
La Clínica Jurídica para la Justicia Social de la Facultat de Dret y su equipo de más de 180 voluntarios ofrecieron su asesoramiento y apoyo en la reclamación de daños, solicitud de indemnizaciones, asuntos laborales, renegociación de alquileres, asuntos civiles, entre otros.
La Universitat de València puso en marcha este servicio gratuito de asistencia y asesoramiento para los afectados de la comunidad universitaria (estudiantado, personal técnico, de gestión, administración y servicios; personal docente e investigador; y personal investigador en formación), una asistencia que se extendió también a los familiares en primer grado.
Este servicio gratuito se prestó a través de la Clínica Jurídica para la Justicia Social de la Facultat de Dret, dirigida por los profesores Pilar Fernández y Andrés Gascón y que habitualmente presta servicio gratuito a ONG, entidades sin ánimo de lucro y personas sin recursos y en riesgo de exclusión social. Una Clínica que ante esta situación catastrófica dió un paso adelante y amplió sus tareas.
Para eso, contó con un equipo formado por más de 180 personas voluntarias entre estudiantado, profesorado y profesionales de colegios de abogados de todo el territorio español. Se organizaron constituyendo 45 equipos de trabajo para abarcar los diferentes ámbitos en los que los afectados podían necesitar apoyo. De esta manera, 17 grupos de trabajo han brindado apoyo en las áreas de subvenciones y administración; 10 en las reclamaciones de seguros y mercantil; 12 en las de civil y familia; 4 en la de laboral; 1 en penal; y 1 en otras materias.
Después de la primera semana de funcionamiento, este servicio había recibido 71 solicitudes de apoyo, pero esperaban recibir muchas más dado que la Universitat de València tenia contabilizados más de 11.000 integrantes de la comunidad universitaria afectados por la DANA. Concretamente, 9.300 estudiantes y 1.800 trabajadores. Unas cifras que representaban el 20% del total.
Ante esta catastrofe, la Universitat también puso en marcha otras iniciativas destinadas a paliar los diferentes niveles de afectación de las personas que vivían en zonas golpeadas por la DANA. Estas acciones, se estructuraron en tres grupos, unas que complementaban la tarea de la Clínica Jurídica y Social y que iban dirigidas a la comunidad universitaria, otras que iban dirigidas a la sociedad e instituciones, y unas acciones inmediatas y transversales.
Algunas de estas iniciativas consistieron en la cesión de aulas para escuelas e institutos, becas para personas UV afectadas, atención psicológica, el programa Salvemos las Fotos, recuperación de obras de arte, reconstrucción de bibliotecas, voluntariado en la zona cero, entre otras.
 
 
					 
													
					
					
				










