La Clínica Podològica de la Universitat de València ofreció quiropodias gratuitas para las personas afectadas e implicadas en la dana. Ante el ingente esfuerzo y trabajo en la limpieza de la zona anegada por la riada, que quedó repleta de barro y suciedad, era fundamental recibir un tratamiento de las afecciones del pie y las uñas, prestando especial atención en las siguientes pautas:
Las infecciones podían aparecer cuando había heridas y estas entraban en contacto con agua, especialmente agua sucia.
Asimismo, el tipo de bota utilizada también era muy importante porque tenía que ser de caña alta y totalmente impermeable. A causa de la dificultad de encontrar material adecuado aquellos días, algunos voluntarios utilizaron tallas más grandes o más pequeñas, lo que aumentaba las lesiones.
Sobre todo, era fundamental tener en cuenta que, en caso de tener una herida, esta se tenía que tratar enseguida porque el riesgo de sobreinfección era muy elevado.
Desde la Clínica Podològica de la Universitat de València, se agradeció "profundamente" el compromiso del voluntariado que, con su implicación y esfuerzo, ayudó en las zonas afectadas por la dana. La adopción de estas medidas de prevención era esencial para proteger su salud, especialmente en un contexto de riesgo para los pies.
Durante los días posteriores a los trabajos de limpieza, la Clínica Podológica UV continuó ofreciendo apoyo y asesoramiento para garantizar la salud podológica de quienes colaboraron en aquellas labores de recuperación e instaron a los voluntarios a que se pusieran en contacto con la Clínica para pedir cita para su quiropodia gratuita.
