KNUT HAMSUN Y EL CINE


Se conocen al menos dos películas rusas de Hamsun (ambas perdidas) y una checa que datan de los inicios del cine, pero en Noruega todo empezó en 1921 con una versión filmada de La bendición de la tierra. Durante muchos años se pensó que esta película estaba perdida hasta que se encontró una copia en Nueva York en 1971. El actor danés Gunnar Sommerfeldt escribió el guión, financió su proyecto en Noruega, y filmó la película en Røsvassdal, en la provincia de Nordland al norte de Noruega, con actores noruegos y daneses. Sommerfeldt había actuado en una serie de películas mudas en Dinamarca y también había probado suerte con la dirección. Entre los directores para los que había trabajado estaba el renombrado August Blom. Llevó una sala de cine en Copenhague sin mucho éxito. La bendición de la tierra se estrenó el 26 de diciembre de 1921. El proyecto fue acogido con gran interés por la pequeña comunidad del cine noruego, pero el producto final no tuvo el éxito que todo el mundo había esperado. Sommerfeldt no era un director de gran calibre, y el material épico con que contaba necesitaba mayores recursos de los que él había podido juntar.

El siguiente en probar suerte fue Harald Schwenzen, un actor del Teatro Nacional de Oslo. Su versión de Pan se rodó en 1921-22, y se estrenó el 16 de octubre de 1922. Entre los mayores logros de la película está la interpretación de Gerd Grieg en el papel de Edvarda, pero algo menos afortunada fue la elección del hermano del director, Hjalmar Fries, como el teniente Glahn. Mientras se preparaba esta película para su estreno, ya había comenzado el rodaje de otra película de Hamsun; el hábil director sueco John W. Brunius se había interesado por la novela Soñadores. Así se convirtió en el primer director profesional en enfrentarse al mundo de Hamsun. La película se llamó Fuertes voluntades y se estrenó en Estocolmo el 5 de marzo de 1923. Con esta película finalizó la primera ola de películas de Hamsun. Pasaron más de 10 años y la época de silencio terminó cuando la industria alemana del cine aceptó el desafio y produjo una versión de Victoria y un nuevo Pan. En Noruega pasarían muchos años antes de que se hiciera una nueva película basada en la obra de Hamsun: Hambre (1966), de gran éxito, dirigida por el danés Henning Carlsen. En los años setenta la Radiotelevisión Noruega produjo una serie basada en las novelas Rosa y Benoni.

Desde finales de los años ochenta en adelante, los realizadores noruegos y escandinavos han vuelto a interesarse por Hamsun. Esta última ola comenzó en 1989 con Los vagabundos, una gran producción a gran escala para cine y televisión, y siguió con El telegrafista en 1993, que al igual que Fuertes voluntades estaba basada en la novela Soñadores. El telegrafista se convirtió en un gran éxito en los cines noruegos, e incluso en el extranjero. Henning Carlsen, el director de Hambre, regresó a Noruega para hacer Dos plumas verdes (1995), una nueva versión de Pan. En 1995 han visto la luz dos grandes producciones sobre la vida de Hamsun, una por el renombrado director sueco Jan Troell (con la película Hamsun) y la otra gracias a un esfuerzo a gran escala de la Radiotelevisión Noruega. (El enigma de Knut Hamsun dirigida por Bentein Baardson).

¿Por qué Hamsun no ha sido llevado al cine más a menudo? La simpatia de Hamsun por el nazismo es una respuesta obvia y quizá demasiado fácil; mientras la gran mayoría de los noruegos celebraban en 1945 la derrota de los invasores alemanes, Hamsun todavía veneraba tozudamente a Hitler. Aunque el amor y el respeto hacia Hamsun como autor pronto resurgió, y nunca dejó de imprimirse su obra en los años de postguerra, el mundo del cine estaba más interesado en contar historias de la resistencia que en gastar millones en llevar a la pantalla los trabajos del traidor. A pesar de todos los inconvientes, Hamsun ha sido adaptado al cine más a menudo que cualquier otro escritor aparte de Ibsen. Tanto La bendición de la tierra de Sommerfeldt, como Pan de Schwenzen son importantes contribuciones a la escasa cosecha de películas mudas noruegas. En general las películas basadas en las historias de Hamsun han influido significativamente en la fama de la que gozan la cultura y los paisajes de este país.

© Trond Olav Svendsen (texto)


La bendición de la tierra (1921) de Gunnar Sommerfeldt

Pan (1922) de Harald Schwenzen

Fuertes voluntades (1923) de John W. Brunius

Victoria (1935) de Carl Hoffman

Pan (1937) de Olaf Fjord

El capítulo final (1961) de Wolfgang Liebeneiner

Corto es el verano (1962) de Bjarne Henning-Jensen

Hambre (1966) de Henning Carlsen

Misterios (1978) de Paul de Lussanet

Victoria (1979) de Bo Wideberg

Victoria (1988) de Olgerd Dunkers

Vagabundos (1989) de Ola Solum

El Telegrafista (1993) de Erik Gustavson

Dos plumas verdes (1995) de Henning Carlsen

Un aire tan claro (1997) de Yves Angelo

La Edad de Hielo (1974) de Peter Zadek

Hamsun (1996) de Jan Troell

El enigma de Knut Hamsun (1996) de Bentein Baardson