Docencia

Las matemáticas son elegantes, poderosas y sorprendentes. Para mí las matemáticas nunca han sido un trabajo más que una pasión y un juego continuo rodeado de lógica, precisión, elegancia y perfección.

Filosofía de la enseñanza

A lo largo de mi carrera docente, he tenido la oportunidad de interactuar con estudiantes en todas las etapas de la vida, desde la escuela primaria hasta la universidad y la matemática recreativa, tanto en el aula como en entornos individuales.

Como profesor, muchas veces he tenido que afrontar la cuestión

¿Por qué necesitamos aprender matemáticas?


Mi respuesta suele estar cerca de la respuesta dada por Travers, J., et al. Enseñanza de las matemáticas. Nueva York: Harper & Row Company (1977),

“las matemáticas son útiles, las matemáticas son hermosas y las matemáticas disciplinan la mente”.


Teniendo estas tres ideas en mente, trato de mostrarles a mis estudiantes las ideas importantes detrás de las matemáticas que estamos estudiando y por qué estas ideas no solo son importantes y útiles, sino también hermosas y elegantes. Mi principal objetivo en mis cursos es hacer que los estudiantes obtengan la comprensión fundamental de los conceptos e ideas detrás del material, y sepan cómo usarlos en matemáticas y situaciones de la vida real.

El aprendizaje es un proceso complejo que a menudo se ve ensombrecido por los procesos de repetición y memorización. Los estudiantes deben construir su propio conocimiento utilizando experiencias, discursos y razonamientos previos. Por eso encuentro sumamente útil cuando los alumnos colaboran en el desarrollo de la clase. Intento convertirlos en usuarios activos de la experiencia de aprendizaje utilizando métodos de enseñanza como el aprendizaje basado en la investigación, el método de Moore o el aula invertida.

Estilo de enseñanza

Mi principal objetivo en mis clases es crear un ambiente educativo, amigable y abierto, donde los alumnos se sientan libres de participar. Intento crear un entorno abierto donde los estudiantes puedan hacer preguntas libremente y sin preocupaciones. Todas las preguntas son siempre un buen punto para iniciar una discusión constructiva que les ayudará a comprender mejor.

En mi opinión, las clases magistrales son importantes y necesarias, pero mientras tenga tiempo, intento introducir una actividad en la que los alumnos tengan que redescubrir las matemáticas por sí mismos de forma natural. Creo que estas actividades son importantes para el desarrollo de la clase y trato de presentarlas de forma recurrente.