Articles here on DS planning: ● Winter Deep Sky
Objects (SP)
● Lyra: a transition constellation (SP)
● Globular
clusters in Hercules and Ophiuchus (SP)
Vamos a comenzar nuestro recorrido en la Jarra de Acuario
donde encontramos dos objetos estelares especialmente interesantes: la doble
Zeta de Acuario, y la variable CY Aqr.
La primera es una doble luminosa y cerrada, pero de un brillo equilibrado,
característica que la hace adecuada a instrumentos pequeños y medianos. z (= zeta) Aqr consta de dos componentes blanco amarillentas de la 4.6 y 4.8
magnitud que forman un par orbital cuyo período se cree próximo a los 400
años. En la actualidad la distancia de separación está próxima a los 2'',
y se observan los dos discos fusionados, formando un 8, con mi refractor de
68 mm. Con un 120 mm se ven ya las
dos componentes completamente separadas. Las aberturas intermedias entre estas
dos serán las que darán imágenes más interesantes. Las componentes de este
magnífico par son de edad avanzada, en tránsito a gigantes rojas. Brillan algo menos de una decena de veces más que nuestro Sol-
aunque tienen prácticamente su misma masa-, y se encuentran separadas una
de otra por una distancia similar a la órbita de Plutón. El conjunto dista
de nosotros apenas 75 años-luz. Se cree que existe una tercera componente,
que con ocho milésimas de masa solar debe ser una enana roja, en torno a la
componente secundaria. Esta tercera estrella no se ha logrado resolver directamente
por su reducida luminosidad y corto radio orbital, pero si se han conseguido
deducir alguno de sus parámetros físicos y mecánicos a partir de sus líneas
espectrales. Completa su órbita, similar a la de Saturno, en 25 años.
Por su lado, la variable CY Aquarii es mucho más
débil, pero extraordinariamente interesante. Para seguir sus evoluciones es
recomendable un telescopio de al menos 10 cm, aunque
para medirla correctamente se necesita una abertura superior. De cualquier
forma puede verse con instrumentos más pequeños, dado que fluctúa entre las
magnitudes 10.6 y 11.3. Ese radio de variación en principio no es demasiado
impresionante. Lo excepcional es el período, de sólo 88 minutos: todo un récord.
Es una cefeida enana de radio de fluctuación anormalmente grande, suficientemente
llamativo hasta para quienes no tengan apenas experiencia como observadores
de estrellas variables. La curva es muy asimétrica. En las últimas etapas
de la subida al máximo, el abrillantamiento es tan
pronunciado que literalmente se abrillantará ante vuestros los ojos. Este
hecho se hace muy chocante, acostumbrados como estamos a la lentitud y majestuosidad
de los fenómenos cósmicos. Las medidas deben tomarse a intervalos de apenas
unos cinco minutos. Dado que en una sola noche se pueden observar varios ciclos,
constituye un ejemplo muy valioso para observadores que cuentan únicamente
con fines de semana puntuales para salir al campo.
Jones 1 es una gran nebulosa planetaria en un extraño lugar: al
Norte del cuadrado de Pegaso, el lugar aparentemente más inapropiado del mundo
para buscar un objeto de esta clase. El campo se puede encontrar con facilidad
a partir de 72 Peg, a 1º al SSE.
Mide nada menos que 5.2' y brilla apenas con la 12.7 magnitud. Se ve como
una gran mancha circular, blanca, irregular y no demasiado difícil con el
(T)310 mm y UHC.
La estrella central no pude verla, aunque debería estar al límite del telescopio.
Esta gran nebulosa debería poder verse con telescopios menores; un 260 mm
es seguro que tendrá éxito, pero debe ser muy difícil con un 200 mm
en una noche excepcional, de no usar oxígeno III
o UHC.
Un curioso cúmulo abierto, muy probablemente un asterismo,
es NGC 7772, también en
Pegaso, pero esta vez al SE. Es de clase III 1 p,
muy pequeño (con apenas 2' de eje mayor), pero no es difícil encontrarlo con
telescopios medianos, 5º al W y 1º al N de Gamma de Pegaso. Aunque de poco
va a servir la comparación, la forma me recuerda mucho a la de Dolidze-Dzimselejsvili 1, mucho más fácil, brillante y grande, en
Aries, que puede verse con prismáticos. NGC 7772
apenas cuenta con 7 débiles componentes blancas entre las magnitudes 10 y
12, dispuestas en dos triángulos, más brillante el exterior. Quizás lo único
llamativo que podemos atribuirle, aparte de un tamaño excepcionalmente reducido,
es encontrarse en una zona del firmamento donde no hay más objetos de su clase,
como sucedió con Jones 1.
Una galaxia interesante para telescopios preferentemente
grandes es Markarian 325
o NGC 7673. Se encuentra
en el interior del cuadrado de Pegaso, a menos de 1º al Este de Ypsilon Pegasi y a 3' al W de una doble muy amplia. Es una galaxia
compacta de la 12.5 magnitud, muy ligeramente ovalada y poco difusa, que destaca
por su anormal color blanco, tan infrecuente en galaxias. Es de tipo Sc peculiar, con brazos espirales fuertemente condensados
en nubes estelares y grandes nebulosas. Con tal actividad de formación estelar,
no debe sorprendernos que hayan estallado varias supernovas en esta galaxia.
A telescopio mide 1' de diámetro, aunque los límites verdaderos son mayores.
Destaca un diminuto y potente núcleo, que con el (T)260
me pareció verlo constituido por dos condensaciones diminutas.
Antes de entrar definitivamente en la zona de Invierno, vamos a ver un pequeño cúmulo de galaxias: el del
Polo Sur de la
Vía Láctea. En esta zona no existe
la sobreabundacia de galaxias que vemos en su homóloga boreal,
pero destaca por incluir bastantes galaxias brillantes. La más notable de
todas es NGC 253, la "Galaxia
del Escultor" (no confundir con el sistema enano MCG 06-03-015, mayor, pero de una dificultad extraordinaria).
La galaxia del Escultor es la quinta galaxia de mayor brillo aparente, tras
las Nubes de Magallanes, M 31 y M 33. Se encuentra sin dificultades con prismáticos
pequeños, 7º al Sur de Beta de Cetus. Es una galaxia
Sc muy grande y ovalada, con 22'x6'. La zona más brillante es asimétrica, con una mitad más
brillante que la otra. El núcleo además está desplazado hacia el Sur, donde
se ve la zona interior de un pasillo oscuro, que le da un perfil nítido, como
sucede en M 31, si bien allí se ven dos. Con un reflector de 260 mm si la noche lo permite se ve llena de detalles. La superficie
está fuertemente condensada. Recuerdo una noche excepcional durante una salida
de observaciones, en que casi parecía un banco de cirros, detallada como jamás
la he vuelto a ver. En las proximidades hay otras tres grandes galaxias más.
NGC 247, 4.5º al Norte,
es casi igual de grande pero mucho más apagada, y girada respecto de la anterior.
Puede verse con prismáticos 20x80 sin ningún problema
siempre que la noche sea oscura.
Mucho más al sur tenemos dos magníficas galaxias más. Son
NGC 55 y NGC 300, que desde Valencia se elevan muy poco, apenas 10º, pero
que por su brillo pueden verse fácilmente si la calidad de la noche lo permite.
NGC 55, desde Canarias y con prismáticos de 60 mm, se veía parecida a NGC 253,
estirada pero más pequeña, apagada y deslucida, con un núcleo mayor. Es una
galaxia irregular muy curiosa, muy recta y alargada, con dos condensaciones
principales, una en cada extremo del eje mayor. NGC
300, con los mismos prismáticos, se ve más redondeada, de núcleo pequeño y
centrado, de poco contraste. La perspectiva que nos ofrece es parecida a la
que presenta M 33, es decir, desde su polo, pero ligeramente ladeada. También
es de tipo Sc, con grandes brazos que poseen zonas
muy activas de formación estelar.
El grupo del Polo Sur
galáctico lamentablemente se eleva poco desde Valencia.
Contiene estas cuatro galaxias principales y otras dos más (NGC
45 y NGC 7793), que forman el segundo cúmulo de
galaxias más cercano al Grupo Local (tras el grupo de M81
y M82), a 7.5 millones de años-luz. Es más pequeño
que el nuestro: mide 2.5 millones de años-luz de diámetro. Está constituido por
galaxias espirales gigantes y subgigantes, cuyas
componentes están animadas por una clara tendencia expansiva que tiende a
disgregar el cúmulo. La masa mínima que se le asigna es de 150000 millones de
unidades solares.
Todos
los objetos que hasta ahora hemos señalado son visibles en la primera mitad de
la noche. A media noche habrán ascendido las constelaciones invernales, y habrá
llegado el momento de visitarlas.
El primero de los objetos de invierno de esta revisión es
una de las mayores y más desconocidas nebulosas planetarias. Se trata de NGC 1360, en Fornax, localizable 1.5º
al sur de Tau-6 de Eridano.
Increíblemente, pese a ser un objeto brillante y muy grande, se la excluye
sistemáticamente de las guías de campo. NGC 1360
se encuentra muy cerca de la Tierra, apenas a 1000 años-luz. Es una enorme
elipse de la novena magnitud, tan extensa como la zona más visible de la Nebulosa
Dumbbell, aunque más débil y baja. Si el cielo acompaña, se
ve fácilmente con prismáticos 20x80, especialmente
si nos ayudamos del UHC, y es seguro que debe perceptible
con instrumentos bastante más pequeños. Es muy ovalada y carente de rasgos,
con un lado más luminoso que el otro, y una prominente estrella central de
la 11.5ª magnitud, probablemente una binaria espectroscópica. Hay otra llamativa
estrella cerca del final del eje mayor. NGC 1360
todavía es una nebulosa joven y luminosa. Mide 2 años-luz de diámetro. Su
brillo intrínseco es de 18 unidades solares. Hay notables discrepancias en
la estimación de su brillo según los catálogos consultados, que dan valores
entre 7 y 11.5. El valor más correcto según lo que de ella he visto es 9.5
No hay muchos cúmulos globulares en las constelaciones de
invierno, ya que estos objetos se concentran preferentemente en la Vía Láctea
interior. Muy al Sur, en la zona Oeste de la constelación de Columba, podemos
sin embargo encontrar un cúmulo globular magnífico y brillante. No es un Messier, pero es mucho más brillante que muchos de los encontrados
por el astrónomo francés. Si la calidad de la noche nos permite bajar hasta
-40º de declinación, merece la pena intentarlo. Es NGC 1851, de la 7.3 magnitud y 11' de diámetro, que pese a la baja
altura se aprecia semirresoluble con mi reflector
de 26 cm. Si no hay muchas luces parásitas al Sur puede intentarse con prismáticos.
Llama la atención la potente acumulación central, pero a causa de la baja
altura el objeto pierde mucha espectacularidad y se ve más pequeño. NGC 1851 es uno de los cúmulos globulares galácticos con una
condensación central más acusada. Se encuentra a 35000 años-luz de nosotros
y mide algo más de cien años-luz de diámetro. Su brillo intrínseco equivale
al de 140000 soles.
Al norte, en la Liebre, hay otro cúmulo globular, una magnitud
más débil, pero mucho más alto sobre el horizonte: M 79. Se localiza fácilmente prolongando hacia el sur la línea
de unión entre la Alfa y la Beta de la Liebre (las dos estrellas del "cuello")
una distancia y media, hasta encontrar la triple Herschel 3752, de la 5ª magnitud. Esta estrella se resuelve con telescopios
de 8 cm en dos componentes de la 5.5 y 6.5 magnitud
a 3", y una tercera de la 9ª magnitud a 1' en dirección Este respecto
de las dos estrellas principales. M 79 es una pequeña mancha grisácea a menos
de 1º al ENE de la triple. Este cúmulo globular es pequeño pero fácil de ver
con cualquier prismático, y muy llamativo con los 20x80.
Se ve granuloso a través de un 12 cm, con 4' de
diámetro y puede resolverse a partir de 100 aumentos. La visión a través de
mayores aberturas es muy espectacular pese a la baja elevación sobre el horizonte.
Está casi diez mil años-luz más lejano que NGC 1851,
y es más pequeño y menos poblado, con algo menos de cien mil estrellas. Los
límites del objeto se extienden hasta los 8'.
Los cúmulos globulares de la Liebre y Columba, aunque bajos
son muy fáciles de encontrar, por poca experiencia que se tenga como observador.
Os voy a proponer ahora uno un poco más difícil, y un cuarto para aquellos
de vosotros que tengáis más práctica y acceso a telescopios grandes. El primero
es el "Vagabundo Intergaláctico", o NGC 2419, en Lynx, que podéis encontrar
en el extremo Este de una característica cadena de tres estrellas de la 7
a la 8.5 magnitud que hacen inconfundible a este objeto. Para localizar la
cadena hay que desplazarse 7º al N de Cástor, la estrella Alfa de Gemini,
una magnífica doble de la que nos ocuparemos a continuación. NGC 2419 es visible con prismáticos 20x80,
pero pequeño y muy deslumbrado por las vecinas estrellas. A pesar de su brillo,
sorprendentemente ni siquiera conseguiremos resolverlo con un reflector de
26 cm. La razón es la enorme separación entre él y nosotros, casi tan grande
como la de las nubes de Magallanes: NGC 2419 dista
nada menos que 305000 años-luz. Es tan remoto que ha escapado de la fuerza
gravitatoria de la Vía Láctea y vaga libre por el Universo. Otros cúmulos
globulares tan lejanos como éste son Arp-Madore 1 y Palomar 15. Ninguno de éstos es sin embargo comparable
a NGC 2419, que es uno de los mayores conocidos,
con más de medio millón de masas solares y un tamaño de casi cuatrocientos
años-luz de diámetro. Las estrellas más brillantes son de la magnitud 16,
y son las responsables de que se vea muy ligeramente granuloso con un telescopio
de 260 mm a 300 aumentos.
Cástor (a Gem)
es la doble más espectacular entre las estrellas más brillantes del hemisferio
Norte, un par orbital formado por dos estrellas de las magnitudes 2 y 2.9,
distantes en la actualidad unos 4" y resoluble con pequeños refractores.
La componente primaria es a su vez una doble cerrada formada por dos estrellas
de 1.5 masas solares cada una, en una órbita algo mayor que la de Marte, que
se completa en 9 días. La secundaria también es un sistema doble de tamaño
muy similar en una órbita circular, ligeramente más pequeña. La separación
entre Cástor A y Cástor B es de 90 unidades astronómicas. Se requieren 400
años para que se complete una revolución. Todavía existe una tercera componente,
Castor C, débilmente asociada al sistema principal y a mil unidades astronómicas.
Castor C es un sistema constituido dos enanas rojas gemelas de 0.6 masas solares
en una órbita muy cerrada, que se ocultan mutuamente cada 19 horas. Como coincide
nuestra visual con el plano orbital, las ocultaciones -o "eclipses"-,
son prácticamente totales, y la luz del sistema cae desde la 9.1 a la 9.6
magnitud. Cástor C se encuentra a 73" -a esa distancia equivale a 150000
millones de kilómetros-, al SSE de Castor A-B y
la veo fácilmente con el reflector de 26 cm pese
al fuerte deslumbramiento. Dada esta colosal órbita, no debe sorprendernos
que no muestre cambios de posición perceptibles desde su descubrimiento. Fijémonos
en lo curioso del caso: las tres componentes que vemos con nuestros telescopios
son a su vez binarias espectroscópicas, y los miembros de cada pareja son
casi gemelos.
El último cúmulo globular de invierno y el más difícil es Palomar 2, en Auriga, a 2.5º al SE de Iota, que sólo debe intentarse por
aquellos lectores que cuenten con telescopios de más de 200 mm
y cielos de buena calidad. Palomar 2 es otro remoto cúmulo globular del halo
galáctico, a 110000 años-luz. Además de lejano, es también débil. La magnitud
absoluta es difícil de evaluar, pero está en torno a -5.5, y el tamaño es
60 años-luz. Resulta demasiado suelto para un objeto de tan reducida masa.
Las estrellas se encuentran poco concentradas y tan sólo su lejana órbita
lo protege del desgaste gravitatorio de la Vía Láctea. Palomar 2 está además
muy enrojecido por el polvo interestelar, lo que dificulta considerablemente
al visión, al alejarlo del máximo de percepción del ojo adaptado a la oscuridad.
El índice de color es tan excepcional (1.9, ¡equivalente a una estrella de
espectro M5!) que es un reto muy difícil, a pesar
de que no es ni demasiado grande ni demasiado débil. De hecho, una cámara
CCD, que es menos sensible a los colores, lo capta sin demasiada dificultad.
Está muy próximo a una estrella de la 11.5 magnitud. Es redondo, de 1.5' de
diámetro, y considerablemente débil a través de mi reflector de 260 mm.
Tenemos al menos una ventaja: su alta declinación hace que desde Valencia
lo podamos observar casi en el cenit, a 80º de altura sobre el horizonte.
La
lista de globulares invernales visibles desde Valencia no está completa. Más al
Norte está Palomar 1, y más al Sur NGC 2298, en Puppis, el primero difícil y el segundo bien asequible a
telescopios medianos. Si queremos ver más de estos maravillosos objetos,
tenemos otros más brillantes, tanto al comienzo como al final de la noche (M15, M2, M72,
M30, M53, M3, etc.).
Pasemos
ahora a otro tipo de cuerpos celestes. El cielo invernal es muy rico en cúmulos
abiertos y grandes nebulosas de emisión. Quién no ha oído hablar de la Gran
Nebulosa de Orión, la de Roseta, la Cuña Negra, etc. Pero junto a estas nubes
grandes y brillantes hay otras, a veces muy fáciles de ver, que son poco
visitadas, y otras muy difíciles, que constituyen retos muy interesantes para
los aficionados más exigentes.
Próximas a la magnífica M 42 hay dos pequeñas nebulosas
menos conocidas y mucho más pequeñas, pero bien asequibles. La primera es
NGC 1999, casi en campo de M 42, a 1º al Sur. Se trata de una nebulosa
mixta, de emisión y reflexión, que se encuentra cruzada por una remarcable
cuña oscura casi en el mismo centro. La nebulosa mide 16'x12', pero la zona central y más llamativa apenas alcanza
a medir 3'. En el centro se encuentra la estrella excitatriz, de la 9.3 magnitud,
blanco azulada y de brillo variable. A través de un telescopio de 200 mm casi tiene forma de anular, aunque el hueco, rodeado de
las zonas más brillantes de la nebulosa, es más bien triangular. Es un objeto
bonito con gran abertura.
El segundo objeto está al 5º al NNW
de Rigel y a un poco menos de 2º al Norte de Beta de Eridano:
NGC 1788, lo bastante
brillante como para que pueda verse a través de prismáticos 20x80.
Es una pequeña nebulosa mixta, que brilla fundamentalmente por reflexión y
que mide 8'x5'. Parece sorprendentemente brillante
y bastante concentrada, en un campo estelar deslumbrante. La estrella iluminadora
es de la décima magnitud, pero hay otras más, inmersas o en sus proximidades.
Muy al Norte, en Gemini, hay un
antiguo resto de supernova: IC 443,
grande, apagado, de estructura filamentosa, que se encuentra fuertemente deslumbrado
por la vecina estrella Eta Geminorum. Está escindido en dos mitades que forman un anillo
partido de casi 1º de diámetro. Rodea al púlsar PSR0611+22,
que se encuentra desplazado hacia el fragmento mayor; por supuesto, es invisible.
Esta nebulosa puede verse bien si nos ayudamos de un filtro UHC. No obstante, se puede intentar sin filtros: la primera
vez que la vi no tenía ninguno. El fragmento más
alejado de Eta es el más visible. Su borde Este,
que es el más nítido y brillante, es el que debemos intentar localizar. Si
se intenta sin filtros debe esperarse a una noche oscura y utilizar un aumento
bajo o medio, por ser un objeto grande y difuso. La estrella h (= Eta) Geminorum es una doble física bastante difícil por el excesivo desequilibrio
y escasa separación. La estrella primaria es una variable semirregular, con un período próximo a los 233 días, durante
los cuales oscila entre las magnitudes 3.2 y 3.9. Esta estrella sufre mínimos
más profundos cada ocho años, a causa de la ocultación por parte de la gigante
roja de una estrella también gigante roja, pero de tipo espectral más tardío.
La próxima ocultación sucederá el año 1996. Estas dos estrellas son irresolubles
desde la Tierra. Lo que tomamos como estrella secundaria es una tercera componente
más lejana, una subgigante 7 veces más brillante
que el Sol, que completa su órbita en 500 años. En la actualidad está a algo
más de 1.5" de la estrella primaria y requiere telescopios a ser posible
de más de 150 mm por el fuerte deslumbramiento.
Posiblemente es variable, dado que se tabulan magnitudes usualmente muy discrepantes.
Si es así, oscilaría entre las magnitudes 6.5 y 9.
Estando en esta zona es casi una obligación visitar M 35, el espléndido cúmulo abierto que se puede ver a simple
vista 2º al NW de Eta
Gem. Es un objeto magnífico para prismáticos y pequeños telescopios,
que debe observarse preferentemente a pequeño aumento por su gran tamaño;
no es difícil alcanzar las 80-100 componentes con los refractores más pequeños
del mercado. Realmente cuenta con 200 estrellas, que presentan colores vivos
y variados, y son de muy diferente brillo. Hay llamativas alineaciones, especialmente
una gran cadena curvada. Se encuentra a 2800 años-luz y es de mediana edad,
con 110 millones de años.
Cercano,
en campo realmente si el aumento es bajo, hay un objeto muy interesante: NGC 2158. Es un apretado cúmulo abierto muy remoto, a 16000 años-luz,
constituido por estrellas de la 12.5 magnitud e inferiores, que se resuelve con
mi reflector de 260 mm sin dificultad, alcanzándose a
ver unas 60 estrellas. El cúmulo es visible a través de los prismáticos 20x80 como una pequeña mancha grisácea de 7'. Su edad es
muy avanzada frente a la inmensa mayoría de aglomeraciones abiertas: 3200
millones de años. Como consecuencia de su gran antigüedad sólo quedan estrellas
de masa reducida, aunque en fase de gigante roja las más luminosas. A pesar de
que estas características parecen llevarnos a la conclusión de que es realmente
un cúmulo globular muy pobre, el contenido metálico es bastante alto, aunque
menor de lo normal. La distancia y la baja latitud galáctica hace
que la absorción interestelar reduzcan su luminosidad en un grado muy
importante. El enrojecimiento que sufre es de 1.29 magnitudes, que supone una
caída de brillo de casi cuatro magnitudes. Si en lugar de encontrarse tan lejos
y oscurecido, el azar lo hubiera situado a la distancia de las Pléyades, sería
el objeto más impresionante del firmamento, con gran diferencia: mediría más 3º
y brillaría en conjunto casi como Venus. Pero en lugar de un grupo de estrellas
blanco azuladas disperso, veríamos una densa masa de 200 estrellas, las más
luminosas, gigantes rojas, tan brillantes como Arcturus.
Es difícil imaginarse quizás 30 estrellas como Arcturus,
Betelgeuse, Aldebarán o Antares, en tan sólo 3º de diámetro; una visión
increíble donde las haya.
Para finalizar con la selección de nebulosas que presento
en este número, dos objetos que deberían revisarse periódicamente: las nebulosas
variables de Hind y Hubble.
La primera es un objeto generalmente muy difícil en telescopios grandes, mientras
que la segunda, aunque muy pequeña, puede localizarse con ayuda de un atlas
usando prismáticos 20x80. La Nebulosa Variable
de Hind,
o NGC 1554-5, está asociada T Tauri,
que es el prototipo de aquellas estrellas que están en proceso de estabilización
y que todavía no han alcanzado la secuencia principal. T Tauri fluctúa entre
las magnitudes 8.4 y 13.5 de una forma completamente irregular, pero es más
habitual encontrarla próxima a la 10.0-10.5 magnitud. Se puede localizar muy
próxima a las Hyades, 2º al Norte y 10' al Oeste
de Delta-1 Tauri. A su vez, NGC
1555 se localiza 40" al Oeste de la estrella, y mide unos 45" de
longitud. Tiene forma de varios filamentos en arco, que rodean a T Tau por el W. En los últimos años ha sido muy poco perceptible.
Es una nebulosa de reflexión, de modo que no pueden usarse filtros para mejorar
la imagen. Además es notablemente rojiza, lo que dificulta la percepción con
el ojo. La historia de esta nebulosa es muy curiosa. Fue descubierta en 1852
por J.R.Hind a través de un refractor de 175 mm. A partir de esa fecha comenzó a debilitarse hasta que
en 1868 ya no se podía ver en absoluto. En 1890 volvió a ser detectada con
un reflector de 914 mm, y cinco años después volvió
a esfumarse. En 1899 se la consiguió fotografiar de nuevo, y desde entonces
se la ha podido ver regularmente, aunque muy débil. A lo largo de estos años
la he visto a temporadas, siempre muy débil, con el (T)260,
pequeña y ovalada N-S, al Oeste de T Tau, pero frecuentemente
no se ve en absoluto y se necesitan telescopios de 450 mm para conseguir distinguirla.
La Nebulosa Variable de Hubble (NGC 2261) es por comparación
trivial. Se localiza con relativa facilidad usando telescopios modestos, 1.2º
al SSW de S Monocerotis,
que es la estrella principal de la Nebulosa del Cono. Con prismáticos 20x80 se hace necesaria la ayuda de un atlas, pero también
es visible conocido el lugar exacto que ocupa. Tiene la forma de un cometa
de la décima magnitud, y mide 2'x1'. El extremo
sur está ocupado por R Monocerotis, la estrella responsable de la luz de esta nebulosa mixta,
de emisión y reflexión. La forma general la mantiene, pero a lo largo de los
últimos años con el reflector de 260 mm se han visto
múltiples cambios a menor escala, sobre todo aparición de huecos de diferentes
formas. Estos cambios son perfectamente visibles con telescopios medianos
en períodos breves, a veces de mes en mes. Además, R Monocerotis también cambia llamativamente de brillo. La observación
de los detalles cambiantes de la Nebulosa Variable de Hubble requiere habitualmente aumentos elevados, ya que son
muy pequeños, del orden de la decena de segundos de arco. R Monocerotis
no es realmente una estrella: lo que vemos es el exterior de una nebulosa
muy compacta que rodea a la verdadera fuente. Las nubes de polvo que la rodean
provocan con su interposición la caída de luz del núcleo, que al transmitirse
por el interior de la nebulosa forman esos huecos que vemos y que son simplemente
zonas oscuras: sombras móviles. La velocidad de desplazamiento de esas perturbaciones
por el interior de la nebulosa es de hecho la velocidad de la luz. Puesto
que la nebulosa parece ser un miembro externo del complejo nebular del Cono,
angularmente muy próximo, mide 1.4 años-luz y su brillo verdadero es modesto:
50 veces el del Sol. R Monocerotis por su lado presenta
un brillo parecido, aunque puede reducirse a una séptima parte cuando la estrella
está cerca del mínimo. Las características de R Mon son únicas. No podemos ver directamente la estrella y
este hecho dificulta su clasificación; puede ser una irregular nebular temprana
(InA) o una T Tauri. El
anillo toroidal de polvo y gas que la rodea provoca
un flujo bipolar asimétrico del mismo tipo que el observado en objetos nebulares
mucho más exóticos y jóvenes (Herbig-Haro). El lóbulo
Sur queda por detrás del plano ecuatorial y se encuentra fuertemente oscurecido;
es débilmente perceptible en fotografías de alta exposición, y mucho mejor
en luz infrarroja. Al lóbulo dirigido hacia nosotros le llamamos NGC 2261.
En Perseo hay una gran cantidad de cúmulos abiertos interesantes.
Aunque el más espectacular es sin duda el Doble Cúmulo (NGC 869 y 884), el más brillante, y con diferencia, es Melotte 20, el cúmulo que rodea a Alfa de Perseo. Es fácil ver a simple
vista la acumulación de estrellas de la 5ª y 6ª magnitud que rodea por el
Sur a la brillante Alfa de Perseo, pero se necesitan unos prismáticos para
apreciarlo en toda su magnificencia. Mel 20 es uno
de los cúmulos abiertos más brillantes del firmamento, formado hace 51 millones
de años. La mayor parte de sus estrellas son blancas, salvo Sigma (roja, casi
con toda seguridad ajena), y la propia Alfa (blanco amarillenta, que esta
evolucionando a gigante roja). El cúmulo posee 124 estrellas en total, dista
550 años-luz y mide 3º, por lo cual su diámetro real es de 30 años-luz. Su
componente más luminosa, Alfa, es 4500 veces más luminosa que el Sol. El flanco
más próximo al cercano plano galáctico es más definido que el contrario, al
SE. Se pueden ver algunas llamativas cadenas de estrellas, la más notable
curvada en torno a Alfa. La estructura global no es muy diferente a la observada
en otros cúmulos abiertos moderadamente ricos, como M52
o NGC 7510: una estrella precursora de gran masa,
y un nutrido grupo de componentes más débiles que la siguen en su movimiento
en torno a la Vía Láctea.
En las
constelaciones de Canis Major-Monoceros-Puppis hay también hay
una sobreabundancia de cúmulos abiertos y nebulosas difusas extensas. Se pueden
pasar muchas noches interesantes centrándose en torno a un objeto brillante y
explorando sus alrededores.
Un objeto particularmente notable, uno de mis preferidos,
es NGC 2362, excepcional
por muchas razones. Se puede encontrar al SE de la constelación de Canis Major, rodeando a la deslumbrante
Tau. Es uno de los cúmulos abiertos totalmente consolidados
más jóvenes conocidos, con apenas un millón de años y todas las componentes
en la secuencia principal, muy azules. No es casual que la luminosísima
Tau, de la 4.1 magnitud visual, se encuentre en
el mismo centro, ya que es miembro físico del cúmulo. Puesto que dista 3600
años-luz (considerando que la absorción sea de 1.2 magnitudes), encontramos
que esta estrella es una de las más brillantes de la Vía Láctea, con la -8
magnitud absoluta y 120000 veces más luminosa que el Sol. Algunos estudios
dinámicos llegan a atribuir 300 masas solares a esta superestrella, convirtiéndola
en la mayor conocida. El cúmulo mide 24 años-luz diámetro y todavía está rodeado
de una tenue nebulosa de emisión de 400 años-luz de extensión (la gran extensión
de esta nebulosa es otro hecho que habla de la increíble energía de Tau
del Can Mayor). Puede verse con prismáticos 20x80,
resolviendo una docena de componentes azuladas en un fondo nebuloso. La visión
a través de pequeños telescopios es también formidable. Con el newton de 260
mm es un objeto espectacular, de forma triangular, con más
de 70 componentes en torno a Tau, que se ve triple.
Vamos a acabar con M 37,
quizás el más bonito cúmulo abierto de invierno. Se encuentra fácilmente con
tan sólo explorar 5º al SSW de Zeta Aurigae; cualquier buscador o prismático revelará una mancha
grisácea algo ovalada, con forma de riñón. Pero si la noche es buena y esperamos
a que se encuentre muy alto sobre el horizonte, bastarán unos buenos prismáticos
7x50 para ver una masa hormigueante y sumamente
apretada de estrellas débiles; los 20x80 lo resuelven
con facilidad, dando una imagen soberbia. A pesar de que con prismáticos ya
se vean estrellas, es imprescindible el uso de un telescopio para conseguir
apreciar los detalles. Un pequeño refractor de buena calidad es suficiente
para conseguir imágenes impresionantes. Las estrellas son de brillo muy parecido;
destaca una componente rojiza de la novena magnitud y un nutrido grupo de
la décima-undécima. Los pequeños refractores lo resuelven sólo parcialmente.
La imagen es mucho mejor con reflectores medianos e indescriptible
con un gran reflector. Un 260 mm muestra en torno
a 250 componentes, más estrellas de las que constituyen el cúmulo; incluso
con luna llena se siguen viendo muchas decenas. La estructura es compleja,
con órbitas tan entrelazadas que no domina ninguna figura característica.
Hay múltiples radiaciones y grupos menores. M 37 es un cúmulo viejo y grande
del brazo de Orión -no del de Perseo, aunque lo parezca-, con 300 millones
de años de antigüedad. Se encuentra a 4900 años-luz y mide 35 de diámetro.
Se le asignan 150 estrellas, pero en determinadas fuentes multiplican este
número por dos e incluso por tres. De cualquier forma, se cuenta entre los
objetos de su clase más ricos y con mayores expectativas de vida.
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Coordenadas 2000.0 |
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Objeto |
Asc. recta |
Declinación |
Descripción |
Constel / Uranometria |
z Aqr |
22h 28.8m |
-0º
1' |
Estrella
doble. Dos componentes blancas de la 4.5 magnitud a 2'' de separación. |
Aqr / 257 |
CY Aqr |
22h 37.8m |
+1º
32' |
Cefeida
enana. Período: ¡¡¡88 minutos!!!. Varía entre las
magnitudes 10.5 y 11.5. Muy espectacular. |
Aqr / (257) |
Jones 1 |
23h 35.9m |
+30º
28' |
Nebulosa
planetaria (3b). Mag:
12.7 y Diam: ¡5.2'! |
Peg / 124 |
NGC 7772 |
23h 50.5m |
+16º
7' |
Cúmulo
abierto III 1 p en Pegaso, ¿o quizás un asterismo?. Apenas 7 estrellas de 10 a 12 mag
en 2' |
Peg / 170 |
Mrk 325 |
23h 27.7m |
+23º
35' |
Galaxia
Sc peculiar,compacta,de
la 12.7 mag y 1.5'. |
Peg / 169 |
NGC 253 y otras |
0h 47.6' |
-25º
17' |
El
cúmulo de galaxias del Polo Sur galáctico. Muchas galaxias brillantes,
principalmente espirales. |
Scl / 307 |
NGC 1360 |
3h 33.3m |
-25º
51' |
Gran
nebulosa planetaria (3) de 6.5' de diámetro y la 9ª magnitud visual,
comparable a M 27. |
For / 312 |
NGC 1851 |
5h 14.1m |
-40º
3' |
Cúmulo
globular(2) notable, pero bajo.11'. Mag 7.3' |
Col
/ 358-93 |
M 79 |
5h 24.5m |
-24º
33' |
Cúmulo
globular(5). 8.0 magnitud; 8.7' de diámetro. |
Lep / 315 |
H 3752 |
5h 21.8m |
-24º
46' |
Estrella
triple. 5.4 - 6.6 - 9.1 mag a 3'' y 59'' |
Lep / 315 |
NGC 2419 |
7h 38.1m |
+38º
53' |
El
"Vagabundo intergaláctico". Cúmulo globular no ligado a la Vía
Láctea. 10.4 mag. 4.1'. Clase 2. |
Lyn / 100 |
Cástor |
7h 34.6 |
+31º
53' |
Estrella
múltiple. Dos componentes de la 1.9 y 2.9 magnitud a 3.9". Una tercera a
73". Todas dobles. |
Gem / 100 |
Palomar 2 |
4h 46.1m |
+21º
23' |
Cúmulo
globular muy difícil. 1.9'. 13.5 magnitud. |
Aur / 96 |
NGC 1999 |
5h 36.5m |
-6º
42' |
Nebulosa
de emisión y reflexión con una nebulosa oscura interpuesta. 16'x12'. Excitatriz V 380 Ori. |
Ori / 270 |
NGC 1788 |
5h 6.9m |
-3º
21' |
Nebulosa
de reflexión brillante. 8'x5'. Asociada a HD293815, de la 10.12 mag y
espectro B9V. |
Ori / 225 |
IC 443 |
6h 16.9m |
+22º
47' |
Remanente
de supernova en Gemini. 50'x40'.
Débil. |
Gem / 137 |
h Gem |
6h 14.9m |
+22º
30' |
Estrella
doble y variable. 3.3(v) y 8.8 mag
a 1.4" (AP 266º).Componente A es una variable eclipsante. |
Gem / 137 |
M 35 |
6h 8.9m |
+24º
20' |
Cúmulo
abierto III 2 m de la 5.1 mag.
28'. A veces clasificado como cúmulo globular muy pobre. |
Gem / 137 |
NGC 2158 |
6h 7.5m |
+24º
6' |
Lejano
cúmulo abierto II
3 r de la 8.6 mag. 5'. 200 estrellas brillantes.
Edad: 110 millones de años. |
Gem / 137 |
NGC 1554-5 |
4h 21.8m |
+19º
32' |
Nebulosa
variable de Hind. Se altera su brillo y tamaño. Mide
sobre 45". Asociada a T Tauri, dG5e |
Tau / 133 |
NGC 2261 |
6h 39.2m |
+8º
44' |
Nebulosa
variable de Hubble. Forma de cometa, de 2'x1'. Estrella asociada R Mon. Flujo bipolar. |
Mon / 183 |
Mel 20 |
3h 22.?m |
+49º ??' |
Cúmulo
de Alfa de Perseo. III 2 m. 185'. 1.2 mag. 50 estrellas muy luminosas. Para prismáticos. |
Per / 63 |
NGC 2362 |
7h 18.8m |
-24º
57' |
Muy
notable cúmulo abierto I 3 p n. 4.1 mag y 8'. 60
estrellas azules, incluyendo a Tau Canis Majoris |
CMa / 319 |
M 37 |
5h 52.4m |
+32º
33' |
Cúmulo
abierto constituido por 150 estrellas. Clase II 1
r. 5.6 mag y 24' de diámetro. Componente más
luminosa es una estrella roja, algo excéntrica. |
Aur / 98 |