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Cultura. Lengua. Literatura. Estudia Filología Catalana en la Ciudad de Valencia

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Alvaro Muñoz Hernandez. Estudiante de tercer curso. Grado Filología Catalana

21 de junio de 2018

Elegí este grado porque era un territorio poco explorado. Cuando estamos en bachillerato, conocemos una decena de autores (sin casi profundizar) y tenía curiosidad para saber cuál era la historia literaria de mi país. Siempre me ha gustado leer y era una forma de concatenar el gusto por la lectura y el placer para poderlo hacer en mi lengua.

La UV no tuvo casi peso en mi elección, es decir, era la más próxima y como tiene prestigio no dudé en poner como posibilidad la UB u otros.

Los trámites resultan un poco costosos, porque cuando los haces por primera vez estás en un momento en el cual tienes muchos nervios. El resto, ya en los cursos superiores, resulta un poco pesado por el hecho de tener que seguir un orden que no conoces: troncales, segunda lengua y optativa, en segundo curso. Si no lo haces así, no te deja tener acceso a las optativas. Aun así, se aprende deprisa.

Las asignaturas más destacadas pera mí son Literatura Contemporánea, Literatura Medieval y Moderna, Orientación (la veo imprescindible) y Gramática Histórica.

Las instalaciones permiten un buen desarrollo. En cuanto a métodos de innovación no hay mucho, en poesía sí, donde hicimos juegos y competiciones entre nosotros relacionadas con el temario. Sin embargo, pienso que hay una relación bastante fluida con la mayoría de los profesores, hecho que autentifiques cuando sales de tu grado y ves como son el resto: power points, pasividad... Estoy en tercero de carrera y todavía no he tenido ningún docente que se dedique a leer sus apuntes

Se han posibilitado otras actividades de formación complementaria, pero solo en las asignaturas de lengua, aunque sí que nos facilitan charlas y conferencias.

Por otro lado, el plan de estudios, en general, se adecua de forma correcta. Aun así, hay algunas asignaturas que parecen fuera de lugar, como Teoría de la Literatura en primero, o el salto que hay entre hacer Latín en primero, no hacer nada en segundo y después una asignatura como Gramática Histórica.

En cuanto a las practicas, todavía no he realizado la reunión, pero en mi grado son obligatorias. La duración, por lo que conozco, es hasta 72 h. El autoprácticum no está valorado en nuestras prácticas. A pesar de esto, yo quería buscarme una editorial a Barcelona y hablé con Miquel Nicolàs y no puso ningún impedimento, simplemente que se requiere una cierta información por el hecho que estas nuevas zonas de prácticas no están en la bolsa de la Universitat de València. Las condiciones no las conozco en primera persona, pero no son remuneradas, hecho que considero excesivo. No tienes que cobrar el mismo que otra persona porque tus conocimientos son menores, pero trabajar gratuito tendría que estar prohibido y más cuando te toca una empresa en un lugar lejano, te toca a ti pagarte el desplazamiento también. En resumen, pierdes dinero para ir a trabajar. Sobre las posibilidades de realizar contacto, mi experiencia de buscarme las prácticas me ha permitido realizar contactos profesionales, pero entiendo que resulta un caso aislado.

Ya había decidido cursar un master antes de hacer el grado, pero a medida que avanza el grado vas viendo el abanico de posibilidades, algunas que no conocía. El Grado que elegí lleva asociado un máster homologado.

Deseo completar mi formación con un máster porque creo que mi carrera es demasiada teórica para no hacer un máster en educación (por ejemplo). Es decir, tienes muchos conceptos, pero no tienes ninguna asignatura que te ayude a crecer como docente. Este es uno de los problemas que tenemos: los de magisterio no saben la mitad, pero saben cómo impartirlo, y los de las filologías sabemos el doble, pero desconocemos las formas de transmitirlo.

En cuanto a las salidas profesionales, las conozco, a pesar de que he conocido más con los años. Conozco la existencia de bolsas dentro de la facultad, y sobre las perspectivas, antes  tenía menos que ahora, porque el primer cuatrimestre de la carrera: Latín, Español, Orientación, Teoría de la Literatura... es muy general y no encuentras un espacio propio catalán, solo con una asignatura (Lengua Catalana), pero despacio vas cogiendo el gusto por el grado, a pesar de que con altibajos (tercero, para la gente de literatura pura acontece un poco cargado).