Lugares de encuentro y sedes sociales

El Hotel Metropol (sede de la Embajada Soviética) estaba en la calle Xàtiva (frente a la plaza de toros).
 


Fotografía actual J.M. Azkárraga

Universidad de Valencia

El presidente Manuel Azaña en el Paraninfo de la Universidad


Hotel Palace Situado en la calle de la Paz
 


Será Casa de la Cultura, sede del II Congreso de Intelectuales y posteriormente sede del Ministerio de Instrucción Pública. Alojamiento entre otras personas de: Rafael Alberti, Maria Teresa León, Rosa Chacel, León Felipe, Nicolás Guillen, Octavio Paz, Cesar Vallejo, Alejo Carpentier.
Negrín inaugurando el Congreso

«Este edificio albergó a los más prestigiosos intelectuales y artistas españoles, cuando desde Madrid asediado (1936-1939) fueron evacuados a Valencia. Llamóse Casa de la Cultura, cuyo patronato presidió el poeta Antonio Machado».
A principios de noviembre de 1936 hasta que se instaló el gobierno en Barcelona, a mediados de 1938, residió en la ciudad del Turia la direc ción militar y política de la República, junto a las manifestaciones litera rias y artísticas de los mejores exponentes de la España republicana, lo que justificaba que el poeta Juan Gil-Albert dijera que «Valencia fue, durante año y medio, la capital de la República y el más importante foco intelectual de la nación».
Antonio Machado vivió inicialmente en Valencia en la «Casa de la Cultura», y después residía en Burjasot, pueblo aledaño a esta ciudad, en un chalet la «Villa Amparo », donde recibía a los jóvenes poetas que le visitaban. Allí ensalzó como un prodigio la finura de matices de la luz de Valencia.
En aquellos años, Valencia parecía un oasis alejado del trágico escenario de la guerra civil. La calle de Ruzafa -del árabe, jardín- era al atardecer un desfile bullicioso de paseantes, muchos de ellos con uniformes militares.
Los restaurantes inicialmente daban buena comida, pero en febrero de 1937 comenzó a escasear la carne de res y se introdujo la carne de caballo.
También comenzó a escasear el tabaco de picadura y los fumadores recalcitrantes liaban cigarrillos con las hojas secas de las patatas o papas. Los cafés estaban repletos, porque confluían evacuados de las poblaciones que habían sido tomadas por los franquistas y en gran número por los madri­ leños a raíz del dramático asedio de noviembre de 1936. (Levante Feliz, de J. A. Climent en Crónicas Valencianas. Escritos desde el exilio)


En un palacete de la calle Trinquete de Caballeros tiene su sede la Alianza de Intelectuales para la defensa de la República
Hotel Victoria, calle de las Barcas, Alojamiento de numerosos intelectuales, uno de ellos el escritor y periodista ruso Ilya Ehrenburg
Escribe: “Valencia se convirtió inesperadamente en Capital, una capital artificial e inverosímil”, en Gentes, años, vida.
 

Sede del Partido Comunista. Pza de Tetuan

Sede del Socorro Rojo Internacional. Calle Abadía de San Martín.

Sede de Mujeres Libres. Calle de la Paz

Sede de la Federación Ibérica de Juventudes Libertarias (FIJL). Calle de la Paz

Calle de la Paz.
(Fotografía: FINEZAS)

J. A. Climent en Crónicas Valencianas. Escritos desde el exilio describe de este modo el tiempo en el que Valencia fue capital de la republica.

En Valencia se instaló el Comité Nacional de la Juventud Republi cana en un elegante edificio, donde hacían también exposiciones de arte. A mí me designaron representante en el Frente de la Juventud de España, en el que era presidente el teniente de artillería Prudencio Sayagués, quien había participado en la toma del Cuartel de la Montaña, lo que oca­ sionó el fracaso de la sublevación militar en Madrid. Las oficinas del Frente de la Juventud estaban en la calle de la Paz N ° 30, un edificio antiguo que traqueteaba con los bombardeos de los aviones franquistas, que se lanzaban sobre la glorieta del Parterre situada al final de esta calle, donde se hallaba el Ministerio de Marina. En uno de esos bombardeos se rompieron los cristales de las ventanas por la onda explosiva.
Al celebrarse el II Congreso Internacional de Escritores Antifascistas 94 en julio de 1937, vinieron a invitar al Frente de la Juventud para que enviase un representante, por la Comisión Organizadora los poetas Juan Gil-Albert, Arturo Serrano Plaja, quien por los pómulos pronunciados y sus gafas, parecía un marinerito nipón, y Emilio Prados, Gil Albert, secretario técnico de la Comisión, era el más entusiasta, y ofreció que nos traería publicaciones de sus poemas. El 4 de julio acompañé a Prudencio Sayagués a la inauguración del congreso que se realizaba en el hemiciclo del ayuntamiento de Valencia, encontrándose el presidium con las bande ras de los países simpatizantes de la República, y la asistencia de signifi cados intelectuales europeos y americanos. En aquella reunión se produjo la declaración de protesta, que motivó la reprobación de Octavio Paz, presentada por José Bergamín, contra André Gide, quien era amigo de los republicanos españoles, por sus críticas a la Unión Soviética en el libro Regreso de la URSS (Retouches).