Una vez hemos determinado cuál es nuestra necesidad de información, hemos diseñado nuestra estrategia de búsqueda, seleccionado las fuentes apropiadas de información, es el momento de evaluar los resultados obtenidos para ver si se ajustan a lo que necesitamos y, en caso contrario, revisar nuestra estrategia.

• Valorar los resultados de la búsqueda: cantidad, calidad y relevancia
• Revisar la estrategia de búsqueda
• Evaluar los recursos: fiabilidad, validez, exactitud (precisión), autoridad, actualidad y punto de vista.