliados llamaron "el barranco", porque estaba situada tras
un barranco de unos 60 metros de profundidad.
El 10 de diciembre los estadounidenses
completaron la construcción de una base aérea en Bougainville.
Mientras tanto seguía habiendo combates para reforzar el perímetro
de la base y extenderlo a las colinas que lo rodeaban.
Sofía fue bombardeada por 120 aviones aliados, dos de los cuales
fueron derribados por la aviación búlgara, que perdió un único
aparato.
Los estadounidenses tomaron el monte Sambúcaro, con lo que
amenazaban las posiciones alemanas en San Pietro Infine. Los
canadienses hicieron un primer intento de cruzar "el barranco"
y, aunque lograron tomar una cresta situada al sur, los intentos
de neutralizar las defensas sobre "el barranco" en sí resultaron
infructuosos.
El 11 de diciembre fuerzas chinas
lograron romper las líneas japonesas y entrar en la ciudad de
Changde, donde llevaron a cabo un combate casa por casa. Desde
allí se dedicaron a cortar las líneas de suministro japonesas.
Fuerzas rumanas retomaron a los soviéticos el monte Mitrídates,
en Crimea.
En Italia tres batallones canadienses hicieron un segundo intento
de cruzar "el barranco". Una compañía logró tomar una
posición en la ladera opuesta, pero fue rechazada tras la llegada
de refuerzos alemanes. En general, el intento costó bastantes
bajas.
El 12 de diciembre un submarino
estadounidense hundió un carguero japonés (Tosei Maru) en
el mar de Flores.
En Bougainville las fuerzas estadounidenses empezaron a atacar
una colina llamada Hellzapoppin, donde los japoneses
estaban bien parapetados. Un intento de ataque por los flancos
acabó convertido en un ataque frontal que fue rechazado.
En Italia tres batallones canadienses trataron de cruzar una vez
más "el barranco", y una vez más tuvieron que retirarse
con muchas bajas. La división alemana que lo defendía también
había sufrido muchas bajas, pero esa noche fue relevada por una
división de paracaidistas.
Aviones estadounidenses bombardearon Bremen. Un carguero alemán (Île d'Aix) resultó hundido y otro
dañado gravemente.
Un submarino alemán hundió dos destructores británicos (HMS
Holcombe y HMS Tynedale) ante las costas de Argelia.
El derrocado presidente checoslovaco Edvard Beneš seguía siendo
presidente de Checoslovaquia en el exilio. No era comunista, pero
creía cándidamente en aquello de que "los enemigos de mis enemigos
son mis amigos", y así estaba convencido de que la seguridad de
Checoslovaquia ante la amenaza alemana al terminar la guerra
pasaba por una sólida alianza con la Unión Soviética. Ese día
firmó un tratado de asistencia mutua y cooperación entre
Checoslovaquia y la Unión Soviética, en el que aceptaba la
incorporación de su país a la esfera de influencia soviética.
Beneš creía que Occidente y la Unión Soviética iban a converger,
en el sentido de que tras la guerra Occidente se haría más
socialista y la Unión Soviética se volvería algo más liberal. La
conferencia de Teherán lo convenció de que la alianza entre "los
tres grandes" continuaría tras la guerra y que Checoslovaquia
podría ejercer un papel de mediador entre ellos.
El 13 de diciembre submarinos
estadounidenses hundieron dos cargueros japoneses (Fukkai Maru
y Totai Maru), y un tercero (Tokiwa Maru) fue
hundido por la aviación estadounidense.
Los japoneses se retiraron de Changde y los chinos los
persiguieron durante más de 20 días.
A primeros de mes los alemanes habían enviado una división a
combatir las guerrillas de la resistencia griega alrededor de Kalávrita
y, como respuesta, los griegos habían asesinado a 78 soldados
alemanes que había capturado unos meses atrás. Ahora se producía
la represalia alemana: tras una marcha en la que fueron quemando
pueblos a su paso y disparando a los civiles que se encontraban,
llegaron a Kalávrita, metieron a todos sus habitantes en la
escuela del pueblo, allí separaron a los hombres y niños mayores
de las mujeres y los niños pequeños, se llevaron a los hombres a
un campo, quemaron todo el pueblo después de haberlo saqueado, y
ametrallaron a los 438 hombres y niños mayores. Sólo sobrevivieron
13 porque quedaron ocultos entre los cadáveres de los otros. Las
mujeres y niños fueron abandonadas en la escuela en llamas, de
donde lograron salir. En total, los alemanes habían matado a 683
civiles y habían destruido 28 poblaciones (ciudades, aldeas,
monasterios y asentamientos menores).
En Italia, el intento del día de tomar "el barranco"
fracasó como los anteriores.
Henry Aubry fue liberado por los alemanes tras haber sido
torturado en varios interrogatorios.
Un destructor británico y otro estadounidense hundieron un
submarino alemán ante la costa de Argelia. La aviación de una
flota estadounidense hundió otro en el Atlántico, y un tercero fue
hundido por la RAF, también en el Atlántico.
El 14 de diciembre un submarino alemán
hundió un carguero japonés (Hakozaki Maru) en el Pacífico.
A lo largo de la última semana, torpederas australianas habían
hundido una gran cantidad de barcazas japonesas que pretendían
llevar suministros a las fuerzas de Sio, en Nueva Guinea. Los
prisioneros que capturaban los australianos se encontraban en un
estado tan lamentable que era evidente que el sistema logístico
japonés estaba al borde del colapso. Mientras tanto, en su avance
hacia Sio, los australianos llegaron a Lakona, un punto
crucial en la ruta de retirada japonesa hacia el mar. Los
australianos rodearon la ciudad y empezaron a acorralar a los
defensores.
Un submarino japonés hundió un carguero británico (Daisy
Moller) en el golfo de Bengala. Luego embistió a los botes
salvavidas y los bombardeó.
El mayor Vokes había ideado un nuevo plan para capturar el
barranco. Al amanecer, dos compañías con apoyo aéreo
atacaron Casa Berardi, un complejo de varias granjas
situado al oeste del barranco. A las 8:30 empezaron el
asalto a el edificio principal y, aunque la resistencia alemana
fue dura, 21 hombres y 5 tanques lograron llegar a menos de 200
metros del objetivo y, a pesar de la llegada de tanques alemanes
de refuerzo, a las 14:30 el edificio estaba en manos de los
canadienses. Desde esa posición, las posibilidades de rodear el
barranco eran mucho mejores.
A las 3:30 del 15 de diciembre cuatro
destructores cargados con tropas y escoltados por otros 9
destructores, dos patrulleras, dos cazasubmarinos y otros barcos
auxiliares, llegó a la isla de Arawe, en el extremo
suroccidental de Nueva Bretaña, en cuyo extremo nororiental se
encuentra Rabaul. En la zona del desembarco la presencia japonesa
era escasa, con apenas un millar de hombres. El desembarco en
Arawe se realizó sin dificultad, pero un intento de desembarco en
la playa de Umtingalu, en la propia Nueva Bretaña, fue
rechazado. Los japoneses dispararon con ametralladoras, fusiles e
incluso un cañón y todas las lanchas de goma fueron hundidas menos
tres. El destructor que debía proteger el desembarco no pudo abrir
fuego hasta las 5:42 (casi 20 minutos después de que los japoneses
abrieran fuego) porque no pudo determinar si los soldados que
nadaban en el agua estaban en la línea de fuego. El intento se
saldó con 12 muertos, 4 desaparecidos y 17 heridos. En cambio, un
desembarco en la isla de Pilelo se llevó a cabo con éxito,
más que nada porque apenas había japoneses en ella. Finalmente,
tras un considerable retraso debido a fuertes corrientes marinas,
a las 7:28 se pudo llevar a cabo un desembarco en Nueva Bretaña,
en la playa llamada "la casa del bombero". Previamente los
destructores habían bombardeado la playa y a continuación la
aviación la había ametrallado.
A las 9:00 llegaron ocho bombarderos japoneses escoltados por 56
zeros, que pudieron esquivar a los 16 aviones aliados que
vigilaban la zona y bombardearon la flota, pero no lograron causar
daños. Poco después la flota se marchó, excepto un destructor que
se quedó recogiendo náufragos del intento de desembarco en
Umtingalu y que zarpó algo más tarde. La playa se encontraba en la
península de Arawe, que no tardó en quedar bajo control
tras haber vencido la escasa resistencia japonesa. A las 11:15
llegaron más aviones japoneses y un zero resultó
derribado. A las 18:00 una fuerza de 12 bombarderos escoltados por
30 zeros fue rechazada por la aviación aliada. En total,
los japoneses perdieron dos zeros a lo largo del día. En
total habían desembarcado unos 1.500 soldados.
Un carguero japonés (Senkai Maru) fue hundido por la
aviación estadounidense en el Pacífico.
En Italia, a la 1:00 una división neozelandesa atacó de nuevo
Orsogna por su flanco derecho y lograron ocupar una buena posición
en una carretera que llevaba a la ciudad, aunque al precio de
numerosas bajas.
A las 7:30 los canadienses atacaron el barranco una vez
más, y tras más de una hora de combate tuvieron que retirarse. Por
la tarde un contraataque alemán fue rechazado en Casa Berardi.
A las 12:00 los estadounidenses atacaron San Pietro Infine con
dos pelotones y 16 tanques, pero el ataque falló por la presencia
de minas y del fuego antitanque. Sólo cuatro tanques
sobrevivieron. No obstante, los estadounidenses habían logrado
apoderarse de Monte Lungo, que juntamente con la posición
en Monte Sambúcaro volvía a San Pietro indefendible.
El 16 de diciembre un submarino
estadounidense hundió un carguero japonés (Ginvo Maru) cerca de
Taiwan. Murieron más de 250 personas a bordo. En Arawe los
estadounidenses no encontraban apenas resistencia japonesa en
tierra, pero una flota que llegaba con refuerzos fue bombardeada
por la aviación y un barco resultó hundido y otros dos, así como
varias barcazas de desembarco, resultaron dañados. Unos 42 hombres
resultaron muertos o gravemente heridos. Para compensar la pérdida
de material la aviación estadounidense lanzó suministros por la
tarde.
En Nueva Guinea, Lakona caía en manos de los australianos tras un
ataque final apoyado por cinco tanques. Encontraron 47 japoneses
muertos y mataron a otros 17 en la posterior limpieza de la zona.
En Croacia los alemanes mataron a 81 habitantes de las ciudades
de Lug y Kug como represalia por ataques
partisanos en la zona.
En Italia los alemanes contraatacaron en Orsogna con
paracaidistas apoyados con tanques, pero terminaron siendo
rechazados. Antes incluso de que el contraataque terminara los
neozelandeses atacaron de nuevo Orsogna con dos escuadrones de
tanques, pero ante el intenso fuego de la artillería y de la
artillería antitanque, la infantería acabó separada de los tanques
y éstos se convirtieron en un objetivo fácil. Al final del día los
alemanes habían retrocedido un poco, pero Orsogna seguía
firmemente en su poder. En San Pietro los alemanes lanzaron un
contraataque como cobertura para retirarse unos km más atrás,
hasta San Vittore.
En San Pietro Infine los alemanes lanzaron un contraataque para
cubrir su retirada a nuevas posiciones en algunos montes situados
un poco más hacia el norte. Las bajas aliadas en la captura de San
Pietro ascendieron a 400 muertos y 800 heridos.
Destructores estadounidenses hundieron un submarino alemán cerca
de la costa de Argelia.
Esa noche Berlín fue bombardeada por 483 bombarderos. La aviación
alemana logró abatir 25 de ellos y, extraordinariamente, hubo más
bajas (29 aviones) durante el aterrizaje en Gran Bretaña debido al
mal tiempo. El sistema ferroviario en los alrededores de Berlín
resultó gravemente dañado, hasta el punto de que un millar de
vagones cargados con material destinado al frente oriental quedó
retenido durante seis días. El Teatro Nacional fue destruido. La
campaña de bombardeos había inutilizado ya una cuarta parte de las
casas particulares de la ciudad.
Otro bombardeo británico en Bremen hundió un carguero finlandés (Vienti).
Un submarino alemán hundió un petrolero estadounidense (McDowell)
cerca de las Antillas Neerlandesas.
El 17 de diciembre la aviación
australiana hundió un transporte japonés (Wakatsu Maru)
cerca de Timor.
Dado que Rabaul estaba muy bien defendido, los estadounidenses
optaron por no tratar de invadirlo, sino de anular su base aérea
mediante bombardeos, ahora que estaba ya bajo el radio de acción
de varias bases aéreas. Ese día se inició la "campaña de
pacificación" con un bombardeo con más de 80 aviones. Los
japoneses apenas respondieron al ataque y por ello sólo siete
cazas japoneses pudieron ser abatidos. Los estadounidenses
perdieron tres aviones.
Otros mil judíos fueron deportados a Auschwitz desde el campo de
concentración de Drancy, en Francia. Sólo 42 sobrevivirían a la
guerra.
Un submarino alemán hundió un carguero británico (Kingswood)
en en golfo de Guinea.
Los japoneses pensaban que el desembarco aliado en Arawe era una
maniobra secundaria de distracción, así que el mayor Masamitsu
Komori recibió órdenes de dirigirse hacia el lugar al frente
de un batallón para contener la cabeza de playa. La noche del 18 de diciembre otro regimiento desembarcó
en Omoi con la misión de reunirse con Komori en Didmop.
En Bougainville los intentos de expulsar a los japoneses de la
colina Hellzapoppin mediante artillería y ataques aéreos estaban
fracasando debido a la densa selva que dificultaba la precisión de
los ataques y provocaba a menudo incendios que les servían a los
japoneses como cortinas de humo. Finalmente se decidió llevar a
cabo un ataque a gran escala al anochecer. Como preparación,
durante la mañana se produjeron tres ataques aéreos junto con un
ataque por parte de la artillería. Poco antes del ataque terrestre
tuvo lugar un cuarto bombardeo aéreo en cooperación con
observadores avanzados en tierra. Se lanzaron 48 bombas de 45 kg.
Finalmente se inició el avance por dos frentes. Los
estadounidenses se encontraron con que los bombardeos habían
aclarado la vegetación y habían obligado a los japoneses a
abandonar sus trincheras y eso los convirtió en blancos fáciles.
La colina fue capturada con 12 muertos y 23 heridos, frente a unas
bajas japonesas de al menos 50 muertos.
Un submarino estadounidense hundió un destructor japonés (Numakaze)
y un carguero (Gyokurei Maru) en el mar de la China
Oriental.
En el Mediterráneo, un submarino polaco hundió un carguero griego
(Christopholis) y otro británico hundió un carguero francés
(La Foce).
En Italia, el mayor Vokes puso en práctica el mayor ataque
conducido hasta entonces contra "el barranco". A las 8:00 la
artillería canadiense empezó a bombardear un frente de 900 metros
a una profundidad de 300 metros. Cada cinco minutos el área
bombardeada avanzaría 100 metros mientras la infantería avanzaría
por tierra apoyada por tanques. Al principio el plan funcionó
bien, pero cuando la artillería trasladó el área bombardeada, los
alemanes situados en los 100 metros que a partir de entonces
quedaron libres de bombas se reorganizaron rápidamente y
ametrallaron devastadoramente a las tropas terrestres. El ataque
tuvo que ser suspendido inmediatamente.
En Marruecos varios políticos nacionalistas se reunieron
clandestinamente en Rabat bajo la dirección de Ahmed Balafrej,
que había sido encarcelado por las autoridades francesas antes de
la guerra y amnistiado tras la invasión aliada, y fundaron el Partido
de la Independencia, que fue organizado alrededor de una
secretaría clandestina de cuatro miembros, presidida por Balafrej,
de la cual dependerían las secciones regionales con un alto grado
de autonomía, que a su vez controlarían células locales de entre
10 y 15 miembros.
El 19 de diciembre la aviación
estadounidense hundió dos cargueros de un convoy japonés (Alaska
Maru y Kaito Maru) cerca de Nueva Irlanda. Otro
carguero (Shoei Maru) fue hundido también por la aviación
cerca de las islas Marshall.
Rabaul fue bombardeado de nuevo, y cuatro aviones japoneses
fueron abatidos. Komori llegó a Didmop y reunió bajo su mando las
unidades que se habían retirado tras el desembarco aliado.
Interrogó a testigos presenciales del desembarco y se formó la
idea errónea de que había sobrestimado en gran medida el tamaño de
la fuerza aliada, y empezó a planear un ataque.
El 20 de diciembre submarinos
estadounidenses hundieron un destructor (Fuyō)
y dos cargueros japoneses (Konan Maru y Tsuneshima Maru)
en varios puntos del Pacífico.
En Nueva Guinea los australianos cruzaron el río Masaweng
y expulsaron a los japoneses de su última línea defensiva antes de
Sio. La moral japonesa se había venido abajo y a partir de ese
momento cesó toda resistencia organizada. En las últimas semanas
unos 420 japoneses habían muerto en la zona como consecuencia de
enfermedades, el hambre o el suicidio.
Sofía fue bombardeada y 113 edificios fueron arrasados. Hubo 64
muertos y 93 heridos. La aviación búlgara derribó tres bombarderos
y siete cazas aliados y perdió dos aviones, uno de ellos en una
embestida suicida del piloto Dimitar Spisarevski, que
derribó un avión enemigo.
En Zagreb la Ustacha colgó en ganchos de carnicería a 16
antifascistas croatas en una calle como represalia por la muerte
de un miembro de la Ustacha a manos de los partisanos. Mientras
tanto los chetniks mataban a 68 civiles en Vranić, cerca
de Belgrado, por sospechas de que escondían o ayudaban a los
partisanos.
El mayor Vokes organizó una maniobra envolvente contra "el
barranco" que se inició con un ataque de artillería que siguó con
un avance de la infantería apoyada por tanques que logró al final
del día una buena posición para atacar "el barranco", pero cuando
iniciaron el avance sobre él se dieron cuenta de que los alemanes
se habían retirado hasta Ortona, donde los canadienses acababan de
iniciar un ataque.
Frankfurt fue bombardeada con 650 aviones. La aviación alemana
logró derribar 41 aviones enemigos. Hubo dos ataques de diversión
al mismo tiempo, uno en Mannheim con 54 aviones y otro contra una
fábrica de armas cerca de Lieja, que, no obstante, no logró
acertar en el objetivo.
La aviación estadounidense hundió un submarino alemán en el
Atlántico, mientras otro submarino hundía un carguero británico (Phemius)
en el golfo de Guinea.
El presidente boliviano Enrique Peñaranda fue derrocado por un
golpe de Estado dirigido por el mayor Gualberto Villarroel,
apoyado por el Movimiento Nacionalista Revolucionario,
fundado dos años atrás por Víctor Paz Estenssoro, y por el
Partido de la Izquierda Revolucionaria. El primero era de
carácter nacionalista, y algunos de sus miembros simpatizaban con
el Eje, mientras que el segundo era marxista-leninista.
El 21 de diciembre submarinos
estadounidenses hundieron un petrolero japonés (Terukawa Maru)
y un carguero (Uyo Maru) en el Pacífico.
El avance hacia Sio se había convertido en una mera persecución
de japoneses en fuga. Al llegar al arroyo de Hubika
encontraron unos 40 japoneses muertos en una cueva, que habían
sido abandonados sin ser enterrados.
Tras la captura de la colina Hellzapoppin, en Bougainville, los
estadounidenses se habían dedicado a construir defensas en ella y
sus alrededores, y durante unos días los japoneses se habían
mantenido alejados, hasta que ahora una patrulla de marines se
enzarzó en un tiroteo con otra patrulla japonesa cerca de una
colina que en los mapas figuraba como 600A. La patrulla se retiró
e informó de la presencia japonesa. Por la tarde se envió un
destacamento que no tuvo dificultad en tomar hacerse con la
colina. Sin embargo, los estadounidenses no eran suficientes para
resistir un posible contraataque japonés, así que por la noche
volvieron a su base al anochecer.
Un convoy de refuerzo a Arawe fue atacados tres veces por
bombarderos japoneses mientras descargaba los suministros que
transportaba. Unos 150 aviones japoneses atacaron Arawe a lo largo
del día.
Los alemanes iniciaron la operación Tormenta de nieve en
Bosnia, contra los partisanos que habían esquivado la anterior
operación Kugelblitz. Esencialmente consistió en incendiar
diversas localidades, mientras los chetniks colaboraban con
saqueos y violaciones previas de mujeres ni niñas. Se calcula que
los partisanos perdieron unos 2.000 hombres.
Los canadienses entraron en Ortona con tres tanques, y allí
tuvieron que librar contra los alemanes una cruenta batalla casa
por casa. Los canadienses emplearon una técnica poco habitual para
avanzar por la ciudad. En lugar de moverse por las calles, donde
serían un blanco fácil para los alemanes, avanzaban por el
interior de los edificios abriendo boquetes en las paredes. Aun
así, las bajas eran numerosas.
Ese día se estrenó La canción de Bernadette, una película
sobre Santa Bernadette de Lourdes, dirigida por Henry King
y que supuso el debut de una joven actriz de 24 años llamada Phylis
Lee Isley, pero que adoptó el nombre artístico de Jennifer
Jones. Hasta entonces sólo había interpretado dos pequeños
papeles secundarios, pero luego no pasó unas pruebas para la
Paramount y eso interrumpió su carrera. Había tenido dos hijos y
había conseguido trabajo como modelo publicitaria y diseñadora de
sombreros. Luego se había presentado de nuevo a unas pruebas ante
el productor David Selznick, pero se fue llorando al
considerar que lo había hecho muy mal. Sin embargo, cuando
Selznick estaba buscando la actriz que protagonizaría su nueva
película, se acordó de ella y la hizo llamar. Henry King le hizo
otra prueba, quedó impresionado y la seleccionó entre varios
cientos de aspirantes.
El 22 de diciembre un submarino
estadounidense hundió un carguero japonés (Haferland Go)
cerca de la costa japonesa. La aviación estadounidense hundió otro
carguero (Ginrei Maru) al sur de Hong Kong.
Un pelotón bien armado fue enviado a la colina 600A en
Bougainville, pero se encontró con que durante la noche los
japoneses habían vuelto a ocuparla y habían construido un buen
sistema defensivo. Los estadounidenses tuvieron que retirarse y
poco después volvieron con una compañía entera. Su comandante,
creyendo erróneamente que los japoneses estaban únicamente en la
cumbre y no en la base o en la ladera opuesta, organizó un ataque
por tres puntos que resultó un fracaso.
Torpederas británicas hundieron un crucero alemán (Niobe)
que había encallado días antes en la costa yugoslava.
Una brigada india falló en un ataque a Villa Grande, en
Italia.
Esa noche 51 aviones atacaron dos puntos desde donde los alemanes
lanzaban bombas autopropulsadas, entre Abbeville y Amiens. Uno de
ellos fue destruido, pero el otro no fue localizado. Colonia
también fue bombardeada.
El 23 de diciembre la aviación de la
marina estadounidense hundió un transporte japonés (Nankai Maru)
cerca de las islas Marshall.
En Bougainville los estadounidenses lanzaron varios ataques
infructuosos contra la colina 600A. Con esta captura los japoneses
habían perdido el control sobre todas las alturas que rodeaban la
cabeza de playa aliada, por lo que ésta pasaba a ser ya mucho más
segura.
Ese día tuvo lugar el primer bombardeo a gran escala contra
Rabaul. Esta vez 40 aviones japoneses se enfrentaron a los
atacantes y éstos aseguraron haber derribado al menos 30, si bien
las cuentas japonesas no coinciden.
Un submarino japonés hundió un carguero británico (Peshawur)
en el golfo de Bengala.
Un submarino británico hundió un carguero alemán (Balkan)
cerca de la isla griega de Lemnos.
Montgomery fue relevado del mando en Italia para participar en
los preparativos de la Operación Overlord, la invasión de
Francia que los aliados pensaban poner en marcha el año siguiente.
El mando de las tropas británicas en Italia pasó al teniente Sir Oliver
Leese.
Mientras tanto un batallón británico atacó de nuevo Villa Grande,
esta vez con mayor éxito. Después de que un contraataque por parte
de paracaidistas alemanes fuera rechazado al mediodía, los
británicos entraron en la ciudad, si bien durante todo el día se
prolongó un mortífero combate a pequeña escala en las calles de la
ciudad.
En un nuevo ataque contra Orsogna, los británicos pudieron
apoderarse de Arielli.
Esa noche 379 aviones atacaron Berlín, de los cuales 16 fueron
derribados. El mal tiempo hizo que el bombardeo fuera poco
efectivo.
Ese día se estrenó Dos en el cielo, una película bélica
dirigida por Victor Fleming y protagonizada por Spencer Tracy. En
ella Tracy muere en un ataque suicida con su avión a un
portaaviones alemán. A nadie le importó que Alemania no tuviera en
realidad portaaviones alguno. Las críticas fueron buenas y la
recaudación mucho mejor. El caso es que el personaje interpretado
por Tracy va al cielo y allí recibe la misión de convertirse en
ángel de la guarda de un joven piloto, y éste fue el primer papel
en el que destacó un actor de 27 años llamado Charles Van Dell
Johnson, que había adoptado el nombre artístico de Van
Johnson. Durante el rodaje sufrió un accidente de coche que
le dejó una placa de metal en la frente y unas cicatrices que la
cirugía estética no podía disimular. La Metro Goldwyn Mayer quiso
sustituir a Johnson en el rodaje, pero Tracy insistió en que se le
permitiera terminar la película, lo que requirió un espeso
maquillaje.
El 24 de diciembre un submarino
estadounidense hundió un carguero japonés (Seizan Maru) y
un transporte (Tofuku Maru) cerca de las costas japonesas.
Otro hundió otro carguero (Heiwa Maru) en el Pacífico. Un
destructor estadounidense hundió un submarino japonés cerca de
Guadalcanal.
Rabaul sufrió otro bombardeo al mismo tiempo que portaaviones
estadounidenses atacaban Kavieng, en Nueva Irlanda, donde
hundieron
un transporte japonés (Tenryu Maru).
Las fuerzas japonesas desembarcadas en Omoi habían tardado ocho
días en recorrer los 11 km de distancia hasta Dismop, en parte
porque tenían que atravesar una selva sin caminos en la que se
perdieron varias veces y en parte porque se paraban ante el menor
temor de encontrarse con fuerzas estadounidenses.
Aunque los japoneses habían resistido los ataques del día
anterior contra la colina 600A, en Nueva Guinea, patrullas
estadounidenses detectaron que por la noche se habían retirado,
así que la colina pudo ser ocupada.
Los soviéticos decidieron celebrar la Nochebuena lanzando un
ataque contra los alemanes en Ucrania, cerca de Kiev. El general
Erich von Manstein trató de organizar un contraataque por un
flanco del frente soviético, pero fracasó.
Una brigada de infantería neozelandesa se unió a los combates en
Orsogna, pero por la tarde estaba claro que la resistencia alemana
no iba a quebrarse.
Un destructor francés atacó a un carguero alemán en el
Mediterráneo (Nicoline Maersk), que se vio obligado a
encallar en la costa española.
Ese día se estrenó en Gran Bretaña Jane Eyre, protagonizada por Orson Welles y Joan Fontaine.
Un submarino alemán fue hundido por un destructor estadounidense
cerca de las Azores. Por otra parte, submarinos alemanes hundieron
un destructor británico (HMS Hurricane), otro
estadounidense (USS Leary) y un lanzador de aeroplanos
británico (Dumana) en varios puntos del Atlántico.
Roosevelt nombró al general Eisenhower máximo responsable
estadounidense en la Operación Overlord.
El 25 de diciembre empezó a funcionar
en Bougainville una segunda pista de aterrizaje para bombarderos,
situada más hacia el interior que la que hasta el momento estaba
operativa cerca de la playa.
A las primeras horas del día las fuerzas de Komori llegaron hasta
las posiciones estadounidenses en Arawe. Durante la mañana
tendieron una emboscada a dos patrullas que viajaban en camiones.
Los estadounidenses se refugiaron en Umtingalu y allí
recibieron refuerzos. A lo largo del día lograron matar a tres
japoneses que merodeaban la zona. Por la noche unos 50 japoneses
lanzaron un ataque mal coordinado y fueron rechazados. Los
estadounidenses contaron un muerto y ocho heridos, mientras que
los japoneses tuvieron unos doce muertos o heridos.
En Nueva Guinea los australianos se tomaron un descanso por
Navidad. Gracias a un esfuerzo logístico, todas las unidades
recibieron comida navideña. Incluso una patrulla que estaba a
bastante distancia de su base recibió sus raciones por transporte
aéreo.
Unos días atrás había zarpado de Gran Bretaña el convoy JW 55B,
con destino a la Unión Soviética. La Luftwaffe primero, y
luego un submarino alemán, habían detectado su presencia y lo
estaban siguiendo. Los británicos lo sabían y habían reforzado su
escolta, de modo que ahora constaba de un acorazado, un crucero
pesado, tres cruceros ligeros y nueve destructores, bajo el mando
del almirante Sir Bruce Fraser. La flota se mantuvo a
distancia porque Fraser quería que el convoy fuera un señuelo que
atrajera al acorazado Scharnhorst, que en efecto ese mismo
día recibió órdenes de zarpar de su base en Noruega para
interceptar el convoy.
Un batallón indio se unió como refuerzo a la batalla en Villa
Grande y atacó tras un bombardeo de artillería.
En el extremo occidental de Nueva Bretaña hay una prominencia
semicircular hacia el norte llamada cabo de Gloucester,
donde los japoneses tenían dos campos de aviación. Ahora que el
desembarco en Arawe había desviado alrededor de un millar de
soldados japoneses de la zona, al amanecer del 26
de diciembre se inició una operación de desembarco en el
cabo de Gloucester en dos puntos opuestos, al este y al oeste del
mismo. En primer lugar la flota estadounidense bombardeó las
posiciones costeras japonesas (durante los meses previos una serie
de bombardeos aéreos habían destrozado buena parte de las defensas
interiores) y a continuación siete escuadrones de bombarderos y
cinco de aviones de ataque completaron la preparación del
desembarco, mientras varios escuadrones de cazas patrullaban para
impedir un posible ataque aéreo japonés. Seguidamente se
produjeron los desembarcos, el principal al este, en Silimati,
mientras que al oeste, en Tauali, desembarcó únicamente un
batallón para confundir a los japoneses. A las 8:35 quedó
establecida la cabeza de playa en Tauali, y a las 10:30 se habían
conseguido todos los objetivos previstos para el día. Por la noche
el perímetro estaba bien consolidado. En Silimati el desembarco se
produjo en dos playas cercanas con escasos incidentes y escasa
resistencia japonesa.
La aviación japonesa de Rabaul había salido hacia Arawe esa
mañana, así que, al llegar las noticias de los desembarcos, tuvo
que regresar a Rabaul para repostar y llegó al cabo de Gloucester
sobre las 14:30. El ataque aéreo terminó con el hundimiento del
destructor USS Brownson y con bastantes bajas en otros dos
destructores. No obstante, varios aviones japoneses fueron
derribados, y a lo largo del día desembarcaron unos 13.000
soldados y unas 7.600 toneladas de equipamiento.
La cabeza de playa en Arawe fue atacada por la noche por unos 15
japoneses, que fueron rechazados.
Paralelamente, 220 soldados estadounidenses y australianos
desembarcaron en Long Island, situada al norte de la
península de Huon, en Nueva Guinea, donde no encontraron presencia
japonesa. Unos días más tarde instalaron allí una estación de
radar. Los japoneses nunca intentaron invadir la isla.
Un submarino estadounidense hundió un petrolero japonés (Kyolu
Maru) al sur de Indonesia.
El contralmirante Erich Bey, al mando del Scharnhorst,
no encontraba el convoy aliado que debía atacar. Pensando que lo
había sobrepasado, envió sus destructores de escolta a rastrear la
zona. El tiempo era malo y la Luftwaffe apenas le ayudó en
la exploración, así que sobre las 9:00 la flota del almirante
Fraser se encontró con el Scharnhorst sin escolta alguna.
Desde una distancia de unos 12 km, los cruceros británicos
abrieron fuego. El Scharnhorst respondió, pero recibió dos
impactos sin que ninguno de sus disparos diera en el blanco. Uno
de los impactos destruyó su sistema de radar, así que los
artilleros tuvieron que guiarse a partir de ese momento por los
destellos de los cañones enemigos. Bey ordenó una huida y, debido
al mal tiempo, el vicealmirante Robert Burnett, que
comandaba la escolta del convoy JW 55B, decidió no ir en su
persecución. La decisión fue controvertida, pero Fraser la apoyó.
Para alivio de Burnett, al mediodía el Scharnhorst se
presentó ante el convoy, pero ahora con su escolta de
destructores. Se produjo un intercambio de disparos en los que el
crucero británico Norfolk resultó dañado. Bey vio que la
flota aliada era mayor de la esperada y ordenó que el Scharnhorst
volviera a puerto mientras los destructores atacaban el convoy en
una posición proporcionada por un submarino, que resultó ser
incorrecta, así que los destructores no encontraron nada. El
crucero Belfast pudo seguir al Scharnhorst y
mantenerlo en el radio de su radar. El Norfolk y el otro
crucero pesado, el Sheffield, tuvieron que quedarse atrás
por problemas en sus motores. Si el Scharnhorst hubiera
tenido sus radares en buen funcionamiento, habría podido detectar
al Belfast aislado y destruirlo con relativa facilidad,
pero no fue así y el Belfast pudo guiar al acorazado Duke
of York y sus cuatro destructores de escolta, que a las
16:15 localizaron al Scharnhorst en sus radares. A las
16:48 el Belfast lanzó bengalas para iluminar al Scharmhorst,
que fue cogido por sorpresa. El Duke of York abrió fuego y
destruyó las torretas delanteras del Scharmhorst. Otro
disparo destruyó el hangar de aeroplanos. Bey viró al norte, pero
se encontró con el Norfolk y el Belfast. Entonces
viró al este a toda máquina. Un disparo del Scharmhorst
rompió los cables que conectaban el radar con la artillería. Un
marinero tuvo que trepar a un mástil para repararlos. A las 18:20
un disparo del Duke of York en el extremo de su radio de
alcance perforó el blindaje del Scharmhorst y destruyó una
de sus calderas. La velocidad del acorazado disminuyó
drásticamente y era cuestión de minutos que el barco quedara al
alcance de los torpedos de los destructores enemigos. A las 18:25
Bey envió un mensaje a su base en el que decía: Lucharemos
hasta disparar la última bomba. A las 18:50 el Scharmhorst
empezó a recibir impactos de torpedos. Con sus disparos logró
dañar uno de los destructores que le atacaban, lo que disminuyó
aún más su velocidad, lo que permitió al Duke of York
aproximarse más todavía. Rodeado por barcos enemigos que no
cesaban de disparar contra él, a las 19:45 volcó y se hundió. De
sus 1.958 tripulantes, sólo 36 pudieron ser rescatados por los
británicos. Entre ellos no se encontraba el contralmirante Bey.
Finalmente los británicos tomaron Villa Grande, en Italia, así
como el monte Morello, que dominaba San Vittore.
Dos cargueros se dirigían a Francia procedentes de Japón con
valiosos suministros. Viajaban sin escolta, tratando de pasar
desapercibidos y burlar el bloqueo. El Osorno iba delante,
pero fue bombardeado por la RAF cuando estaba ya cerca de
la costa, en su precipitación por huir del ataque chocó contra los
restos de un barco sumergido y se vio obligado a encallar en una
playa. Su cargamento pudo ser salvado.
Un submarino alemán hundió un petrolero estadounidense (Chapultepec)
cerca de Sierra Leona.
Ese día se estrenó Tarzán y el misterio del desierto,
protagonizada por Johny Weissmuller. Previamente había estrenado El
triunfo de Tarzán. En ambas se menciona a Jane, pero
el personaje no aparece en escena porque Maureen O'Sullivan estaba
en Gran Bretaña cuidando de su marido, John Farrow, que
había contraido el tifus durante su servicio en la marina, en el
Caribe. En ambas películas, como no podía ser de otro modo, los
malos son los alemanes. En la escena final de El triunfo de
Tarzán, la mona Chita se pone a hablar por una radio
alemana y los alemanes la confunden con Hitler.
El 27 de diciembre submarinos
estadounidenses hundieron dos petroleros japoneses (Kenyo Maru
y Kyūei Maru) y un portahidroaviones (Kimikawa Maru),
éste en la costa japonesa.
Desde Silimati, los estadounidenses avanzaron casi 5 km hacia el
oeste, en dirección hacia el campo de aviación japonés, y fueron
detenidos en lo que llamaron el punto del infierno, donde
los japoneses habían bloqueado la carretera.
Tras el descanso navideño, los australianos reanudaron su avance
hacia Sio en Nueva Guinea, precedidos por ataques aéreos a cargo
de 30 bombarderos. En el interior, desde el valle del Ramu los
australianos empezaron a avanzar hacia los montes Finisterre,
en una de cuyas montañas había una fortaleza japonesa. El primer
objetivo era un saliente rocoso ocupado por un regimiento japonés.
A las 8:06 tuvo lugar un ataque aéreo, seguido de una hora de
bombardeo por parte de la artillería. Hacia las 9:46 los
australianos empezaron a llegar a la cumbre, aunque los japoneses
no fueron expulsados completamente hasta el día siguiente.
Esa noche la cabeza de playa en Arawe fue atacada por segunda
vez, también por un grupo reducido de japoneses, también sin
resultado alguno.
Un submarino alemán hundió un carguero estadoundense (José
Navarro) cerca de la costa de la India.
Von Manstein pidió permiso a Hitler para retroceder ante la
ofensiva soviética, pero la respuesta fue la acostumbrada:
mantener la posición.
Gracias al descifrado de mensajes alemanes, los británicos
estaban al tanto de la existencia del Alsterufer, el
segundo barco que pretendía burlar el bloqueo naval y que
transportaba suministros desde Japón, concretamente caucho y
tungsteno. Por ello el crucero Glasgow salió de las Azores
en su busca, y pronto se le unió el Enterprise. Sin
embargo, finalmente fue un escuadrón checoslovaco de la RAF
el que localizó el barco y lo hundió.
El 28 de diciembre la aviación
estadounidense hundió cinco transportes japoneses (Daitei Maru,
Heizan Maru, Kola Maru, Kuluzan Maru y Unyo Maru) en
el río Yangtsé. Un submarino estadounidense hundió un carguero
japonés (Shuntai Maru) en el mar de la China Oriental.
En el cabo de Gloucester los estadounidenses crearon una tercera
cabeza de playa más cercana a los puntos donde se producían los
combates contra los japoneses, lo que facilitó la llegada de
suministros. El punto del infierno fue rebasado con nueve
muertos y 36 heridos estadounidenses, frente a más de 266
japoneses muertos.
En Arawe Komori envió unos 25 hombres a destruir los morteros
estadounidenses, para lo cual se infiltraron en sus líneas
atravesando unos pantanos, pero fueron detectados antes de que
pisaran tierra seca y se retiraron dejando 17 muertos.
En Nueva Guinea los australianos que avanzaban hacia Sio
volvieron a entrar en contacto con los japoneses que se huían de
ellos, y que les habían sacado ventaja por la pausa navideña.
Un submarino japonés hundió un carguero estadounidense (Robert
F. Hoke) en el golfo de Omán.
Los soviéticos atacaron Kazatin, en Ucrania, y tras
varias horas de combate la capturaron.
Un submarino británico hundió un carguero alemán (Oldenburg)
ante la costa noruega.
Tras ocho días de combate, los alemanes se retiraron finalmente
de Ortona. Las bajas canadienses durante toda la campaña en el río
Moro fueron de 1.375 hombres. En Ortona los alemanes perdieron 867
hombres y además hubo unos 1.300 civiles muertos. El aeropuerto de
Ciampino y la base aérea de Guidonia en Roma fueron bombardeados
por la aviación estadounidense.
Un submarino de la Francia Libre hundió un carguero de la Francia
de Vichy (Chisone) cerca de Toulon.
Los alemanes no sabían que el Alsterufer había sido
hundido, y dos flotillas compuestas por 5 destructores y 6
torpederas salieron a su encuentro para escoltarlo en el tramo
final de su viaje. La aviación aliada las detectó y los dos
cruceros que habían sido enviados a interceptar el Alsterufer
se dirigieron hacia ellas. La aviación alemana también los detectó
y lanzó un ataque aéreo, que fue rechazado. A las 13:30 el Glasgow
divisó los destructores alemanes. Los cruceros maniobraron para
tratar de cortarles la retirada hacia su base. Se inició un
intercambio de disparos a larga distancia, que durante un tiempo
no dio lugar a impacto alguno, debido también en parte al mal
estado del mar. Sólo a las 14:05 una bomba alemana explotó en una
de las calderas del Glasgow, dejando dos muertos y seis
heridos. Sobre las 14:35 uno de los destructores alemanes recibió
un impacto del Enterprise que destrozó una caldera y
alcanzó un depósito de combustible, lo cual desencadenó a su vez
un gran incendio. Mientras tanto el Glasgow se concentraba
en una de las torpederas, que recibió varios impactos que dejaron
a casi todos sus tripulantes muertos o heridos. Otra torpedera que
trató de acudir en su auxilio tuvo que abandonar el intento tras
recibir varios impactos. Una tercera recibió luego otro impacto de
gravedad y el Enterprise se encargó de hundirla mientras
el Glasgow buscaba a la otra. Sin embargo, con quien se encontró
fue con el destructor dañado, que navegaba a la deriva y no tuvo
dificultad en hundirlo. La otra torpedera dañada fue hundida poco
después. Los dos cruceros se reunieron y, sin hallar rastro de los
restantes barcos alemanes, pusieron rumbo a Gran Bretaña.
El 29 de diciembre un submarino
estadounidense hundió tres cargueros japoneses en el Pacífico (Ryuto
Maru, Shichisei Maru y Tenposan Maru).
Los marines estadounidenses habían roto las defensas japonesas
alrededor del campo de aviación más próximo en el cabo de
Gloucester, y al final del día controlaban la mayor parte del
mismo.
Los japoneses transfirieron las islas Andaman a la India Libre de
Subhar Chandra Bose, que visitó Port Blair para izar la
bandera tricolor el Ejército Nacional Indio. Los japoneses se
aseguraron de que Bose no pudiera entrar en contacto con la
población local, no le fueran a contar las cómo los japoneses
usaban a los indios como mano de obra esclava, o cómo centenares
de nacionalistas indios estaban siendo torturados en la cárcel.
Cuando Bose se marchó, los japoneses siguieron controlando en la
práctica las islas, de modo que la "India Libre" no fue más que
una ficción. Bose nombró al general Arcot Doraiswamy
Loganathan gobernador de las islas, pero los japoneses sólo
le dieron competencias sobre educación.
Los soviéticos capturaron Korosten, en Ucrania.
Esa noche Berlín fue bombardeada por 712 aviones británicos, pero
las nubes hicieron que los daños fueran leves.
La aviación alemana hundió un submarino francés (Protée)
en el Mediterráneo.
Ese día se estrenó Compañero de mi vida, un drama
protagonizado por Ginger Rogers en el que varias mujeres conviven
durante la ausencia de sus maridos, que están en la guerra. La
película termina con una fiesta de bienvenida para uno de los
maridos, que las visita durante un permiso, pero ese mismo día el
personaje de Rogers recibe un telegrama que le comunica la muerte
de su esposo. La escena final de la película es un enternecedor
discurso que Rogers dirige a su bebé, explicándole que el padre al
que nunca conocerá es un héroe, tras lo cual se seca las lágrimas
y se dispone a bajar para unirse a la fiesta.
El 30 de diciembre un submarino
estadounidense hundió un carguero japonés (Ichiyu Maru) en
el mar de Java.
Los estadounidenses ocupaban ya los dos aeropuertos del cabo de
Gloucester. Uno de ellos estaba en muy mal estado y decidieron no
restaurarlo para concentrarse en el otro. La cabeza de playa
occidental sufrió un fuerte ataque japonés que finalmente pudo ser
rechazado. Los japoneses contaron 89 muertos y 5 capturados,
mientras que los marines tuvieron 6 muertos y 17 heridos.
En Moscú se estrenó la Segunda sinfonía de Jachaturián.
El compositor se había afiliado recientemente al Partido Comunista
de la Unión Soviética.
Un bombardeo aliado en Sofía dejó 70 muertos y 96 heridos.
El convoy JW 55B llegó a la Unión Soviética sano y salvo.
El 31 de diciembre un submarino
estadounidense hundió un carguero japonés (Shoho Maru) en
el Pacífico.
En Nueva Guinea, un batallón de tanques se puso a la vanguardia
del avance australiano hacia Sio.
Los soviéticos tomaron Zhitomir, en Ucrania. Las tropas
alemanas empezaban a dispersarse dejando huecos en el frente.
Cerca de Zhitomir se creó un hueco de unos 55 km de longitud.
Ese día se estrenó con gran éxito Destino Tokio, una
película en la que Cary Grant interpreta al capitán de un
submarino. El rodaje lo dejó agotado, pues se completó en seis
semanas.
Durante el mes de diciembre, los servicios secretos soviéticos
tenían pensado ejecutar un plan para sacar de México a Ramón
Mercader, el asesino de Trotski, y llevarlo a la Unión Soviética
para honrarlo como los comunistas honraban a los asesinos.
Pretendían aprovechar el momento en que Mercader saldría de la
cárcel para declarar en el juzgado. Pero por entonces había
llegado a México Caridad Mercader, la madre de Ramón, que estaba
hablando con muchas autoridades implorando que liberaran a su
hijo. Esto desató las sospechas del gobierno y las medidas de
seguridad se reforzaron, con lo que el plan tuvo que ser
abandonado.
A quien sí que pudieron rescatar los comunistas fue al vietnamita
Ho Chi Minh, que seguía encarcelado en China hasta que los
comunistas chinos lo sacaron de la cárcel y le facilitaron su
regreso a Vietnam.
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