El personal docente son profesionales de la voz y así lo considera la Administración Pública. Tienen que hablar muchas horas ante un público y muchos sienten que se cansan, que tienen que hacer un esfuerzo excesivo, incluso algunas personas notan tensión, dolor y pérdida de la capacidad vocal.
Muchos y muchas docentes han encontrado y utilizan sus propios recursos para evitar o disminuir los episodios de disfonía, pero no son conscientes de la importancia que tiene la voz para su profesión hasta que no se instala una patología que les impide llevar a cabo su trabajo.
Es importante que este colectivo aprenda a utilizar su voz de forma óptima para dotarlos de recursos y así poder evitar la aparición de patologías vocales.
CARACTERÍSTICAS DE LOS CURSOS